¡¡ PAZ Y ELEVACIÓN PARA ESTE NUEVO AÑO 2.021 !!
¡¡ VAMOS A POR ÉL !!
INQUIETUDES ESPÍRITAS
1.- Fenómeno Espírita
2.- El libro de tu vida
3.- Dios
4.- Iniciando un nuevo año
5.- Mis deseos en Final de Año-
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2. Hay un principio elemental que lleva a deducir la causa por sus efectos, aun cuando a esa causa no se la vea.
Si un pájaro en pleno vuelo es alcanzado por una bala que lo mata, suponemos que fue un tirador, aunque no lo veamos. No es entonces siempre necesario ver algo para saber que existe.
Absolutamente, en todos los órdenes ocurre lo mismo: observando los efectos se llega a conocer las causas.
3. Otro principio elemental, hoy considerado axioma, a fuerza de ser cierto, es aquel que dice que todo efecto inteligente tiene su origen en una causa Inteligente.
Cuando estamos frente a una obra de arte o de una industria pensamos que ella es producto del cerebro de un hombre de genio, porque necesariamente su concepción es el resultado de una inteligencia desarrollada.
Juzgamos que su autor es un ser humano porque sabemos que es algo factible de ser realizado por un hombre. Pero a nadie se le ocurriría pensar que pudo haber sido un idiota o un ignorante su creador, y menos aún que es el trabajo de un animal o producto del azar.
4. Reconocemos la presencia del hombre en sus obras. La existencia del hombre antediluviano se comprueba no sólo por los fósiles humanos hallados, sino también, y con igual certeza, por los objetos trabajados por él mismo que se encontraron: un fragmento de ánfora, una piedra tallada, un arma, un ladrillo. El grado de inteligencia y adelanto de quienes han realizado
dichos trabajos se reconoce por la imperfección o delicadeza de los mismos. Si visitamos un país habitado exclusivamente por salvajes y descubrimos una estatua digna de Fidias, inmediatamente nos haríamos el siguiente razonamiento: los salvajes no pueden ser los autores, por lo tanto, la estatua es obra de una inteligencia superior.
5. ¡Pues bien! Con sólo mirar a nuestro alrededor y posar nuestra mirada sobre las obras de la Naturaleza, veremos la previsión, la sabiduría y la armonía que las preside, sentimos que todas ellas sobrepasan en grado indecible a la inteligencia creadora del ser humano. Si el hombre no
produjo esas obras, significa que son el producto de una inteligencia superior a la humana, a menos que pensemos que hay efectos sin causa.
Las obras de la Naturaleza son producto de fuerzas naturales que actúan mecánicamente en razón de las leyes de atracción y repulsión. Las moléculas de los cuerpos inertes se unen y disgregan bajo la acción de estas leyes. Las plantas, en virtud de esa misma ley, nacen, germinan, crecen y se multiplican, cada una en su especie. El crecimiento, la flor, el fruto y el color están subordinados a causas materiales como el calor, la electricidad, la luz, la humedad, etc. Lo mismo sucede con respecto a los animales. Los astros se forman por atracción molecular y se mueven perpetuamente con sus órbitas debido a la gravitación. La regularidad mecánica en el empleo de las fuerzas naturales no habla de ninguna inteligencia independiente. El hombre mueve su brazo cuando quiere y como quiere, pero quien hace un movimiento único y siempre en igual sentido, desde su nacimiento hasta su muerte, sería una especie de autómata. Por tanto, podemos concluir diciendo que las fuerzas orgánicas de la Naturaleza son puramente automáticas.
Todo eso es muy sincero, pero esas fuerzas son efecto que deben poseer alguna causa. Nadie dice que ellas constituyan la Divinidad. También es verdad que son materiales y mecánicas y que no son inteligentes por sí solas. Ellas son puestas en acción, distribuidas y adecuadas a las
necesidades de cada cosa por una inteligencia que no es humana. La adecuación útil de esas fuerzas es un efecto inteligente que descubre a una causa inteligente. Un péndulo se mueve con automática regularidad, y es esa regularidad lo que realmente vale. La fuerza que lo hace mover es material y
exenta de inteligencia, mas, ¿de qué serviría el péndulo si una inteligencia no hubiese combinado, calculado y distribuido el empleo de esa fuerza para lograr que se mueva con precisión? ¿Sería racional afirmar que la inteligencia no existe porque no está a la vista? Se la juzga por sus efectos.^
La existencia del reloj confirma la existencia del relojero: la ingeniosidad del mecanismo testifica la inteligencia y conocimientos del relojero. Cuando un reloj nos da la información que necesitamos, ¿pensamos acaso que él es inteligente?
Podemos decir lo mismo del mecanismo del Universo: Dios no se muestra, pero afirma su existencia por sus obras..
EL GÉNESIS.
ALLAN KARDEC
Iniciando un nuevo año
Sea tal vez porque las fiestas se multiplican (son graduaciones, bodas, cenas de empresa), o porque ya se prepara para el viaje de vacaciones en breve.
De una forma o de otra, es común escuchar a las personas desahogarse diciendo que desean que se termine el largo año.
Quien mucho sufrió, desea que el termine y aguarda días nuevos, de menos dolores.
Quien perdió amores, desea que el se acabe de una vez, en el ansia de que los días que vendrán consigan traer esperanzas al corazón entristecido por las ausencias.
Quien está concluyendo algún curso y dio lo máximo de si, desea que los meses que se anuncian lleguen contra antes, para descansar de tanto esfuerzo.
Y así sucesivamente. Cada uno está pensando en el año que acaba de terminar en el sentido de dejar algo detrás. Algo que no fue muy bueno.
Naturalmente, muchos son los que ven finalizar los días del año con alegría pues ellos les fueron propicios. Esos, desean que los futuros días se repitan esos valores de alegría, de afecto, de cosas positivas.
Año viejo, Año Nuevo. Son convenciones marcadas por el calendario humano, en función de los movimientos del planeta en torno del sol.
Con todo, psicológicamente, también nos remiten, si, a un estado diferente.
Como Dios nada hizo, en Su sabiduría, sin un fin útil, también así también es con la cuestión del tiempo como lo convencionamos.
Cada día es un nuevo día. La noche nos habla del reposo. La madrugada nos anuncia oportunidad renovada.
Cada año que finaliza nos invita a dejar para tras todo lo de ruin, desagradable que ya vivimos, permitiéndonos proyectar planes para un futuro próximo.
Por todo eso, por esta oportunidad que la Divinidad nos permite cada 365 días, en esta Tierra, pensé que usted puede mejorar su vida en nuevo año que se anuncia.
Comience por retirar de su casa todo lo que le estorba. Libérese de aquellas cosas que usted guarda en los armarios, en el garaje, en el trastero.
Cosas que están allí hace mucho tiempo, que usted guarda para usar un día. Un día que tal vez nunca llegue. Piense en cuanto tiempo ellas están allí: meses, años… esperando.
Son ropas, calzados, libros, discos antiguos, utensilios que usted no usa desde hace años. Libere armarios, espacios.
Las cosas antiguas, a superar son muy útiles en los museos para la preservación, la evolución de nuestra historia.
Done lo que pueda a quien sea más útil.
Sienta el espacio vacío, siéntase más ligero.
Después, piense en cuantas cosas inútiles usted guarda en su corazón, en su mente.
Amarguras vividas, calumnias recibidas, mentiras que le robaron la paz, traiciones que le dejaron enfermo, puñaladas de amigos que le arañaron las carnes del alma…
Aleje todo de si. Mentalmente, coloque todo en un gran paquete e imagínese arrojándolo en la corriente de un rio caudaloso que la llevará muy lejos, para el mar del olvido.
Desee para si mismo un Nuevo Año diferente. Y comience libre, sin esa carga pesada, que le quita las posibilidades de ser feliz.
Comience el año nuevo mirando para el frente, para lo Alto. Establezca metas de felicidad y conquistas.
Usted es hijo de Dios y heredero de Su amor, merecedor de la felicidad.
Conquístela. Abandone los dolores innecesarios, piense en el bien.
Mentalice a las personas que son amigas, que lo aman, que lo quieren bien.
Prográmese para estar más con ellas, a fin de, fortalecido, alcanzar objetivos nobles.
Comience el año pensando en cómo usted puede influenciar a las personas, ambientes, con su acción positiva.
Prográmese para vencer. Prográmese para hacer oídos sordos a los que desean su infelicidad y avance.
Prográmese para ser feliz. El día surge. Es Año Nuevo. Siga para la luz, cierto que con voluntad firme, con deseos de acertar, Jesús bendecirá sus disposiciones.
Es Año Nuevo. Piense nuevo. Piense grande. Sea feliz.
Redacción de Momento Espirita
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