Fisiología de la Mediumnidad ( I I )

(....... viene del anterior)

PSICOGRAFIA

     En el caso de la psicografía, la escritura se procesa frecuentemente con mucha rapidez, las palabras pueden aparecer escritas con poca claridad, las letras a veces son grandes, probablemente para facilitar la escritura rápida, la caligrafía tiene poco capricho, no hay necesidad de acompañar al médium en lo que escribe y puede ocurrir que se escriba como en un espejo.

                                                     COMUNICACIÓN ORAL

    En la comunicación oral, el médium se expresa con voces de características variadas, el tono puede ser pausado como hecho con esfuerzo, pero, en los médiums más preparados, la falta acostumbra a ser fluida, muy rápida, pareciendo que se trata de un discurso ya preparado o muy bien adornado. Se nota también que, durante la comunicación, el médium asuma posturas y gestos no comunes a su modo habitual de  expresarse.

     Cuando interrogamos a los médiums conscientes, esos dicen que, en el transcurso del fenómeno, son llevados para hablar o escribir como si eso no dependiese de la voluntad de ellos.

     Correlaccionando ahora lo que vimos en términos neurológicos para la fisiología del sistema extrapiramidal (ganglios de la base y área cortical pre-motora) con las características de la comunicación mediúmnica, tenemos la impresión que la entidad comunicante  utiliza de ese sistema automático para  manifestarse con mayor rapidez, con la mínima donación de energía, con menor interferencia de la conciencia del médium y con mayor posibilidad de darse la amnesia.

     Resumidamente, podríamos encuadrar ese tipo de comunicación mediúmnica como una constelación de automatismos complejos, desempeñados por el sistema extrapiramidal del médium, pero con la co-autoridad del espíritu comunicante.

     Ya vimos también que, durante nuestros actos automáticos, nuestra conciencia está libre para la ejecución de actos voluntarios e intencionados pudiendo con ellos interrumpir o modificar nuestros automatismos. Por eso, podemos decir y concluir que la manifestación mediúmnica,  tratándose de gestos automatizados, sufre el control y la ingerencia de la conciencia del médium. Lo  que no deja de ser un factor inhibidor, sino necesario para la propia "disciplina" de la entidad comunicante, cuando eso se hiciera necesario.

                                                  El TÁLAMO

     El  tálamo es un núcleo sensitivo por excelencia. El ejerce un papel receptor, centralizado y selectivo de las informaciones sensitivas que se dirigen al cerebro.

     Los  estímulos externos del tipo dolor, tacto, temperatura y tensión percibidos en toda la extensión del nuestro cuerpo recorren vías neuronales que terminan en el tálamo (en el centro del cerebro). A partir de ahí, esos estímulos son priorizados y seleccionados para que lleguen al cerebro apenas los estímulos convencionales, principalmente los más urgentes, como es el caso de los estímulos nocivos, que exigen una rápida retirada. Es el caso de retirar luego la mano de un objeto que está muy caliente.

     Por otro lado, incluso para estímulos de poca importancia, el tálamo puede ofrecer para la conciencia las informaciones deseadas, cuando ellas fueran requeridas para el cortex. Es el caso de, en cualquier momento, incluso con los ojos cerrados, queremos saber si estamos o no usando una alianza en el dedo o un calcetín en los pies.

     Por tanto, las informaciones sensitivas son percibidas en el tálamo y este ejerce un papel bloqueador interrumpiendo el camino hasta el cortex cerebral; que sólo será alcanzado cuando a informaciones fueran nuevas o cuando despertaran interés o riesgo.

     Las informaciones monótonas y rutinarias quedarían permanentemente inhibidas en el tálamo. Incluso porque sería muy inconveniente estar ligados permanentemente a todas las informaciones que tocan, por ejemplo,  nuestra piel.

    Es posible que muchas de las sensaciones somáticas referidas por los médiums, que dicen que perciben la aproximación de entidades espirituales, como si estos les estuviesen tocando el cuerpo, sea efecto de estímulos talâmicos.

     En ese caso, por la acción del cortex del médium los estímulos espirituales pueden ser facilitados o inhibidos por la aceptación o por la desatención del médium, sea como  efecto de estados emocionales no disciplinados por el médium.

                                          LA GLÁNDULA PINEAL

    La estructura y las funciones de la glándula pineal pasaron a ser estudiadas con mayor énfasis después del descubrimiento de la melatonina por Lerner, en 1958.

    Aunque la pineal ya fuese conocida desde 300 años d.C. (fue descubierta por Herophilus), sólo después del  descubrimiento de la melatonina se conoció su relación con la luminosidad y la oscuridad.

      Quedó demostrado experimentalmente que la luz interfiere en la función de la pineal a través de la retina, alcanzando el (cruce de los nervios ópticos sobre el hueso debajo de la base del cráneo; punto de unión de dos cromosomas homólogos en el cual ocurre el cruzamiento y el cambio  de información genética. El hipotálamo, el tronco cerebral, la medula espinal, el ganglio cervical superior, llegando, finalmente, al nervio coronario en el lugar del cerebelo. Entre la pineal y lo  restante del cerebro no hay una vía nerviosa directa. La acción de la pineal en el cerebro se hace por las repercusiones químicas de las sustancias que produce;

      Hoy ya se identificó un efecto dramático de la pineal (por acción de la melatonina), en la reproducción de los mamíferos, en la caracterización de los órganos sexuales externos y en la pigmentación de la piel.

      Investigaciones recientes demuestran una relación directa de la melatonina con una serie de dolencias neurológicas que provocan epilepsia, insomnio, depresión y disturbios del movimiento.

    Animales inyectados con altas dosis de melatonina desenvuelven la no coordinación motora, perdida de motricidad voluntaria, relajamiento muscular, caída de los palpados, pilo erección, vasodilatación contrayendo las extremidades, reducción de la temperatura, más allá de respiración agónica.

   Se descubrió también que la melatonina interobra con las neuronas serotoninérgicos y con los receptores bendiazepínicos del cerebro teniendo, por tanto, un efecto sedativo y anticonvulsiones.

    Pacientes portadores de tumores de la pineal pueden desenvolver epilepsia por disminución de la circulación sanguínea de la producción de melatonina.

   La melatonina parece leer también un papel importante en la génesis de enfermedades psiquiátricas como depresión y esquizofrenia.

   Otros estudios confirman una propiedad analgésica central de la melatonina, integrando la pineal a los analgesia opiáceos endógena.

   La literatura espiritual hace mucho viene dando un destaque para el papel de la pineal como núcleo generador de irradiaciones luminosa sirviendo como puerta de entrada para la recepción mediúminico.

   Como la pineal es sensible a la luz, no será de extrañar que pueda ser más sensible aun a la vibración electromagnética, sabemos que la irradiación espiritual es esencialmente semejante a la onda electromagnética que conocemos, comprendiéndose, así, su acción directa sobre la pineal.

   Podemos suponer que este primer contacto de la entidad espiritual con la pineal del médium posibilitaría la liberación de melatonina predispuesto el resto del cerebro al "dominio" del espíritu comunicante. Esa participación química al fenómeno mediúmnico nos podría explicar las fluctuaciones de la intensidad y de la frecuencia con que se observa a la mediumnidad.

   Hasta el presente, la especie humana recibe la mediumnidad como una carga pesada de pruebas y sacrificios. Raras veces como oportunidad bien aprovechada para prestaciones de servicio y engrandecimiento espiritual.

   La  evolución, no obstante, camina acumulando las experiencias, repitiendo enseñanzas. En  poco, iremos acumulando tanto espiritual, como físicamente, modificaciones en nuestro cerebro. El  hombre del futuro deberá disponer de la mediumnidad como dispone hoy de la inteligencia. Confiamos que la misericordia de Dios nos conceda la bendición de usar bien las dos a partir de hoy.

Nota: (Extraído de la Revista Cristiana de Espiritismo nº 01, páginas 10-15)

 Nubor Orlando Facure - Ex-Profesor Titular de Neurocirurgía UNICAMP.

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