INQUIETUDES ESPÍRITAS
1.- Las adicciones a la luz del Espiritismo
2.-Los espíritas son libres pensadores
3.-Bienaventurados los pobres de espíritu
4.- Jeremías y los falsos profetas
*************************************
El
Espiritismo nos trae el conocimiento de sí mismo como clave para la elevación
moral del alma. Para esto tendremos que negar todos nuestros defectos de
tal manera que purifiquemos nuestro espíritu a través de la reforma
íntima. Pero además del alma, también debemos cuidar el cuerpo, ya que
ambos están íntimamente ligados. en este artículo abordaremos las
consecuencias espirituales de las adicciones en general.
Normalmente los vicios de la humanidad son completamente materiales. Cosas como el sexo, las drogas, la comida, el lujo, el consumismo, etc., se vuelven cada vez más intensas y presentes en el día a día de las personas. Tales vicios provienen de nuestra naturaleza imperfecta, que aún apunta a lo material antes que a lo espiritual.
De modo que nos volvemos cada vez más dependientes de lo que nos agrada. “Porque donde esté vuestro tesoro, allí estará también vuestro corazón”. (Mateo 6:21), tales palabras son la primera advertencia de Dios a través de sus mensajeros sobre la importancia de saber: ¿Qué amo?
Si
la respuesta a esta pregunta es una cosa material, es muy probable que todavía
esté demasiado apegada a la materia. Este hecho se ejemplifica en el día a
día de los encarnados. generalmente uno ama las posesiones y posee a las
personas.
El
problema de esta afirmación sobre los bienes materiales y los placeres de la
carne es que los placeres de la carne son transitorios y por tanto merecen un
lugar inferior al que solemos asignarles. De ahí que tengamos el problema
de la desvalorización de lo espiritual en relación con lo material.
Adicciones perjudiciales para el organismo
Para
mantener el cuerpo carnal es necesario alimentarse, socializar, reír y cuidar
la salud. Sin embargo, cuando aplicamos demasiada energía a tales
factores, terminamos volviéndonos adictos a los placeres que estos actos nos
brindan.
Dios
puso placer en el sexo, la comida y las actividades que nos gustan para que
podamos practicarlas con el fin de perpetuar la especie, preservar nuestro
sistema corporal y socializar. Note que todos son procesos de las leyes de
Dios, la ley de la sociedad, la ley de la reproducción, la ley de la
conservación, etc.
703. ¿Para qué dio Dios a todos los seres vivos el instinto de
conservación?
“Todos deben
contribuir a los designios de la Providencia; por eso Dios les dio la
necesidad de vivir. Y, además, la vida es necesaria para la perfección de
los seres; lo sienten instintivamente, sin darse cuenta”.
711. ¿Es el uso de los bienes de la tierra un
derecho de todos los hombres?
“Este derecho es consecuencia
de la necesidad de vivir. Dios no podría haber impuesto un deber, sin
haber dado los medios para cumplirlo.”
712. ¿Con qué
propósito ha puesto Dios una atracción sobre el disfrute de los bienes
materiales?
“Incitar al hombre al cumplimiento de su misión y, también, a
experimentarlo, a través de la tentación”.
a) ¿Cuál es el propósito de esta tentación?
“Desarrolla tu razón, que debe preservarte de los excesos”.
Si al hombre sólo se le animara a usar los bienes de la tierra,
con miras a la utilidad, su indiferencia podría quizás comprometer la armonía
del Universo: Dios le dio la atracción del placer, que lo impulsa a cumplir los
designios de la Providencia. Pero, por esta misma atracción, Dios también
quiso experimentarlo, a través de la tentación, que lo arrastra al abuso, del
cual su razón debe defenderlo.
(El Libro de los Espíritus, 2ª parte, cap. V)
El
placer material que se siente en estas actividades, como hemos visto, se debe a
la necesidad que tiene el hombre de buscarlas para conservarse en la
vida. El problema es que, por egoísmo y debilidad moral, el hombre se
entrega a vicios superfluos e innecesarios. Un buen ejemplo son los
cigarrillos, una adicción creada por el orgullo humano, así como las drogas en
general, que apuntan a la búsqueda de sensaciones pasajeras que espiritualmente
causan enormes problemas.
Como
estudiamos anteriormente, el periespíritu tiene una conexión con el cuerpo físico y en él “imprime” todas nuestras actitudes de
consecuencias físicas y espirituales. Si bebemos y llegamos a nuestro
hígado físico, una zona similar en nuestro periespíritu sufrirá una lesión, si
fumamos y enfermamos nuestros pulmones, sentiremos al desencarnar los
síntomas de ahogo y dolor en la zona espiritual que sería los
pulmones. Todas estas actitudes que hieren nuestro periespíritu, serán
sentidas por el espíritu al pasar al mundo espiritual.
Las
exageraciones en la alimentación, así como las exageraciones en la búsqueda del
cuerpo perfecto, haciéndonos rehenes de ello, también causan algunas
impresiones negativas en el periespíritu. Los esteroides anabólicos, por
ejemplo, deforman y crean una inflamación dañina para el cuerpo y esto se
refleja en el espíritu. Según André Luiz, en nuestra casa, ciertos
comportamientos creaban una especie de glomérulo negro, que atacaba el aparato
físico del espíritu a través del periespíritu. Estos glomérulos estaban
directamente ligados al sistema nervioso, de tal manera que los pensamientos de
la criatura al entregarse a esos placeres carnales fueron los que los crearon.
Aparte
de las drogas, que tienen un efecto más violento y rápido tanto en el organismo
material como en el periespíritu. Tales consecuencias pueden causar la
animalización del espíritu debido a los miasmas adquiridos por los pensamientos
y los compañeros espirituales que han creado el uso de alucinógenos y
adicciones.
713. ¿Tiene el goce límites fijados por la Naturaleza?
“Sí,
para mostraros el límite de lo necesario; pero con tus excesos te sacias y
te castigas.
714. ¿Qué pensar del hombre que busca, en los excesos de toda
especie, un refinamiento para sus goces?
"¡Pobre
compañero! ¡Tengamos piedad de él y no lo envidiemos, porque está muy
cerca de la muerte!
a)
¿Es la muerte física o la muerte moral lo que le acerca?
"De
ambos."
El hombre que busca, en los excesos de todo
tipo, un refinamiento del goce se sitúa por debajo del animal, porque sabe
detenerse cuando su necesidad está satisfecha. Abdica la razón que Dios le
ha dado como guía, y cuanto mayores son sus excesos, mayor preponderancia da a
su naturaleza animal sobre su naturaleza espiritual. Las enfermedades, las
dolencias, incluso la muerte, que son consecuencia del abuso, son al mismo
tiempo el castigo por la transgresión de la ley de Dios.
716. ¿ No ha trazado la Naturaleza, a través de nuestra
organización, el límite de nuestras necesidades?
“Sí, pero el hombre es
insaciable. La naturaleza ha trazado el límite de sus necesidades a través
de su organización; los vicios, sin embargo, han alterado su constitución
y le han creado necesidades que no son reales.”
El vampirismo y la obsesión por la adicción
A
través de nuestras actitudes atraeremos a un tipo específico de compañeros
espirituales. El promiscuo atraerá espíritus de esta cepa, el fumador
atraerá espíritus ligados al tabaquismo, etc. Tales espíritus se vuelven
tan dependientes de los encarnados para mantener sus vicios que ellos mismos
comienzan a influenciar a los encarnados para que “vayan a tomar algo” o
practiquen actos que van más allá del necesario y saludable hábito. Tales
hábitos de mala adaptación pueden crear una situación obsesiva que es difícil
de cambiar.
Cómo evitar las adicciones
Parece
innecesario, pero la mayoría de nosotros tenemos algún tipo de adicción que en
mayor o menor grado es perjudicial para nuestra salud, por lo que debemos tener
en cuenta que necesitamos conocernos a nosotros mismos para que podamos notar
nuestros defectos y nuestras dificultades. Habiendo notado esto, debemos
trabajar en ellos, lo que significa: luchar contra los arrastres negativos.
Si sabemos cuáles son nuestras dificultades, tendremos más posibilidades de
comprenderlas y con ello aplicaremos toda nuestra energía y voluntad para que tengamos
hábitos más sanos y compatibles con los espíritus evolutivos que somos.
Siempre es bueno recordar que existen teléfonos y entidades que
ayudan en la lucha contra el tabaquismo, las drogas y el
alcoholismo. Dejaremos algunos de ellos al final. Aparte de eso,
todos pueden y deben buscar ayuda en los centros espíritas para tratamientos de
curación que pasen concomitantemente con la búsqueda de profesionales de la
salud que puedan ayudar en la lucha contra nuestras debilidades
materiales. ¡Que Jesús nos ayude hoy y siempre! ¡Mucha paz para
todos!
( Desconozco la autoría de este buen trabajo)
*******************************

LOS ESPÍRITAS SON LIBRES
PENSADORES
En el articulo "El libre pensamiento y la libertad de conciencia" dice Kardec: "El libre pensamiento, en su acepción mas amplia, significa: libre examen, libertad de conciencia y fe raciocinada; él simboliza la emancipación intelectual, la independencia moral, complemento de la independencia física; Él no quiere mas esclavos del pensamiento, ni esclavos del cuerpo, porque lo que caracteriza el libre pensador, es que piensa por si mismo y no por los otros, en otras palabras, que su opinión le pertenece particularmente.
Puede, pues, haber libres pensadores en todas las opiniones y en todas las creencias. En ese sentido, el libre pensamiento eleva la dignidad del hombre; le hace un ser activo, inteligente, en lugar de una máquina de creer.
Veamos que de esta cita, emerge el entendimiento de que el libre pensamiento es fe raciocinada, manifestación clara de la libertad de conciencia, que asiste todas las criaturas, como un derecho inalienable y expresión de las divinas leyes.
El libre pensar, dignifica al individuo, pues lo mismo abandona la indigencia intelectual de la creencia ciega y al edificar en la práctica la propia autonomía, aprende a pensar con criticidad, libertándose de la pereza mental que tiene sometido a multitudes, a una manera mediocre de ser y de estar en el mundo.
No se trata de auto-suficiencia, es una simple actitud de superación frente a la postura de adiestramiento y condicionamiento ante la tutela ajena, históricamente producida en el seno de las teologías dogmáticas.
El Espiritismo, como propuesta filosófica, que sale a borbotones del mundo de los Espíritus, sugiere al adepto esclarecido, la práctica consciente de la libertad de pensar, una actitud filosófica sin miedo ni culpa , madurando su propia reflexión sobre el contenido que la Doctrina presenta, mediante el estudio perseverante, racionado y serio de los textos de Kardec.
Nadie extrañe la naturalidad con lo que podemos lidiar, con la expresión "libre pensador" en la comunidad espirita, pues, el maestro Allan Kardec, al hacer un balance sobre el movimiento espirita de 1867, esclarece que podemos entender como libres pensadores, a todas las personas "que no se sujetan à la opinión de nadie, en materia de religión ,ni de espiritualidad".
Destaca todavía, en otro texto, que esta calificación, no especifica ninguna creencia en particular, pero que podría ser aplicada a los distintos matices del espiritualismo racional, y en ese caso, "todo hombre que no se guíe por la fe ciega, es, por esto mismo, un libre pensador; por eso este título, LOS ESPÍRITAS SON LIBRES PENSADORES."
Luego, recordemos que la fe raciocinada, profesada en el Espiritismo, preconiza la libertad de pensar y el libre examen, actividad intelectual indispensable de un adepto sincero y lúcido, con fin que desarrolle una actitud filosófica definida, delante de la Doctrina de los Espíritus.
Se concluye, de este modo, que el espirita antes de ser un creyente, deberá constituirse en un libre pensador, porque solamente le merece creencia aquello que comprende racionalmente y por lo tanto tiene convicción.
[*]
Revista Espírita, fevereiro de 1867.
[7]
Revista Espírita, janeiro de 1867.
Sacado del articulo "Por Uma Atitude Filosófica" de Vinícius Lousada
Aportación y Adaptación:
Oswaldo E. Porras Dorta
**********************************
BIENAVENTURADOS LOS
POBRES DE ESPÍRITU
1 Bienaventurados los
pobres de Espíritu, porque de ellos es el reino de los cielos. (San Mateo, cap.
V..
La incredulidad
se ha ensañado en esta máxima. «Bienaventurados los pobres de Espíritu,» como
en muchas otras cosas, sin comprenderla. Por pobres de Espíritu, Jesús no
entiende los hombres desprovistos de inteligencia, sino los humildes: dice que
el reino de los cielos es para ellos, y no para los orgullosos.
Los hombres de ciencia
y de genio, según el mundo, generalmente tienen tan alta opinión formada de sí
mismos y de su superioridad, que miran las cosas divinas como indignas de su
atención; sus miradas concentradas en su persona no pueden elevarse hasta Dios.
Esta tendencia a creerse superiores a todos, les conduce muchas veces a negar
lo que, no estando a sus alcances, podría rebajarles, a negar hasta la
Divinidad; o si consienten en admitirla, le disputan uno de sus más hermosos
atributos: su acción providencial sobre las cosas de este mundo, persuadidos de
que ellos solos bastan para gobernarlo bien. Tomando su inteligencia por la
inteligencia universal, y juzgándose aptos para comprenderlo todo, no creen
posible nada de lo que no comprenden; cuando han pronunciado su sentencia, para
ellos no tiene apelación. Si se niegan a admitir el mundo invisible y un poder
extrahumano, no es porque no esté a sus alcances, sino porque su orgullo se
subleva a la idea de una cosa que no pueden dominar y les haría bajar de su
pedestal. Este es el motivo por el que solo tienen sonrisas de desdén para todo
lo que no es del mundo visible y tangible; se atribuyen sobrado genio y ciencia
para creer en cosas buenas como los cándidos, según ellos, teniendo por pobres
de Espíritu a todos los que las toman por lo serio. Sin embargo, por más que
digan, será preciso que entren como los otros en ese mundo invisible del que se
ríen; entonces será cuando abrirán los ojos y conocerán su error. Dios, que es
justo, no puede recibir con el mismo título al que ha desconocido su poder y al
que se ha sometido humilmente a sus leyes, ni hacerles una parte igual.
Diciendo que el reino
de los cielos es para los humildes, Jesús entiende que no se admite a nadie sin
la sencillez del corazón y la humanidad de Espíritu: que el ignorante que
poseerá estas cualidades será preferido al sabio que cree más en sí que en
Dios. En todas las circunstancias coloca la humildad en la categoría de las
virtudes que aproximan a Dios, y el orgullo entre los vicios que alejan de Él;
por una razón muy natural, porque la humildad equivale a un acto de sumisión a
Dios, mientras que el orgullo es rebelarse contra él. Vale, pues, más, para la
futura felicidad del hombre, ser pobre de Espíritu, en el sentido del mundo, y
rico en cualidades morales.
EL EVANGELIO SEGÚN
ESPIRITISMO.- Capítulo VII
Allan Kardec
******************************************
Jeremías y los falsos profetas
Encontramos con este título, este pasaje en la
Bíblia, cap.XXIII, vers 16,17,18,21,25,26 y 33.
El tema, como claramente señala el
epígrafe, gira en torno a los falsos profetas, pero de antemano ruego se
me disculpe porque antes parecerá que me desvío del tema, y en principio así
es, pero es algo que en este pasaje sale a colación, y creo interesante e
importante comentar primeramente lo que sigue:
Lo primero que llama mi atención al leer el
citado pasaje bíblico, es cuando el Profeta Jeremías se refiere a Dios como:
“Señor de los ejércitos”. No podemos interpretar ni menos aún
imaginar a Dios bajo esa denominación literal, pues da la sensación de que
estamos hablando de un dios menor, parcial y amigo de unos, pero belicoso y
enemigo de otros , ( cuando todos tenemos el mismo origen y somos hijos del
verdadero y auténtico Dios).
Ese “señor de los ejércitos” que
Jeremías tomaba por Dios, y que igualmente aparece en muchos momentos y
citas por todo el Antiguo Testamento como un dios, señor
temible, celoso y vengativo, que exigía sacrificios de sangre y que otras
veces incluso mataba él mismo o mandaba matar; que tenía poder para abrir el
mar y secarlo con un fuerte y cálido viento dejando el camino seco y
estable al pueblo hebreo para su huida de Egipto y que después tuvo a
todo ese pueblo elegido, cuarenta años vagando de un lado a otro por un
desierto mientras lo mantenía y alimentaba cada día arrojándole alimento
desde una “nube” ( el misterioso “maná” y codornices ). ( ¡Qué Dios más
raro, y qué comida tan poco variada ¿ no ? ). Está claro que no se trataba del
verdadero Dios que más tarde nos mostraría Jesús..
Entonces, si no era de verdad Dios, ¿ quién era
ese misterioso y terrible Jehová?. Ante este extraño personaje que por su
extraordinario poderío era tomado por dios , tal como aparece en los
relatos bíblicos del Antiguo Testamento, no me cabe sino pensar que muy bien
pudo tratarse del Mando supremo de una nave de origen extraterrestre, venida,
tal vez, desde lejanos mundos hasta este planeta, con la misión de preparar una
región o zona de la Tierra en donde sus gentes o pueblo, adquiriesen unos
principios éticos y morales ( los Diez Mandamientos de la 1ª Revelación hecha a
Moisés), con el fin de educarlos y prepararlos para acoger
mas tarde en su seno la llegada del Cristo o Enviado del Padre en la
persona de Jesús de Nazaret, el cual vino más tarde con la gran misión de
dejar en la Humanidad la semilla de Su enseñanza (2ª revelación), para
que germinase en medio de este pueblo y desde allí se esparciese más tarde por
los cuatro puntos cardinales del planeta.
Volviendo a la cita de Jeremías,
este recomienda que no escuchemos a los profetas que nos engañan porque
se dejan llevar por su imaginación y no por lo que de verdad les puede llegar
de parte de Dios a través de sus mediumnidades de profecía. Lo que dicen y afirman estos falsos
profetas, es la gran parte de las veces “de cosecha propia”.
Dice Jeremías: “Yo no los enviaba y
ellos corrían por sí mismos; no les hablaba y ellos profetizaban de su cabeza".
Claramente continúa diciendo Jeremías con su Inspiración Divina, que
esos falsos profetas mienten en nombre de Dios, dejándose llevar por la
imaginación que engaña a sus corazones. Finalmente añade que esos falsos
profetas son “la carga del Señor”, o sea, el lastre o dificultad que nos
encontramos a menudo en la senda espiritual trazada para la Humanidad,
por lo que todos debiéramos identificarlos para apartarlos de nuestro camino, a
fin de que con sus engaños, extravíos e imaginación, no influyan negativamente
en la senda espiritual que trazó Cristo y que aclaró y confirmó más
tarde la doctrina de los Espíritus con el Espíritu de Verdad ( 3ª
Revelación), que Jesús-Cristo prometió enviarnos y que Allan Kardec
codificó recogiendo sus enseñanzas y dando sobre ellas unas
aclaraciones válidas para toda la Humanidad.
Kardec nos recuerda los
consejos de S. Juan: “ No creáis a todo espíritu, mas probad antes si son de
Dios”. Y es que entre los invisibles, también los hay engañadores que se
complacen en la mentira, como falsos profetas, siendo los médiums su
primera opción. Este hecho es señalado por Kardec como uno de los grandes
escollos del Espiritismo. Por tanto hay que ser prudentes en estos casos para poder
distinguirlos, … pero…,
¿ Cómo se pueden diferenciar?
En primer lugar por el contenido de sus
mensajes: Ver si están en armonía con la elevada moral que enseñó el Maestro
Jesús, o no lo están.
Y en segundo lugar también por las formas, pues al igual que los charlatanes de feria tienen formas de hablar que les caracterizan y delatan pues estos espíritus engañadores o los médiums falsos, usan un lenguaje a veces tosco, otras veces pomposo y teatral lleno de aspamientos, y a veces hasta tétrico, impropios de personas serias ni espíritus serios cuando aportan sus elevados mensajes a través de médiums formales, rectos y responsables.
- Jose Luis Martín-
**************
No hay comentarios:
Publicar un comentario