INQUIETUDES ESPÍRITAS
1.- La virtud más meritoria
2.- Atendimiento fraterno
3.- Historia del concepto reencarnatorio
4.- Al Espiritismo por el Magnetismo
***************************
LA VIRTUD MÁS MERITORIA
El apego a las cosas
materiales, es un indicio notorio de inferioridad, pues, cuanto más el hombre
se apega a los bienes de este mundo, menos comprende su destino.
Por el desinterés, al
contrario, él prueba que ve el futuro desde un punto de vista más elevado
"El hombre
de bien que, creyendo en su futuro celestial, quiere llenar su vida con nobles
y bellas acciones, saca de su fe, la certeza de felicidad que lo
aguarda y la fuerza necesaria para sus acciones de
caridad, de sacrificio y de abnegación.
Y, por fin, no hay
malas inclinaciones, que con la fe, no puedan ser vencidas."
El Libro de los
Espíritus, Allan Kardec, cap. XIX, íten 12.
Pregunta Allan
Kardec a los espíritus responsables por la codificación, cuál sería la más
meritoria de todas las virtudes. De ellos obtuvo la siguiente respuesta que nos
sugiere una gran reflexión:
"Todas las
virtudes tienen su mérito, porque todas son indicios de progreso, en el camino
del bien.
Hay virtud siempre que
hay resistencia voluntaria, a ser arrastrado por las malas tendencias.
Mas la sublimidad de
la virtud, consiste en el sacrificio del interés personal, por el bien del
prójimo, sin segunda intención. La más meritoria es aquella que se basa en la
caridad mas desinteresada".
El hábito de hacer el bien
Según los buenos
espíritus, esa caridad es espontánea, sin necesidad de lucha interior, en las
personas que realizan el progreso. Así, los buenos sentimientos no les cuestan
ningún esfuerzo y sus acciones les parecen tan naturales; que el bien se tornó
para ellos en un hábito.
Se debe honrar a esas
personas, "como a viejos guerreros, que conquistan posiciones".
Como estamos
todavía lejos de la perfección, esos ejemplos nos sorprenden por el contraste y
lo admiramos, porque son raros.
Sin embargo, en los
mundos inter-dimensionales, más avanzados que el nuestro, eso que nos es
excepción, es la regla.
El indicio más
característico de la imperfección, es el interés personal.
Informan
los espíritus orientadores que, en la evaluación de los tribunales de justicia
divina (y de la conciencia), fuera la de nuestros defectos
y nuestros vicios, sobre los cuales nadie se engaña, el más
característico indicio de la imperfección, es el interés personal.
Según nos
enseñan, las cualidades morales, son generalmente como un objeto de cobre, que
no resiste a la piedra de toque. "Un hombre puede poseer cualidades reales
que lo hacen para el mundo, un hombre de bien, pero esas cualidades, aunque
representan un progreso, no soportan por lo general ciertas pruebas, y basta
tocar la tecla del interés personal, para que se descubra el fondo de su
pensamiento".
Indicio notorio de inferioridad
Dicen los
espíritus orientadores al pedagogo de Lyon: "El verdadero desinterés, es
un hecho tan raro en la Tierra, que se le puede admirar como a un fenómeno,
cuando se presenta. El apego a las cosas materiales, es un indicio notorio de
inferioridad, pues, cuanto más el hombre se apega a los bienes de ese mundo,
menos comprende su destino. Por el desinterés, al contrario, se prueba que mira
el futuro, desde un punto de vista más elevado".
Y prosiguen:
"A medida que los hombres se aclaren, sobre las cosas
espirituales, daran menos valor ha las materiales; en seguida, es necesario
reformar las instituciones humanas, que lo entretienen y lo excitan.
Esto depende de la
educación".
Es necesario que
el egoísmo produzca mucho mal, para hacer comprender la necesidad de su
extirpación
El egoísmo, que
lejos de disminuir, crece con la civilización, que parece excitarlo y
entretenerlo, se presenta como un gran mal. Y cuanto mayor es el mal, mas
horrible se torna.
Cuando los hombres se
hayan separado del egoísmo que los domina, vivirán como hermanos,
no haciendo el mal y ayudándose recíprocamente por un sentimiento
fraterno de solidaridad.
Entonces el fuerte
será el apoyo y no el agresor del débil, y no se verán hombres desprovistos de
lo necesario, porque todos practicarán la ley de justicia.
Ese es el reino del
bien, que los Espíritus están encargados de preparar".
El medio de destruir el egoísmo :
Por la práctica
de la abnegación se combate el predominio de la naturaleza corpórea,
generadora del egoísmo. De esa forma el Espíritu triunfará sobre la materia.
En su lógica
irrefutable, esclarecen los bienhechores espirituales que, de todas las
imperfecciones humanas, "la mas difícil de eliminar es el egoísmo, porque
se liga a la influencia de la materia, de la cual el hombre, todavía permanece muy cerca
de su origen, y del cual no puede liberarse.
Todo concurre para
mantener esa influencia: sus leyes, su organización social y su educación.
El egoísmo se reducirá
con el predominio de la vida moral sobre la vida material, y sobretodo, con la
comprensión que el espiritismo nos ofrece en cuanto al nuestro estado futuro
real y no desfigurado por las ficciones alegóricas.
El egoísmo se
funda en la importancia de la personalidad. Pues el espiritismo bien
comprendido, hace ver las cosas desde un punto tan alto, que el sentimiento
personal desaparece de alguna forma, ante la inmensidad.
Al destruir esa
importancia, o por lo menos al hacer ver la persona como aquello que de
verdad es, combate necesariamente el egoísmo".
El principio
de la caridad y de la fraternidad, se opone al egoísmo
Es por el
contacto, como el hombre experimenta el egoísmo de los otros y que
lo torna generalmente egoísta, porque siente la necesidad de ponerse a la
defensiva.
En un contexto
genuinamente cristiano, los buenos espíritus aseguran que solamente "el
principio de la caridad y de la fraternidad debe de ser la base de las
instituciones sociales, de las relaciones legales del pueblo para el pueblo y
del hombre para el hombre, y este pensará menos en si mismo cuando vea, que
los otros también lo hacen.
Experimentará, así, la
influencia moralizadora del ejemplo y del contacto".
Explica Fénelon a
Kardec: "cara al actual desdoblamiento del egoísmo, es necesaria una
verdadera virtud, para abdicar de la propia personalidad, en provecho de los
otros que en general no lo reconocen.
Es a esos, sobretodo,
a los que poseen esa virtud, a quienes está abierto el reino de los cielos; a
ellos, sobretodo, está reservada la felicidad de los elegidos, pues, en verdad
os digo, en el día del juicio, quien no piense sino en si mismo, será
puesto a un lado y sufrirá el abandono".
Lopes para asociación frat. Estudio elaborado sobre la
condensación del cap. XII, Perfección Moral, del Libro de los Espíritus, de
Allan Kardec, traducción de J. Herculano Pires, Editora EME.
Adaptación: Oswaldo E. Porras Dorta
***************************************
ATENDIMIENTO FRATERNO
(Entrevista con Divaldo )
José Ferraz: -¿Cuál es la utilidad doctrinaria del servicio de Atendimiento Fraterno en la Casa Espírita?
Divaldo: - Recibir a las personas, orientándolas según las posibilidades que la Casa dispone en forma de recursos que son puestos a las órdenes de aquellos que vienen hasta el núcleo de iluminación espiritual, encaminando a los que tienen problemas para recibir las respuestas pertinentes a sus necesidades y, por fin, haciendo el trabajo educativo y fraternal de bien y conducir a todos aquellos que llaman a las puertas de la Institución Espírita.
Joao Neves: - ¿Es beneficioso para las personas que recurren a la terapia de los pases ser, antes, asistidas y orientadas por el atendedor fraterno?
Divaldo: - El Atendimiento Fraterno es una psicoterapia que modifica la estructura del problema en el individuo que se acerca a la Casa Espírita con ideas que no corresponden a la realidad. Se puede decir que, de ese contacto personal que anticipa el pase, muchas veces el cliente ya se beneficia, siendo incluso innecesaria la aplicación de la bioenergía. Vivimos en una sociedad que padece conflictos psicosociales, socioeconómicos, comportamentales, cuyos individuos tienen necesidad de hacer catarsis. Como el atendimiento psicoanalítico es muy caro y muy prolongado, en el Atendimiento Fraterno el individuo tiene la oportunidad de abrir el alma al buen oyente, que se puede orientar con seguridad
Como es natural, la desinformación, la falta de información atribuye al pase un carácter de naturaleza milagrosa, lo que ha llevado a algunas personas menos esclarecidas a establecer el número de ellos para la solución de ciertos problemas, lo que no deja de ser una equivocación, porque se les podrá aplicar en número infinito y, si el paciente no se transforma interiormente, de nada adelantará la terapéutica. Si él no se abre para asimilar las energías, es igual a una piedra granítica que, a pesar de estar sumergida en aguas profundas durante millones de años, al no abrirse se encuentra seca interiormente.
José Ferraz: - ¿Cuáles son los requisitos indispensables para que una persona, como atendedor fraterno, pueda sintonizar con los Buenos Espíritus?
Divaldo: - La condición esencial es la buena moral. Desde el punto de vista espiritista el requisito moral del individuo es relevante, imprescindible. Nos utilizamos de un dicho popular. “Dime quien es y yo te diré con quien andas; dime con quien andas y te diré quien es”. Ir a Dios a través de la oración es otra condición, pues se abren los canales psíquicos para una perfecta sintonía con el Mundo Espiritual que os asiste en el atendimiento a las criaturas de la Tierra. Además de esos caracteres esenciales, a parte de los valores morales, es imprescindible el conocimiento de la Doctrina Espírita. No se puede propiciar un buen atendimiento fraterno en la Casa Espírita, sin que se conozca el Espiritismo, lo que sería una paradoja, hablar de una cosa con la cual no se está identificado.
El conocimiento amplio de la Doctrina Espírita es un requisito que tiene un carácter primordial, porque la persona hablará sobre aquello que es la esencia de la Doctrina a fin de que el recién llegado se entere de lo que puede conseguir.
Un buen tacto psicológico es
necesario. La capacidad de saber escuchar es valiosa, porque el cliente,
normalmente, quiere hablar. En la mayoría de las veces, no desea escuchar
respuestas, quiere “desahogarse”, como muchos afirman, porque, a falta de una
respuesta para el problema, él necesita de alguien que lo oiga. Entonces, el
atendedor debe poseer este tacto psicológico para dar oportunidad al visitante
de liberarse del conflicto. Evitar, cuanto sea posible, que él hable de
cuestiones íntimas, de las que se arrepentirá después, cuando el problema haya
pasado. El Atendedor Fraterno no es un confesionario. Como el propio nombre
dice, es un encuentro, en el cual se atiende fraternalmente a aquel que tiene
cualquier tipo de carencia. Con tacto psicológico se puede desviar, en el
momento oportuno, un asunto que sea un inconveniente e interrumpir al cliente
en el momento adecuado, a fin de no alargar demasiado, generando una
“complicidad” de afinidades entre el terapeuta del atendimiento y aquel que lo
busca, evitando producir lo que, a veces, ocurre entre el psicoterapeuta
convencional y su paciente. El atendedor fraterno no debe dar preferencias,
debe permanecer en una neutralidad dinámica, como diría Juana de Ángelis,
porque todos son iguales –dice la justicia- ante la Ley. Entonces, a todos los
que tienen problemas y nos buscan, deberemos atender con cariño, sin
preferencias, sin excepciones y sin absorber su problema, para que él no se
convierta en un paciente nuestro y no transfiera todos sus desafíos hacia
nuestra residencia. Muchas veces preguntará: - Cuando tenga un problema ¿puedo
llamarle? – No – será la respuesta – en casa yo tengo otros compromisos; usted
vendrá cuando lo necesite, aquí al Atendimiento.
Atendimiento Fraterno, Proyecto Manuel Philomeno de Miranda.
*****************************************
HISTORIA DEL CONCEPTO REENCARNATORIO
La idea de la
reencarnación es un concepto que se remonta a épocas tan antiguas y remotas
casi como el propio Ser humano.
Términos como alma,
espíritu, reencarnación (la idea), inmortalidad, etc, no son inventos de esta
época, sino que ya aparecían en los pueblos diseminados por toda la Tierra,
desde muchos siglos antes de la aparición de Cristo.
En
los tiempos primitivos esta idea ya era intuida por el Ser humano
con su sentido innato de lo religioso. Se puede comprobar
que es así por hallazgos arqueológicos, como por ejemplo, que en
la Edad de Piedra, hace
unos 10.000 años, se hacían entierros en posición fetal, porque creían que así
facilitaban el renacimiento.
El Ser humano desde su origen, ya experimentó la idea de haber vivido antes, al retomar emociones y recuerdos de un pasado desconocido; a estas sensaciones y recuerdos, posteriormente se les llamó “dejá vú ”, (vocablo francés que significa ya visto).
Si nos
remontamos unos 50.000 años, podemos comprobar como el
hombre de Neanderthal enterraba
a sus muertos provistos de alimentos y utensilios, expresando así su fe en otra
vida semejante a la terrena.
En las tumbas de
los Etruscos, que
florecieron en Italia antes de la época del Imperio Romano, se han encontrado
muebles y carrozas para el uso de los Seres que habían partido de este mundo,
lo que confirma el concepto que estos tenían sobre el más allá..
En
el antiguo Egipto, 3000
años antes de nuestra era, la supervivencia del espíritu y su reencarnación ya
eran conocidas y afectaba a la aristocracia de los reyes cuyos
nombres terminaban en “Keres”, porque atribuían que todos ellos eran
reencarnaciones de “Keres”. En un principio la reencarnación solo era atribuida a
los poderosos, pero ya en la XVIII Dinastía se creía que las personas
inferiores también renacían.
De los egipcios
esta idea pasó a los Griegos, a través de Pitágoras- unos 500 años
antes de C- y de sus discípulos Sócrates, Platón, Empedocles, Apolonio, etc
Asimismo
fueron figuras históricas destacables que sostuvieron este concepto, Aristóteles, -350
años antes
de C. aproximadamente; Plutarco – unos
cien años a. de C. aprox) y
Herodoto, Este último fue un historiador griego que vivió cinco siglos antes de C. y reflejó
las creencias egipcias de su tiempo. Creían en la reencarnación como
metempsicosis (entrada del alma humana en un animal inferior como castigo por
sus pecados). Ya entonces la enseñanza se concretaba en que el alma
ascendía a través de todos los grados hasta que se convertía en humana, y
después guiada por Espíritus Superiores ascendía a través de miles de grados
hacia la Perfección.
En el oriente viene
siendo esta idea sostenida desde hace miles de años, no solamente a nivel religioso,
sino también como creencia popular. Los hinduistas y los
budistas han sido sus principales paladines, y a partir de ellos esta idea
formó parte de las raíces religiosas de casi todas las religiones asiáticas.
En occidente este
concepto no ha sido desconocido, pues aunque haya a quien pueda parecer extraña esta
afirmación, la idea de la reencarnación ha sido un pilar básico en la cuna de
la cultura occidental.
En Europa, según los galeses, esta
idea comenzó con los Celtas y de allí pasó al Este en
donde coincidió y se afianzó con el Hinduismo y con el Budismo.
La cultura
occidental nació en base a la cultura Helénica, en Grecia, en
donde filósofos como Pitágoras, Sócrates, Platón, Aristóteles, etc,
defendieron y explicaron estos conceptos a sus discípulos.
Posteriormente diversas Escuelas Esotéricas continuaron manteniendo esta idea hasta el momento en que surgió el Cristianismo. Durante los primeros cuatro siglos del mismo, surgieron por Europa oriental y en la parte occidental de Asia, varias escuelas de pensamiento que trataron de lograr una síntesis del platonismo, conjugando enseñanzas griegas, judías, orientales y cristianas. Constituyeron así el Neoplatonismo, cuyos máximos exponentes fueron las Escuelas de Alejandría, de Atenas, Siria, Pérgamo y Roma, que buscaron reunificar la sabiduría de oriente y occidente, siguiendo el hilo conductor de la doctrina de Platón. El Cristianismo fue un fenómeno social de importantísimas y transcendentes dimensiones que en su historia ya presenta testimonios que prueban que la idea de la reencarnación era una creencia firme y consolidada entre los primeros cristianos. Entre las más destacadas figuras, están los llamados Padres de la Iglesia, que la sostuvieron y defendieron, tal como Orígenes y Tomás de Aquino.
Sin embargo,
después el Cristianismo y posteriormente el Islam, combatieron severamente este
milenario concepto que tuvo que quedar oculto y disperso entre grupos
minoritarios debido a las discrepancias que presentaba con respecto a la
religión oficial impuesta, por lo que la Iglesia de Roma lo persiguió como
“herejía”. Así, se instituyó la “Santa Inquisición” que persiguió, torturó y dio
muerte en las hogueras a muchos cientos de aquellos primeros cristianos que han
pasado a formar parte de la negra historia de la Iglesia y fueron
conocidos como los “Albigenses”..
La Reencarnación no solamente está contemplada en las primeras y más remotas obras escritas, sino que fue adoptada por grandes pensadores, filósofos y reformadores morales que ha tenido la Humanidad, desde los asiáticos Confucio o Buda, hasta el mismo Jesús Cristo, como asimismo por otros personajes filósofos y pensadores de la antigua Grecia hasta otros más recientes, como Voltaire, Franklin, Niestzche, Shopenhauer, etc
Y así, en esta situación actual de desconocimiento e indiferencia, a causa del materialismo que se forjó con tantos dogmas falsos y absurdos de las religiones, hemos llegado hasta nuestros días, en los que la divulgación del conocimiento espiritista está reponiendo entre las gentes los conceptos espirituales y racionales que necesita la humanidad para avanzar hacia un mundo mejor y más equilibrado que el actual.
- José Luis Martín-
***************
“Antes de nacer, el niño ha vivido ya y la muerte no termina en la nada. La vida es un devenir que transcurre semejante a un día de sol, que recomenzará” - Egipcios- 3000 a.a.C
*****************************
El Magnetismo y los fenómenos magnéticos son tan sorprendentes que, como decía el Barón Du Potet (1796-1881), pueden parecer exagerados y extraordinarios, pero resultan necesarios para un exacto entendimiento de la extensión de la Doctrina Espírita. Es así porque al tratarse de Magnetismo cuidamos de los pases y sus técnicas, de curas espirituales y/o magnéticas, y así podemos llegar al Espiritismo por medio del Magnetismo.
El propio Allan Kardec (1804-1869) sabía de la importante relación entre esas ciencias, diciendo que el Magnetismo preparó el camino del Espiritismo y que el rápido progreso del Espiritismo solo ocurrió en virtud de la vulgarización de las ideas de los magnetizadores.
Joseph Philippe François Deleuze (1753-1835), importante magnetizador francés, decía que el Magnetismo es una extensión del poder que tienen todos los seres vivientes para actuar sobre aquellos órganos que están sujetos a la voluntad, y es el hombre quien tiene la facultad de ejercer sobre sus semejantes una influencia provechosa, dirigiendo sobre ellos, por su voluntad, el principio que nos anima y nos hace vivir.
No hay una fecha precisa de reconocimiento del Magnetismo. No es como en el Espiritismo, en el que la eclosión de los fenómenos de las mesas giratorias o de los hechos ocurridos con las hermanas Fox en los EUA, en 1848, permiten una fecha, o mejor, la observación y el estudio hasta su sistematización en Doctrina por Kardec.
Algunos afirman que el Magnetismo fue "descubierto" por Franz Antón Mesmer (1784-1815), médico alemán anterior a Kardec.
Mesmer fue, sin duda, el mayor magnetizador; fue quien sistematizó el Magnetismo, siendo considerado el Padre del Mesmerismo; fue el primero que pronunció las palabras Magnetismo Animal, las cuales sustituyeron a la de gravitación animal, usadas en su tesis de doctorado. Mesmer "no descubrió" el Magnetismo, porque este ya era conocido y manejado desde la Antigüedad, practicado en secreto en todas las épocas de la Historia, en casas o en templos, por sacerdotes, pitonisas, videntes, oráculos, profetas y curanderos que eran los únicos "habilitados" o "instruidos" para esto. Hay noticia de que los sacerdotes de los templos del antíguo Egipto estaban habilitados en la experimentación magnética.
Hector Durville, por cierto, presentó una talla o una pintura en el Templo de Karnak, en donde uno de los grandes Jefes Divinos proyectaba en la nuca del faraón, un fluído que proporcionaba vida, salud y fuerza.
En el mismo sentido, Jacob Melo afirma que no hay una fecha o periodo preciso que confirme la implantación del magnetismo en el seno de la humanidad, siendo por eso mismo y por todas las reflexiones seria al respecto, permitido que se diga que hay magnetismo en el mundo, desde que el mundo es mundo.
De esa forma, el Magnetismo no era ninguna novedad en el siglo de Kardec. Al contrario, asunto por demás debatido, era conocido en toda Francia y también objeto de los estudios de Kardec, como el mismo confirma por sus innumerables escritos en la Revista Espírita.
A pesar de eso, no se puede ignorar que el "Magnetismo Animal" fue iniciado en 1776, como la primera respuesta terapeútica científica de la era moderna, habiendo sido por la metodología científica que el doctor Mesmer hizo su descubrimiento.
¿ Y para qué sirve el Magnetismo?. El Magnetismo tiene gran influencia en los procesos de cura. El Barón Du Potet destacaba la virtud curativa del Magnetismo, advirtiendo que indebidamente manejado sin que fuesen seguidas sus técnicas, podría causar accidentes, lo que significa que si el magnetismo puede hacer el bien, reconoceremos igualmente que igual que los demás elementos de la Naturaleza, también puede hacer el mal, por lo que deberán aprender a conocerlo bien, a fin de estar en guardia contra los accidentes que pueda producir.
En el Libro de los Espíritus, Kardec se refirió a aquellas personas que tienen el don de curar por el simple toque, siendo que los Espíritus son sensibles a la fuerza magnética, a la pureza de sentimientos y al ardiente deseo de hacer el bien, como una especie de "filtros" para evitar abusos y narraciones interesadas por parte de personas exploran la credulidad en su provecho.
En el Libro de los Médiums, Kardec distingue a los magnetizadores de los médiums curadores, reconociendo que había algo más en los Espíritus, aludiendo a la potencia magnética, que residía, sin duda, en el hombre, pero aumentada por la acción de los Espíritus que llama en su ayuda".
La ciencia del Magnetismo, decía León Denis (1846-1927), coloca al hombre que la posee, como dueño de maravillosos recursos, pues la acción de los fluidos sobre el cuerpo humano es inmensa; sus propiedades son múltiples y variadas.
De ahí por qué al ser el Magnetismo un método racional, con él se puede comprender y estudiar mejor el Espiritismo.
- Antonio Cesar Lima de Fonseca- del Centro Cultural Espírita de Porto Alegre (CEPA).Brasil
****************************************************************
No hay comentarios:
Publicar un comentario