Queridos amigos hola buenos días, asomada la ventana y mirando la madre Naturaleza observamos que todo parece ser en ella un milagro, porque todo en ella es admirable y revela ostensiblemente la sabiduría divina. Esos milagros están hechos para todos aquellos que tengan ojos para ver y oídos para oír, y no en provecho de algunos individuos. Sabemos que los milagros no existen en el sentido que le da el hombre a esa palabra, porque todo depende de las leyes eternas de la creación.
Los Espíritus operan sobre los fluidos espirituales como los hombres operan sobre los gases, pero lo hacen con la ayuda del pensamiento y la voluntad. El pensamiento y la voluntad es para los Espíritus como las manos para el hombre. Con el pensamiento ellos imprimen a los fluidos tal o cual dirección, los aglomeran, los combinan o los esparcen, forman con ellos objetos, que tienen formas, caracteres, y determinado color, cambian sus propiedades, como el químico cambia las de los gases u otros cuerpos, combinándolos según ciertas leyes; es en fin, el gran taller de la vida espiritual.
Los fluidos espirituales que constituyen uno de los estados del fluido cósmico Universal, son la atmosfera de los seres espirituales; es el elemento de donde toman los materiales sobre que operan, , el centro en el cual tienen lugar los fenómenos especiales perceptibles a la vista y el oído del Espíritu, e imperceptible a los sentidos carnales, que solo puede, impresionarse por la materia tangible; es en fin, el vehículo del pensamiento, como el aire es el vehículo de los sonidos.
El pensamiento del espíritu crea fluidicamente los objetos y la vestimenta de los que se serbia en existencias pasadas para poder hacerse reconocer; además el avaro, andará siempre entre oro, el fumador con su pipa. El militar con sus armas; objetos fluídico que so como lo eran en estado material cuando estaba vivo; pero por esta misma razón que son creados por el pensamiento, su existencia es tan fugaz como el pensamiento mismo.
Los encarnados sufren la acción de los Espíritus a través de los fluidos espirituales, ya que estos fluidos son el vehículo del pensamiento, y están impregnados de las cualidades buenas o malas de los pensamientos que los ponen en acción, modificados por la pureza o impureza de los sentimientos. Los malos pensamientos corrompen los fluidos espirituales como los miasmas deletéreos corrompen el aire que respiramos. Los fluidos que proyectan los malos espíritus, están, viciados, en cambio los de los buenos Espíritus , son tan puros como lo permite su grado de perfección moral.
El hombre encarnado tiene en parte, atribuciones de la vida espiritual, puesto que viven de esta vida tanto como de la corporal, sobre todo durante el sueño, y no pocas veces en estado de vigilia. Al encarnar, el Espíritu conserva su periespiritu con las cualidades que le son propias, ejerciendo un papel importantísimo en el organismo; por su expansión, pone al Espíritu encarnado en relación más directa con los Espíritus libres.
El pensamiento del Espíritu encarnado obra sobre los fluidos espirituales como el de los desencarnados, se transmite de espíritu a espíritu por la misma vía, y según es bueno o malo, sanea o vicia los fluidos ambientes.
El periespiritu de los encarnados siendo de idéntica naturaleza que los fluidos espirituales, se los asimila fácilmente, como una esponja se empapa de un liquido; esos fluidos tienen sobre el periespiritu una acción tan directa, que por su extensión y radiación llega a confundirse con ellos. Estos fluidos reaccionan sobre el periespiritu, hace que influya sobre el organismo material con el cual se haya en contacto molecular. Si los efluvios son de buena calidad, el cuerpo experimenta una impresión saludable, y si son malos, esta impresión es desagradable e incluso penosa; si los fluidos malos son permanentes y enérgicos, pueden determinar desordenes físicos. Enfermedades que no reconocen otro origen.
Los centros en los cuales abundan los malos Espíritus están impregnados naturalmente de malos fluidos, que se absorben por los poros del cuerpo como los miasmas pestilentes.
Lo mismo sucede en las reuniones de los encarnados. Una asamblea es un foco de donde irradian diversos pensamientos. El pensamiento obra sobre los fluidos como los sonidos en el aire. Podemos decir con toda verdad que en los fluidos hay ondulaciones e irradiaciones de pensamientos que se cruzan sin confundirse, como hay en el aire ondas y rayos sonoros.
Una asamblea es como una orquesta o un coro de pensamientos, en donde cada integrante emite una nota. De esto resulta una multitud de corrientes de efluvios fluídico de la cual cada uno recibe la impresión por el sentido del oído. Si el conjunto es armónico, la impresión es agradable, y si es discordante, penosa. Aun sin expresión de palabras, la irradiación fluídico existe y si se mezclan malos pensamientos, producen el efecto de una corriente de aire frio en una habitación templada.
El pensamiento produce, una especie de efecto físico, que reacciona sobre lo moral; cosa que solo el Espiritismo puede hacer comprender ; el hombre lo siente instintivamente; puesto que busca las reuniones homogéneas y simpáticas donde sabe que puede adquirir nuevas fuerzas morales, el pensamiento constituye una verdadera emisión que ocasiona una pérdida real de fluidos espirituales, y por consecuencia, de fluidos materiales; de modo que el hombre tiene necesidad de confortarse con los efluvios que recibe del exterior.
Cuando decimos que un médico cura a sus enfermos con buenas palabras, se expresa una verdad absoluta, porque el pensamiento benévolo lleva consigo fluidos reparadores que obran sobre lo físico tanto como sobre lo moral.
Los fluidos se unen en virtud de su semejanza y naturaleza; los que no son iguales se repelen; hay incompatibilidad entre los buenos y los malos fluidos, como entre el aceite y el agua.
Las moscas suelen acudir a los focos de corrupción, si se hacen desaparecer los focos ellas desaparecen. Del mismo modo los malos Espíritus acuden donde el mal existe; si el mal desaparece ellos se alejan. Los Espíritus realmente buenos, encarnados o no, nada tienen que temer de la influencia de los malos Espíritus.
Hagamos el bien, seamos cada día mejores personas, y las malos fluidos y los malos espíritus nada tendrán que hacer con nosotros, solo seguir nuestro ejemplo cambiando para mejor.
Os deseo un lindo fin de semana con mucho amor y cariño que el señor nos bendiga a todos.
Merchita
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LA CIENCIA SIGUE INDAGANDO LA
EXISTENCIA DEL ALMA
Foto demuestra que los seres humanos tienen un alma inmortal
Los teólogos, filósofos, metafísicos, agnósticos y ateos: todos han debatido sobre el alma, su composición y propiedades, e incluso si realmente existe. Ahora los científicos afirman que no sólo tienen prueba que los seres humanos tienen un alma inmortal, sino que ya lo pesaron y fotografiaron dejando el cuerpo en el momento de la muerte.
El alma existe, afirman los científicos
El alma existe, afirman los científicos
Arthur Schopenhauer, un filósofo del 19 siglo, observó que el universo no es un lugar racional. Esa visión fue posteriormente confirmada por la famosa “teoría del caos” ahora aceptada por la mayoría de los físicos de hoy en día.
El universo es misterioso, contradictorio, místico, etéreo y a menudo muy, muy espantoso. Muchos humanos elegirian no vivir aquí si hubiera otro lugar para ir. Las religiones dicen que hay otros lugares, pero sólo puede ser alcanzados a través de la muerte.
El debate que se extendió durante miles de años es: ¿dónde está la prueba?
Ahora algunos científicos afirman que tienen la prueba.
La famosa máxima afirmación de Schopenhauer dice que “Toda verdad atraviesa tres fases: primero, es ridiculizada; segundo, recibe violenta oposición; tercero, es aceptada como algo evidente”.
Mientras la humanidad es empujada cada vez más cabeza abajo hacia el segundo milenio, la verdad de la vida después de la muerte (o la vida después de la vida) está captando mayor atención.
La tecnología ha alcanzado una etapa en la que permite echar una ojeada en dimensiones alternas, realidades, y universos… tentadores vistazos en lo que algunos llaman el cielo.
Los científicos afirman que el alma humana pesa 1/3.000ª de onza
Un increíble experimento realizado por investigadores en Dresden, Alemania determinó que el alma humana existe y pesa exactamente 1/3000ª de una onza. El estudio fue publicado en la revista científica alemana, Horizonte.
El coautor Dr. Becker Mertens escribió en un documento que acompaña el estudio diciendo que “la conclusión ineludible es que ahora hemos confirmado la existencia del alma humana y determinado su peso.
“El desafío que tenemos ante nosotros ahora es averiguar exactamente de que se compone el alma”, explicó. “Nos sentimos inclinados a creer que es una forma de energía”.
Alma egipcia pesada como es mostrada en una pared de una tumba. Los pueblos antiguos tenían pleno conocimiento de la existencia del alma.
Aunque algunos científicos criticaron inmediatamente los resultados del estudio, el físico Dr. Elke Fisher que formó parte del equipo de investigación respondió señalando que los científicos fueron cuidadosos para tener en cuenta todas las diferencias de peso entre el aire que sale de los pulmones.
“Se nos ocurrió que la pérdida de peso podría ser el resultado de un deterioro físico instantáneo,” dijo Fisher. “Pero después de un exhaustivo estudio estuvimos de acuerdo que no era el caso. La única explicación posible es que estábamos midiendo la pérdida del alma humana o algún tipo de fuerza vital”.
Después de considerar todas las variables, su escala (precisión de 1/100.000 de una onza) claramente midio una diferencia anómala de 1/3000.
Los experimentos de Watters con las almas
Ya en la década de 1940, los investigadores buscaban pruebas del alma. El Dr. R.A. Watters, en ese momento el director de la Fundación William Bernard Johnston para la Investigación Psicologica en Reno, Nevada – EE.UU. desarrolló una increíble hipótesis atómica del alma. Propuso que las almas (ya sea humano o animal) existen en un estado dentro del “espacio intra-atómico entre los átomos de las células humanas”.
Para probar su idea, Watters adquirido una cámara de niebla de expansión Wilson.
Para aquellos no familiarizados con una cámara de niebla, es un aparato científico utilizado sobre todo por los físicos para observar y seguir el paso de partículas tanto atómicas y subatómicas. Usando este dispositivo, Watters creia que, permitiría la observación y el seguimiento de un alma saliendo de un ser viviente precisamente en el momento de su muerte.
Cámara de niebla de Wilson, 1911. El diámetro de la cámara es de 16,5 cm, profundidad 3cm
Watters eligio un insecto como el tema de su experimento. Puso un saltamontes en el compartimiento de la nube y lo eutanasio con una sobredosis de éter. Una cámara fue estratégicamente colocada para tomar una foto en el momento que la fuerza vital deja a la criatura. El obturador de la cámara se disponía a disparar cuando se detectó una expansión del vapor de agua dentro de la cámara. Pruebas anteriores revelaron que en el momento de la muerte, el vapor de agua en la cámara se elevaría perceptiblemente.
La foto reveló un extraño e inexplicable “fenómeno de sombra” que coincidió con la forma de la criatura.
Watters continuo con más experimentos para ver si el mismo fenómeno aparecia con los animales en el momento de la muerte. Dirigió más de 40 experimentos con ratones y ranas en vez de saltamontes.
Los resultados fueron concluyentes. Cada foto mostraba claramente la sombra. Cada sombra siguió la forma del animal que murió.
Señaló que todos los experimentos que concluyeron con la muerte permanente de una criatura la sombra perduraría tanto como ocho horas. Si el animal sólo perdia el conocimiento, no obstante, y más tarde fuera resucitado, no aparecería ningún fenómeno de sombra.
Foto captura el momento preciso de la muerte mientras el alma se marcha
La imagen tomada a través del método de visualización de descarga de gas (Gas Discharge Visualization), una técnica avanzada de fotografía de Kirlian, muestra en azul la fuerza vital de la persona gradualmente dejando el cuerpo.
Según Korotkov, el ombligo y la cabeza son las partes que primero pierden su fuerza vital (lo que sería el alma) y la entrepierna y el corazón las últimas zonas donde permanece el espíritu antes de navegar por la fantasmagoria del infinito.
El momento del desdobamiento astral en el que el espíritu deja el cuerpo ha sido capturado por un científico ruso, quien fotografió con una cámara bioelectrográfica a una persona en el instante de su muerte.
En función a otros casos Korotkov ha notado que “el alma” de las personas que mueren de una forma violenta e inesperada suele manifestar un estado de confusión en su configuración energética y regresan al cuerpo en los días subsiguientes a la muerte. Esto podría ser debido a un remanente de energía no utilizada.
La técnica desarrollada por Korotkov, quien es director del Instituto de Investigación de Cultura Física de San Petersburgo, es avalada como una tecnología médica por el Ministerio de Salud de Rusia y es utilizada por más de 300 médicos en el mundo para monitorera el estrés y el progreso de pacientes tratados para ciertas enfermedades como el cáncer. Korotkov dice que su técnica de visualización energética podría servir para observar todo tipo de imbalances biofísicos y realizar un diagnóstico en tiempo real y también para mostrar si una persona en realidad tiene poderes psíquicos o es un fraude.
Cámara ‘GDV’ del Dr. Korotkov
Esta técnica, que mide en tiempo real y de forma amplificada la radiación estimulada por el campo electromagnético, es una versión más avanzada de la tecnología ideada por Semyon Kirlian para medir el aura.
Las observaciones de Korotkov confirmarían, según lo propuesto por Kirilian, que “la luminosidad estimulada electro-fotónica alrededor de las puntas de los dedos del ser humano contiene información coherente y comprensiva del estado de una persona, tanto físico como psicológico”.
En esta entrevista en video Korotkov habla del efecto en el campo bioenergético que tienen los alimentos, el agua y hasta los productos cosméticos. Y hace hincapie en beber agua de mananatiales y comida orgánica, particularmente notando que el aura de las personas en Estados Unidos resiente los efectos negativos de tecnologización de los nutrientes tan distribuída en esa sociedad.
Korotkov también habla de sus mediciones en lugares supuestamente cargados de energía y de la influencia que tienen las personas en los campos bioenergéticos de otras personas. Comprobando el experimento de Rupert Sheldrake de la sensación de ser observado: puesto que el campo bioenergético de una persona se modifica cuando otra persona le dirige su atención, aunque ésta esté de espaldas y no la perciba conscientemente. Asimismo los campos de un lugar se ven alterados cuando existe una concentración de turistas.
También advierte sobre el uso de celulares y la radiación negativa que estos tienen siendo muchas veces cancerígenos, algo que diversos estudios parecen confirmar.
En conclusión
La realidad del alma está entre las cuestiones más importantes de la vida. Mientras que las culturas antiguas creían en su existencia (al igual que las religiones contemporáneas), tradicionalmente la ciencia ha desestimado el alma como un objeto de la creencia humana, o lo reducen a un concepto psicológico que da forma a nuestro conocimiento del mundo natural observable.
Por otro lado están los que sostienen que nuestras almas son más que la interacción de neuronas en el cerebro. De hecho, están construidos a partir de la trama misma del universo – y puede haber existido desde el principio de los tiempos, concluyendo que la esencia de una persona (el alma) persiste incluso después de la muerte.
Nueva Mente
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LA VIDA EN EL PLANO ESPIRITUAL
(Kédima Furquim)
(Kédima Furquim)
Desde mi más tierna infancia veía marcharse a mi madre todos los miércoles y sábados mientras me quedaba preguntándome a dónde se dirigía, hasta que una noche, mientras cenaba con ella, me explicó dónde iba. Me quedé alucinado y me parecía tan interesante todo lo que me contaba que no paraba de hacerle preguntas. ¡Imagínense! ¡Había vida después de la vida! Así que a los cinco años comencé a frecuentar el mismo centro espírita donde iba mi madre, donde tenían una clase llena de niños de edades similares a la mía. Me acuerdo perfectamente de mi educadora, una persona muy alegre y llena de amor por todo lo que nos enseñaba.
Vivíamos solos mi madre y yo, pues mi padre murió cuando yo crecía en la barriguita de mi madre. No llegué a conocerle en persona, aunque sé muy bien quien fue porque mi madre siempre me contaba los momentos graciosos que habían disfrutado juntos. Murió muy joven de accidente de coche debido a un conductor borracho que vino a su encuentro, le propinó un duro golpe del que no se pudo recuperar y acabó falleciendo. Mi madre nunca sintió rabia de Dios y siempre me decía que Dios es una “persona” muy especial de quien nunca deberíamos sentir rabia, pues todo lo que ocurre es para nuestro bien aunque muchas veces no lo entendamos.
Llevaba ya muchos años asistiendo a las clases de educación espírita de las que aprendí muchas cosas, pero empecé a sentirme muy cansado para ir al centro y tenía mucho sueño. Mi madre me llevó al médico y después de ese día mi vida cambió por completo. Tenía 14 años y me acuerdo como si fuera hoy cuando vino el médico a casa y concluyó que tenía cáncer. ¡Qué nervios! ¡De la impresión pensé que desencarnaría allí mismo! ¿Qué iba a hacer ahora tan joven pero enfermo? Entonces ¡todo lo que había aprendido ya no tenía sentido!, pero mi madre me tomó de las manos y me dijo: hijo mío, confía.
Comenzamos con el tratamiento que era muy difícil, pero intentaba no desanimarme; mi madre siempre se encontraba a mi lado, incluso dejó el trabajo para estar conmigo la mayor parte del tiempo. Su último recuerdo es el beso que me dio antes de entrar en la sala de operaciones y de la dulce sonrisa del doctor. Un poco más tarde desperté en un lugar distinto, me sentía confuso, no recordaba el hospital con unas vistas tan lindas, pero no quise ser desconsiderado y esperé la llegada de la enfermera.
-Buenos días señorita, creo que me cambiaron de hospital. La verdad es que éste me gusta mucho ¿puedo hablar con mi madre?
La buena señora me sonrió y me dijo el momento exacto en que podría verla. No sentí miedo pues todo allí parecía tan natural, pero de lo que tenía ganas era de ver a mi madre. Más tarde, por la noche vino un señor de pelo muy blanco pero es que me acordaba muy bien de él y dije: ¿abuelo?, ¿abuelo eres tú?
-Sí cariño, soy tu abuelo. ¡Cómo te he echado de menos! – me quedé helado porque si yo estaba viendo a mi abuelo quien murió años atrás, eso quería decir que…
-¡No puede ser abuelo!, ¿estoy muerto?
-¿Tú crees que estás muerto? ¡Pues yo te veo más vivo que nunca! – Ese momento fue bastante difícil pero el abrazo de mi abuelo y el amor que recibía de él me permitían confiar aún más que todo estaba bien.
-Abuelo, ¿cómo está mamá?
-Está triste pero aceptando la voluntad de Dios.
-¿Puedo ir a verla? ¡Quiero ir a darle un abrazo y decirle que la quiero mucho!
-Claro que sí, pero todavía no.
Pasaron los días y finalmente dejé el hospital. Qué bonito era todo, ahí sentía amor por todos los rincones donde paseaba. Mi abuelo me llevó a un lugar muy especial, una clase de educación espírita en el plano espiritual y me sorprendió saber que iba a poder seguir frecuentando las clases que tanto me gustan. Me vino a buscar un chico joven, llamado Manuel, alto, delgado y muy divertido. Me preguntó si me gustaría visitar mi antiguo centro espírita y ver mi querida clase desde arriba. ¡Qué subidón!, pensé. No quise mostrar que estaba nervioso sino que deseaba que fuese todo muy natural, pues ya había estudiado y sabía de qué iba. Pasado un tiempo vi cómo brillaba desde arriba aquella casa espírita que tanto me gustaba.
Foto: Marcelo Nogare |
Durante el camino de vuelta le pregunté a Manuel por qué puede ver a mi abuelo pero no a mi padre y me explicó que mi padre no se encontraba en la misma esfera que yo, que mi abuelo está a su lado desde hace años ayudándolo a que perdone a la persona que le quitó la vida. Y pensé que debía ser cierto pues así piensa mi padre.
En el plano espiritual voy a clase cada día, siento y recibo el amor de todas las personas que están en la Tierra y de mi abuelo cuando viene a verme. Haber estudiado cuando estaba encarnado me ayudó mucho durante el proceso de adaptación. En realidad estoy convencido de haber vuelto a mi verdadera casa. Me encantaría que supieran que la vida aquí está llena de amor y aprendizaje y que existe vida después de la vida. Por tanto dad a vuestros hijos todo el amor que podáis y no sintáis rabia de Dios ni por un segundo.
( De la Revista Visión Espírita )
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