martes, 3 de enero de 2023

El último día

   INQUIETUDES  ESPÍRITAS

1.- Cómo el Espiritismo abolió la esclavitud

2.- Con Jesús ( Psicografía)

3.- Ayudas

4.- El último día

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    DE CÓMO EL ESPIRITISMO ABOLIÓ LA ESCLAVITUD

          Mucho se ha dicho y escrito respecto al papel que desempeñó el Espiritismo en la proclamación emancipadora. Bien sabido es que Roberto Dale Owen y otros espiritistas eminentes, escribieron con frecuencia al Presidente Lincoln sobre la liberación de los esclavos. Con todo, no recordamos haber leído narración alguna sobre un acontecimiento importante tan coordinada y autorizada como la que sigue, tomada de un tratado que publicó “The Medium and Saybreak” de Londres, nº 408, de una lectura de J. M. Puebles, quien dijo:

         "Otro ejemplo tengo de los usos del espiritismo. Me refiero a los medios que influyeron en la mente de Lincoln, dando por resultado la emancipación de cuatro millones de esclavos. Conozco personalmente a los hombres y a los médiums. S. P. Kase, Esq., es uno de los reyes de los caminos de hierro americanos, que ha ayudado a la construcción de cinco líneas férreas y sido a la vez presidente de dos de ellas. Este caballero al visitar la ciudad de Washington D. C., en otoño de 1863, durante nuestra guerra civil, estaba paseando a lo largo de la avenida de Filadelfia, cuando acertó a ver el signo suspensivo del médium Mr. J. B. Conklin, y oyó al mismo tiempo una voz que decía: “Vaya V. a ver a Conklin; está en las habitaciones que ocupaba V. doce años ha” Allá se encaminó Mr. Kase y encontró a Mr. Conklin en un estado semi-anormal, dirigiendo al presidente Lincoln una carta escrita bajo la influencia de los espíritus. Mr. Conklin dijo: “Llega V. a tiempo, necesito que lleve esto al Presidente”
      “Bien, contestó Mr. Kase, no hallo inconveniente, si V. quiere acompañarme”

      Fueron los dos a la casa presidencial y, como Mr. Kase se hubiese dejado olvidada su tarjeta de visita, envió por el criado su nombre, S. P. Kase, que el presidente tomó por S. P. Chase, miembro entonces de su gabinete. Introducidle, dijo. Al entrar en el salón, explicose fácilmente el error, atribuyéndolo a descuido por parte del criado.
       Tome V. asiento, dijo el presidente a Mr. Kase. Le conozco a V. mucho, y aprecio la utilidad que prestan sus caminos de hierro, transportando nuestras tropas al Sur.
      Después de conversar un rato sobre los ejércitos combatientes y la situación del país, Mr. Kase dijo: “Tengo una carta para V. Sr. Lincoln, y se la alargó. Leyola y releyola el presidente hasta que se volvió hacia Mr. Kase, diciéndole: “Es muy extraño. En esta carta se afirma que procede de los espíritus, de los padres de nuestra nación. ¿Sabe V. algo respecto a Espiritismo?
      Oh! Sí, replicó Mr. Kase: me han llamado espiritista durante algunos años, y a la voz y guía de los espíritus debo ciertamente mi éxito financiero.
         Las inteligencias espirituales solicitaban en la carta algunas conferencias personales con el Presidente, por conducto del médium de ellos. Arregláronse las cosas, y Mr. Conklin se hospedó en la mansión presidencial cuatro domingos seguidos. El resultado exacto de estas sesiones no se conoce, y sí sólo que la emancipación fue inmediatamente bosquejada en las reuniones del gabinete. Poco tiempo después el Presidente con su señora, el juez Wattles, el ex gobernador Smith y otros varios personajes políticos eminentes tuvieron una sesión en casa de Mr. Laurie, caballero muy conocido en Washington, y cuya hija, la señorita Jonng, es la célebre médium en presencia de quien el piano ha sido levantado bajo la acción de los espíritus, mientras ella lo estaba tocando.
      Durante esta sesión un joven médium fue presentado por uno de los padres de la República y se dirigió al presidente Lincoln hablando del modo más atrevido y elocuente sobre la dirección de la guerra, la senda política que debía seguirse y la importancia de que saliera inmediatamente una proclamación por cuya virtud quedarán libres todos los esclavos de la nación. Voy ahora a leer la sustancia de lo que dijo el espíritu, según me lo ha contado Mr. Kase:
      “Usted, señor, como Presidente de la República, ha sido llamado al puesto que ocupa para un objeto importantísimo. El mundo no sólo gime bajo el peso de la esclavitud mental y espiritual, si no que cuatro millones de hombres hechos a imagen de Dios están sufriendo la esclavitud material. Su yugo debe romperse, cortarse sus cadenas y ser libre el que está esclavizado físicamente para que pueda volver a su centro vuestra nación. En tiempo de Washington sembráronse los gérmenes de la libertad en los bosques del oeste, y están ahora próximos a dar preciosos frutos. Esta república va a la vanguardia de las naciones en la senda del pensamiento libre, pero ese punto oscuro, esa plaga de la esclavitud mancha su bandera. Este mal nacional debe destruirse. Un congreso espiritual vela por los asuntos de esta nación. La guerra civil no cesará, no se pronunciará el grito de victoria a través del norte, ni retumbará a lo largo de los valles del sur; el ramo de olivo de la paz no ondulará sobre vuestros campos, vuestros lagos, vuestras montañas, hasta que expidáis la proclamación de libertad, proclamación que hará libres para siempre a los millones de esclavos de vuestro perturbado país.”
      Los espíritus repitieron eso sustancialmente en las sesiones siguientes y en menos de tres semanas desde la recepción de esos mensajes espirituales del Congreso de Espíritus, el Presidente Lincoln publicó la gran proclama de la Emancipación.
      A partir de ese tiempo veinte batallas se libraron y cada batalla, a excepción quizá de alguna escaramuza sin importancia, fue una victoria para el norte. El Presidente Lincoln, el orgullo de América, no era un sectario, ni un fariseo encerrado dentro de su credo, sino un gran defensor de la humanidad, que vivió libre-pensador y murió espiritista. El mundo de los espíritus es el mundo de las causas, y en ese Congreso de Espíritus, esas influencias espiritistas, en una palabra, el Espiritismo abolió la esclavitud en América. (Traducción del inglés de B. S.)

Texto extraído de la “REVISTA DE ESTUDIOS PSICOLÓGICOS” Febrero de 1879, BARCELONA.

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                          CON JESUS (Psicografía)

                                                    


         Con Jesús, la vida adquiere nuevo sentido.

         La dificultad se hace bendición

         Dolor es alegría 

         Tristeza  es la víspera de la consolación. 

         La lucha constructiva produce tranquilidad de conciencia.

         Trabajo es condición de felicidad.

         La sombra es la fuente que da luz.

         La lágrima es la perla del sentimiento.

         Desprendimiento es el  camino de la propiedad verdadera.

            Renuncia es adquisición.

         Sacrificio es la carretera para las alturas.

         Es por eso que la Navidad, en cualquier parte, uniendo las criaturas en la misma faja de comprensión y solidaridad humana, será siempre la estrella del amor y de la esperanza en cada corazón.

( Espíritu Emmanuel, psicografia de Francisco Candido Xavier, GEEM)


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                                                               AYUDAS

Muchos son los que en la vida, en momentos de grandes tormentas, han de hacer una codificación en sus vidas, asidos a costumbres, no quieren desistir de la vida que han llevado, y en momentos de agonía, claman al cielo, pidiendo a Dios que les libre de las cadenas que lo mantienen en las prisiones dolorosas en las que viven, pero no quieren comenzar una nueva vida, persisten una y otra vez, en mantener el modo de vivir, tratando de buscar variaciones, que permitan la solución, para seguir con el carro en el mismo camino. No quieren cambios, quieren soluciones, y a veces las soluciones están en el cambio, porque vamos por caminos equivocados, caminos que no nos llevan al fin que traemos trazado.

El Espiritismo dilata el pensamiento y abre nuevos horizontes; en lugar de tener una vista estrecha y mezquina que concentra la atención en la vida presente, enseña que esta vida solo es un eslabón en el conjunto armonioso y grandioso de la obra del creador.

Como Espíritus eternos que somos, estamos hoy en el punto exacto de la evolución para la cual nos preparamos, con los recursos más adecuados para la solución de nuestros problemas y tareas, según los compromisos que contrajimos, sea en el campo del progreso necesario o en la esfera de la prueba rectificadora.

La base de la tranquilidad del hombre reside en su integridad en la conciencia, debiendo comprender que todos sus problemas  constituyen débitos  que le compete resarcir y que todas las facilidades que nos enriquecen el camino son instrumentos que el Señor nos presta, a fin de que nos sirvamos de ellos  para utilizar nuestra voluntad, construyendo  un mundo feliz en el futuro y comprendiendo así que la vida nos devuelve aquello que le damos.

Incontestablemente la sociedad terrena está muy avanzada en la senda del progreso dentro del siglo XX, pero da pena  que en la paz de tantos y tan admirables  triunfos sociales, el hombre no se conduzca también un poco más respetuoso ante Dios, sumiso  ante Sus Leyes, agradeciendo los favores que del Cielo recibe con la posibilidad de tales conquistas para el bien de todos.

Olvidamos con facilidad que la gloria del hombre virtuoso es el testimonio de la buena conciencia. Por lo tanto si conserva la conciencia pura, siempre estará alegre. Una buena conciencia puede soportar muchas cosas y permanecer alegre, hasta incluso en las adversidades. La mala conciencia en cambio, anda siempre temerosa e inquieta.

Se goza de suave sosiego si de nada nos acusa el corazón. Si nos acercamos a Jesús en la vida y en la muerte, entregándonos  fielmente,  El nos socorrerá, cuando todos nos falten…

No busquemos reposo; nacimos para trabajar, por eso dispongámonos   más  hacia la paciencia que para el consuelo, más para la cruz que para la alegría…

Las leyes eternas establecidas por el Supremo Señor para la regencia de Su Creación, jamás serán impunemente  desacatadas, pues todos sufrimos  las consecuencias inevitables de los hechos que realizamos contrarios a la ley. Todos sabemos, porque el Evangelio lo advierte, que a cada hombre le será concedido de acuerdo con los actos practicados.

Comprendiendo las leyes que rigen los destinos de la Humanidad se puede esclarecer a los ignorantes  en cuanto a la severidad  y a la justicia de las mismas leyes, con lecciones prudentes y racionales que podrán contribuir mucho para la educación de las almas frágiles  que aun no pueden o no saben comprender que los mundos y sus Humanidades son regidos por una justicia Inflexible, que, para bien del propio delincuente, de él exigirá actos armoniosos  con la armonía de la Creación, jamás sancionando desvíos de las rutas trazadas por la Legislación Suprema.

La bondad paternal del Creador, cuyas leyes, establecen una inflexible justicia en la punición del error, también establecen la misericordiosa enseñanza para la rehabilitación del alma culpable, por eso la meditación es una experiencia para el arrepentimiento, gracias a ella se consigue elevarse por encima de las miserias  vislumbrando un camino para observar dentro de la armonía  de la legislación divina.

Son muchos los sordos por ignorancia, sin buena voluntad para el progreso, y hasta incluso padecen rebeldía debido a las amarguras que sufrimos en la esclavitud.

La fe en Dios,  y en la inmortalidad del alma humana, el conocimiento de la reencarnación; la consoladora esperanza de la vida después de la muerte plena de justicia y recompensas, permite al hombre escalar hasta Dios lleno de ilusiones y esperanzas  para alcanzar  la Cima, gracias al trabajo que es un bendito elemento de redención para todas las criaturas ya que despierta el sentimiento por el interés fraternal hacia sus semejantes.

La resignación ante la adversidad es el sublime amparo del desgraciado, que envuelve su personalidad, animándola y resignándola con pleno testimonio de acerbos dolores.

Es preciso que el alma pecadora se vuelva para Dios, nuestro Padre, el cual siendo poderoso concederá fuerzas para conseguir la victoria contra uno mismo.

Dios protege y salva al “humilde”; ama y consuela, al humilde que se inclina ante Él y le da abundancia de gracias; mas después del abatimiento, le levanta para la gran honra. Al humilde revela sus secretos y lo atrae hacia Sí y le invita. El humilde, al sufrir ofensas, conserva su paz, porque confía en Dios y no en el Mundo.

Mientras el hombre no se reconozca inferior a todos, no habrá realizado progreso alguno.

Es necesario avisar a los hombres de las verdades,  para que se conduzcan mejor en la vida. ¡Ama y Respeta la Doctrina del Consolador prometida por Jesús!; Vigila, prudentemente, por la Revelación con claridad y dedicación, porque solamente ella, con las enseñanzas de las leyes que dirigen los destinos humanos, corregirá tales desarmonías existentes en el seno de las sociedades terrenales.

- Merchita -

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 EL ULTIMO DIA 

 

"Aquel era su último día de vida, pero él no lo sabía".

Aquella mañana sintió deseo de dormir un poco más. Estaba cansado, se quedó hasta muy tarde y no había dormido bien. Pero luego abandonó la idea de quedarse un poco más en la cama y se levantó pensando en las muchas cosas que precisaba hacer en la empresa

Se lavó la cara y se afeitó corriendo, automáticamente. No prestó atención al rostro cansado y a las ojeras oscuras, resultado de noches mal dormidas.

Tomó el café y salió  despidiéndose bajito con un "buenos días" sin mucha convicción. Despreció los labios de la esposa que se ofrecían para un beso de despedida.

No entendía por qué ella se quejaba tanto de la ausencia de él, y vivía pidiendo más tiempo para estar juntos.

El estaba consiguiendo mantener el elevado nivel de vida de la familia, ¿ eso no bastaba ?.

Entró en el automóvil y salió. Sacó el teléfono móvil y llamó a su hija. Sonrió cuando supo que el nietecito había dado los primeros pasos. Quedó serio cuando la hija recordó que hacía tiempo que él no aparecía para ver al nieto y lo invitó a comer.

Él estuvo bastante reacio: sabía que le iba a gustar mucho estar con el nieto. Pero no podía salir de la empresa aquél día. ¿ Quien sabe el próximo fin de semana?

Llegó a la empresa y malamente cumplimentó a las personas. La agenda estaba llena de gente y era muy importante comenzar después de atender sus compromisos, pues tenía plena convicción de que personas de valor no desperdician su tiempo con una pequeña charla.

A  la hora del almuerzo pidió a la secretaria que le trajera un sandwich y un refresco de dieta. El colesterol estaba alto, necesitaba hacerse un chequeo, pero eso quedaría para el mes siguiente.

Comenzó a comer mientras leía algunos papeles que usaría en la reunión de la tarde. No se dio cuenta que clase de bocadillo estaba masticando.

En cuanto relacionaba los telefonemas que debería dar, sintió un poco de atontamiento, la vista empañada. Se acordó  del médico advirtiéndole algunos días antes, cuanto tuvo los mismos síntomas, de que era hora de hacer un chequeo.

Pero concluyó de que era un mal estar pasajero, que sería resuelto con un café fuerte, sin azúcar.

Terminado el "almuerzo", se cepilló los dientes y volvió al trabajo. "La vida continúa" pensó. Más papeles para leer, más decisiones que tomar, más compromisos a cumplir.

Salió para una reunión, ya medio atrasado. No esperó el ascensor. Bajó las escaleras saltando los escalones de dos en dos. Entró al coche, lo arrancó, y cuando iba a meter la marcha sintió de nuevo el mal estar y ahora con un dolor fuerte en el pecho.

El aire comenzó a faltarle... El dolor fue aumentando... El coche desapareció... Los otros coches también... Los muros, las paredes, la puerta, la claridad de la calle, las luces del techo, todo se fue apagando delante de sus ojos, al tiempo que surgían escenas de una película que él conocía bien. 

La esposa, el nietecito, la hija, eran una tras otra, todas las personas que más quería.

¿ Por qué no había ido a almorzar con la hija y con el nieto?. ¿ Qué le había dicho la esposa a la puerta de casa cuando él estaba saliendo esta mañana?.

El dolor en el pecho persistía, pero ahora otro dolor comenzaba a perturbarlo: el dolor del arrepentimiento.

El no conseguía distinguir cual era más fuerte: el de la coronaria lodada o el de su alma rota.

Escuchó el barullo de alguna cosa rompiéndose dentro de su corazón, y de sus ojos escaparon lágrimas silenciosas....

Quería vivir, quería tener otra oportunidad, quería volver a casa y besar a su esposa, abrazar a la hija, jugar con el nieto....

Quería....Quería....Pero no había más tiempo.

 ¡Piense en eso!

¡ Cuantas personas están viviendo hoy su último día de existencia en la Tierra y no lo saben !

 ! Cuantas salen del cuerpo físico diariamente y dejan muchas cosas por hacer!

Ciertamente los compromisos profesionales, la limpieza de la casa, las compras, los pagamentos,... otras personas lo harán.

Pero las cuestiones afectivas, las cosas del corazón, solamente cada uno puede realizar personalmente cada día:  Aquella visita a un amigo, el abrazo de ternura de un familiar querido, un beso cariñoso a la esposa o al esposo, una palabra de atención a alguien que la necesita, un tiempo para dedicarlo a los amores....

 Equipo de Redacción de Momento Espírita, con base en el texto del libro La suerte es Ser Feliz, de Roberto Shinyashiki 


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