domingo, 8 de mayo de 2011

Espíritas

Dr. Bezerra


     A los espíritas les pertenece la gran tarea de vivir el amor

    A los espíritas está destinada la gran tarea de dar ejemplo de amor con actos, no con palabras. A través de la acción por medio de la vivencia, porque el mundo está cansado de oír, pero necesitado del estímulo que procede de aquellos que viven lo que enseñan…

  La unión nos da la señal de Jesús, fortaleciendo nuestros sentimientos y la unificación de los espíritas.
        Seamos las fuerzas morales y doctrinaria para la expansión del mensaje liberador. Cierto que os enfrentaréis a desafíos. Sed puentes que facilitan el acceso de uno a otro margen, en este mundo en el que existen tantos individuos que optan por la postura de obstaculizar y dificultar el acceso. 

      Olvidar vuestras divergencias y uníos en las concordancias. Dejad al margen el ego perturbador y asumid la situación de hijos del calvario que contemplan la cruz pensando en la resurrección gloriosa.

Espíritas, hijos del alma, aquí estoy presente entre muchos, también confraternizando en esta noche que anuncia la unificación procedente de la unión de las almas, los compañeros Carlos Jordao da Silva y Luiz Monteiro de Barros, que tanto lucharon por la edificación de la identidad del Bien por el servicio de amor.

             La unión multiplica los valores, la separación desarma las defensas y naturalmente viene la disgregación. No dejéis atrás el Evangelio de Jesús, nos dice el apóstol de los gentiles.

Adelante, daos las manos, uníos en el amor con Jesús y con Allan Kardec.

Dejad de lado los escrúpulos, para pensar en la felicidad indescriptible de la gloria de la Doctrina Espírita y no en la exaltación de cualquiera.

Espíritas, el tiempo apremia. Amad. Si no pudieras amar, perdonad; si fuera difícil perdonar, disculpad; y si encontrarais obstáculos para la disculpa, tened compasión, como nuestro Padre la tiene con todos nosotros, enseñándonos la bendición de la reencarnación para reeducarnos, para recuperarnos, para que reanudemos la tarea que quedó interrumpida, en la retaguardia.

Que el Señor Bendito nos bendiga, hijos míos, son los deseos del humildísimo y paternal servidor de siempre, Bezerra. 


         El Espíritu Becerra de Menezes (Mensaje transmitido a través de Divaldo Pereira Franco, al final de la conferencia dada  en el Auditorio Bezerra de Menezes, de la Federación Espírita del Estado de San Pablo, en la noche del 18 de Abril del 2004, en ocasión de la Conmemoración de los 140 años del libro “El evangelio Según el Espiritismo” – 1864/2004).


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