¿Experiencias fuera del cuerpo?.-
Esta clase de experiencias conocidas como Proyecciones
astrales ( PES), constituyen un fenómeno
universal a lo largo de la historia.
Estos casos constituyen experiencias profundas que
afectan a la vida de las personas que las han experimentado, pues
siempre les queda una sensación y un recuerdo agradable de la
experiencia.
Cuando esto sucede, suele ser de forma involuntaria en
personas que en estado de relajación profunda o semidormidos,
sienten como abandonan su cuerpo físico del que se alejan,a veces
acompañados de una sensación de vértigo, y pasan a contemplar el
mundo exterior desde una posición exterior, a veces muy alejada del
lugar donde quedó el cuerpo físico.
Esta experiencia, cuando sucede, suele ser una vez en la
vida, y salvo excepciones, ya no se suele experimentar más, aunque
conscientemente se intente. Es de señalar que también hay casos
en los que esta experiencia es provocada bajo estado de trance
hipnótico o causado por algún accidente traumático que ha
colocado al sujeto durante un periodo de tiempo, del que él no es
consciente, en una situación límite, al borde de la muerte.
Estos fenómenos , que nada tienen que ver con las
ensoñaciones experimentadas durante el sueño fisiológico, se han
podido comprobar después en cuanto a su veracidad, porque los
sujetos han descrito hechos y detalles puntuales sobre lo que han
oído, visto y hasta olido en determinado lugar lejano de donde él
se encontraba físicamente y en un momento determinado, aportando
toda clase de datos o detalles que se han podido verificar después
, acreditando y comprobando así su autenticidad. Esto nos lleva a
la única y mas lógica explicación posible , de que realmente el
sujeto ha estado allí personalmente, cosa totalmente descartable,
o bien que se ha proyectado mentalmente hasta allí, en el momento
comprobado, aun manteniendo la evidencia de que su cuerpo físico
se encontraba en otra parte.
Según relatos de quienes han vivido esta experiencia,
parece ser que la sensación general durante la proyección astral,
es de bienestar y de optimismo. Algunos sujetos, curiosamente,
también han descrito a su propio “fantasma” o “cuerpo astral”
como otro
cuerpo desde el que se ven fuera de su propio cuerpo, y
con el que se sintieron flotar a mas o menos altura, quedando
unidos a este solamente por un delgado cordón luminoso que les
permitió regresar después a su cuerpo físico, como “refundiéndose
en él y regresando conscientemente al estado normal.
Este
hecho tiene aspectos interesantes que debemos conocer: A veces
también se han producido esta clase de experiencias en sujetos que
han sufrido “muertes clínicas aparentes ”, de las que regresan
tras un cese completo de su actividad cerebral, con ausencia de
signos vitales como el latido cardíaco, y dilatación de las
pupilas, no habiendo ninguna explicación médica a este hecho.
También se han dado casos parecidos en personas
aparentemente muertas por congelación que presentan un profundo
letargo y una gran hipotermia durante su muerte aparente, sin
presentar signo alguno de actividad cerebral, y sin embargo más
tarde recuperan la conciencia y la actividad cuando se vuelven a
calentar progresivamente. Es como una invernación, semejante a la
experimentada regularmente por ciertas especies de anfibios, que
durante el crudo invierno, permanecen “congeladas”, y vuelven a
retomar el pulso vital con la fusión de las nieves primaverales y la
gradual subida de la temperatura.
Todos estos datos nos pueden llevar a la conclusión de
que los electroencefalográmas
“planos” no constituyen por si solos una prueba exacta y
definitiva de la actividad cerebral, y por lo tanto, de la muerte
definitiva, porque puede ser factible que el cerebro se encuentre a
tan bajo nivel de actividad, que esté prácticamente inactivo, y que
el “ electro” no registre actividad alguna, y sin embargo la
persona aparentemente muerta, en realidad aún esté viva y sea
susceptible de poder “volver” a su estado vital normal.
La
experiencia fuera del cuerpo también puede ser provocada
voluntariamente por el propio sujeto y es también conocida como
“viaje astral”, siendo
frecuente entre algunos maestros y lamas
tibetanos e indios durante sus prácticas de meditación y yoga.
Las
personas que han vivido esta experiencia, realmente guardan un buen
recuerdo de la misma, y pierden el temor a la muerte, aunque no por
eso desean morir, pues como cualquier persona, también tienen el
fuerte y natural instinto de supervivencia. Además quienes han
vivido esta experiencia fuera de su cuerpo, suelen experimentar un
cambio interno muy positivo en sus vidas.
Resultan también muy interesantes los casos de sujetos
que han tenido la experiencia de una “muerte
clínica” a causa de algún accidente con
parada cardíaca momentánea. Algunos quedan en ese estado algunos
segundos o minutos, de los que después no son conscientes ni
recuerdan nada, porque durante su “muerte
aparente”, abandonaron su cuerpo y su
cerebro, perdiendo el sentido del tiempo y el espacio, debido a que
estos parámetros físicos no existen en la dimensión astral en
donde estuvieron mientras duró la experiencia.
José Luis Martín-
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“
Los hombres saben cada dia más del Cosmos y cada
día menos de sí mismos”
- Anthony
de Mello -
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EL DINERO
El dinero constituye una pesada responsabilidad para quien lo posee.
No compra la felicidad y muchas veces es culpable de incontables desdichas.
A pesar de eso, su ausencia casi siempre se transforma en un factor de desequilibrio y miseria con el que se atormentan multitudes en desvarío.
El dinero en sí mismo, no tiene culpas; no es ni bueno ni malo
La aplicación que se le da lo hace agente de progreso social o de desarrollo técnico, de confort físico y, a veces, moral o causante de innombrables desgracias.
Su validez depende del uso a que se destine.
Con él se adquiere el pan, la leche, el medicamento, dignificando al hombre por el trabajo.
Su correcta aplicación impone responsabilidad y discrnimiento, vovlviéndose factor decisivo en la edificación del comercio entre naciones y estabilizador del intercambio saludable entre los pueblos.
Por medio de él, irrumpe el vicio y la corrupción, que arrojan a las criaturas livianas a profundos despeñaderos de locura y criminalidad.
Para conseguirlo se empeñan valores de inteligencia, en esfuerzos exaustivos, por medio de los que son fomentadas las industrias o el comercio, las realizaciones de alto porte, las ciencias, las artes, los conocimientos.
En el submundo de las pasiones, simultáneamente, se utiliza con astucia e indignidad, favoreciendo los disparates de la emoción, acariciando ambiciones degradadas para el consorcio de la anarquía con el placer.
Por su intermedio, unos son elevados a las alturas de la paz, de la gloria humana, mientras que otros son arrojados en zonas pestilentes de pavor y de desaregación moral en la que sucumben.
Su presencia o ausencia es relevante para la casi totalidad de los hombres de la Tierra.
Para el intercambio, en movimiento de productos y valores, el dinero desempeña un papel preponderante.
Gracias a él se establecen acuerdos de paz y por su posesión explotan guerras calamitosas.
*
Usalo sin esclavizarte.
Poseelo sin dejarte poseer por él.
Domínalo antes de que te domine.
Dirígelo con elevación, a fin de que no seas mal conducido.
Cuida de no someter tu vida, tus conceptos, tus consideraciones y amistades, al talante de tu condicionamiento.
Providente, multiplica el beneficio de todos, sin la avaricia que alucina o la ambición que desvaría.
Según te sirvas del dinero, construirás el cielo de la alegría o el infierno de mil tormentos para ti mismo.
*
Si te escasea en las manos la moneda, no te supongas vencido.
Tener o dejar de tener, importa poco en la economía de tu existencia.
Lo importante será la posición que asumas en relación a la posesión.
No te desesperes por la ausencia del dinero.
Como hay quienes se hicieron siervos de quien tiene, los hay también esclavizados de lo que les gustaría tener.
El dinero es medio, no meta. Imprescindible colocarte jubilosamente en la situación que la vida te brindó,padronizando las directrices y los deseos personales dentro de los límites transitorios de la experiencia educativa por la que pasas, consecuencia natural del mal uso que hiciste del dinero que un día poseiste.
Por otros recursos podras ayudar al prójimo y erigir la felicidad personal, conforme las luminosas lecciones con que el Evangelio te puede enriquecer la vida.
Lo esencial es vivir en paz, con dinero o sin dinero.
DIVALDO PEREIRA FRANCO
DICTADO POR EL ESPÍRITU JOANA DE ÂNGELIS
DICTADO POR EL ESPÍRITU JOANA DE ÂNGELIS
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Es normal que a veces sintamos inquietud, turbación, y que en nuestra alma surja incontenible un anhelo de paz y serenidad.
La fe y la esperanza no es una virtud pasiva. La fe y esperanza es confianza en uno mismo, en los demás y en el Universo., es saber que hay un orden, y no impera el azar o el caos.
La Fe y la Esperanza es adhesión de toda nuestra persona a la verdad suprema, el amor supremo. La fe nos abre a la espiritualidad y a nuestros hermanos.
La fe y la esperanza nos permite ver en todos los acontecimientos de la vida un sentido y significado para lograr ser una presencia amorosa. Pueden ser situaciones agradables o desagradables, pero quien tiene fe puede entrever en todas ellas la providencia divina.
La fe no nos pide cerrar los ojos a lo que la razón humana ve con claridad, nos pide abrirlos más, mucho más, para descubrir la realidad más profunda, que es la omnipresencia del amor
Esta confianza, que se convierte en certeza y gratitud, es muy importante en nuestra vida, nos crea un conocimiento del bien que nos ayuda también en las horas de oscuridad.
Si nuestra vida es un acto constante de gratitud, todo nuestro ser se llenará de paz y estaremos siempre abiertos a Ser y estar con nosotros mismos y con el prójimo con todo nuestro corazón.
La fe y la esperanza no es una virtud pasiva. La fe y esperanza es confianza en uno mismo, en los demás y en el Universo., es saber que hay un orden, y no impera el azar o el caos.
La Fe y la Esperanza es adhesión de toda nuestra persona a la verdad suprema, el amor supremo. La fe nos abre a la espiritualidad y a nuestros hermanos.
La fe y la esperanza nos permite ver en todos los acontecimientos de la vida un sentido y significado para lograr ser una presencia amorosa. Pueden ser situaciones agradables o desagradables, pero quien tiene fe puede entrever en todas ellas la providencia divina.
La fe no nos pide cerrar los ojos a lo que la razón humana ve con claridad, nos pide abrirlos más, mucho más, para descubrir la realidad más profunda, que es la omnipresencia del amor
Esta confianza, que se convierte en certeza y gratitud, es muy importante en nuestra vida, nos crea un conocimiento del bien que nos ayuda también en las horas de oscuridad.
Si nuestra vida es un acto constante de gratitud, todo nuestro ser se llenará de paz y estaremos siempre abiertos a Ser y estar con nosotros mismos y con el prójimo con todo nuestro corazón.
Marilys Fernandez Rodriguez ************* |
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