viernes, 27 de mayo de 2016

LOS ANIMALES Y EL HOMBRE.


¿ UN ESPÍRITU DESENCARNADO TIENE LIBERTAD PARA VIAJAR POR LAS DIFERENTES FRANJAS DEL MUNDO ASTRAL ?

Los espíritus de los niveles superiores gozan de mayor libertad de movimiento y pueden descender a los niveles inferiores, aunque para ellos resulte tan incómodo como para vosotros lo sería caminar por dentro de un lodazal. Los espíritus de niveles inferiores no pueden ascender a niveles superiores hasta que no logren aumentar su nivel vibratorio, y esto sólo se consigue cuando evolucionan espiritualmente.
Por lo tanto, los contactos entre espíritus de diferente nivel siempre se realizan descendiendo el más avanzado a la región del menos avanzado. Los espíritus que habitan en las zonas densas del astral inferior encuentran mayor dificultad para moverse en su entorno, pareciendo casi que viven con las mismas limitaciones que tiene un humano
encarnado, ya que la vibración de la “materia astralina” de esa zona es tan baja que se asemeja mucho a la de la materia física. No ocurre así con los espíritus del astral superior, que pueden viajar libremente,aunque para que éstos se manifiesten en el astral inferior y puedan ser vistos por sus habitantes deben ajustar su vibración, y esto les resulta tan
penoso como lo es para vosotros el respirar en una habitación llena de humo.

- ¿Por qué hay esta separación entre niveles?
* Esta separación es inherente a la naturaleza del mundo astral e impide que los espíritus poco avanzados puedan infiltrase en las regiones de alta vibración, donde impera el amor, y causen daño a sus moradores.

- ¿Hay algún tipo de conexión entre estas franjas vibratorias o están completamente separadas entre sí?
*Las separaciones no son abruptas sino graduales. Al igual que la densidad de la atmósfera disminuye de forma progresiva al alejarnos de la superficie terrestre, así lo hace también la densidad de la materia astralina. Las diversas comunidades del astral están conectadas entre sí y existe un tránsito de espíritus, con la limitación que hemos indicado  anteriormente. Es decir, mientras los avanzados pueden moverse libremente por su nivel y los niveles inferiores, los menos avanzados sólo pueden alcanzar niveles superiores aumentando su nivel vibratorio, a través de la evolución espiritual. Las comunidades del astral medio son ayudadas por las comunidades del astral superior, de las que reciben
asesoramiento espiritual y técnico para organizar sus comunidades conforme a las leyes espirituales más avanzadas. A su vez, de estas comunidades del astral medio, parten misiones de ayuda a los espíritus del astral inferior que están en condiciones de salir de esa franja vibratoria, por haber tomado conciencia del daño que hicieron, porque han mostrado arrepentimiento y voluntad de mejora, y por haber pedido ayuda sincera para salir de esa situación.

Sebastián de Arauco.


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LOS ANIMALES Y EL HOMBRE.

592 – Si comparamos al hombre y a los animales, con respecto a la inteligencia, la línea de demarcación parece difícil de establecer, porque ciertos animales, bajo este aspecto, tienen una superioridad notoria sobre ciertos hombres. ¿Puede ser establecida de una manera
precisa esta línea de demarcación?
– Sobre este punto no están muy acordes vuestros filósofos. Unos quieren que el hombre sea un animal y otros que el animal sea un hombre; Todos están errados. El hombre es un ser aparte, que se rebaja mucho a veces o que puede elevarse muy alto. Físicamente el
hombre es como los animales y está mucho menos provisto, que muchos de ellos. La Naturaleza les dio todo lo que el hombre está obligado a inventar con su inteligencia para sus necesidades y su conservación. Es verdad que su cuerpo se destruye como el de los animales, pero su Espíritu tiene un destino que sólo él puede comprender, porque sólo él es completamente libre. ¡Pobres hombres, que os rebajáis aún por debajo de la brutalidad! ¿No os sabéis distinguir? Reconoced al hombre por el pensamiento de Dios.


593 – ¿Puede decirse que los animales no actúan sino por instinto?
– También esto es un sistema. Es verdad que el instinto domina a la mayor parte de los animales; ¿pero no ves que actúan con una voluntad determinada? Es de la inteligencia, aunque limitada.

Además del instinto, no podría negarse a ciertos animales actos combinados lo que denota una voluntad de actuar con sentido determinado y según las circunstancias. Por tanto, hay en ellos una especie de inteligencia, cuyo ejercicio está más concentrado en los medios de satisfacer sus necesidades físicas y proveer su conservación. En ellos nada de creación se ve, nada de mejoramiento. Cualquiera que sea el arte que admiremos en sus trabajos, lo
que antes hacían, lo hacen actualmente, ni mejor, ni peor, según formas y proporciones constantes e invariables. El pequeñuelo, aislado de los demás de su especie, no deja de construir su nido conforme al mismo modelo, sin haber recibido enseñanza alguna. Si algunos son susceptibles de cierta educación, su desarrollo intelectual, siempre encerrado en estrechos límites, se debe a la acción del hombre sobre una naturaleza flexible, porque no tienen ningún progreso propio. Ese progreso es efímero y puramente individual, porque el animal entregado a sí mismo, no tarda en regresar a los límites estrechos marcados por
la Naturaleza.

594 – ¿Los animales tienen un lenguaje?
– Si queréis decir un lenguaje formado de palabras y de sílabas, no; pero un medio de comunicarse, sí. Y se dicen muchas más cosas de lo que vosotros creéis, pero su lenguaje es limitado, como sus ideas, a sus necesidades.

– Hay animales que carecen de voz. ¿Parece que éstos no tienen lenguaje?
– Se comprenden por otros medios. ¿No tenéis vosotros más que la palabra para comunicaros? ¿Qué dices de los mudos? Dotados los animales de la vida de relación, tienen medios de advertirse y de manifestar las sensaciones que experimentan. ¿Crees que los peces no se entienden entre sí? El hombre no tiene, pues, el privilegio exclusivo del lenguaje, aunque el de los animales sea instintivo y esté limitado por el círculo de sus necesidades e ideas, mientras que el del hombre es perfectible y se presta a todas las concepciones de su inteligencia.

En efecto, los peces que emigran en masa, como las golondrinas que obedecen al jefe que las guía, deben tener medios de avisarse, entenderse y concretarse. Acaso lo hagan merced a una vista más penetrante que les permita distinguir las señales que se hacen; puede ser también que el agua sea un vehículo que les transmita ciertas vibraciones. Cualquiera que sea, es incontestable que tienen un medio de entenderse, como todos los animales privados de voz y que trabajan en común. Y después de esto, ¿hemos de asombrarnos de que los Espíritus puedan comunicarse entre sí, sin el empleo de la palabra articulada?.

595 – ¿Los animales tienen el libre albedrío de sus actos?
– No son simples máquinas como creéis, pero su libertad de acción está limitada a sus necesidades y no pude compararse con las del hombre. Siendo muy inferiores al hombre, no tienen los mismos deberes que él. Su libertad está restringida a los actos de la vida
material.


596 – ¿De dónde procede la aptitud de ciertos animales para imitar el lenguaje del hombre, y por qué semejante aptitud se encuentra más en las aves que en el mono, por ejemplo, cuya conformación tiene más analogía con la suya?
– Conformación particular de los órganos de la voz, secundada por el instinto de imitación; el mono imita los gestos y ciertas aves imitan la voz.


597 – Puesto que los animales tienen una inteligencia que les da cierta libertad de acción, ¿existe en ellos un principio independiente de la materia?
– Sí, y sobrevive al cuerpo.
– ¿Este principio en un alma semejante a la del hombre?
– Es también un alma, si así lo queréis; eso depende del sentido que se dé a esa palabra; pero es inferior a la del hombre. Entre el alma de los animales y la del hombre hay tanta distancia como entre el alma del hombre y Dios.


598 – ¿El alma de los animales conserva, después de la muerte, su individualidad y la conciencia de sí misma?
– Su individualidad, sí, pero no la conciencia de su yo. La vida inteligente permanece en estado latente.


599 – ¿El alma de los animales tiene elección para encarnarse en un animal antes que en otro?
– No, pues no tiene libre albedrío.


600 – El alma del animal, sobreviviente al cuerpo, ¿está después de la muerte en un estado errante como la del hombre?
– Es una especie de erraticidad, porque no está unida al cuerpo, pero no es un Espíritu errante. El Espíritu errante es un ser que piensa y actúa por su libre voluntad, siendo la conciencia de sí mismo su atributo principal. El alma de los animales no tiene esa misma
facultad. El Espíritu del animal es clasificado después de la muerte, por los Espíritus a quienes les compete y utilizado casi de inmediato, no teniendo tiempo para ponerse en relación con otras criaturas.


601 – ¿Siguen los animales una ley progresiva como los hombres?
– Sí, y por esto en los mundos superiores, donde los hombres están más avanzados, los animales lo están también y tienen medios más desarrollados de comunicación. Pero son siempre inferiores y están sometidos al hombre. Son para él servidores inteligentes.

Nada hay en esto de extraordinario. Supongamos a nuestros más inteligentes animales: al caballo, al perro, al elefante, dotados de una conformación apropiada a los trabajos manuales, ¿qué de cosas no harían bajo la dirección del hombre?

602 – ¿Los animales progresan, como el hombre, en virtud de su voluntad o por la fuerza de las cosas?
– Por la fuerza de las cosas, y por esto no existe expiación para ellos.


603 – ¿En los mundos superiores conocen a Dios los animales?
– No; el hombre es para ellos un dios, como en otro tiempo los Espíritus fueron dioses para los hombres.


604 – Siendo siempre inferiores al hombre los animales aunque perfeccionados en los mundos superiores, resultaría que Dios ha creado seres intelectuales perpetuamente condenados a la inferioridad, lo que parece no estar conforme con la unidad de miras y de progreso que en todas sus obras se observa.
– Todo se encadena en la Naturaleza por lazos que no podéis comprender aún, y las cosas en apariencia más dispares, tiene puntos de contacto que el hombre en su estado actual no llegará a comprender jamás. Puede entreverlas por un esfuerzo de su inteligencia, pero
sólo cuando ésta haya adquirido todo su desarrollo y esté exenta de los prejuicios del orgullo y de la ignorancia, podrá ver claramente en la obra de Dios. Hasta entonces sus ideas limitadas le harán ver las cosas bajo un aspecto mezquino y restringido. Entended bien que Dios no se puede contradecir y que en la Naturaleza todo se armoniza por medio de leyes generales que nunca se apartan de la sublime sabiduría del Creador.
– ¿Así, la inteligencia es una propiedad común, un punto de contacto, entre el alma de los animales y la del hombre?
– Sí, pero los animales sólo tienen la inteligencia de la vida material. En el hombre, la inteligencia da la vida moral.


605 – Si se consideran todos los puntos de contacto existentes entre el hombre y los animales, ¿no se podría pensar que el hombre posee dos almas: el alma animal y el alma espírita y que si no tuviese esta última, podría vivir como el animal, en otras palabras, que el animal es un ser semejante al hombre, exceptuando el alma espírita?
¿Y no resultaría de aquí que los instintos buenos y malos del hombre serían efecto del predominio de una de esas dos almas?
– No, el hombre no tiene dos almas, sino que el cuerpo tiene sus instintos que son resultado de la sensación de los órganos. Solo existe en el una doble naturaleza: la naturaleza animal y la naturaleza espiritual. Por su cuerpo, participa de la naturaleza de los animales y de sus instintos; por su alma, participa de la naturaleza de los Espíritus.
– Así, además de sus propias imperfecciones de las que ha de despojarse el Espíritu, ¿debe luchar también con la influencia de la materia?
– Sí; y mientras más inferior es, más apretados son los lazos entre el Espíritu y la materia. ¿Acaso no lo veis? No, el hombre no tiene dos almas, el alma es siempre única en cada ser. El alma del animal y la del hombre son distintas una de la otra, de modo que el alma de uno no puede animar el cuerpo creado para el otro. Pero si el hombre no tiene alma animal que le ponga en sus pasiones al nivel de los animales, tiene el cuerpo que con frecuencia le rebaja hasta ellos; porque su cuerpo es un ser dotado de vitalidad que tiene instintos, pero inteligentes y limitados al cuidado de su conservación.

Encarnándose el Espíritu en el cuerpo del hombre, le trae el principio intelectual y moral que le hace superior a los animales. Las dos naturalezas presentes en el hombre dan a sus pasiones dos orígenes diferentes: una proviene de los instintos de la naturaleza animal, otra de las impurezas del Espíritu de la cual es la encarnación que simpatiza más o menos con los groseros apetitos animales. Purificándose el Espíritu, se emancipa poco a poco de la influencia de la materia, bajo la cual se aproxima a la brutalidad. Liberado de esa influencia,
se eleva a su verdadero destino.

606 – ¿De dónde toman los animales el principio inteligente que constituye la especie particular de alma de que están dotados?
– Del elemento inteligente universal.
– La inteligencia del hombre y la de los animales, ¿dimanan entonces de un principio único?
– Sin ninguna duda, pero en el hombre recibió una elaboración que lo eleva por encima de la del animal.

EL LIBRO DE LOS ESPÍRITUS. ALLAN KARDEC.


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                        Lección viva

Humberto-de-Campos camino al aeropuerto, Aristeu Soares comentaba con el amigo Alcides Mota las enseñanzas recogidas en la reunión mediúmnica de la víspera, y se estableció, de pronto, un curioso diálogo.

– Creo absolutamente inoportuna cualquier prédica tendiente a herir nuestra independencia – hablaba Soares, decidido.

– Pero… contestaba Mota, reservado. El asunto no admite evasivas. Los Espíritus amigos que se comuniquen, que consuelen, que instruyan; mientras tanto, nada de fabricar frenos psicológicos, copiando a las religiones del pasado.

– Pero, estamos en un período de reencarnación, a manera de alumnos en la escuela. No sabemos todo y no estamos libres del auxilio de profesores que nos señalen el camino seguro, para que vengamos a errar lo menos posible!…

– Nadie aprende sin experimentar la lección por sí mismo.

– La función de la enseñanza será, de seguro, conducirnos a la experiencia sin caídas innecesarias.

– Usted está buscando subterfugios.

– No, querido mío. Comprendamos que los buenos Espíritus nos ayudan sin coacción. La ley de Dios nos reclama a vivir hoy de modo más elevado que antes. Usted, claro, no querrá repetir las mismas faltas de pasadas reencarnaciones…

– Eso es otra cosa. La enseñanza es luz para lo íntimo. Concuerdo en que los bienhechores espirituales nos eduquen los sentimientos; entre tanto, a mi modo de ver, no es justo que se aprovechen del intercambio con nosotros para apartarnos de la regalía de proceder como quisiéramos… Serán buenos amigos, sin duda; con todo, la mayoría de las veces, se hacen dulces y amables para inducirnos a una posición de disciplina que no apruebo. Nada de exposiciones acerca de penas y lágrimas más allá de la tumba y de invocaciones angustiosas a esa o a aquella actitud, ante los principios de causa y efecto, como si debiésemos desempeñar el papel de niños asombrados…

– ¡Soares, Soares!… Usted, por lo que veo, no percibe que los instructores espirituales nos guían para el bien, exclusivamente para el bien…

– Comprendo que se pruebe la inmortalidad del alma y acepto la necesidad de la convicción, pero no justifico advertencias y avisos de amigos encarnados o desencarnados. Si todos disponemos de libre albedrío y si la propia Doctrina Espírita consagra la responsabilidad personal, ¿por qué motivo los discursos o escritos de corrección o de reprobación?!…

Espíritu Hermano X
Médium Francisco Cándido Xavier


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                        Vida y coraje

Nadie consigue evolucionar y elevarse sin el coraje de aceptarse tal cual es para hacer lo mejor de sí. De cierto los que erraron y nunca sufrieron estarán aun en la escala cero, en materia de experiencia.

Ningún progreso fue hecho y ni será hecho sin los riesgos. Pesimismo es impedimento de creación voluntaria. Recelo en el sacrificio, en tratándose de hacer lo mejor, es atraso en la marcha. Trabajar sirviendo es participar, y participar es vivir corajosamente.

Todos aquellos que se preservan demasiado contra obstáculos y pruebas acaban huyendo de las tareas que les compete desenvolver.

El Espíritu que colabora en la construcción de la felicidad general no se molesta con la visita de la injuria, como sembrador que, con el fin de enriquecer el establo, no se irrita contra los detritos de la tierra a que se dedica. En la contabilidad del bien de todos, más vale imperfección que trabaja en auxilio a los otros, en el proceso de perfeccionamiento del alma, que virtud inerte con miedo a perderse.

Todos nosotros – los espíritus aun vinculados a la Tierra – somos colectivamente considerando, vasto rebaño de criaturas en evolución. Más aquel que no tenga coraje en pensar, actuar y renovarse a solas, cuando el estallido del rebaño lo plante, estará por mucho tiempo en la rueda de repetición, ya que sin coraje de ser lo que somos, operando y cooperando para cumplir el deber que la vida nos atribuye, no encontraremos progreso y ni seremos útiles a nadie.

Por el Espíritu André Luiz
Médium: Francisco Cándido Xavier y J. Herculano Pires
Extraído del libro ” Dialogo de los vivos”

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