A medida que profundizamos en la materia espírita, vamos comprendiendo cada uno de los detalles que nos son revelados por la Espiritualidad. Es bueno que preguntes.
Ante todo, es lógico que en los inicios de nuestras estudios nos surjan algunas dudas, pues no olvidemos que estamos trabajando nuestra fe razonada y por ende nos esforzamos en comprender los secretos de la vida que por la Doctrina nos son revelados día tras día.
En primer lugar debemos tener en consideración que en nuestra condición nos creemos con capacidad de conocerlo todo, incluso nos creemos con esa misma capacidad para conocer la naturaleza y atributos de Dios. Pero en cierta manera es así. A modo de ejemplo, hace pocos días tuve un intercambio de ideas acerca de la existencia de vida en otros planetas cuando me aseguraban que si el "hombre" había llegado a otros globos celestes sin encontrar el más mínimo indicio de encontrar vida, suponía que tal vida allí no existía. En este caso, el Libro de los Espíritus ya nos responde sobre ello, pues nuestro egocentrismo nos hace creer que toda la información que provenga de nuestros cinco sentidos es la única válida yque fuera de ahí no hay nada más, pues obviamos las distintas modulaciones que puede llegar uno de los tres elementos básicos del Universo, la materia. El si no lo veo no lo creo.
Extrapolando esto a la idea de Dios, se convierte en un esfuerzo mental sin límites, pues no estamos capacitados a conocer la naturaleza íntima de Dios, ni tampoco lo estamos para conocer todos los atributos del Mismo, de entre las cuales tenemos la Omnipotencia, la Justicia y la Bondad. -Preguntas 4 a 16 LE-
Así, cuando cansados del mal, buscaremos siempre el remedio en el Bien, pero todo dependerá de nosotros, de nuestras responsabilidades y de nuestro libre albedrío.Debemos dejar de un lado los preconceptos, y uno de los más claros, es la idea de castigo. Dios no castiga.
Solamente nosotros somos responsables de nuestros actos y que ante los fallos y atropellos que cometemos, Dios en su infinita Bondad nos ofrece ilimitadas posibilidades de rectificación. hasta el bien entendido de la lección. El alumno que siempre tropieza en la misma piedra se le invita a pasar continuamente por el mismo trazo del camino con la intención de que algún día esquive el obstáculo. Así ocurre con el suicidio entre otras muchas caídas a las que nos sometemos. Ahora bien, rectificaremos más tarde o más temprano en virtud de nuestro libre albedrío.
Repito, no existe castigo ninguno, existe libre albedrío y múltiples situaciones que Nos ofrece para su debida rectificación, pues si un padre terrenal, con todos sus defectos humanos puede amar tanto a sus hijos -aún castigándolos- , cómo no nos va amar tanto más aún nuestro Gran Padre...
Un saludo,
Trabajo de Xavi en Espiritismo Estudios
No hay comentarios:
Publicar un comentario