domingo, 16 de enero de 2022

Es preciso soñar

   INQUIETUDES ESPÍRITAS

1.- Ciencias educacionales a la luz del Espiritismo (2)

2.- La seguridad de la vida futura

     Características de los buenos Espíritus

3.- Es preciso soñar

4.- Mis ideales ( del Blog de Amalia)



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                                                                  Viana de Carbalho (Espíritu)


CIENCIAS EDUCACIONALES A LA LUZ DEL ESPIRITISMO (y 2)

La sociedad humana en los tiempos actuales está desanimada  debido a que está equivocada con relación a los valores humanos. Desilusionada,  por falta de apoyo y de respeto por la sociedad, los postulantes al conocimiento padecen la hipertrofia  de los sentimientos, permaneciendo en las escuelas por la búsqueda de títulos  que les faciliten el triunfo en el mundo, sin conciencia del valor de la auto-realización.

El abuso de drogas y de sexo en la Escuela, el desinterés de los maestros, considerando los salarios ridículos que reciben, hace que el instituto o la escuela, como queramos llamar el lugar de estudio, deje de ser el templo del saber  para transformarse en un lugar de encuentros para pasar el tiempo,  pues se espera por el Diploma y no por la capacitación para la lucha en el mundo social.

Cuando se de la reversión de estos acontecimientos y la sociedad prestigie más y mejor el conocimiento en detrimento de la astucia, así como a la cultura, en vez de fuerza muscular  o solamente la agilidad física, la Escuela recuperará su lugar , y los educadores serán emulados a un cambio de comportamiento con más eficiencia en el área de los estudios que conducen   la concienciación de sus deberes y de su realización anterior.

La competitividad puede influir positivamente, en la educación, siempre que su objetivo no sea el de aplastar o vencer a otro.  Es un estimulo para conquistar espacios  y realizaciones dignificantes. La escuela siempre se valdrá aun, por bastante tiempo, de la evaluación de resultados  del aprendizaje produciendo inconscientemente, un sentido de competición positivo.

La competición lamentable es aquella que humilla, al perdedor situándolo en posición inferior. Las naciones ricas, muchas veces carentes de valores éticos, dieron inicio al mundo de las competencias, para la adquisición de vidas y recursos intelectuales que les faltaban, tornando al hombre objeto de compra  y no instrumento de ideas. Los deportes  perdieron casi el sentido de competición calificativa para tornarse en industrias de profesionales  destituidos  de sentimientos fraternos, cuyos únicos intereses son el dinero y la supervaloración que les posibilita  disponer de más  altos estipendios. Ganar en las competencias se tornó un factor de mercado y no de ideal o de placer. Lo mismo ocurre  en otras áreas del comportamiento artístico, cultural, social…

Los estímulos por el idealismo, las competiciones  para la calificación de los participantes, son métodos valiosos para la conquista de valores nobles que deben ser preservados.

La Educación es una forma de dirigir al alumno al autodescubrimiento, es un inevitable viaje interior,  gracias al cual el alumno  descubre las posibilidades que están a su alcance, así también lo que realmente desea en la vida, evitando  enmarañarse por las conquistas exteriores que no satisfacen su plena realización. En el futuro, el profesor tendrá conocimiento del Espíritu y sus potencias, así entenderá los conflictos  y problemas que desafían  y enfrenta el alumno para los cuales deben recibir orientaciones de seguridad.

La conquista de la conciencia en la Escuela, marchará al lado de la adquisición del conocimiento, del discernimiento para la acción, de manera que cada alumno descubra lo que hacer, cuando y como realizarlo. Al mismo tiempo, esa experiencia conducirá al autodescubrimiento.

El desinterés, la indiferencia, la falta de voluntad, y empeño  de los alumnos,  es debido, a la falta de respeto hacia la Cultura general y la supervaloración de los deportes y de las diversiones.

En el hogar se inicia el amor por el aprendizaje, dado que en la familia se encuentra la primera escuela, formadora del carácter y de la personalidad.

Para desarrollar el interés de los alumnos, se hace menester  que los individuos en particular y el Estado en general, pasen a considerar la educación como de vital importancia para una existencia saludable y feliz en la Tierra.

La Humanidad  no puede vivir solamente  de la exaltación en las conquistas, en el campo del deporte, de las aficiones sean las que sean, ya que son transitorias.

Por tanto, es indispensable  que la familia y el Estado conjuguen esfuerzos  para la valoración de la Escuela y de su grandioso significado en la edificación de una sociedad justa y feliz.

La educación moral, no es una doctrina  de esta o aquella Institución, es de todas. Se inicia en el hogar, de los padres  con relación a los demás individuos, incluyendo a los familiares y se prolonga en la Escuela. En un futuro próximo, como ya viene ocurriendo, un campo de experiencias integrales, en las cuales se unirán todos los esfuerzos para el equilibrio, que resulta de lo que se es, de los que se hace y de aquello a lo que se propone.

A la Educación le cabe, en todas partes, la gran tarea de renovar la sociedad, partiendo del alumno bien orientado, disciplinado y auto conocedor de sus necesidades.

El perfil de la Escuela del próximo siglo, del futuro a de tener el aspecto de un hogar transitorio, rico en seguridad emocional y cultural, donde todos se estimen como verdaderos amigos y hermanos, movilizándose en un ambiente de solidaridad y comprensión, disfrutando  de libertad de pensamiento y de acción, con entera responsabilidad y conciencia, de modo que los derechos ajenos sean respetados y tenidos en cuenta, sin tentativas de traspasar las fronteras invisibles , pero seguramente conocidas.

La educación en el próximo milenio, será efectuada por el desarrollo tecnológico, repercutiendo, conforme algunos imaginan, en la eliminación del espacio físico de la escuela, del trabajo, hacia un espacio accesiblemente virtual, ese proceso ya viene ocurriendo, en razón de muchos factores. La Escuela deja de ser el edificio donde son administrados los cursos, presentadas las clases y en una visión más profunda, es cualquier lugar donde se procesa el aprendizaje y se difunden los conocimientos.

Gracias a la contribución de la tecnología y la computación, los hogares se transformaran en escuelas productivas, utilizando los recursos virtuales para la ampliación de conocimientos y mayor vivencia de las informaciones, disminuyendo la movilización de los aprendices, que pierden mucho tiempo en los viajes  hacia los núcleos centrales de información escolar.

Para llegar a una Educación en la que se observe y respete la universalización de los derechos, habrá que considerar los valores éticos ejercitados desde los primeros  momentos junto al profesor (educando) ampliándola en dirección de su integridad física, moral, social y económica; esa conducta que el mismo se sienta digno y pase a valorizar a las demás criaturas, teniendo en vista sus conquistas morales y no sus pasiones o los factores circunstanciales de proyección del mundo.

Los profesores enriquecidos por el respeto que la sociedad le debe, adecuada y honradamente remunerados, tendrán oportunidad de actualizarse siempre, no recargándose  de trabajos acumulativos para una sobrevivencia financiera equilibrada, lo que siempre dificulta la atención del compromiso asumido junto al alumno. Liberados  y respetados se sentirán capaces de infundir en las mentes nuevas las directrices de respeto a la universalización de los derechos. No se debe reducir la enseñanza a las clases, es necesario ampliarla en el contacto con la Naturaleza, con visitas a los museos, así que rememorando el pasado, podamos construir mejor futuro, sacando informaciones de la Historia.

Esa lección viva, que nos demuestra que todo pasa, contribuye a su vez a la edificación del futuro que dejará surcos de nobleza y elevación después de transcurrido su tiempo.

Mientras que no tenga el hombre  elementos para discernir, para saber qué hacer y cuando realizarlo, no se le podrá facilitar la libertad, por encontrarse distante de la responsabilidad. Conceder la libertad  sin orientación es condenar al hombre, al desequilibrio generador del libertinaje. Cuando el hombre es inmaduro, el solamente posee instintos  no educados, por tanto, posibles de encaminarlo hacia las pasiones que señalan su nivel evolutivo.

Sócrates se preocupaba en estimular al alumno a encontrar las respuestas para los variados requisitos de la vida, haciéndolo  viajar hacia dentro, con el fin de arrancar el conocimiento  que en el dormía y provenía del mundo  de las ideas, por donde deambulara  antes de vestir el ropaje carnal.

Jesús es el educador por excelencia, a Su vez se valía de sus parábolas  y sobre todo de las lecciones vivas, a fin de que Sus enseñanzas permaneciesen insculpidas en lo intimo del ser de aquellos que Lo escuchaban.

Pestalozzi inauguró la Escuela Nueva, restaurando la dignidad infantil, abriendo espacios  para la Psicología de la infancia, proponiendo  el amor como base  de una buena educación.

El modelo ideal para educar al niño, sintiéndose amado y despierto  hacia el crecimiento interior, es cuando este encuentra en el profesor el guía y amigo para el gran viaje del descubrimiento de la realidad de sí mismo y del mundo en el cual se encuentra.

la religión forma parte de la vida de todos aquellos que creen en Dios y en la inmortalidad. La religión  tiene por meta  producir la religación de la criatura con el Creador. Variando sus métodos y contenidos, los objetivos que  alberga son siempre nobles, pese  que también, siempre sean lógicos y racionales.

Las informaciones deben ser ofrecidas al niño a partir de su nacimiento, dado que en esa fase, el Espíritu aun se encuentra en el proceso  de la reencarnación y registra los acontecimientos que suceden alrededor de su nueva experiencia  con bastante lucidez.

Es en el hogar y en el templo de cada religión, donde  el niño, desde muy temprano, debe recibir instrucciones y orientaciones  sobre las diferentes religiones, así como los esclarecimientos  que le posibiliten distinguir los valores y comportamientos de su prójimo en el mundo de relaciones.

Todo el empeño debe ser realizado por maestros y padres para que la libertad de religión sea preservada y específicamente, cada alumno sea orientado en el hogar y en su núcleo de fe al respecto de la Doctrina espiritual que deberá seguir.

Educar, bajo cualquier aspecto, es conducir con seguridad, libertad y responsabilidad, equipando  al alumno con valores que lo capaciten  para la vida, para la victoria sobre las pasiones disolventes,  preparándolo para los pasos más agigantados de la evolución.

El Estado, no tiene derecho de a intervenir  en la educación religiosa de los ciudadanos en general, porque seria una intromisión violenta en los derechos de la libertad de elección, de la libertad de conciencia.

La meta principal del profesor debe ser la de crear condiciones en el alumno para que pueda vivir con dignidad, resolviendo con sabiduría los problemas que enfrentará en el camino de su evolución. Para ello, el profesor  ha de estar enriquecido  por conocimientos que transmitirá  y embestido de valores morales  que podrán  confirmar  la excelencia del mensaje  educativo que pretende ofrecer a sus alumnos. Sin el ejemplo que se manifiesta por la vivencia equilibrada y saludable, las mejores lecciones pierden su significado profundo para tornarse tan solamente  un conjunto  de informaciones culturales sin sentido práctico de aplicación en lo cotidiano.

La transformación social será realizada mediante la educación. El individuo es el resultado de lo que hizo de sí mismo, de lo que aprendió en el grupo por donde caminó, de la formación educativa que recibió en el hogar, en la Escuela, en la sociedad.

Conjugados esos factores, inevitablemente, tendremos, la transformación de la Humanidad para mejor.

Para lograr despojar al niño de los valores, ideas y creencias enfermizas, y partiendo de que la construcción del hombre  ideal comienza en la educación formal y en la experimental, los padres y maestros deberán trabajar unidos en el mismo ideal de la educación, no transfiriendo para la Escuela toda la responsabilidad  por la formación ética, moral y cultural del niño y del joven.

El hogar y la Escuela son términos de la misma ecuación educativa y solamente cuando esos dos núcleos  de vida estén en sintonía y trabajen unidos es que se podrán mantener los valores elevados, las ideas nobles en consideración y  las creencias en la dignidad humana como base para el progreso individual y general de la sociedad.

Procuremos trabajar el universo infantil con los instrumentos del amor y de la razón, grabando en su interior la certeza de su inmortalidad, tanto como también informarlo y concientizarlo de que es miembro actuante de la familia universal, esto constituye el principal, y urgente  desafío para la educación, que posee valiosos recursos para disolver los canceres del egoísmo, del orgullo, de la prepotencia, generadores de la miseria   de variado orden.

Trabajo realizado por Merchita (mercedes Cruz Reyes).

Extraído del Libro: Actualidad del Pensamiento Espirita, de Divaldo Pereira Franco, por el Espíritu “Vianna de Carvalho”

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    LA SEGURIDAD DE LA VIDA FUTURA

La vida terrenal no es nada. Ustedes no percibían lo que hay más allá de la tumba, nosotros
les hacemos ver, más lejos, un horizonte espléndido. No sabían por qué sufrían en esta vida, ahora ven en el sufrimiento la justicia de Dios. Antes el bien no ocasionaba, según las creencias, beneficios futuros. De ahora en adelante será eso una meta y una necesidad. La fraternidad era antes sólo una hermosa teoría. Ahora ella se fundamenta sobre una ley de la Naturaleza. Gobernados por la creencia de que todo terminaba con la vida, el infinito es un vacío, el egoísmo reina como señor absoluto y la divisa que precede es: “Cada cual para sí.”
“Con la seguridad de la vida futura los espacios se pueblan hasta el infinito, el vacío y la
soledad desaparecen, la solidaridad une a todos los seres de más acá y de más allá de la tumba, nace el reino de la caridad y la divisa de él es: “Uno para todos y todos para uno.” Y como broche magnífico, si al morir daban a quienes querían un adiós eterno, hoy podrán despedirse con un: ¡Hasta luego!”


LA GENESIS
ALLAN KARDEC

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CARACTERÍSTICAS DE LOS BUENOS ESPÍRITUS

La bondad y la benevolencia también son atributos esenciales de los espíritus purificados. No alimentan odio a los hombres ni a los demás espíritus. Lamentan sus debilidades, critican sus errores, pero siempre con moderación, sin resentimiento ni animosidad. Si se admite que los espíritus realmente buenos sólo pueden querer el bien y expresar conceptos elevados, se concluirá que todo lo que en el lenguaje de los espíritus revele falta de bondad e indulgencia no puede tener origen en un espíritu bueno.

- El Libro de los Médiums-

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ES PRECISO SOÑAR


Cada vez más la interpretación  y comprensión de la importancia de los sueños, adquiere relevante papel en la vida humana. En ellos reside la comprobación de nuestra vida psíquica y a través de los sueños nos reciclamos.  Si el oxigeno es fundamental para vivir, soñar  mientras dormimos también es. Tanto que podríamos morir si no no fuésemos capaces de soñar.

Los sueños son tan necesarios para el equilibrio biológico  y mental  como el sueño, el oxigeno, y una alimentación sólida. Alternando relajamiento y tensión psíquica el cumple una función vital. La muerte o la demencia  pueden llegar a ser falta total de sueños. El sueño es uno de los mejores agentes de información sobre el estado psíquico de quien sueña. Ofrecen a través de símbolos vivos, un cuadro de la situación  existencial  presente de la persona. Los sueños representan, para quien sueña,  imágenes generalmente  insospechadas de la propia persona. Revela  como está el yo de la persona. Lo que torna  muy complicada la interpretación de los sueños es  que nuestra mente disimula las imágenes del propio individuo, substituyéndolos por símbolos. Una cosa importante es saber que, los símbolos son aquellos que nosotros mismos construimos o usamos con significados propios y particulares. Por ejemplo, si un día, sufrimos una paliza de la madre, en lamente del  niño, bajo el impacto de la emoción la impresión  fue de una madre quedando en pie, las patas traseras, esta figura puede transformarse, para la criatura, como un símbolo  de agresividad, que, un día podrá surgir en sus sueños.

Tal vez, el papel más importante de los sueños, sea el de establecer en el psiquismo de una persona, una especie de equilibrio compensador. Asegura un auto regulación psico biológica. ¿Por qué?   Nuestras reacciones a las experiencias  son principalmente emocionales. En los sueños, ellos son aun más emocionales, pues los sueños son un agente de concentración de nuestros varios motivos subjetivos, o profundamente íntimo y particulares. Más allá de eso, cuando dormimos y soñamos, nuestras alertas mentales, lo que llamamos censuras internas, están relajadas  y de ahí nuestra mente inconsciente puede dejar  emitir las imágenes que ayudan a expresar las experiencias emocionales que vivimos cuando estamos despiertos.

Así, creamos en los sueños, un mundo en que el espacio y el tiempo no poseen poderes restrictivos y mucho menos precisan quedar limitados a las imágenes convencionales para representarlos. De esta forma, al contar una historia podemos  no usar una figura simbólica por hallarla inadecuada o impropia, mientras que, en los sueños tal imagen puede aparecer sin restricción  ninguna, porque inconscientemente  es la tal imagen  que mejor representa nuestro sentimiento.

Según recientes  pesquisas un ser humano de 60 años habrá pasado, mínimamente, 5 años de su vida soñando. Estudios científicos revelan que tenemos un mínimo de 3 sueños por noche, más podría tenerse hasta nueve. Ya quedo establecido que los sordos  y los ciegos sueñan, que los niños sueñan desde los ocho meses, y de que las personas bajo coeficiente intelectual tanto como el sueño de muy alto coeficiente intelectual.

Hacer una especie de "mezcla" de las diversas definiciones acerca de los sueños, podemos decir que son expresiones o representaciones,, espontaneas y simbólicas de cómo anda nuestra vida inconsciente,  donde guardamos las emociones vividas  y los deseos que, no siempre podemos realizar, sea porque no conseguimos o porque  fuimos impedidos.

Los sueños siempre ocuparon lugar de destaque en la vida emocional y mental de los pueblos. En Egipto antiguo se atribuía a los sueños un valor sobretodo premonitorio: los dioses crearon los sueños para indicar el camino a los hombres, cuando esos no podían ver el futuro.

Precisaban interpretar con acierto los sueños para entenderle las indicaciones de los dioses. Para los negritos de las islas Adama, los sueños  son producidos  por el alma,  que es considerada como la parte maléfica del ser. Sale por la nariz y realiza fuera del cuerpo las proezas de que el hombre toma conciencia en sueños.

Para los indios de América del Norte, los sueños están  en el origen de las liturgias, establecen la escuela de los sacerdotes y confieren  la calidad de chaman. Es de ellos  que provienen la ciencia médica, el nombre que se dará a las criaturas, y los tabús; ellos ordenan las guerras, las cacerías, las condenaciones la muerte, y la ayuda a ser administrada;

Para los bantúes del Kasai (cuenca del Congo) ciertos sueños son producidos por las almas que se separan del cuerpo durante el sueño y van a conversar con las almas  de los muertos. Esos sueños tienen carácter premonitorio referente a la persona, o entonces pueden consistir en verdad  mensajes de los muertos a los

En este punto, no podemos dejar de incluir el significado de los sueños en nuestras vidas, según la doctrina de los Espíritus.

El Libro de los Espíritus nos muestra que el Espíritu encarnado, en realidad, vive y aspira a verse libre de la materia densa. Los sueños son una forma de desdoblamiento que permite al Espíritu estos momentos de ejercicio en la esfera espiritual, aunque continúe ligado al cuerpo y, por tanto,  a la materia. El reposo del sueño es necesario  para el cuerpo  como ya vimos más arriba, más el espíritu jamás queda inactivo. Durante el sueño el tiene  la oportunidad  y el privilegio de entrar en relación más directa con los otros Espíritus. también es estimulante saber que el Espíritu  dispone de más facultades durante el sueño, esto es,  en el desdoblamiento posible  al Espíritu mientras  sueña, el puede investigar tanto su pasado  como su futuro. Por el efecto de los sueños, los Espíritus encarnados están siempre en relación  con el mundo de los Espíritus, es una especie de puerta que Dios permite que se abrá para un contacto más directo con los amigos de la Espiritualidad.  Producto de la emancipación temporal del alma  que se torna más independiente  por la suspensión de la vida en vigilia y de relaciones, los sueños son vivencias  que acaban  siendo recordados, cuando acordamos, apenas parcialmente. Muchas veces podemos recordar  fragmentos o Aun mismo enredos completos que están llenos de simbología a partir de las experiencias  que tuvimos  cuando soñábamos.

El Libro de los Espíritus explica aun, que los sueños son verdaderos en el sentido de presentar imágenes reales para el Espíritu, y que no siempre tienen relación con lo que se pasa en la vida corpórea. Una vez que el alma, durante el sueño, continúa bajo  la influencia de la materia, nuestros sueños  pueden narrar acontecimientos ligados a las ideas que tenemos en la vida activa. La dimensión del tiempo también queda muy  diferente durante el sueño. Es posible soñar una larga historia  en una fracción de segundos. Hasta aun mismo cuando “dormimos la siesta en el sofá” o cuando  en el autobús se nos cae la cabeza, es tiempo suficiente para que seamos transportados para una vivencia en  sueño.

Durante los sueños, podemos recibir orientaciones de otros espíritus, visitar Espíritus  que nos son queridos estimados  o con quienes tengamos asuntos  pendientes y, posibles a veces ser resueltos. Entramos  en contacto con parientes, personas conocidas  y amigos, contactos y conversaciones que pueden  quedarnos en la memoria como intuiciones obtenidas  en tales experiencias.

Según el Libro de los Espíritus, aun podemos provocar visitas espiritas voluntariamente, pudiendo ocurrir que, al ir a realizar una visita, en verdad ella no tenga la intención  del Espíritu cuando despierto, en ese caso prevalece de sus ideas de cuando esta en vigilia. Si las prioridades del Espíritu pueden ser diferentes mientras su cuerpo duerme, significa que en la esfera espiritual, podemos tener pendencias más urgentes `para ser resueltas y simples deseos en la vida corpórea pueden no merecer o no cumplir las intenciones realizadas.

El desdoblamiento de los sueños, puede aun servir para que Espíritus  tengan la oportunidad, hasta aun mismo de participar de Asambleas de espíritus, con fines útiles y necesarios para los mismos. El Libro de los Espíritus nos informa que hay Espíritus que pueden estudiar mientras su cuerpo duerme durante el sueño.

Por fin, es importante saber que, los Espíritus pueden comunicarse a través de pensamientos sin que estén atados  o limitados  al uso de símbolos exteriores y de lenguaje, constituyendo así una especie de lenguaje de los Espíritus que, algunas veces, experimentamos al soñar. Cuando tenemos la convicción de conversar con una u otra persona en sueño y recordamos que ella no  movía la boca mientras nos comprendíamos lo que estaba diciendo, es un ejemplo de ese lenguaje que aquí en el plano terrenal, llamamos la telepatía o conversación solo por el pensamiento.

Estas son apenas unas pocas muestras de la valorización de los sueños en varias culturas y también de los significados de los sueños que fueron acrecentados para nuestras vidas con la comprensión de la utilidad y necesidad de los sueños  a partir de las revelaciones de la doctrina Espirita. Es bueno recordar que, en todas las culturas, los sueños tienen significados propios de acuerdo a los valores de los pueblos. Para no elaborar una lista enorme  de citaciones, podemos tomar la Biblia con uno de los libros que contiene, tanto relatos de los sueños, como las interpretaciones que eran hechas en la época de los pueblos antiguos, transformando sus intérpretes en consejeros de Reyes y Faraones, más también enemigos   de gobernantes o de Dios, cuando esas interpretaciones eran erróneas o traían malos presagios.

Si usted es de aquellas personas que no se acuerda de los sueños, es una pena porque usted está siendo privado  de informaciones importantes  a su propio respecto. Se usted se acuerda con facilidad  y le gusta hablar de sueños, usted tiene en las manos optima fuente de datos a respecto de su vida inconsciente, y puede ser señal de que usted, como persona, posee un canal abierto  en su psiquismo… Eso puede   ayudar a mejorar e implementar su autoconocimiento.

“Nacer, morir, renacer aun, y progresar siempre, tal es la Ley Allan Kardec.

Eneas Martin Cañadas

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                                       MIS IDEALES ( Del Blog de Amalia )

Ni los antiguos sabios de la Grecia, ni los grandes pensadores de nuestros días, han podido escribir, ni definir una obra tan perfecta, tan llena de episodios interesantes y de sucesos conmovedores, como encierra ese volumen divino llamado hombre.

 Ni Voltaire con su profundo estudio del corazón humano, ni el célebre Rousseau con su Contrato Social, ni el inolvidable Lord Byron con sus nostalgias sublimes y sus pesimismos desconcertantes; ni el autor del Quijote, Miguel de Cervantes Saavedra; ni el primer poeta y filósofo del siglo XIX, Víctor Hugo, ninguno ha llegado a idear una tragedia con escenas tan emocionantes como se encuentra en la historia de algunos seres: que nunca la inventiva humana tiene tan vivos colores como la amarga realidad de la vida. 

Yo he leído mucho, muchísimo en este mundo. A los diez años conocí el valor de lo que leía, y durante cuatro lustros he hojeado toda clase de libros, llegando a familiarizarme tanto con las novelas, crónicas, memorias, impresiones, historias y relatos de viajes, que al comenzar a leer un volumen, por el prólogo deducía cuál sería el epílogo, hasta hacérseme monótona la lectura, y decir, como aquel indiferente del cuento, que cuando iba al teatro, se dormía tranquilo y al despertarse preguntaba a sus amigos: «¿Se casó, o se murió?» Así discurría yo al comenzar la lectura de un libro, hasta que decidí buscar la fuente de la historia humana en la frente del hombre y en la sonrisa de la mujer. 

Cada ser humano que conozco, me sirve de modelo para mis estudios; y así como los médicos de nuestros días hacen sus experimentos de inoculación en distintas especies, y hasta prueban el efecto de sus medicinas en sí mismos, como lo hizo Samuel Hahnemann, el fundador de la homeopatía, y otro sabio cuyo nombre no recuerdo en este momento, que probó en sí mismo el efecto que producía el cloroformo, yo estudio, leo y tomo apuntes en esas criaturas que, si se las mira atentamente, se ve que llevan en su rostro un jeroglífico trazado por el lápiz del dolor. 

El haberme dedicado a la propaganda del Espiritismo, me ha hecho conocer a muchísimos desgraciados. Algunos de ellos me han contado espontáneamente su historia; en otros me ha costado el trabajo de ir leyendo línea en las arrugas de su frente, en la expresión de sus ojos, en la inflexión de su voz y en la amarga sonrisa de sus labios; y he creído en verdad del Espiritismo, más que por sus fenómenos, por las influencias moralizadora que ejerce sobre el carácter, las costumbres y las pasiones humanas. Este fenómeno, producido por la comunicación de los espíritus, es superior en grado máximo a todos los aportes, apariciones, escritura directa y demás manifestaciones de los seres de ultratumba. 

Nada es más difícil en la Tierra que cambiar el modo de ser del hombre; hay vicios tan arraigados y malas costumbres tan inveteradas que dominan en absoluto, y todo lo más que en una existencia se consigue, es avergonzarse de ellas y tratar de ocultarlas. Esto ya es algo, comienza por evitar el dar mal ejemplo; pero dista mucho de ser lo suficiente para regenerarnos; mientras que la comunicación de los espíritus logra en algunos hombres lo más difícil, extirpar de raíz pequeños defectos que suelen pasar inadvertidos para el mundo pero que no por esto dejan de producir un daño inmenso al que los tiene. Se nos dirá tal vez que la mayoría de los espiritistas tienen las mismas debilidades y flaquezas que los demás hombres, ¿ quién lo duda? El Espiritismo no ha venido a hacer santos; ha venido a operar una reforma grande, profunda, trascendental, y por esta razón su trabajo es lento; que mientras más gigantesca es la obra, más tiempo se necesita para llevarla a cabo; debiéndose también considerar que el Espiritismo encuentra a la Humanidad sumergida en la más humillante degradación. Porque ¿ qué mayor envilecimiento para el espíritu que comprar su salvación por un puñado de oro, o creer que el acaso acumuló las moléculas que componen su cuerpo de igual manera que el simún amontona los granos de arena en el desierto?

 Las religiones han empequeñecido al hombre; la falsa ciencia le ha enorgullecido, y el Espiritismo tiene que luchar con los ignorantes y con los fatuos, o sea con los tontos de buena fe y los mentecatos envanecidos con su afán de saber. Entre tanta cizaña tiene que implantar el ideal de la justicia, grande y justa, y despertar en el hombre el sentimiento de su dignidad, haciéndole comprender que no hay más cielo ni más infierno que nuestras obras, buenas o malas. 

Tiene que demostrar el Espiritismo al obcecado materialista, que su yo pensante no es un poco de fósforo que en mayor o menor cantidad llena las cavidades de su cerebro, puesto que éste, en un momento de crisis, queda inerte, la masa cerebral pierde su vibración y la rápida descomposición de la materia orgánica disgrega el cuerpo, mientras que el entendimiento y la voluntad que le hicieron funcionar siguen vibrando, el yo sobrevive revestido de otra envoltura menos grosera, pensando, sintiendo y queriendo.

 Como se ve, el Espiritismo está llamado a verificar una revolución completa en todas las clases sociales, en todas las esferas de la vida, en todas las inteligencias, y obra tan colosal, no se puede consumar en un corto número de años: que le cuesta mucho al hombre separarse de vicios que le complacen y de religiones que le tranquilizan con sofismas que parecen verdades mientras no se analizan a la luz de la razón. ¿Hay nada más cómodo que pecar, confesarse, recibir la absolución de nuestros pecados, y volver a pecar en la seguridad de que la bendición de un sacerdote ha de abrirnos las puertas del cielo? ¿Y qué diremos de los materialistas, que nada encuentran en la creación superior a ellos, creyéndose modestamente el cerebro del Universo? ¿Y dónde hay seres más felices que los indiferentes, que no se preocupan por nada? Decirles que estudien y averigüen por qué nacieron, es exigirles un inmenso sacrificio. 

El estudio del Espiritismo viene indudablemente a destruir la paz de algunas existencias que se deslizan en la molicie; flores inodoras, árboles improductivos. El Espiritismo viene a despertar grandes remordimientos, a destruir muchas ilusiones engañosas; es el microscopio con el cual vemos nuestras ocultas miserias; como son nuestra envidia, nuestro solapado amor propio, nuestra falsa modestia, nuestra sorda murmuración, nuestra escondida avaricia y otros innumerables defectos, consecuencia natural de las anteriores causas, que en gran número pasan inadvertidos en la sociedad, como pasan a nuestra vista los millones de infusorios que se agitan en una gota de agua. Para estudiar el Espiritismo, se necesita que el espíritu esté preparado para ello, bien por el progreso adquirido, bien porque sus muchos desaciertos le hayan colocado al borde del abismo, y tomando en serio el adagio a grandes males, grandes determinaciones, se decida a cauterizar las profundas llagas que le hacen vivir muriendo. 

Es indudable que se necesita mucho valor para leer uno en sí mismo; por eso abundan los espiritistas convencidos, y escasean los que hacen firme propósito de corregirse de sus vicios cuanto les es humanamente posible; mas es innegable que el verdadero espiritista, el que se propone ir por la senda del progreso, llega a poseer virtudes que forman en torno suyo una esplendente aureola, para lo cual cuenta con convicciones profundas, de que la generalidad carece. Mucho ha de influir eficazmente en el hombre dotado de buena voluntad y de regular criterio, obtener por sí mismo o por otro comunicaciones razonadas, en las cuales le aconsejen los espíritus el cumplimiento estricto de su deber, y sin falsa adulación le den el parabién por sus buenos deseos, y sin acritud le reconvengan cuando caiga, diciéndole que son muchos los seres que toman parte en sus penas y en sus alegrías. 

La certidumbre de ser amado y constantemente protegido es un valioso estímulo para la virtud y el progresó espiritual, estímulo que casi sólo los verdaderos espiritistas pueden tener; porque son los que tocan la realidad de la vida, libro inédito que enseña más que todos los volúmenes que se guardan en las bibliotecas de la Tierra. Ahora bien: ¿es beneficiosa la influencia del Espiritismo? ¿Estamos locos los que creemos que cuando se vulgarice su estudio muchas almas enfermas recobrarán la salud, y muchos crímenes dejarán de cometerse? No somos locos, no; los días de la luz se acercan; la aurora del progreso ilumina el horizonte del porvenir. Los espiritistas son los centinelas avanzados, cuyo ejemplo estimula y dice: «Luchad, luchad con denuedo, y venceréis vuestras imperfecciones como las hemos vencido o tratamos de vencerlas nosotros.  ¡Querer es poder! Seguid nuestras huellas y os llevaremos por un sendero de flores que nunca se marchitan, al conocimiento de las verdades supremas.» ¡El infinito nos espera! ¡En nuestra patria no habrá aurora ni ocaso: en ella brillará siempre el sol esplendoroso del amor universal! 

Escrito por Amalia Domingo Soler. Publicado en su libro “Cuentos Espiritistas”

( Tomado de Zona Espírita)

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