Educación para la muerte

     INQUIETUDES  ESPÍRITAS

1.- Cuadro de la Vida Espírita ( 4 de 4 )

2.- ¿ Hemos podido estar en vidas pasadas con las mismas personas que ahora nos acompañan?

3.- Elucidaciones espíritas de León Denis

4.- Educación para la muerte

                                    *********************************************

                                                                               

                        CUADRO DE LA VIDA ESPÍRITA

(4 de 4 )  .../...

    En otros el sentido moral está más desarrollado; sin tener ni gran superioridad ni gran profundidad, juzgan más sanamente y con frecuencia, condenan lo que hicieron, dijeron o pensaron durante la vida. Del resto, hay esto de notable, que incluso entre los Espíritus más comunes, la mayoría tiene sentimientos más puros como Espíritus que como hombres, la vida espírita los esclarece en cuanto a sus defectos; y con muy pocas excepciones, se arrepienten y lamentan el mal que hicieron, porque lo sufren más o menos cruelmente. Algunas veces los vimos siendo, no mejores, pero jamás siendo peores de lo que eran cuanto estaban vivos. El endurecimiento absoluto es muy raro y no es sino temporal, porque tarde o temprano, acaban por sufrir en su posición y puede decirse que todos aspiran a perfeccionarse porque todos comprenden que es el único medio de salir de su inferioridad; instruirse y esclarecerse, ahí está su gran preocupación, y son felices cuando le pueden agregar algunas pequeñas misiones de confianza que los revelan a sus propios ojos.

   Tienen también sus asambleas, más o menos serias, según sus pensamientos. Hablan con nosotros, ven y observan lo que pasa; participan en nuestras reuniones, en nuestros juegos, en nuestras fiestas, en nuestros espectáculos, como en nuestros negocios serios; escuchan nuestras conversaciones: los más livianos para divertirse y frecuentemente reírse a nuestras costas, y si pueden actúan con malicia, los otros para instruirse; observan a los hombres su carácter y hacen lo que llaman estudios de las costumbres, teniendo en vista resolver sobre la elección de su existencia futura.

   Vimos el Espíritu en el momento en que, dejando su cuerpo entra en su nueva vida; analizamos sus sensaciones; seguimos el desarrollo gradual de sus ideas. Los primeros momentos son empleados en reconocerse y en enterarse de lo que pasa con él; en una palabra, ensaya, por así decirlo, sus facultades como el niño poco a poco ve aumentar su fuerza y sus pensamientos. Hablamos de Espíritus vulgares porque los otros, como dijimos, están de algún modo identificados previamente con el estado espírita que no les causa ninguna sorpresa, sino únicamente la alegría de estar libres de los obstáculos y de los sufrimientos corpóreos. Entre los -espíritus inferiores, muchos lamentan la vida terrestre, porque su situación como Espíritus en cien veces peor y es por eso que procuran una distracción en la visión de lo que hacía otrora sus delicias, pero esa misma visión es para ellos, un suplicio, porque tienen el deseo y no pueden satisfacerlo.

   La necesidad de progresar es general entre los Espíritus y es lo que los excita a trabajar por su progreso, porque comprenden que su felicidad tiene un precio; pero no todos sienten esa necesidad en el mismo grado, sobre todo al comienzo; algunos se complacen, incluso en una especie de holgazanería, pero que no tiene sino un tiempo; pronto la actividad se les vuelve una necesidad imperiosa, a la cual, además son impelidos por otros Espíritus que les estimulan el sentimiento del bien.

   En seguida viene lo que se puede llamar la escoria del mundo espiritual, compuesta por todos los Espíritus impuros, en los que el mal es la única preocupación. Sufren, y les gustaría ver sufrir a todos los demás al igual que ellos. Los celos les hacen odiosa toda superioridad; el odio es su esencia; no pudiendo prenderse a los Espíritus, se prenden a los hombres y atacan a aquellos que les parecen más débiles. Excitar las malas pasiones, insuflar la discordia, separar a los amigos, provocar las riñas, hinchar el orgullo de los ambiciosos para darse el placer de abatirlos en seguida, esparcir el error y la mentira, en una palabra, desviar del bien, tales son sus pensamientos dominantes.

   Pero, ¿ por qué Dios permite que sea así ?. Dios no tiene que darnos cuentas, Los Espíritus superiores nos dicen que los malos son pruebas para los buenos  y que no hay virtud donde no hay victoria a alcanzar. Por lo demás, si esos Espíritus malignos se encuentran en nuestra Tierra, es porque encuentran aquí ecos y simpatías. Consolémonos pensando que por encima de este lodo que nos rodea hay seres puros y benevolentes que nos aman, nos sustentan, nos encorajan y nos extienden los brazos para llevarnos hasta ellos y conducirnos a mundos mejores, donde el mal no tiene acceso si supiéramos hacer lo que es preciso para merecerlo.                                              FIN

- ALLAN KARDEC-    Revue  Spirite                                                                                                                             Journal  D`Etudes Psichológiques- Anne 2- Avril 1859- nº4

Traducido por Salvador Gentile y Revisado por Elías Barbosa

( Art. tomado de la Revista Fraternidad Cristiana Espírita nº 41)

                                               *************************

                                                          

¿Hemos estado en vidas pasadas  con las mismas personas que  ahora nos acompañan?

         Con frecuencia,  sucede que quienes nos acompañan en esta vida, desempeñando los papeles de familia, amigos, compañeros, etc, hayamos estado anteriormente juntos, tal vez desempeñando papeles de relación diferentes cada uno, como actores de la misma compañía teatral, interpretando cada vez nuevas obras en el escenario de la vida.

 Casi siempre durante la vida con “diversos compañeros de viaje”  se crean lazos de Amor o de odio, o cualquier otra pasión, que perduran hasta  el Más Allá, y  por  sintonías semejantes, se atraen o se repelen, y  hasta se unen de nuevo esos Seres que se buscan en el Mas Allá y después también coinciden aquí, de nuevo en el mismo escenario físico en donde ya estuvieron juntos anteriormente. Así  sucede porque la Ley de Causa y Efecto, así como  la de Afinidad, funcionan inexorablemente, como toda ley natural establecida.

 Esto lo hemos podido comprobar casi todas las personas, cuando nos hemos encontrado con personas que nada más conocerlas, nos han causado casi instantáneamente una simpatía, una atracción, o por el contrario, una antipatía y  un rechazo.   Esto sucede cuando los antiguos lazos de simpatía y de amor, o bien de antipatía y de rechazo, se reencuentran y bien se atraen o se repelen, según de la especie que sean estos lazos.

  En estos casos es muy frecuente que cada uno venga con un papel diferente al que tuvo, para representarlo en este escenario de la vida, lo que significa que  muchas veces  la  relación personal o familiar entre ellos cambia los papeles a desempeñar de una vida a otra, así  por ejemplo, quienes tuvieron en una vida pasada una relación de amigos, ahora  podrían  coincidir de nuevo juntos pero como esposos;  otras veces volverán como padre e hijo, otras  lo serán  como  jefe y subordinado, etc.

   En cada vida humana, el Ser espiritual va jugando papeles o roles diferentes, con el fin de reafirmar mejor  y de ampliar los valores y aspectos positivos que haya entre él y quienes le rodean, así como para  pulir y superar otros aspectos negativos o defectos morales, que también nos ligan con otros Espíritus en una relación deudora o acreedora.

- Jose Luis Martín-

  “La doctrina espírita nos muestra el verdadero significado de la vida social, especie de  terreno espiritual en que plantamos y cosechamos, e igualmente la escuela   donde debemos  aprender la ciencia del bien.  -Chico Xavier-

                                             ***************************

 

Elucidaciones espiritas de León Denis

 

Toda creencia debe estar apoyada en hechos. A las manifestaciones de las almas libres de las ligaduras de la carne, y no a textos viejos y oscuros, es a quienes hay que pedir el secreto de las leyes que rigen la vida futura y la ascensión de los seres.

Las religiones del porvenir tendrán por base la comunión de los vivos y de los muertos, la enseñanza mutua de ambas humanidades. A pesar de las dificultades que presenta todavía la comunicación con lo invisible  es probable que allanarán con la experiencia de los tiempos  ya desde ahora puede verse que hay aquí una base mucho más amplia que todas aquellas en que se apoya la idea religiosa. Será uno de los grandes méritos del Espiritismo haberla traído al mundo.

Él había preparado y facilitado la unidad religiosa y moral.

La solidaridad que une a los vivos de la Tierra con los del cielo se extenderá poco a poco a todos los habitantes de nuestro globo, y todos comulgarán un día en una misma creencia, en un mismo ideal realizado.   

El alma humana aprenderá a conocerse en su naturaleza inmortal, en su porvenir sin fin. Espíritus de paso en esta Tierra, comprenderemos que nuestro destino es vivir y progresar sin cesar, a través del infinito de los espacios y de los tiempos, para iniciarnos cada vez más en las maravillas del Universo, para cooperar cada vez más íntimamente a la obra divina.

Penetrados de estas ideas, sabremos desprendernos de las cosas materiales y remontar muy alto nuestras aspiraciones .  Nos sentiremos unidos a nuestros compañeros de camino en el gran viaje eterno, unidos con todas las almas por la cadena de atracción y de amor que nos une a Dios y nos mantiene a todos en la unidad de la vida universal.

Entonces cesarán todas las precauciones, todas las rivalidades mezquinas.

Todas las reformas, todas las obras de solidaridad recibirán un vigoroso impulso.

Por encima de las pequeñas patrias terrestres, veremos desplegar la gran patria común, el cielo sin límites.  Desde allí los espíritus superiores nos tienden los brazos. Todos subimos, a través de las pruebas y de las lágrimas, desde las regiones obscuras hasta la luz divina. La senda de la misericordia y del perdón está siempre abierta para los culpables. Los más degradados pueden rehabilitarse por el trabajo y el arrepentimiento, porque Dios es justicia, Dios es amor.

Así la revelación de los espíritus disipa las nieblas de odio, las incertidumbres y los errores que nos rodean. ¡Ella hace brillar sobre el mundo el gran sol de la bondad, de la concordia, de la verdad!

León Denis

En lo invisible.

 

                                               *************************************

EDUCACIÓN PARA LA MUERTE

                           (LA TRISTE FALTA DE ESTA CLASE DE EDUCACIÓN)

Aún en nuestros días el respeto a los muertos está envuelto en una forma velada de repulsa y desprecio.

La muerte transforma al hombre en cadáver, lo expulsa del número de los vivos y le anula todas las posibilidades de acción y, por tanto, de significación en el medio humano. "El muerto está muerto", dicen los materialistas y el populacho.

El Papa Paulo VI declaró, y la prensa mundial lo divulgó por todas partes, que ,"existe una vida después de la muerte, pero no sabemos como ella es". Eso quiere decir que ni la propia iglesia sabe nada de la muerte, a no ser que morimos. La idea cristiana de la muerte, sustentada y defendida por las diversas Iglesias es sencillamente aterradora. los pecadores al morir se ven ante un Tribunal Divino que los condena a suplicios eternos. Los santos y los beatos no escapan a esas condenaciones, a pesar de la misericordia de Dios, que no sabemos como puede ser misericordioso con tanta impiedad.

Las mismas criaturas inocentes, que no tuvieron ocasión de pecar, son destinadas al Limbo misterioso y sombrío por la simple falta del bautismo. Los criminales ásperos e ignorantes y todo el grueso de la especie humana son arrojados a las garras de satanás, un ángel caído que solo no encarna al mal porque no debe tener carne. Pero con dinero y la adoración interesada a Dios esas almas pueden ser perdonadas, de manera que solo para los pobres no hay salvación,ya que para los ricos el Cielo se abre por la vías de los "Tedéums" suntuosos, de las mi Nunca se vio un soberano mas venal y un tribunal mas injusto. el desprecio a la muerte generó el desabrido comercio de los traficantes del perdón y de las indulgencias divinas. el vil dinero de las trapacerías e injusticias terrenas consigue calmar a la Justicia Divina, de manera que el desprestigio de los muertos llega al máximo de la vergüenza. La felicidad eterna depende de la abundancia de los cofres dejados en la tierra.

J.HERCULANO PIRES

                                         ****************************