viernes, 20 de marzo de 2020

Los niveles de conciencia

   INQUIETUDES ESPÍRITAS

1.- Unión y unificación del Espiritismo
2.- La revelación del mundo
3.- Los niveles de conciencia
4.- Lo que supone cuando se descubre el Espiritismo



                                                        *************************






                 UNIÓN Y UNIFICACIÓN DEL                                     ESPIRITISMO

  El surgimiento en el espiritismo brasileño del llamado Pacto Aúreo,  marca un periodo hoy mayoritariamente superado. Desde aquella época hasta aquí, Kardec y su obra ganaron un significativo espacio, en el que ya no es posible convivir con las tendencias mistico-religiosas de género roustanguista o semejantes. 

   Estudiar y comprender a Kardec, implica obligatoriamente liberar el movimiento espírita de tantos mitos que contribuyeron a generar graves distorsiones doctrinarias, y en consecuencia, a generar serios equívocos institucionales, en sentido contrario a las recomendaciones del fundador del Espiritismo.


  Estudiar a Kardec conduce, naturalmente, a reconocerlo como un auténtico libre-pensador que siempre se guió por la racionalidad filosófica. Comprender su doctrina permite situarlo en un terreno que no concuerda con la forma y con el actuar religioso en que pontifican jerarquías investidas de autoridad para dar la mejor y definitiva interpretación, normalizando procedimientos y cercenando la libertad de las instituciones y personas,  


  La CEPA, que en esa ocasión daba sus primeros pasos en busca de la unión de los espíritas del Continente, teniendo como referencia central a la figura de Allan Kardec, ya entonces se dio cuenta, de que unión no es lo mismo que unificación. La unión siempre es deseable y deriva de la "comunión de pensamientos", formadora del lazo que naturalmente se establece entre aquellos que identifican la existencia del espíritu, su inmortalidad y comunicabilidad, como base de una filosofía en constante progreso, en un clima de libertad y de fraternidad. Y la unificación, de nítida inspiración eclesiática, impone normas, creencias y procedimientos que, si no son observados, justifican el apartamiento o la exclusión de aquellos que osen manifestar discordancias, incluso en puntos no fundamentales de la doctrina. 


   Felizmente, en nuestro medio, gracias al avance de una cultura kardecista, fruto del mejor y más profundo estudio de la obra del fundador del espiritismo, el péndulo del tiempo apunta más a la unión por el estudio y la investigación, que la unificación por la creencia, que va de arriba hacia abajo.


(La Redacción de CEPA)


                                                        *****************************



        LA REVELACIÓN DEL MUNDO

    El origen del mundo se viene revelando a los hombres lentamente, a través de los milenios en los que se sucedieron las generaciones. Pero la verdad es que solo en este siglo, gracias al extraordinario adelanto de las ciencias, su realidad comienza a revelarse ante nuestros ojos.  

Cuando el hombre apareció en la Tierra el mundo ya era viejo, pues tenía muchos millones de años. Ese animal curioso, dotado de inteligencia indagadora, comenzó por conocer solo la epidermis del planeta, incluso en una muy reducida escala.Viviendo y multiplicándose entre misterios y asombros, las generaciones se formaron una imagen del mundo que hoy se nos muestra como un cuadro fantástico de un pintor paranormal. Revelaciones simbólicas fueron hechas a los hombres sobre el origen del mundo, su naturaleza y su finalidad. Las más complejas y significativas permanecieron en las tradiciones de los pueblos y en sus  escrituras sagradas. Entre ellas se destaca la del libro bíblico Génesis, atribuido a Moisés y adoptado por las iglesias judaicas y cristianas como verdad indiscutible.

Por otra parte, gracias a la extraordinaria capacidad intuitiva de los griegos, surgieron las primeras explicaciones humanas y racionales de los orígenes. Con Leucipo y Demócrito, por ejemplo, emergió en Atenas la idea del átomo, que sería una partícula infinitesimal e indivisible de la cual serían hechas todas las cosas. A la idea judaica de que Dios creó al mundo de la nada, solamente con su voz, con su verbo, los griegos opusieron la idea del  átomo,del agua, del fuego y del aire, y la notable concepción matemática e Pitágoras, según la cual Dios era el número Uno que se cernía solitario en lo inefable y, de repente, por un estremecimiento, produjo el número tres y desencadenara la década, la secuencia de números del uno al diez, formando así el mundo.

Estas ideas conflictivas se fueron reduciendo con el avance cultural a dos concepciones opuestas: la religiosa, considerada definitiva y la única verdadera, y la científica, basada en hipótesis que exigían largas investigaciones para su comprobación. En el siglo 19 el problema se mantenía en esa misma situación. La Iglesia sustentaba como verdad la supuesta revelación dada a Moisés por el mismo Dios, y las ciencias se empeñaban en las investigaciones posibles de la verdad oculta. La mayoría de las personas cultas rechazaba la explicación bíblica o la tomaba solo como simbólica, aguardando una futura exégesis de esa simbología. La masa popular fluctuaba entre una y otra posiciòn, pero con una tendencia cada vez mayor a la negación de  Dios y a la aceptación de las ideas materialistas. En ese tiempo se desencadenaron las manifestaciones espíritas espontáneas en los Estados Unidos de América y Europa, llamando la atención de los científicos hacia esos hechos extraños. El profesor Denizard Rivail, bachiller en ciencia, pedagogo y discípulo de Pestalozzi, director de estudios de la Universidad de Francia, en donde sus obras pedagógicas habían sido adoptadas, se interesó por el tema a instancias de sus amigos, quedando su atención aprisionada por el mismo. Se dedicó primeramente a la observación de los fenómenos, sobre los que formuló varias hipótesis materialistas. Verificó luego, en las famosas experiencias con las niñas Baudin, una de catorce y otra de dieciseis años, que era innegable la intervención de una inteligencia extraña en tales manifestaciones. Entonces se entregó a serias investigaciones científicas, y consiguió demostrar que la inteligencia que producía esos fenómenos era humana. La continuidad de sus investigaciones científicas probó que los manifestantes eran espíritus de personas fallecidas.

Fundó la Sociedad Parisiense de Estudios Espíritas, para dar regularidad y mayor precisión a las actividades de investigación. En 1857 lanzó  El Libro de los Espíritus, obra con la cual fundaba el Espiritismo. De tal manera se inició una fase nueva y dificil en el terreno de las ciencias. La posición materialista de estas, decididamente volcada al estudio de la realidad sensorial, las condujo a rechazar la Ciencia Espírita y a condenarla por carecer de bases científicas.

 Pero Kardec declaró la incompetencia de las ciencias materialistas para opinar sobre el asunto y prosiguió con su labor en las investigaciones y divulgación de sus resultados a través de la Revista Espírita, que fundó con esa finalidad.  Grandes científicos y renombrados escritores, exponentes de la cultura francesa, se interesaron por los fenómenos, apoyándolos individualmente. En la Sociedad de París, Camilo Flammarión, director del observatorio de  Jouvisy, que era médium psicógrafo, recibió numerosos mensajes de Galileo sobre cuestiones de astronomía. El famoso autor teatral Victorien Sardou, que  jamás había sido diseñador, ilustraba con dibujos mediúmnicos las informaciones de los Espíritus sobre otros mundos del espacio cósmico.

Fue en tal ambiente de entusiasmo por la investigación espírita y sus resultados positivos, que el profesor Denizard Rivail, ya entonces conocido como Allan kardec, decidió elaborar una obra  sobre la Génesis, la creación de la Tierra , en vez de lo descrito por la Bíblia,a pesar de tratar en ella sobre esto, comparándolo con la nueva concepción del origen planetario que surgía de las investigaciones y de la Doctrina Espírita. En enero de 1868 lanzó esta obra en París, originando muchas críticas, pero recogiendo también muchos aplausos y aprobaciones. La Génesis fue la obra que cerró la Codificación del Espiritismo.

Un año después Kardec falleció, quedando su cuerpo en el cementerio de Pére Lachaise y regresando al Mundo Espiritual que reveló científicamente a los hombres. Hasta hoy su tumba es la única del famoso cementerio que se mantiene permanentemente´cubierta de flores, por la devoción de los franceses, belgas y demás personas de otros países vecinos de Francia. Sus admiradores recompensan así, con permanentes ofrendas florales, los espinos que él recogió en la Tierra, como hombre pobre y dedicado a los estudios e investigación de los fenómenos espíritas.

El Espiritismo dio origen a las hoy llamadas investigaciones de lo paranormal. La antígua Parapsicología alemana, la Ciencia Psíquica inglesa, la Metapsíquica de Richet, en la misma Francia, y la Parapsicología actual nacieron de las entrañas de la Ciencia Espírita y confirman, en este siglo, la plena validez de esta ciencia.

Nota: El cuerpo mortal del Codificador, fallecido el 31 de marzo de 1869, recibió sepultura provisional en el cementerio de Montmartre, el 2 de abril de 1869, siendo exhumado el 29 de marzo de 1870 y llevado al de Pere Lachaise, en el que al año de su desencarnación, se inauguró el dolmen que lo cobijó definitivamente. 


-Jose Herculano Pires-
( Tomado de la Revista Fraternidad Cristiana Espírita nº  23 /89)


                                          **************************************

                                                  



                               NIVELES DE CONCIENCIA
Desde que el alma descubre la necesidad de cambiar hacia el bien para apartar de su vida el sufrimiento y la ignorancia comienza el camino de su ascensión consciente. Hasta ese momento ha sido maltratada por sí misma, llevada por las circunstancias de sus propios errores, condicionada por sus actos equivocados, que vida tras vida le presentan las consecuencias y responsabilidades de las maldades cometidas así como los beneficios del bien realizado.
No obstante después de este punto de inflexión en que, unas veces hastiada del sufrimiento y las aflicciones que su obcecación en el error le produce, y otras despertando a las bondades de la asunción de sus propias responsabilidades y a la incuestionable perfección de la justicia divina que ahora ya comprende mejor en cuanto a las desigualdades humanas, se encuentra en el momento óptimo de comenzar a caminar conscientemente.
La diferencia que el alma experimenta entre avanzar obligada por la fuerza de las leyes de justicia divina, a hacerlo por propia voluntad, una vez comprendida y aceptada la planificación divina que todos los espíritus debemos recorrer, es enorme. Esta última opción le permite ser consecuente con sus proyectos y responsabilidades tanto en el espacio, sin materia, como en las reencarnaciones que a partir de ese momento llevará a cabo.Para ello se preparará adecuadamente en el intervalo que permanece en el espacio entre una y otra encarnación. 
Aquí el espíritu hace acopio de conocimientos, de experiencias, de valoraciones, se prepara con profusión, se prueba en trabajos y objetivos, a fin de que cuando llegue el momento de cumplir con una nueva misión en la tierra no pierda de vista el objetivo final: el progreso de su espíritu cada vez más conscientemente, aceptando con ello las aflicciones que le correspondan superar, las pruebas que le sobrevengan y los retos que deba enfrentar, pues ya se vuelve consciente de que de este esfuerzo, de esta abnegación, este trabajo incansable y muchas veces incomprendido o desagradecido en la tierra la única beneficiada es su propia alma; los niveles de conciencia que irá alcanzando y que le ayudarán a ver con claridad y lucidez el camino que tiene por delante. Aunque este sea difícil y complicado de recorrer.
Como el tiempo es relativo, los niveles de conciencia que el alma alcanza en su ascensión son muchos, pero a modo de ejemplo simplificaremos a continuación algunos de ellos para darnos cuenta no de lo que ya hemos superado, sino de todo lo que nos queda por alcanzar. Existen muchas clasificaciones a este respecto, sin embargo, aquí y ahora vamos a detallar someramente cuatro  categorías referidas a cuando tenemos cuerpo físico; aquellas otras que alcanza el alma en el mundo espiritual -en estados superiores- son todavía para nosotros difíciles de alcanzar y comprender.
Usaremos la clasificación realizada por el científico Robert De Ropp, y la acompañaremos de las reflexiones al respecto de la mentora Joana de Ángelis (*) por intermedio de la psicografía de Divaldo P. Franco.
1.-“Conciencia de sueño sin sueños” Es el ser fisiológico, que únicamente atiende a sus sentidos, placeres sensoriales y necesidades inmediatas, básicas, (comer, dormir, reproducirse, etc.) Joana de Ángelis define este estado con esta frase: “Los fenómenos orgánicos automáticos se exteriorizan sin conocimiento de la conciencia”
 2.-“Conciencia de sueño con sueños” Es la persona que se ha dado cuenta de que la “vida humana” es algo más que las funciones básicas de un primate. No obstante, todavía los impulsos y deseos de su inconsciente controlan sus acciones, pero empieza a despertar y ya es capaz de distinguir mejor el bien del mal. Ya se siente culpable cuando transgrede sus propias creencias, y esto le permite reflexionar sobre sus acciones.
3.-“Conciencia de sueño acordado (Identificación)” Es aquél que ya se va liberando del ego, y dándose cuenta de que existe una realidad inmortal, sabe que posee una serie de valores internos que debe de activar. Al respecto de este nivel Joana de Ángelis afirma: “En este nivel, la actitud del ser humano para consigo mismo se caracteriza por una continua identificación con  todo lo que reclama su atención, es decir, sus pensamientos, deseos, imaginación, etc….. y la determinación personal junto a su voluntad conduce al ser a ideales de ennoblecimiento, descubriendo la finalidad de su existencia..”
4.-“Trascendencia del yo” Es un estado superior de conciencia en el que el ser se des-identifica de su persona, del colectivo, dejándose conducir por su conciencia luminosa. Son aquellos hombres y mujeres que entregan sus vidas por ideales que benefician a toda la humanidad. “El hombre experimenta este nivel de conciencia por alguna emoción religiosa, por influencia de un trabajo artístico, por crisis que surgen en situaciones de peligro o dificultad” (Joana de Ángelis).
5.-“Conciencia Cósmica” En este nivel el ser actúa en perfecta identificación con la Conciencia Cósmica, con los ideales superiores de la vida. El mejor ejemplo de este estado es el de Jesús cuando afirma: “Yo y el Padre somos Uno”Esta frase no quiere decir que Jesús era Dios -como erróneamente se interpreta- sino que su conciencia se vinculaba a la Conciencia Cósmica, al haber superado todas las etapas evolutivas.
Estos niveles son la trayectoria evolutiva del alma respecto a su conciencia que conduce a un hombre nuevo: “Un Ser consciente de sí mismo”cuya alma ha superado la etapa instintiva e intelectiva, que controla sus emociones y se entrega a sus semejantes. Así nuestra alma va forjando su conciencia en la auténtica realidad espiritual que le prepara en un futuro para otra etapa más elevada: la intuitiva o inspirativa; propia de los grandes seres que ya pasaron por la tierra y dejaron constancia de su realidad inmortal por encima de las vicisitudes de los mundos inferiores que superaron con notoriedad y ejemplo.
Esta realidad no es utópica, pues los grandes maestros (Buda, Krishna, Jesús, Francisco de Asís, Sócrates, etc.) que vinieron en todas las épocas ya demostraron con su ejemplo que se pueden alcanzar todos estos niveles de conciencia superior. Ellos, conscientes de que todos somos creados iguales en nuestro espíritu inmortal, y que lo único que nos diferencia es el grado de elevación espiritual alcanzado, trajeron un mensaje para todos los que habitamos este planeta: “lo que hacemos vosotros también podéis hacerlo”.
Nuestra alma necesita pues elevar su nivel de conciencia, y ello se consigue trabajando en el bien, con renuncia a nuestro ego, aprendiendo a amar y perdonar, conociéndonos y venciéndonos a nosotros mismos. Creciendo en elevación moral.
 Antonio Lledó Flor- Amor, Paz y Caridad
(*) Joanna de Ângelis – Divaldo Franco – Libro: “Reflejando el Alma”
                                                                ************************************


 LO QUE SUPONE CUANDO SE DESCUBRE EL ESPIRITISMO

   Al final de su obra La Nueva Revelación, sir Arthur Conan Doyle se eleva a altas
consideraciones, y hace observar la influencia que ejercen los fenómenos sobre el
pensamiento y el corazón de los hombres.. Y termina con estas hermosas palabras de
Gerald Massey 
                           " El Espiritismo ha sido para mí, como para otros  muchos, el
ensanchamiento de mi horizonte mental y la penetración del cielo, la transformación dela fe en hechos reales; sin él, no puede compararse la vida sino a un viaje efectuado en el fondo de la bodega de un barco, con las escotillas cerradas, en el cual el viajero no percibiese otra claridad que la de una vela, y al cual se le permitiese de pronto, en una espléndida noche estrellada, subir al puente y contemplar por vez primera el prodigioso espectáculo del firmamento resplandeciente de la gloria de Dios"..

Espíritus y Médiums
León Denis

                                             ****************************************



No hay comentarios: