APRECIADA AMISTAD
La amistad es la excelente presencia de Dios en las relaciones de las almas.
Las referencias a la amistad se encuentran desde el Antiguo Testamento. Es el dicho que quien encuentra un amigo posee un tesoro.
Es Jesús el que nos da ejemplo de la preciosa amistad. Revisando los Evangelios, nosotros Lo vemos rodeado por la multitud. Curando. Amparando. Enseñando.
Más, en las noches estrelladas, es en la casa de Simon Pedro, en Cafarnaum cuando El distribuye las lecciones más intimas.
Para Su colegiado, para aquellos hombres que habían dejado a sus familias, sus vidas, para vivir una nueva vida, El ofrece Su amistad.
Compartió Su vida con ellos. No prescinde de los amigos.
Cuando iba a Jerusalén, por serle hostil la ciudad, buscaba refugio en casa de los amigos de Bethania: Lázaro, Marta y María.
Se dedica a los amigos. Cuando Lázaro enferma, las hermanas lo mandan llamar en las distancias de Pareia. Dos días de viaje hasta Bethania. Y el amigo viene.
Retira Lázaro de las sombras del túmulo, pues no estaba muerto. Solamente en un estado letárgico. Lo devuelve a la convivencia de la familia por la cual El nutre amistad.
Cuando se adentra en la ciudad de Jericó y ve a Zaqueo, el publicano, sobre el árbol, El lo mira y dice: desciende deprisa. Porque hoy he de hospedarme en tu casa.
Podría haber dado la lección del Reino de los Cielos allí mismo. Al final, el hombre estaba a la espera de El, el Maestro hizo cuestión de demostrar la importancia de la amistad. He de hospedarme en tu casa.
Zaqueo prepara un banquete. El mejor, para el amigo que acababa de conquistar.
En la última cena, El dice a los Apóstoles reunidos: Vosotros sois mis amigos… Ya no os llamaré siervos, porque el siervo no sabe lo que hace su señor. Más os llamé amigos, porque os di a conocer todo aquello que oí de mi padre.
Después de su muerte, es un amigo, José de Arimatea, que va a tener con Pilatos y requiere el cuerpo de Jesús.
Recelaba que Lo lanzasen a alguna fosa común. Como apenas restasen pocas horas antes de ponerse el sol, el ofrece su propio sepulcro nuevo para sepultar el cuerpo de Jesús.
Otro amigo de Jesús, Nicodemo, quiso prestar al Maestro un verdadero servicio. Providenció que se comprasen cien libras de esencia odoríferas y un gran lienzo de lino precioso para embalsamar el cuerpo.
Tener amistad es tener corazón que ama y esclarece, que comprende y perdona, en las horas más amargas de la vida.
El amigo verdadero, es, siempre, el emisario de la ventura y de la paz.
El amigo verdadero ampara en las horas tristes. Se alegra con las alegrías del otro. No exige nada. no impone condiciones. Acepta al otro como es se presenta.
Si algo descubre de malo, desagradables, en el otro, sugiere, aconseja, sin imposición.
La amistad verdadera no es ciega, más si observa defectos en los corazones amigos, sabe amarlo y entenderlo aun mismo así.
En los trámites de la Tierra, la amistad leal es la más hermosa modalidad de amor fraterno, que santifica los impulsos del corazón en las luchas más dolorosas e inquietantes de la existencia.
Redacción del Momento Espirita
******************************
OBSERVANDO EL UNIVERSO
Mercedes Cruz Reyes
El mundo no fue creado en su virilidad y en su plenitud de vida. El universo nació niño, la materia cósmica primitiva dio nacimiento a torbellinos a aglomeraciones de este fluido difuso; a aglomeraciones de materia nebulosa; que se dividieron por sí mismas y se modificaron hasta el infinito, para formar en las regiones inconmensurables de la extensión diversos centros de creaciones simultáneas o sucesivas.
Refiriéndonos a algunos millones de siglos antes de la época actual, nuestra tierra no existía; nuestro sistema solar mismo no había empezado aún las evoluciones de la vida planetaria y sin embargo, esplendorosos soles iluminaban el éter; ya planetas habitados , dan la vida a una multitud de seres que nos han precedido en la carrera humana; las producciones opulentas de una naturaleza desconocida y los fenómenos maravillosos del cielo despliegan bajo otras miradas los cuadros de la inmensa creación.
La eternidad está detrás como delante de nosotros: el espacio es el teatro de una sucesión y simultaneidad inimaginables de creaciones. Las nebulosas que se distinguen apenas en las profundidades de los cielos son aglomeraciones de soles en vías de formación; otras, en cambio, son vías lácteas de mundos habitados, y otras en fin, teatros de catástrofes inmensas y de decadencia. Estamos en medio de una infinidad de mundos, del mismo modo estamos en medio de una infinidad de duraciones anteriores y ulteriores; que la creación universal no es para nosotros, y que debemos reservar esta palabra a la formación aislada de nuestros diminutos glóbulos.
El fluido cósmico universal, o materia cósmica primitiva contiene todos los elementos materiales fluídicas y vitales de todos los universos que despliegan sus magnificencias ante la eternidad; ella es la madre fecunda de todas las cosas; ella es la abuela y lo que es más, la generatriz eterna. No ha desaparecido esa sustancia de la que proceden las esferas siderales; no ha muerto ese poder, porque aun está dando incesantemente los elementos reconstituidos de los mundos que se van borrando del libro eterno.
El fluido cósmico universal no es otra cosa que la sustancia primitiva donde residen todas las fuerzas universales de donde la naturaleza ha sacado todas las cosas.
Este fluido envuelve los cuerpos como un inmenso océano. En el reside el principio vital que da nacimiento a la vida de los seres y la perpetua en cada globo según sus condiciones, allí dormita latente, por eso cada criatura mineral, vegetal, animal o de otra clase – porque hay otros reinos en la naturaleza, cuya naturaleza ni siquiera sospechamos – sabe, en virtud de este principio las condiciones de su existencia y duración.
La materia cósmica primitiva está revestida, no solo de leyes que aseguran la estabilidad de los mundos, sino también del principio vital universal que forma generaciones espontaneas en cada mundo a medida que se manifiestan las condiciones de la existencia sucesiva de los seres, y cuando les llega la época de la aparición de los hijos de la vida durante el periodo creador, todo es producto de la voluntad divina, Dios ha creado siempre, crea sin cesar y seguirá creando en la eternidad.
Allí donde nuestros ojos admiran resplandecientes estrellas, allí donde nuestro espíritu completa irradiaciones magnificas que brillan en lejanos espacios, hace mucho tiempo que la muerte ha extinguido esos esplendores, y el vacio ha sucedido a ese deslumbramiento y aun recibido nuevas creaciones desconocidas todavía.
Es necesario reconocer que la tierra y el hombre no son nada, comparados con todos los esplendores de la creación, y que las más colosales operaciones de nuestro pensamiento no se extienden aún sino a un campo imperceptible, al lado de la inmensidad y de la eternidad de un universo que nunca concluirá.
Las obras de Dios están creadas para el pensamiento y la inteligencia; los mundos son las moradas de los seres que los contemplan, y que descubren bajo su velo el poder y la sabiduría del que los formó, no son cosas dudosas para nosotros. Pero lo que importa que sepamos, es que debemos ser solidarios. Y lejos de querer interpretar magistralmente la obra, debemos contentarnos con estudiarla humildemente, letra por letra, palabra por palabra, línea por línea.
******************************
LA PRIMERA PIEDRA
Hay, si, muchos compañeros errados.
Nadie lo niega.
Ese, que gozaba de tu confianza, te defraudo, a la manera de un tronco pesado, sobre la plantación, aun frágil, de tu fe.
El otro, que te parecía invulnerable en audacia, se acobardó y huyo.
Conociste a los que predicaban generosidad, agarrándose a la avaricia, y notaste a los que hablaban de virtud, caer en el vicio.
Situabas la fuente del consuelo en varios amigos, que acabaron en la desesperación y recogías orientaciones de otros tantos, que se hundieron en la corriente de las sombras, como barcos a la deriva.
En muchos casos, trocaste entusiasmo por desaliento y admiración por repugnancia.
Ante semejantes problemas, es natural te sientas entre la amargura y la rebeldía.
No en tanto, entra en el santuario de ti mismo procurando comprender nuestra obligación de auxiliar y servir, y reflexiona en las exigencias de la evolución.
Colócate en el lugar de la criatura en dificultad y enumera cuantas veces has sido providencialmente auxiliado, para no caer en la tentación.
Medita en las horas en que los pensamientos infelices te dominan el alma; en los momentos en que tropiezas y caes; en las ocasiones en las que te engañas y sufres; en los instantes en los que lastimas las faltas que no desearías cometer; y si te sientes lejos de la posibilidad de errar e integralmente libre de toda culpa, podrás, entonces, oír de nuevo, la lección de Jesús y tirar la primera piedra.
Por el espíritu Emmanuel – Del Libro: Canales de la Vida: Francisco Cándido Xavier.
Nadie lo niega.
Ese, que gozaba de tu confianza, te defraudo, a la manera de un tronco pesado, sobre la plantación, aun frágil, de tu fe.
El otro, que te parecía invulnerable en audacia, se acobardó y huyo.
Conociste a los que predicaban generosidad, agarrándose a la avaricia, y notaste a los que hablaban de virtud, caer en el vicio.
Situabas la fuente del consuelo en varios amigos, que acabaron en la desesperación y recogías orientaciones de otros tantos, que se hundieron en la corriente de las sombras, como barcos a la deriva.
En muchos casos, trocaste entusiasmo por desaliento y admiración por repugnancia.
Ante semejantes problemas, es natural te sientas entre la amargura y la rebeldía.
No en tanto, entra en el santuario de ti mismo procurando comprender nuestra obligación de auxiliar y servir, y reflexiona en las exigencias de la evolución.
Colócate en el lugar de la criatura en dificultad y enumera cuantas veces has sido providencialmente auxiliado, para no caer en la tentación.
Medita en las horas en que los pensamientos infelices te dominan el alma; en los momentos en que tropiezas y caes; en las ocasiones en las que te engañas y sufres; en los instantes en los que lastimas las faltas que no desearías cometer; y si te sientes lejos de la posibilidad de errar e integralmente libre de toda culpa, podrás, entonces, oír de nuevo, la lección de Jesús y tirar la primera piedra.
Por el espíritu Emmanuel – Del Libro: Canales de la Vida: Francisco Cándido Xavier.
*****************************+
¿ SON NECESARIAS LAS RELIGIONES ?
|
**************
¿ POR QUÉ LAS GUERRAS ?
El día 12 de junio de 2014, tres jóvenes israelíes fueron secuestrados en las proximidades de las colonias de Gush Etzion, localizadas entre las ciudades palestinas de Belén y Hebrón. Dieciocho días después, los cuerpos fueron encontrados con marcas de tiros y con la sospecha de que los disparos habrían sido realizados el día en que los adolescentes desaparecieron. Este reciente episodio sirvió de mecha para que se escribiese una página más de la secular guerra existente entre judíos y árabes, o de otro mdo, entre israelíes y palestinos.
Volviendo dos mil años atrás, la historia ns muestra el Imperio Romano forzando un éxodo de judíos de la entonces Tierra de Israel, la cual los romanos pasaron a llamar de palestina. Esta salida impuesta fue denominada por los historiadores como diáspora. En el siglo VII los árabes invaden Palestina y pasan a ser mayoría en la región. Doce siglos después, los judíos emigran desde Europa, retornando a los territorios palestinos, formando diversas comunidades judaicas.Debido a la denominación anterior "Tierra de Israel", los mismos pasan a llamarse israelitas. De esta forma, comienzan las tensiones entre los dos pueblos y los conflictos iniciados en el siglo XIX, alcanzando todo el siglo XX y adentrándose en el siglo XXI, sin ninguna solución pacífica definitiva desde entonces.
Uno de los puntos cruciales del actual conflicto ocurrió el día 24 de julio de 2014, cuando una escuela de la ONU, localizada en Beit Hanoun, en el norte de la Faja de Gaza, fue alcanzada por armamentos del ejército israelita, matando a 15 refugiados e hiriendo a muchos otros. Las escenas que recorrieron todo el mundo en los diversos medios, fueron impactantes, contando con niños enfermos, siendo retirados en las ambulancias en situación crítica.
El confrontamiento aún continúa, con la intensificación de las acciones de Israel sobre la Faja de Gaza en el día 29 de julio. Según datos de las agencias de noticias, más de mil personas murieron en los confrontamientos hasta ahora.
Aunque las cámaras se vuelven este mes hacia los conflictos israelitas, decenas de conflictos armados ocurren alrededor del globo. Como por ejemplo, en África tenemos la Guerra Civil de Somalia, con un saldo de casi mil muertos, solo en 2014. Entre América del Norte y México, lucha en la Guerra por el narcotráfico. En Asia, no se calmaron totalmente las tensiones entre las dos Coreas, del Sur y del Norte. En fin, no tenemos una Guerra envolviendo todo el mundo, todavía, aunque tenemos un mundo envuelto en Guerras.
¿ Pero, por qué las guerras todavía persisten en el siglo XXI, donde la sociedad moderna ya se encuentra más intelectualizada y tecnológicamente mejor y mucho más desenvuelta?. Tal vez no fuese el momento de extinguir de nuestro planeta una de las llagas más dolorosas de la humanidad: la guerra ?.
En este abordamiento no vamos a considerar las cuestiones político sociales que envuelven los conflictos. Mucho menos vamos a analizar las justificaciones elaboradas por estrategas renombrados en la historia, tales como Sun Tzu o Carl von Calusewintz. Apenas nos adherimos a la visión de la Doctrina Espírita en lo atañe a la guerra.
Las guerras aún suceden en nuestro planeta debido a las condiciones en que nos encontramos en nuestra línea de evolución. Como espíritus encarnados en un mundo de expiaciones y pruebas, la predominancia de la "naturaleza animal en un trasnsbordamiento de pasiones", aun impele al hombre a luchar contra el más débil a fin de imponer su fuerza en su propio beneficio.
La Providencia Divina permite que tales conflictos ocurran porque contribuyen para la libertad y el progreso de los pueblos. Igualmente en situaciones en que una nación es subyugada, la guerra, a falta de un término mejor, asume un carácter benéfico para el pueblo que por medio de la expiación pueda progresar más deprisa. Por otro lado, aquel que suscita la guerra acumula incontables débitos, los cuales llevarán en diversas existencias para ser dirimidos, a causa de los homicidios en los que contribuyó.
Tales cuestiones son abordadas por Allan Kardec en las preguntas número 742 al 745, del capítulo que aborda la Ley de Destrucción en el Libro de los Espíritus.
Naciones que se envuelven en estos conflictos acumulan débitos colectivos terribles, conforme nos muestra el Espíritu de André Luiz en la obra Nosso Lar, por la psicografía de Francisc Cándido Xavier. "Los países agresores se convierten ,naturalmente, en núcleos poderosos de centralización de las fuerzas del mal" Con eso, los allí encarnados establecen un hilo de conexión con las capas más sombrías, envolviendo a toodos en una psico-esfera de "perversidad y de horror".Solamente los más elevados, encarnados en esas naciones dominadoras para ejercer tareas nobles, consiguen no envolverse en la embriaguez de la guerra.
En el libro "A camino de la Luz", Emmanuel nos cita el ejemplo de la ciudad de Esparta en el auge de la Grecia antigua. Su pueblo pasó a la historia por ser soldados que en la antigüedad propagaban la destrucción y los flagelos de la guerra. Para la humanidad, ninguna contribución constructiva les dejaron. Para ellos mismos, indudablemente, acumularon una gran suma de deudas para ser expiadas en varias encarnaciones.
Veamos ahora el caso individual de un soldado que es obligado a guerrear para defender a su país. Conforme responden los espíritus en diversos pasajes de El Libro de los Espíritus, "la intención es todo,que el hecho nada vale". Luego, un homicidio no deja de ser un "gran crimen", pero mucho más será cobrado de aquel que lo hiciese en una situación de conflicto con intención, que aquel que lo hiciese en legítima defensa. Cada caso es un caso, pero l que siempre será observado será la intención (preguntas 746 a 748).
Por fin, aun de acuerdo con el Libro de los Espíritus, la marcha del progreso es constituida por el Progreso Intelectual y el Progreso Moral. Generalmente el Progreso Intelectual camina al frente del moral, permitiendo al hombre entender el bien y el mal, y hacer sus elecciones ( pregunta nº 780). Con este libre albedrío, el hombre aumenta la responsabilidad de sus actos y pasa a avanzar o no en su Progreso Moral.
Es notorio que ya no estamos en el amanecer de nuestras encarnaciones. En Obras Póstumas, en el ítem "Aristocracias", Allan Kardec nos muestra que la primera aristocracia era la aristocracia patriarcal, donde la Tierra aún primitiva, ls jefes de las tríbus salvajes conducían a sus familias. Más tarde, divergencias entre las poblaciones vecinas dieron lugar al empleo de la fuerza bruta, las primeras guerras. Esto fue la segunda aristocracia. Con los bienes y la autoridad adquiridos en combates, el poder pasó a ser transmitido del padre para el hijo, consolidando la autoridad por el nacimiento.
En este punto ya estamos en la Tierra de Expiaciones y de Pruebas, y con el surgimiento de las clases superiores e inferiores, el trabajo de la segunda en busca de mejores condiciones de vida, da lugar a una nueva potencia: el dinero. Para generarlo surge la nueva aristocracia basada en la inteligencia.
Llegamos al final de la edad media, en el amanecer del mundo moderno/contemporáneo intelectualizado. Pero como vimos anteriormente, el Progreso Intelectual no implica el Progreso Moral. Luego, aun queda al hombre desenvolverse por los caminos de la justicia y de la caridad. Este desenvolvimiento abrirá las puertas a la última aristocracia que será la Aristocracia Intelecto- Moral.
Con ella tendremos efectivamente la llegada de una nueva era sin guerras ni destrucción.
Así que, ¿ guerras, por qué ? Por nuestra cndición de seres humanos que aun cargan en el corazón el orgullo y el egoísmo (pregunta nº 785) y se vuelven un obstáculos para nuestro Progreso Moral. Además de eso, por medi de ellas somos impulsados a progresar (pregunta nº 744). A partir del momento que nos libramos de estas cargas, estaremos dispuestos para dar nuestras manos al prójimo.
Unidos por la Paz, podremos llegar a un Mundo de Regeneración.
Márcio Martins da Silva Costa
*****************************
No hay comentarios:
Publicar un comentario