Hoy veremos :
- Evidencias científicas a favor de la vida antes de la vida.
-Compartiendo, aprendiendo, ejemplificando
-¿ Qué o quien es Dios ?
- Fuerzas radiantes
*****************************
EVIDENCIAS CIENTÍFICAS A FAVOR DE LA VIDA ANTES DE LA VIDA
Normalmente, cuando hablamos con alguien sobre el tema de la reencarnación, la objeción más común es “¿Y por qué, si nos reencarnamos, no nos acordamos de nuestras vidas pasadas?”, pues bien, esta refutación tiene los días contados. Las investigaciones científicas al respecto (Ian Stevenson, Erlendur Haraldsson, Brian Weiss, Moris Netherton, Carol Bowman, etc., son algunos de los más recientes investigadores) están mostrando evidencias objetivas de que sí tenemos ese recuerdo de vidas pasadas, sólo que está enterrado en nuestra memoria subconsciente, nuestra memoria extra-cerebral, que aflora bajo determinadas circunstancias especiales.
Esas circunstancias son variadas, pero vamos a centrarnos en las más objetivas, tales como las regresiones realizadas bajo hipnosis y las manifestaciones espontá- neas de otra vida anterior que surgen en niños de corta edad.
Regresiones hipnóticas
Hoy día, se cuentan por centenas de miles los casos documentados por médicos psiquiatras de personas que rememoran vidas pasadas en estado de inducción hipnótica. Para esas personas, esos recuerdos son tan reales, que el vivenciarlos de nuevo les ha servido de catarsis para solucionar problemas psicosomáticos de variadas índoles, como pueden ser fobias, angustias, miedos, insomnios, dolor, anorexia/bulimia, obsesiones y compulsiones, adicciones, etc. Luego, si el vivenciar mentalmente situaciones traumáticas pasadas les libra de problemas físicos y/o psíquicos reales actuales, estas vivencias tienen que tener una base real ya que, que se sepa, el crear mentalmente situaciones imaginarias no soluciona los problemas que puedan sufrir en la actualidad.
En esas regresiones, se han dado casos de xenoglosia entre los sujetos, que se han expresado por escrito o verbalmente en lenguas extranjeras e incluso lenguas muertas, como el antiguo lenguaje de los jeroglíficos egipcio, desconocidas para ellos.
Tras investigar entre los familiares y amistades, no se ha hallado ninguno que hablase dichas lenguas, ni se ha dado el caso de estancia o viaje en el país correspondiente, lo cual descarta la hipótesis de la criptomnesia, o sea, la rememoración de idiomas aprendidos y posteriormente olvidados.
La hipótesis de la memoria genética tampoco tiene mucho fundamento, ya que no explicaría, por ejemplo, como un niño de once años, de ojos azules, pelo rubio, fue capaz de expresarse en chino antiguo durante diez minutos. ¿Qué relación genética puede haber entre un niño caucásico y un chino de la antigüedad? Ni explicaría tampoco como estos sujetos recuerdan la causa de su muerte, ya que unos padres no podrían transmitir genéticamente a su descendencia el proceso de su fallecimiento, un hecho que ocurre después de la procreación.
Estos sujetos dan informaciones detalladas de esas vidas, describen los lugares frecuentados tal y como eran en la época de las mismas y no como son en la actualidad, son capaces de orientarse y señalar las localizaciones cercanas sin haber estado nunca, en la vida presente, sobre el terreno y aportan datos, costumbres, etc., desconocidos de los propios lugareños e historiadores, que luego se verifican como veraces.
Dan informaciones detalladas de esas vidas, describen los lugares frecuentados tal y como eran en la época de las mismas… son capaces de orientarse… y aportan datos, costumbres, etc., desconocidos de los propios lugareños e historiadores, que luego se verifican como veraces.
Los detractores dicen que ello es debido a un fenómeno de percepción extra-sensorial, de telepatía. Si fuese así tendrían esa facultad en otros momentos de su vida y no solamente en ese momento. Además tendrían que acceder a la memoria de varios individuos, estando la información diseminada entre muchos y no focalizada en un solo individuo. Tampoco se conocen casos de aprendizaje de idiomas por telepatía. Otros arguyen que tienen acceso a la memoria colectiva, teoría esta aún más difícil de aceptar, ya que lo que se sabe al respecto es vago e impreciso y en todo caso esa memoria es de carácter general, no concreto.
Otro factor a tener en cuenta es la intensidad emocional en el momento de la rememoración. Esa emoción es tan fuerte y vívida, que ha convencido de la realidad de los hechos narrados a experimentados psiquiatras, habituados a lidiar con fantasías y regresiones imaginarias.
La Dra. Helen Wambach (1932-1985), doctora en psicología, escéptica en primera instancia, realizo en 1975 un estudio de regresiones hipnóticas sobre unos mil voluntarios. Los resultados del mismo fueron estos:
– A pesar de que había una mayoría de voluntarios de sexo femenino, de que muchas de ellas dijeron haber tenido encarnaciones masculinas, y al revés también, el porcentaje de vidas masculinas y femeninas compulsadas fue de 50,6 % y 49,4 % respectivamente, lo que coincide con las estadísticas.
– El porcentaje de vidas de clase social alta, media y baja, coincide con las estimaciones de los historiadores. Solo un 10 % dijo haber pertenecido a la clase alta, mientras que un 25 % dijo ser comerciante o artesano (la clase media) y el resto campesinos y otros. Esto echa por tierra la creencia común de que la mayoría de los que recuerdan vidas pasadas creen ser personajes de renombre.
– Los detalles aportados sobre arquitectura, vestimenta, calzado, comida, utensilios, distribución racial y geográfica coincidieron con los conocimientos arqueológicos que se tienen de la época referida.
Ella, la Dra. Wambach, partía de la premisa que estas narraciones de vidas pasadas eran fruto de la imaginación del sujeto. Los resultados demostraron que era una “fantasía” muy precisa y documentada.
Su conclusión fue: «¡Yo no sólo creo en la reencarnación, yo sé (que existe)!» (Wambach 1978)
Memoria espontánea de vidas pasadas
Un caso especial y eminentemente convincente es el de los niños de corta edad que recuerdan de manera espontánea su anterior vida. Estos niños suelen manifestar esos recuerdos nada más aprenden a hablar, entre los 2 y los 4 años, y les suele durar normalmente hasta la edad de 5 a 8 años. Dan detalles, como nombres de personas, animales, lugares distantes, etc., corroborados como ciertos en su gran mayoría tras investigación posterior, reconocen a familiares y amigos de su anterior vida y se extrañan de verlos envejecidos, toman la personalidad del fallecido y hablan como si fuese él. Muchos de ellos tienen marcas y deformidades de nacimiento, que coinciden asombrosamente con el tipo de muerte acaecida, normalmente violenta, según testimonio de ellos mismos, de familiares, vecinos y amigos y según los informes médicos de los hospitales, cuando los había y a los cuales se ha tenido acceso. Tienen fobias a situaciones y objetos relacionados con el modo de fallecimiento sufrido.
El Dr. Ian Stevenson (1918-2007) catedrático de psiquiatría en la Universidad de Virginia, y de reconocido prestigio entre sus colegas científicos, ha sido uno de los más importantes investigadores, sino el que más, que ha estudiado los numerosísimos casos conocidos. A lo largo de más de 40 años ha investigado miles de casos de ni- ños reencarnados, entrevistando a veces hasta 50 personas relacionadas con el infante en cuestión. Muchas de esas investigaciones han sido revisadas a posteriori por otros investigadores, corroborando las informaciones iniciales.
Fue en 1966 cuando publicó su libro clave 20 Casos Posibles de Reencarnación que posteriormente revisó en 1974. En él hace un estudio detallado de una serie de 20 sujetos investigados, seleccionados de entre más de 1.200 casos recopilados por Ian Stevenson hasta esa fecha
Los mismos argumentos a favor y en contra presentados para las regresiones hipnóticas pueden ser aplicados para estas memorias espontáneas en niños. Además habría que añadir que aquí se trata de jóvenes infantes, a los cuales es muy difícil, por no decir imposible, hacerles mentir o tomar un papel en el cual no se encuentran cómodos, por lo que se descarta la posibilidad de montaje.
Para finalizar este corto repaso sobre algunas de las evidencias a favor de vidas anteriores a la presente, ofrecemos una cita.
Cuenta Schroder que en una ocasión le preguntó a Stevenson si él consideraba que sus investigaciones habían “probado” la reencarnación. A lo que Stevenson contestó: «Yo no pienso que haya ningún tipo de prueba en la ciencia aparte de las matemáticas», sin embargo, agregó, «Sobre los casos que conocemos hoy -al menos para algunos de ellos-, la reencarnación es la mejor explicación que hemos podido encontrar. Hay un impresionante volumen de evidencia, y pienso que con el tiempo se está haciendo cada vez más fuerte. Pienso que una persona racional, si lo desea, puede creer en la reencarnación en la base de esta evidencia».
Old Souls: The Scientific Evidence for Past Lives (Schroder, 1999).
- Javier Rodriguez- Presidente de la Asoc Alicantina de Espiritismo
************************
COMPARTIENDO,APRENDIENDO, EJEMPLIFICANDO
Un aspecto no siempre bien valorado y explicado en las dinámicas de los grupos y centros espirituales es la necesidad de exteriorizar; es decir, adquirir una doble vertiente abierta a la sociedad.
Por un lado compartir conocimientos, divulgarlos y enseñarlos a todos aquellos que, ignorantes de la realidad espiritual, solicitan o buscan los mismos para despertar sus inquietudes personales o resolver sus problemas aflictivos y conceptuales.
Y por otro, relacionarse con otros grupos a fin de compartir las experiencias y conocimientos adquiridos, tanto los aspectos positivos como los obstáculos que en el camino se van encontrando, ya que nadie está exento del error, y un tropiezo en un grupo puede servir de señal de alarma para otros, evitando de esta forma caer en el error y avanzar más rápidamente en la senda del progreso.
Y por otro, relacionarse con otros grupos a fin de compartir las experiencias y conocimientos adquiridos, tanto los aspectos positivos como los obstáculos que en el camino se van encontrando, ya que nadie está exento del error, y un tropiezo en un grupo puede servir de señal de alarma para otros, evitando de esta forma caer en el error y avanzar más rápidamente en la senda del progreso.
De aquí se deduce la importante necesidad de compartir, convivir, relacionarse y experimentar formas y actuaciones a la hora de organizar, desarrollar y hacer efectivas las realizaciones y trabajos que todos los grupos realizan. El aislamiento no conduce más que a situaciones peligrosas que derivan en conductas poco flexibles, con enormes carencias para afrontar los cambios que han de producir el avance, el progreso y la ejecución de realizaciones que cada vez más se basan en la comprensión profunda de los problemas espirituales que afligen el alma humana.
Al relacionarnos y socializar nuestra conducta espiritual con otros grupos e instituciones nos enriquecemos, aprendemos, compartimos y podemos advertir no tanto las deficiencias de los otros, sino las propias carencias. Ocurre igual que a nivel personal; donde con frecuencia realizamos la transferencia psicológica de ver en los demás nuestras propias debilidades; este hecho hemos de cambiarlo, transmutarlo, a fin de no ver en las demás agrupaciones más que lo bueno, lo positivo, y si apreciamos que muchas de esas cosas tienen carencia en nuestra institución, debemos intentar aprender, conseguir el método que utilizan para aplicarlo a nuestra idiosincrasia y particularidades, a fin de enriquecernos y crecer como grupo en pos de mejores y mayores realizaciones.
El aprendizaje personal precisa de actitud y aptitud; la primera está enraizada con la voluntad y la humildad, a fin de comprender que de todo el mundo se puede aprender, y en todas partes nuestra voluntad noble y sincera de avanzar nos ayudará a aprender. La segunda, deriva de nuestras propias conquistas y méritos realizados, pues la aptitud se conquista principalmente con el esfuerzo, el trabajo por aprender, por formarnos, por instruirnos, no sólo en el conocimiento teórico sino en la vivencia práctica que las leyes espirituales nos demandan para conseguir una realización personal plena, en equilibrio y en constante espíritu de superación.
Somos muy pequeños; pero cuando nos encontramos formando parte de una institución con fines nobles y altruistas, no sólo aprendemos y nos podemos corregir, sino que podemos dar lo mejor de nosotros mismos; obteniendo como recompensa una de las mayores bondades que la providencia divina pone a nuestro alcance: el dar sentido espiritual a nuestra vida, cumpliendo nuestros compromisos espirituales y alcanzando el objetivo principal para el que vinimos a la tierra: el progreso espiritual.
Las vidas exentas de ideales o de principios son vidas vegetativas; una vida sin objetivos es una vida muerta (*) si sólo dedicamos nuestros esfuerzos a comportamientos fisiológicos como comer, dormir, practicar sexo, etc. Cuando los principios o las metas que mueven nuestra voluntad son de índole material y empeñamos nuestra determinación al máximo, obtenemos la fuerza para alcanzar nuestro objetivo y nos preparamos para ello sin escatimar esfuerzos (alcanzar poder, dinero, etc).
Y si el sentido de la vida se convierte en algo más trascendente, como por ejemplo dedicar la vida a los demás, a causas nobles, solidarias y altruistas, entonces ese esfuerzo se ve recompensado además por la felicidad interior, que se abre paso en el individuo a medida que avanza. A mayor capacidad de dar y entregar su vida de servicio por los demás, su plenitud y satisfacción interior se multiplica, alcanzando pleno sentido su vida en la tierra.
Si además de ello, somos conscientes de los mecanismos que rigen la vida psicológica y espiritual del hombre al considerar a éste el resultado de la evolución antropo-socio-psicológica de millones de años, nos encontramos con la realidad consciente de nuestro origen y de nuestro porvenir. Alcanzamos entonces el conocimiento de hacia dónde caminamos, con seguridad y confianza, con fe y sumisión lúcida ante las leyes divinas. Estas últimas, perfectas e inmutables en el tiempo y en el espacio, son expresiones genuinas del amor divino y de la vida espiritual y física establecida por el creador; auténtico artífice de todo aquello que somos y que llegaremos a ser.
El transferir para otros nuestros avances, nuestras experiencias, nuestras capacidades, a fin de ayudar mediante la nobleza de intenciones, es un reto y una responsabilidad que nos compete. Esto último lo debemos ejercer con la autoridad moral del ejemplo. Sin ejemplificar en nuestras propias vidas carecemos de las fuerzas suficientes para llegar a los demás. Solamente con el conocimiento teórico no podremos llegar nunca a los corazones del ser humano; seremos como la higuera seca del evangelio de Jesús; donde detrás de brillantes y deslumbrantes palabras, muy agradables a los oídos, encontraremos el vacío del amor y la hipocresía de la apariencia, al analizarlas en profundidad.
El ejemplo es la clave para trasladar con autoridad moral nuestros principios de ayuda y solidaridad, pero siempre bajo la premisa y la actitud de la humildad; ofreciendo sin pedir nada a cambio, entregando lo que el otro necesita, sin reclamar recompensa alguna.
Antonio Lledo Flor Amor, paz y caridad
(*) LO QUE EL HOMBRE NECESITA REALMENTE NO ES UN ESTADO DE TRANQUILIDAD ABSOLUTA, SINO MÁS BIEN ASPIRAR Y LUCHAR POR LOGRAR UNA META QUE MEREZCA LA PENA, UNA TAREA LIBREMENTE ESCOGIDA.
Viktor Emil Frankl (1905-97). Neurólogo y Psiquiatra, fundador de la Logoterapia
*********************************************
¿Qué o quién es Dios?
Hay personas que alguna vez se han podido hacer el planteamiento de que si Dios existe, y lo hizo todo, ¿quién a su vez lo ha hecho a Él?. Otros solo lo consideran una idea abstracta hacia algo superior, indescifrable e indefinido, con lo cual dudan en el fondo de su ser, persiste la duda de si en realidad existirá o no algún Dios. vez. Ese “ancianito de larga barba”, desde luego no existe.
Dios no es ese anciano de larga barba blanca que resplandece en una nube, tal como las mentes infantiles nos lo imaginamos alguna
Sin embargo nadie puede tratar de definir algo tan grande e infinito que se intuye como la Causa Perfecta de toda la Creación y todos los mundos.; la Causa de las causas. No obstante yo voy a tratar de exponer aquí las ideas y conceptos que soy capaz de admitir y comprender, siendo consciente de que intentar definir a Dios es limitarlo, y sin embargo este es un concepto ilimitado e indefinible.
Particularmente yo lo siento como una Energía Perfecta, Poderosa e Inteligente; sutil e infinita en todos los atributos posibles que le podamos imaginar; continuamente presente en todo cuanto me rodea y en lo más recóndito de mi alma, así como en el alma de toda la Creación con los seres que la pueblan, y con todos los demás humanos que lo buscan fuera de ellos mismos, sin darse cuenta de que “esa Grandeza Todopoderosa y Perfecta que llaman Dios”, solo lo pueden encontrar por dentro, en sí mismos. De ahí que en realidad seamos Templos vivos del Espíritu Divino, concretado en nuestro Ser que lo madura y lo manifiesta durante un proceso evolutivo a través de muchas experiencias humanas obtenidas en muchas y muy variadas vidas, y reguladas por la Ley del Amor y la de Consecuencias.
Dios no tiene una imagen física; Él es la Inteligencia origen de toda inteligencia; es un Ser Perfecto e ilimitado en todas las perfecciones y atributos y por eso se podría tal vez, imaginar, como el Ser Supremo que desde una infinita cúspide vibracional en el Plano Espiritual más elevado, irradia su vibración de Amor a todo el Universo que late como un gran corazón inmerso todo Él en un enorme proceso evolutivo hacia la Perfección infinita de esta Fuente Creadora, Y este Ser tan inconmensurable para la mente humana, alcanza con su vibración a todos los mundos y a los seres que los habitan.
Este Ser Perfecto y origen de todo lo creado, ha sido denominado de muchos modos: “El Gran Arquitecto”; “el Alfa y el Omega”; “el Todo”, etc. Jesús de Nazaret nos lo presentó sencillamente como “El Padre”, de ahí que cuantos creemos y aceptamos las enseñanzas del Maestro Jesús, nos sentimos o nos debiéramos sentir como hermanos porque todos somos hijos de ese Gran Padre en común..
Se le podría considerar también a Dios como la conciencia colectiva de todos nosotros juntos ( el gran “Yo Soy” ),lo cual viene a significar que cada Ser humano por nuestra parte espiritual, somos como una “Chispa Divina” desprendida y creada por el Gran Foco de Energía cósmica, que es Él mismo. La realidad, tal como nos la han explicado a través del Espiritismo, es que somos esas Chispas Divinas, pero no como partes desprendidas del Todo, sino creadas por la inteligencia de este mismo Ser Omnipotente, hechos a Su imagen y semejanza, o sea con Sus atributos latentes, que deberemos cada uno desarrollar para poder ir regresando a Él. Por eso somos hijos de Él o creación de Él, pero no somos Él, ni en una ínfima parte. Hay mucha gente que considera que la creencia de que cada uno tenemos en potencia el poder de Dios es ridículo, pero para aquellos que creen o respetan las Sagradas Escrituras, vemos como en el Evangelio de S.Juan (1-12), cada uno tiene el poder de convertirse en “hijo de Dios” cuando lo comprende y lo acepta, al igual que lo afirmó Jesús de sí mismo.
Ante la idea de Dios debemos comenzar por comprender que es el Principio y origen de todo cuanto existe y a su vez es también la Causa, el fin de existir y la meta infinita de todos los seres.
Él es el Principio increado de todo cuanto existe en el universo, porque si Dios pudiese haber sido creado por otro, este otro Principio Creador estaría por delante de su criatura, por tanto este último sería Dios .
Dios es Espíritu con una personalidad real, aunque sin límite ni forma humana o de ningún otro tipo. Es el único Ser que engloba en Sí mismo a toda la Creación y a todo el espacio, con los mundos de todos los universos infinitos y a todos los seres creados por El que existen en todos los universos, conocidos y desconocidos por el hombre.
Está tanto en lo más grande o macrocosmos con una infidad de galaxias que se organizan en el espacio infinito, como en lo más ínfimo o microcosmos; no es un Ser o algo exterior a nosotros, sino que al mismo tiempo lo tenemos dentro y fuera. Es infinito, universal e ilimitado en el espacio y en el tiempo, por lo cual todo lo abarca, lo interpenetra, lo vitaliza, y no tiene principio ni final.
Partamos de la base de que definir es limitar, y nos encontramos aquí, tratando de definir con nuestras limitadísimas mentes, lo que es infinitamente ilimitado.
Debo reiterar el concepto de que lo que dentro de nuestra limitada capacidad humana llamamos Dios, no es ningún ser concreto contenido dentro de una forma o delimitado, semejante a nosotros, con una forma humana tal como lo concibieron las religiones creadas en épocas en las que el ser humano no podía concebir una idea más grandiosa y más abstracta. Esta idea del Dios con figura humana, es producto de la fantasía del Ser humano que para concebir algo superior a él solo fue capaz de hacerlo mediante la imagen y forma concreta de un Ser semejante a él y con un físico semejante al de un ser humano, aunque mucho más poderoso, bello y perfecto..
Los seres humanos solamente somos capaces de imaginar de modo muy torpe y limitado la idea de Dios como un Todo; como una Energía Inteligente no delimitada en formas físicas algunos, que lo llena e impregna todo cuanto existente a partir de El mismo y de Su Voluntad , haciéndose así omnipresente en todo, y que es la Fuente Primera y Origen de todo cuanto existe, y solo se concibe como Infinitamente Perfecto en todas sus manifestaciones .
Considerado bajo el prisma de nuestros sentidos físicos, Dios es un Ser múltiple, o sea que se manifiesta en todas las fuerzas de la Naturaleza que falsamente vienen a parecer otros tantos dioses; así nació el Politeísmo. Dios tiene,en efecto, muchos atributos que son parte de Su Naturaleza, pero que por sí solos ninguno de estos atributos por si solo son Dios.
Dios se engloba en un TODO: espíritu y materia; de aquí la idea del dualismo. La concepción que ha dado origen a las religiones trinitarias de la India y al Cristianismo, es la de que Dios es un Ser que aparece triple: alma, espíritu y cuerpo o materia. Estos tres principios constitutivos del universo se unen en un solo Ser Absoluto.
Ahora se comprenden y se explican con esta amalgama de concepciones sobre Dios, la gran diversidad de religiones y sistemas religiosos existentes.
De esta Suprema Energía Creadora que conocemos como Dios, emanan unas sabias leyes inmutables porque son perfectas, y que rigen permanentemente todo cuanto existe, siendo la Ley Suprema la Ley del Amor, porque es su propia Esencia y Vibración, siendo este Amor-Energía nada menos que el motivo y el origen de toda la Creación. Todo en la Naturaleza de la que formamos parte, ha tenido su origen en esa Energía que es Amor, Sabiduría, Luz , Poder y todas las demás cualidades en grado Absoluto, pero que siendo solamente aspectos o atributos de lo que llamamos Dios, por si solas no son Dios, como ya se dijo anteriormente..
De todos modos, llegamos a un punto en que nos tenemos que rendir finalmente a la evidencia de que nuestra limitada mente humana es incapaz de comprender o definir la idea de lo ilimitado. Abarcar en su totalidad la idea de Dios, es imposible; lo único que con respecto a este concepto podemos hacer los humanos, es sentirlo y amarlo en mayor o menor medida.
Lo podemos comprender también como una constante vibración que se proyecta en todo el Universo infinito y afecta a cada criatura por medio de unas leyes que rigen en forma de orden, equilibrio, impulso y armonía. Por eso sabemos que Dios es Amor que se manifiesta en forma de Ley; así también podremos concebirlo como como Amor y Ley al mismo tiempo.
Científicamente, ya vimos que no se puede demostrar su existencia, si hablamos de una demostración empírica de laboratorio, pero sin embargo cada persona, aun sin poder definirlo, lo siente de un modo personal y subjetivo, y por ello puede comprenderlo y sentirlo en sí misma. ¿ Cómo lo pequeño y limitado podría medir en su totalidad a lo infinitamente grande e ilimitado?.
El Ser Supremo no es alguien que esté fuera del mundo, sino que se integra en él. Este es el principio de solidaridad y de Amor que nos hace a todos hermanos.
Lo podríamos imaginar también como el gran foco de energía y Luz que se esparce hasta el infinito, llenando todo con su Sabiduría, su Potencia y su Bondad.
Aunque sabemos que solo podemos comprenderlo parcial y limitadamente, si podemos comprender la realidad de su existencia, desprendiéndonos de pensamientos y preceptos mezquinos, y rechazando las formas materiales y groseras con que las religiones han revestido a este Supremo Ideal.
Busquemos a Dios en donde le podemos encontrar: en nosotros mismos y en la majestad de sus obras. Dios habita en nosotros y en los demás; quien le busca fuera de sí mismo y fuera de los demás seres humanos no lo encontrará jamás y terminará por hacer un ídolo falso e inexistente.
En lugar de tratar de explicar qué es Dios, tal vez deberíamos analizar qué significa para nuestras vidas su existencia y qué sentimientos despierta en nosotros: ¿dudas, seguridad, temor, rebeldías, amor, escepticismo, etc?. Creo que para muchos de nosotros, principalmente representa la seguridad de sentir que siempre está cerca como un Padre que nos ama, muchas veces por medio de otros espíritus familiares o guías que nos inspiran y dan fuerzas para transitar el camino de la vida.. Sentir a Dios, supone sentir que Algo Superior e indefinible nos ama más incluso aún que nosotros mismos y nos comprende y acepta tal cual somos, sin juzgarnos y brindándonos continuamente oportunidades para progresar y participar finalmente de la felicidad de Su presencia y cercanía, aunque esto a veces supongan situaciones de dolor que en cualquier caso siempre son transitorias.
Dios no solo es fuente de Amor, sino también de Justicia permanente, porque la justicia para ser tal debe estar ligada al Amor y mediante la conjunción de ambas nos podríamos hacer una idea de su Perfección y Misericordia. Toda la Creación es la manifestación de su Amor; y la Reencarnación de sus hijos los espíritus, en mundos físicos, es manifestación de su Justicia. Como el Amor y Justicia son nuestra meta más íntima, podemos vislumbrar que Dios existe dentro y fuera de nosotros, en el Universo y también en nuestra alma. Por este motivo realmente somos sus hijos y nuestro destino es la inmortalidad , por lo aspiramos acercarnos a Él en esta suprema intención de hacer nuestra Su Divina Voluntad como Padre/Madre nuestro que es, haciendo así realidad estas metas de Amor y Justicia que laten en el interior del Ser humano ,porque aun sin ser conscientes de ello estas metas o ideales por si mismas son también evidencia de Su realidad existencial que es Origen y Meta de todo cuanto existe.
*************************
- “Ayúdanos a descubrir a Dios...”
-“Nadie puede ayudaros a hacerlo”
-“¿ Por qué no?
-“Por la misma razón que nadie puede ayudar al pez a descubrir el océano”
-Anthony de Mello-(¿Quién puede hacer que amanezca?)
**********************
FUERZAS RADIANTES
Todo se explica por la naturaleza de los fluidos impregnados de cualidades o defectos, llevados hasta su más alto grado de potencia y sostenidos por una sólida voluntad. Cuando las condiciones de receptividad son favorables y la fusión se establece, hay producción de efectos que van hasta el entusiasmo o la furia y que la Historia registra, sin definir sus causas.
Basta un alma vibrante para despertar las fuerzas latentes que adormecen en lo profundo de otras almas y provocar uno de esos grandes movimientos de opinión política o religiosa, que marcan los anales de los siglos.
En ese sentido es como se puede medir toda la potencia del alma sobre sus semejantes, sobre la Naturaleza entera y entrever en qué foco radiante puede ella convertirse en el curso de su evolución mediante el cultivo de la voluntad y el entrenamiento psíquico.
Es también mediante este estudio de las vibraciones como se revelan la concordancia y la armonía perfectas, la combinación de sones, de colores y de perfumes. Nosotros lo hemos visto, cada nota corresponde a un color y a un perfume.
Es en ese equilibrio de las cosas como se demuestra la armonía soberana que rige el mundo, tanto en el campo moral, como en el orden físico..
Solamente cuando el hombre ponga su pensamiento, su consciencia y sus actos de acuerdo con esa ley soberana, el orden y la paz reinarán sobre la Tierra y la Humanidad conocerá el reino de la justicia y del amor.
LEÓN DENIS
*************************
No hay comentarios:
Publicar un comentario