DESEO Y PLACER.
El deseo, que lleva al placer, puede originarse en el instinto, en forma de necesidad violenta e insospechable, tornándose un impulso que se sobrepone a la razón, predominando en la naturaleza humana, cuando aun primitiva en su forma de expresión. En ese caso, se torna imperioso, devorador e incesante.
Sin el control de la razón, desarticula los equipamientos delicados de la emoción y conduce al desajuste de comportamiento. Como la sed implacable, no se sacia, porque es devoradora, manteniéndose al nivel de sensación periférica en el área de los sentimientos que no se dejan del todo dominar. Es voraz y tormentoso, especialmente en el área genésica, expresándose como erotismo, búsqueda sexual para el gozo. En esfera más elevada, se torna sentimiento, gracias a la conquista de algún ideal, alguna aspiración, ansiando por alcanzar metas agradables y desafiadoras, propenso a la realización ennoblecedora.
Se dirá que las dos formas se confunden en una única, lo que, para nosotros, tiene sentido diferente, cuando examinamos la función sexual y el deseo de lo bello, de lo noble, de lo armonioso, en comparación a aquel de naturaleza orgánica, erótica, de compensación inmediata hasta nueva y tormentosa búsqueda. El deseo se impone como fenómeno biológico, ético y estético, necesitando ser bien administrado en uno como en otro caso, a fin de tornarse motivación para el crecimiento psicológico y espiritual del ser humano.
Es natural, por tanto, buscar el placer, ese deseo interior de conseguir el gozo, el bien estar, que se expresa después de la conquista de la meta. A su vez, el placer es incontrolable, así como no administrable por la criatura humana. Goethe afirmaba que el constituía una verdadera dádiva de Dios para todos los que se identifican con la vida y que se alegran con el esplendor y la belleza que ella revela. La vida, en consecuencia, lo retribuye a través del amor y de la gracia.
El placer se presenta bajo varios aspectos: orgánico, emocional, intelectual, espiritual, siendo, ahora físico, material, y en otros momentos de naturaleza abstracta, estético, efímero o duradero, pero que debe ser registrado fuertemente en el psiquismo, para que la existencia humana exprese su significado. El placer depende, no es raro, de cómo sea considerado. Aquello que es bueno, genéricamente da placer, abriendo espacio para el miedo de la perdida, de las faltas, o para las situaciones en que puede generar daños, auxiliando en la caída del individuo en calabozos de aflicción.
Muchas personas consideran el placer apenas como siendo expresión de lascivia, y se olvidan de aquel que transcurre de los ideales conquistados, de la belleza que se expande en toda parte y puede ser contemplada, de las inefables alegrías del sentimiento afectuoso, sin poseer, sin exigencia, sin el condicionamiento carnal. Por una herencia atávica, gran número de personas tienen miedo del placer, de la felicidad, por asociarlo al pecado, a la falta de merito, que se tornaría una deuda a rescatar, dando oportunidad a la desgracia venirle detrás, como siendo una tentación diabólica para retirar al alma del camino del bien. Tal castración punitiva, que se prolongo por muchos siglos, al ser vencida dejo una cierta consciencia de culpa, que liberada, viene conduciendo una verdadera legión de gozadores al desequilibrio, al abuso, al extremo de las aberraciones.
Como efecto secundario, aun existen muchas personas que temen el placer o que procuran disimularlos, envolviéndolo en ropajes variadas de disculpas, para calmar sus conflictos subyacentes. Acentuamos, pues, que el placer es una fuerza creadora, predominante en todo y en todos, responsable por la personalidad, incluso por la esperanza. Muchas veces, es confundido con el deseo de poseer todo, a fin de disfrutar, mas tarde, de la cornucopia cargada de todos los gozos, preferentemente de naturaleza sexual.
Wilhelm Reich, el eminente autor de la Bioenergética, centró, en el placer, todas las búsquedas y aspiraciones humanas, considerando que la persona es solamente su cuerpo, y que este es constituido por un sistema energético, que debe ser trabajado, siempre que la coraza bloquee la emociones, proponiendo como terapia la Teoría de los Anillos, a fin de, a través de su aplicación en las corazas correspondientes, poder liberar la emoción encarcelada. Teniendo, en el cuerpo solamente, la razón de ser de la vida, Reich se torno apologista del placer carnal, sensual, capaz de llevar al estado de felicidad psicológica, emocional.
La naturaleza espiritual del ser humano, sin embargo, no mereció cualquier referencia de Reich, así como de otros estudiosos del comportamiento y de la criatura en sí misma, en su complejidad, quedando en plano secundario. De ese modo, el deseo y el placer se transforman en palancas que promueven al individuo, o, abismos que lo devoran. La esencia de la vida corporal, sin embargo, es la conquista de sí mismo, la lucha bien dirigida para que se consiga la victoria del Self, su armonía, y no apenas el gozo breve, que se transfiere de un nivel para el otro, siempre mas ansioso y perturbador.
Espíritu Joanna de Angelis
Médium Divaldo Pereira Franco
Extraído del libro “Amor, Imbatíbel Amor”
Traducido por Jacob
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REENCARNACIÓN DE ESPÍRITUS CON
MISIONES ESPECIALES.
Las inteligencias avanzadas, bajan a encarnar en los planos físicos solamente en misiones especiales, a fin de contribuir al adelanto de las humanidades, y muy especialmente a colaborar en la obra de Dios. Comoquiera que su tónica vibratoria es muy sutil, buscan y rebuscan, y eligen con gran cuidado la familia que ha de albergarles en los primeros años de su vida física; no en cuanto a fortuna y posición social, sino en cuanto a las condiciones espirituales y morales de los que serán sus padres. Esta elección, aparte de llevarles tiempo, deben hacerla con relación al programa o actuación que quieren desarrollar, a fin de no encontrarse después con tropiezos y dificultades insalvables que les expongan a un fracaso lamentable.
Y todo espíritu ya más evolucionado, planifica un programa antes de nacer, de enmiendas y realizaciones a desarrollar, de acuerdo con su necesidad evolutiva y su capacidad. Y esta necesidad y capacidad varían en cada ser, lo que es fácil apreciar en la enorme diversidad de destinos humanos. Y aquellos que traen misiones de más responsabilidad, planifican con mucha antelación su destino.
Necesario es aclarar que, en las primeras fases de la etapa humana, el individuo poco evolucionado no está aún capacitado para escoger su propio destino humano, y encarna dirigido por inteligencias directrices del progreso humano, en concordancia con su necesidad evolutiva y su capacidad de realización; pero nunca contra su voluntad.
Al llegar aquí, pienso que más de un lector preguntará: entonces, ¿de dónde salen tantas almas, .si la población humana de nuestro mundo esta aumentando considerablemente?
Y aquí responderé a muchas preguntas:
1. En los diversos planos del astral superior y del inferior, hay una población entre 18 a 20.000 millones de almas o seres desencarnados (según versiones recibidas de Lo Alto), de los cuales muchos están preparados y preparándose para encarnar; y entre los cuales hay gran número desesperados por salir de su terrible condición y dispuestos a aceptar un cuerpo físico por tarado que sea.
2. Cada ciclo planetario hay transmigraciones de un mundo a otro, con el objeto de limpiar de espíritus perturbadores a los mundos que van alcanzando cierto grado de progreso; como va acontecer ya en nuestro mundo, de donde será expulsada toda la maldad humana a mundos inferiores salvajes. Son los citados en el Apocalipsis de Juan Evangelista, como los de la izquierda de Cristo. Y estos desterrados (en espíritu) a mundos de civilizaciones primitivas, mucho sufrirán, pero también contribuirán al progreso de esas civilizaciones salvajes de esos mundos.
Concluiremos nuestra exposición con lo siguiente: mientras el alma no vibre en amor, mientras no amemos a nuestros semejantes como nos amamos a nosotros mismos, estamos destinados a proseguir la cadena de las reencarnaciones terrenas. Pero ¡ay de aquellas almas ruines y ciegas que practiquen la maldad y siendo causantes de sufrimientos! ¡Ay de los que exploten la ignorancia humana! Porque hemos llegado, estamos ya en el «final de los tiempos», y ya no podrán volver a encarnar en este mundo nuestro, sino que serán llevados a encarnar y vivir, durante milenios, en alguno de los mundos más atrasados que el nuestro, entre los que hay una vida bestialmente salvaje y cavernaria, y en donde añorarán (desde lo profundo de sus conciencias) el «paraíso perdido», de este mundo nuestro del cual se verán separados.
Sebastián de Arauco.
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LOS DÍAS GRAVES DEL SEÑOR
¡Estos son los días, los días graves del Señor!
Es necesario que las criaturas humanas nos abramos al Evangelio restaurado y nos permitamos ser instrumentos del Conductor de Vidas, para que podamos aplanar los caminos que Su Misericordia vino a recorrer.
¡Espíritas!
Asumisteis un compromiso antes de la cuna. Firmasteis en el Más Allá un documento de responsabilidad para proclamar el Reino de Dios en la Tierra, en el momento de las grandes aflicciones.
Pedisteis el testimonio y el sufrimiento para respaldar la cualidad de vuestra tarea.
No recalcitréis, pues, ante el espino del testimonio.Permaneced solidarios para que no experimentéis soledad.
Cantad un himno de alabanza y de bienaventuranzas, para que las vuestras no sean lágrimas de remordimiento, al contrario, sean de gratitud.
No posterguéis el momento de la renovación interior.
Si recogéis, por cuanto, los cardos y sorbéis la taza de la amargura que preparasteis antes, sembrad la paz, la alegría y el amor para la cosecha del futuro.
El Espiritismo es Jesús volviendo con los brazos abiertos y trayendo en su sequito los corazones afectuosos que os anticiparan en el viaje de vuelta al Gran Hogar, y que, en una canción de júbilo, agradecen a Dios la honra de participar de la Era Nueva del Espíritu Inmortal.
Tornaos sabios en la simplicidad, en la cordura, en la gentileza y ricos en la compasión.
El amor cubre la multitud de los pecados y la compasión corona el amor de ternura.
Comenzando por ahora, aquí, el trabajo de lapidación del carácter para mejor, conseguiréis, como estamos intentando conseguir, la palma de la victoria.
Que nada os atemorice. ¿Qué mal pueden hacer aquellos que calumnian, que mienten, que persiguen, si todo cuanto hicieran pierde su sentido en el túmulo?
Jornaleros de la Inmortalidad, avanzad cantando a Jesús para los oídos sordos del mundo, y presentandolo para los que se ocultan en las urnas de la locura, de las sensaciones y del despotismo.
Hoy es el momento sublime de construir y, en breve, el momento de ser feliz.
Mucha paz, hijos míos. Con todo el cariño, el servidor humilde y paternal de siempre.Becerra de Meneses / Divaldo Franco.
Mensaje psicofónico recibido por el médium Divaldo Pereira Franco, al final de la Conferencia pública, realizada en el Grupo Espírita André Luiz, no Rio de Janeiro, na noche de 26 de agosto de 2010
Traducido por: M. C. R
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El
por qué de la Pobreza
Para la mayoría de las personas, la miseria y la
pobreza son un terrible mal que aqueja a gran parte de la Humanidad
y que, por supuesto nadie desea para sí mismo o para los suyos.
Esta idea es consecuencia del atraso evolutivo y del
desconocimiento espiritual de la gente, que a nivel popular aún no
comprenden que esta idea negativa que se tiene sobre la pobreza en
el fondo es un error, porque en estas circunstancias humanamente
adversas , los Seres humanos inmersos en ellas se ven obligados a
superar una difícil prueba espiritual, desde un punto de vista
meramente humano, al tener que llevar una vida de trabajos y
dificultades que sin embargo son factores positivos, porque tienden
a desarrollar las facultades de su alma.
Esta situación humanamente dura pero provechosa para el
Espíritu , es la que mas posibilidades de progreso espiritual ofrece
al Ser, porque la vida del pobre, cuando es llevada con humildad y
honradez, está mas libre de las perversidades, tentaciones y vicios
, que la vida holgada del rico, mucho más propensa a caer en esos
peligros de atraso para su Espíritu.
. El
saber esto, sin embargo no nos exime a nadie de ser caritativo y
generoso con los demás;
no
me refiero a la caridad de dar los bienes materiales que nos sobran,
sino el esforzarnos por dar de lo que nos suele faltar: cariño,
comprensión, parte de nuestro tiempo; en dos palabras: generosidad
, caridad y altruismo; algo que no tiene precio monetario pero que
su valor es incalculable..
El pobre
desde un enfoque espiritual de su situación, se puede considerar un
Ser privilegiado pues sabemos que la vida siempre es muy breve
considerada en el conjunto de la vida del espíritu que es eterna, y
su posición es la de estar ante una oportunidad de desarrollar la
humildad, el trabajo, la fé, la constancia ,etc. , y todos los
pobres son dignos del respeto de los demás. Recordemos que
Jesucristo,
al que muchos tenemos como nuestro Maestro y Guía, también nació,
vivió y murió voluntariamente pobre y humilde.
No obstante esta dura prueba material no está exenta de
riesgos espirituales. Hay una pobreza material o económica que puede
ser largamente compensada por una gran riqueza espiritual; del mismo
modo que existe una miseria moral que ninguna riqueza podrá atenuar
nunca. El pobre en bienes materiales que se encuentra en paz consigo
mismo y vive sin envidiar a nadie, siendo generoso con su trabajo,
estando libre de ningún vicio, siendo noble y con un recto pensar
y sentir, posee una riqueza moral que vale muchísimo más que la
material, porque esa riqueza la lleva consigo después de esta vida,
pero los bienes materiales se quedan aquí absolutamente todos. El
pobre que sabe mantener una actitud positiva ante la vida, siempre
se mantiene en un estado de equilibrio y armonía, que son
generadores de paz y felicidad, y son una verdadera riqueza.
Por eso no se debe envidiar a los ricos , pues su
riqueza también es una prueba en la que más fácilmente pueden
fracasar y suponerles por ello un motivo de ruina espiritual.
Lo importante es que cada uno sepa adaptarse a su
condición social y económica,(no digo conformar), y sobre todo
tomar conciencia de que siempre habrá quien lo estará pasando
económica y socialmente peor o con mas apuros ,tratando de ayudar a
los demás en la medida que nos sea posible hacerlo, y sin caer en el
error de despilfarrar lo que a otros les está faltando.
La mejor de las fortunas es la felicidad que
proporcionan la Paz y la Armonía internas que se logran con el
Amor, y que se extienden y se transmiten a los demás, aunque esto
pueda sonar como algo utópico.
Sin embargo hay muchos pobres cuya prueba desperdician
debido sobre todo a los estados de rebeldía que les provocan las
envidias por riquezas ajenas. Muchos de ellos no son sino ricos sin
riquezas,( o sea, que en una existencia anterior fueron ricos), y
después, de vuelta en la Tierra, se sienten igualmente ávidos de
las posesiones materiales de los ricos a quienes envidian y
critican. Si no lo han experimentado aún, en otra existencia deberán
experimentar en el futuro la prueba de la riqueza para llegar a
aprender la sublime lección del desprendimiento y la generosidad. El
pobre que envidia al rico, cuando a él le toque pasar por esa
prueba, será como un castigo para experimentar el enorme peso de su
responsabilidad y el valor efímero de esas riquezas.
No se debe envidiar la fortuna o el bienestar material
del que tiene más, aunque esto no significa que no se deba ser
ambicioso en cuanto a espíritu de superación y de progreso y mejora
en la conquista de bienestar material. Aceptar cada cual su situación
y no envidiar a los demás por sus mejores situaciones económicas y
sociales, no supone el tenernos que conformar con una situación de
penuria y no hacer nada por mejorarla . Hay que tener presente que
en la fe, el esfuerzo y en el trabajo están la mejora, el progreso
y la evolución.
- Jose Luis Martín -
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“
La pobreza es una riqueza; pero la
pobreza por causa del egoísmo clama al cielo”
- Toni de Mello- “Testigo de la Luz”
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