lunes, 12 de diciembre de 2022

Humildad o Presunción

 INQUIETUDES  ESPÍRITAS

1.- Purificación

2.- ¿Las religiones que asumen la Reencarnación, la consideran un factor positivo?

3.-  Mediumnidad espontánea

4.- Humildad o Presunción

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                                               PURIFICACIÓN     


     Este es el título de la música que estoy escuchando. Esta música eleva mis sentidos, afina mi sensibilidad, conecto o me conecta con fajas vibratorias más elevadas de las que yo suelo estar y me dan grandes deseos de ponerme a escribir, de expresar ideas que creo que son buenas. Es como si alguien me dijera: Ponte a escribir que ya es la hora. Y yo me siento muy bien escribiendo, expresando ideas y sentimientos que vienen llegando a mi mente desde una inteligencia que no es la mía. No se en realidad de quien será, pero mientras que me sienta bien y lo que me diga me sirva y sirva también a los demás, me pondré a escribir.

Me dicen que lo titule Purificación es el título de la música que me ha inspirado, Purificación es también el título del escrito de hoy.

De la purificación de vuestro cuerpo vamos a hablar hoy :

     Amados hermanos, es muy importante que cuidéis vuestro cuerpo. Que purifiquéis vuestro cuerpo. Más bien que cuidar, yo os diría purificar. Cuidar es una cosa y purificar es otra muy diferente.

     Cuidar el cuerpo es darle cuanto este pide, y tener por seguro que cuanto más le deis, más os va a pedir, y este nunca se encontrará satisfecho; siempre pedirá más y más, y llegará el momento en que empezará a tener pequeños vicios y con el tiempo esos vicios se irán haciendo mayores hasta que os lleven a un mal camino, a un embrutecimiento del cuerpo, y vuestro Espíritu, vuestra Alma, vuestro Ser Real, será un esclavo de vuestro cuerpo. Y esos vicios, como pueden ser el alcohol, los juegos, las drogas, por citar algunos, además de que os pueden sumergir en la ruina a vosotros y a los seres que de vosotros dependan; vais a tardar mucho tiempo en veros libres de ellos. Porque después de lo que llamáis muerte, vais a seguir con esos mismos vicios. Son unos fluídos o toxinas que se impregnan en el  Periespíritu y no es fácil deshacerse de ellos.

      Por eso decía al principio, purificar y no cuidar. Porque purificando el cuerpo es como realmente lo estáis cuidando y también a vuestra Alma. El cuerpo purificado está al servicio del Alma, como debe de ser, y no al contrario, ya que el cuerpo es vehículo, esta lo utiliza durante cierto tiempo en épocas que le es necesario para su evolución, y por lo tanto debe de estar a su servicio.

      El pensamiento, el sentimiento y la voluntad, son atributos del Alma que deben imponer disciplina al cuerpo, educarlo y purificarlo, y estos atributos puestos de manifiesto en el Alma, siempre deben de ser más fuertes que aquellas necesidades viciosas que el cuerpo demande, e imponerse en todo momento a esas necesidades viciosas. Y siempre me refiero a necesidades viciosas, no a necesidades que el cuerpo tiene, como cuerpo que es: Como puede ser una alimentación adecuada de una dieta equilibrada; según la edad del cuerpo, esto también puede influir bastante, como puede ser el cuidar de su salud, o cualquier otra necesidad que el cuerpo puede tener, pero siempre evitando caer en los excesos, porque todos los excesos son malos, sabedlo bien. Lo repito, todos los excesos son malos. De aquí nacen las malas costumbres, todas las enfermedades del cuerpo,  los vicios y la degeneración, produciendo un desequilibrio entre cuerpo y Alma, pasando esta última a ser esclava del primero.

     Y no es así como debe de ser, es el Alma quien debe, en todo momento, imponer su voluntad; el cuerpo tampoco debe ser esclavo del Alma, porque esto de los esclavos no me gusta tan siquiera escribir la palabra, pero que esta nunca sea manipulada por él; ella debe imponer su voluntad, porque es la parte pensante, la parte sublime, lo creado por Dios, lo que perdura y no muere, lo que tiene facultades porque está dotada de ellas para tener un cuerpo purificado, formado por ella. Pero para eso debe despertar para esa otra realidad, debe sentir esa verdadera realidad, y desde que ella lo desee, tendrá un cuerpo purificado. Utilizando el inmenso poder del que está dotada, que es la voluntad. Utilizarla contra vuestros excesos y vuestros pequeños o grandes vicios, vuestra fuerte voluntad, y cada día, a medida que vayáis obteniendo pequeños éxitos, vuestra voluntad crecerá, y un día habrá crecido tanto, que podréis hacer aquello que realmente os de la gana, siempre en el sentido del Bien y del Amor.

( Mensaje mediúmnico psicografiado, el 09-07-95 en el Centro de Estudios Espíritas)

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¿Las religiones que asumen la reencarnación  la consideran  un factor positivo?

           


                                                      


Particularmente, para  el  Budismo  la  Reencarnación es casi un castigo, pues  la consideran  una serie encadenante de vidas que sujetan  al Ser humano para  volver a vivir  repetidamente en este   mundo en el que predomina el sufrimiento y el dolor, por lo que su  meta  final  es  llegar  a   interrumpir  lo que llaman la  “rueda  de  los  renacimientos”  para finalmente llegar a alcanzar el   “Nirvana”,  que   viene a  ser  algo así  como  alcanzar  la felicidad  de un  “no  ser”, o  de una disolución en  un  Todo..   Este Todo  viene a ser  la misma   idea del   Dios  común en   todas  las   religiones,  aunque   habría que matizar que los budistas  no  aceptan   la existencia de ningún Dios  como un Ser concreto, individualizado y humanizado, de ahí que  consideren al Ser Supremo como un Todo inconcreto, un “No Ser” que lo contiene todo en Si mismo. Por ese concepto, nosotros seríamos  creación o parte de esa gran  y eterna Energía, pero no seríamos ese Todo ilimitado e inconcreto, pues nosotros si que estamos concretados en una individualidad.

Al concepto negativo  de la reencarnación se añade la superstición arraigada en el budismo, de que es posible, por causa del karma negativo, renacer en animales o plantas como castigo y amenaza, a causa de haber cometido cualquier falta; así se comprende mejor el por qué consideran el tener que regresar a este mundo como una auténtica desgracia no deseada. Esta falsa idea, si fuese cierta,  supondría para el espíritu dar un salto atrás en su evolución, al regresar a la naturaleza animal, cuando sabemos que por la ley del progreso,  la meta suprema en la escala animal es llegar a formar parte de la escala humana, con sentido del yo, y del espacio temporal, de que carecen las especies animales. O sea, que estando todos los seres sujetos a la Ley de Evolución, esta solo actúa progresivamente en un continuo ascenso a la perfección, pero nunca tiene carácter retrógrado. Entonces se comprende que ese salto atrás no es posible porque este proceso constituiría una ley contraria y opuesta a la de la Evolución del ente espiritual. 

Las religiones africanas que en general asumen la reencarnación, excepto las islámicas, así como también  el  budismo chino  la ven  sin embargo como algo positivo y deseable, a diferencia de como la consideran los hindúes y los budistas tibetanos, lo que parece comprensible que así lo entiendan, pues viendo el sufrimiento que es tan abundante en nuestro planeta de expiaciones no es de extrañar, aunque comprendamos ahora que este sufrimiento es necesario para la evolución en general de los seres. Por lo tanto para estas mencionadas  religiones que no han profundizado demasiado en las leyes de la Naturaleza, la Reencarnación  no es deseable  como no es deseable el sufrimiento para nadie, pues les parece un castigo.

- Jose Luis Martín-

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                                  Mediumnidad espontánea

     Los síntomas que anuncian el surgimiento de la mediumnidad son muchos y varían en cada persona. Por eso, no tenemos la pretensión de agotar el tema. Vamos a mencionar algunos síntomas y los que ya han pasado por el proceso de desarrollo de la mediumnidad, 

    La facultad mediúmnica se manifiesta en el hombre, independiente de sus creencias o convicciones, de sus posibilidades de inteligencia o de su nivel cultural.

    Afirma Allan Kardec, y podemos comprobarlos por nuestra propia experiencia, que la mediumnidad,"(...) la encontramos en niños y ancianos, en hombres y mujeres, sean cuales fueran su temperamento, estado de salud, grado de desarrollo intelectual y moral.(...)".De esa forma, los médiums pueden ser encontrados en todos los lugares entre la gente de cualquier religión e incluso entre los ateos.

    La mediumnidad no tiene componente moral en sí misma. Ella es neutra en ese aspecto. La moral dará la calidad del ejercicio mediúmnico. Pero la persona no necesita ser moralmente elevada para poseer la facultad y no es por el hecho de no ser espírita, de ser católica, protestante o atea que ella no necesite vivir esa oportunidad de conocer la realidad espiritual.

    Existen personas que ni se dan cuenta de que poseen esa facultad, que conviven con la mediumnidad, naturalmente sin dar al tema mayor importancia.

    Algunos ni siquiera perciben que poseen una capacidad distinta de los demás.

    Allan Kardec registra en la Revista Espírita de Junio de 1.867, hablando del "Sentido Espiritual", que conoció, en París, a una señora en quien la doble vista era permanente y tan natural como la vista ordinaria.

    Escribe él que "(...) ella ve sin esfuerzo y sin concentración el carácter, los hábitos, los antecedentes de quien quiera se le acerque; describe las enfermedades y prescribe tratamientos eficaces con más facilidad que muchos sonámbulos ordinarios; basta con que piense en una persona ausente para que la vea y la designe. Un día estábamos en su casa y vimos pasar por la calle a alguien con quien tenemos relaciones de amistad, y que ella jamás había visto. Sin ser provocada por cualquier pregunta, hizo de ella la exacta descripción moral y nos dio a su respecto consejos muy prudentes. Entre tanto, esa señora no es sonámbula: habla de lo que ve, como hablaría de cualquier otra cosa, sin perturbarse en sus ocupaciones. ¿Es médium? Ella misma nada sabe al respecto, porque hasta hace poco ni siquiera conocía de nombre al Espiritismo.(...)"

- Viviana Clara Gianitelli -

 

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     HUMILDAD Y PRESUNCIÓN

En el trabajo con uno mismo, hoy estudiaremos la palabra “PRESUMIR”: 

La HUMILDAD ha de ser un PRINCIPIO BASICO en la Espiritualidad. 
 

Del Evang. de Mateo 11, 25-30 
En esa oportunidad, Jesús dijo: «Te alabo, Padre, Señor del cielo y de la tierra, por haber ocultado estas cosas a los sabios y a los prudentes y haberlas revelado a los pequeños. 


PRESUMIR: 
Exhibir con orgullo una cualidad o algo que se tiene o se hace : Presumir de rico; presumir de simpático; presumir de inteligente, de sabio, de intelectual… 

Dime de lo que presumes y te diré de lo que careces. Popular refrán que se usa para indicar que una persona tiene falta de aquello de lo que precisamente quiere aparentar que le sobra, indicándole que es él el primero que debe callar al respecto; es, por tanto, de uso habitual contra los hipócritas. 

¿Será por ello que los Grandes y Verdaderos Maestros hablan con sencillez, para que todos sus alumnos los entiendan? ¿No con palabras rebuscadas, queriendo impresionar con ellas la falta de Espíritu y de verdadero Conocimiento? 

Sencillez, humildad, deben acompañar la vida, las actitudes y palabras del ser que ya ha “despertado” a la espiritualidad. ¿A quién se puede impresionar con una exagerada intelectualidad? ¡A nadie…a nadie! 
Vamos a ser sencillos, vamos a expresarnos sin afectaciones no intentando impresionar con lo que no tenemos. 

Las personas que constantemente presumen y exhiben lo que tienen o lo que no tienen, pueden resultar “pedantes”. 

NOTA: Pedante (del it. «pedante»).- Se aplica a la persona que hace ostentación presuntuosa e inoportuna de sus conocimientos, o de sus posesiones de cualquier tipo, así como a su tono, a sus palabras, etc. 

En el evangelio nos encontramos con que las características mencionadas por el profeta encajan perfectamente en la persona de Cristo enviado por el Padre a toda la humanidad. Y Cristo aparece ensalzando a los “pequeños”, es decir, a los sencillos y humildes, por su condición de desprotección. 

Los limpios de corazón son aquellos discípulos  : 

• Que son misericordiosos con otros hermanos. 
• Que en su accionar no hay maldad. 
• Que su acercamiento a Dios es verdadero. 
• Que no hay hipocresía en su corazón. 
• Que no hay maldad cuando hablan de otro hermano. 
• Que no son de doble cara. son genuinos en su actuar: 

La Humildad tiene que ser PRINCIPIO BASICO en la Espiritualidad.

- Reinaldo Formoso -
                       

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