martes, 1 de octubre de 2019

Visión espírita de las almas gemelas

   INQUIETUDES ESPÍRITAS

1.- La verdad nos hará libres
2.- ¿ Existirá la Reencarnación?
3.- ¡ Sí a la vida!. ¡No al aborto!
4.- Visión espírita de las almas gemelas
5.- Defectos del alma.
      Psicografía de Chico Xavier




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   LA VERDAD NOS HARÁ LIBRES



                                                                               


Dios es mucho mas que un simple dogma impuesto por los hombres, Él rige el Universo
bajo la justa y exacta Ley de Causa y Efecto arropada por su misericordia e inmenso
Amor a su Creación, donde el ser humano es su máxima expresión, todo aquel que
infringe la Ley comete errores y ha de compensar su falta, por ello nos da miles de oportunidades.
No, no me estoy refiriendo a ningún misterio, nada que se refiera a Dios encierra misterio, con Su ayuda, y la de las fuentes donde encontré la luz, intentare dar una explicación sencilla y lógica, descorreremos el tupido velo para que las criaturas humildes y buenas, “no tengan miedo a la muerte carnal, y así, asimilen lo que nos quiere decir el sacerdote con las palabras “Resurrección”.
Los soberbios y orgullosos ellos mismos se condenan, pero, lo quieran o no, al final de
su obtusa tozudez, también verán La Luz, tardarán y sufrirán mas, pero la verán, Dios
no deshereda a ninguno de sus hijos; cuando cansados y agotados de arrastrarse por este
planeta de expiación y pruebas, se aparten del fatal materialismo que no les deja ver un
palmo ante sus ojos; “¡Que tiempo perdí tan absurdamente!”, dirán en sus lamentaciones.
Insisto, la piedad del Señor continuará dándonos otra oportunidad más, y otra, y otra…
Si la Luz se hizo en mí y en millones de hermanos, ¿por qué no en toda la faz de la
Tierra y el mundo sería un auténtico paraíso?
En mi mente, como en la mente de cualquier persona de facultades mentales normales,
jamás tendría cabida la idea de la “resurrección de la carne”, como ya he dicho,
imposible matemáticamente probado por la ciencia. Entonces, aquellos que hablan en el
nombre de Dios, ¿qué quiere decir con: “Dios los resucitará en el último día”?
¿Se estarán refiriendo al “último día de vida carnal, cuando el espíritu o alma, en
verdad, vuelve a la vida, a su vida espiritual?, ¿o se están refiriendo a nacer otra vez?”
¿Por qué no se aclaran?, ¿Por qué no explican el asunto?
Repito siempre con amor y respeto, ¿lo ignoran, o se les prohíben?
Veamos, relajémonos, con la fe puesta en Dios, empezaremos siempre con humildad, a
buscar la Luz que nos hará Razonar la Fe.
No nos adelantemos a los acontecimientos juzgando algo que aún desconocemos; leamos siempre en dulce calma.
- Jose de Pizarra-

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                ¿ EXISTIRÁ LA REENCARNACIÓN ?

Es evidente que, si no existe la reencarnación, sólo hay una existencia corporal. Si nuestra actual existencia corporal es la única,el alma de cada hombre es creada al nacer, a menos que se admita su anterioridad, en cuyo caso se preguntaría lo que era el alma antes de su nacimiento y si ese estado no constituiría de alguna forma una existencia. No cabe término medio: o el alma existía o no existía antes del cuerpo; si existía antes del cuerpo, ¿cuál era su situación? ¿Tenía o no conciencia de sí misma? Si no tenía conciencia era como si no
existiese. Si tenía su individualidad, ¿era progresiva o estacionaria?
En uno y otro caso, ¿en qué grado se encontraba al ingresar en el cuerpo? Admitiendo, de acuerdo con la creencia vulgar, que el alma nace con el cuerpo, o lo que da lo mismo, que antes de su encarnación no tenía sino facultades negativas, sentamos las siguientes cuestiones:
1 - ¿Por qué el alma manifiesta aptitudes tan diversas e independientes de las ideas adquiridas por la educación?
2 - ¿De dónde proviene la actitud extranormal de ciertos niños de cierta edad para tal arte, o ciencia, mientras otros no pasan de ser incapaces o mediocres durante toda la vida?
3 - ¿De dónde proceden las ideas innatas o intuitivas de unos,de las cuales carecen otros?
4 - ¿De dónde se originan en ciertos niños esos instintos precoces de vicios o virtudes, esos sentimientos innatos de dignidad o de bajeza, que contrastan con el medio en que han nacido?
5 - ¿Por qué, haciendo abstracción de la educación, están más adelantados unos hombres que otros?
6 - ¿Por qué hay salvajes y hombres civilizados? Si adoptáis a un niño hotentote recién nacido y lo educáis en los mejores colegios, ¿haréis de él algún día, un Laplace o un Newton?

Allan Kardec.

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                                             ¡SI A LA VIDA!
¡No AL ABORTO!


                                                           


Todos estamos destinados a sublime Luz. La vida es el más precioso tesoro que se conoce.   
     No siendo el hombre su autor, no le compete, interrumpirla a su gusto.
    El primer derecho natural del hombre, es el de “Vivir”. Por eso nadie  tiene  el derecho de atentar contra la vida de su semejante, ni el de hacer nada que pueda comprometer  su existencia corporal.
   Por el  desarrollo de la Ciencia, se comprueba fácilmente  el inicio de la vida  humana desde el momento de la concepción en el vientre materno, y no solamente cuando llega el nacimiento como muchos afirman.
   Constituye  un grave  compromiso  con las leyes  divinas la provocación del aborto en cualquier fase de la gestación, ya que  tal iniciativa impide que el Espíritu, ya ligado al embrión, renazca en el cuerpo físico que le servirá como instrumento de progreso.
   El Movimiento Espirita  es contrario a los proyectos  de revisión de la legislación que buscan la legalización del aborto en todos los países.
   Considerado el proceso reencarnatorio en los moldes de la normalidad y viabilidad, se observa, que muchas de las reencarnaciones  esperadas no se concretan, a pesar de toda la planificación hecha  tanto a nivel espiritual, como por los padres, que desean la oportunidad de recibir un hijo en el hogar.
   De todos los institutos sociales existentes en la Tierra, la familia es el más importante, desde el punto de vista que es en la familia donde existen los alicientes morales que rigen la vida.
   Es por la unión sexual entre el hombre  y la mujer que la Humanidad se perpetúa en el Planeta; en virtud de eso, entre los padres y los hijos  residen los mecanismos  de la sobrevivencia humana, en cuanto a las formas físicas, en la faz del orbe.
   El hombre atendiendo  a los impositivos del progreso, se alterna en la arena del mundo, albergando la posición de padre,  o desempeñando la posición  de hijo, aprendiendo gradualmente, en el cuerpo carnal, las lecciones profundas del amor, el mismo que lo erguirá, un día, en definitiva, desde la Tierra a los Cielos.
    El echo  calamitoso del aborto criminal, es debido exclusivamente a la huida del deber.
   Habitualmente, siempre,  es el Ser espiritual quien planifica  la formación de la familia, antes del renacimiento  terrestre,  con el amparo y supervisión de los benefactores espirituales, de modo semejante a la casa que levantamos en el mundo, con el apoyo de arquitectos y distintos técnicos.
    Comúnmente antiguos compañeros  de infelices aventuras, les programan la vuelta a nuestro lado, para mejorar su esperanza de elevación, rescate  y mejoría.
   Crean proyectos, alientan sugestiones, articulan previsiones  y expresan deseos respetables, englobando con ello saludables compromisos y deseos, que, si son observados,  redundaran  en bendiciones  para todo el grupo  de corazones que se vinculan  para la existencia. Sin embargo, cuando están instalados  en la Tierra, anestesian la conciencia,  expulsándolos de su compañía, con el pretexto de resguardar el propio confort.
    El hombre posee un alto potencial energético gracias al cual es capaz de mover objetos próximos o a distancia. Gracias a la fuerza de su pensamiento, actúa también sobre las energías  sutiles que unen  las moléculas  del embrión a la textura energética del psiquismo fetal.
    Las acciones mentales de la gestante tienen profunda repercusión sobre las obligaciones energéticas del espíritu reencarnante con su embrión.
  Hay madres que odian el hecho de estar embarazadas. Sea por las circunstancias dolorosas que motivaran el embarazo, sea por la dificultad de relacionarse  con el esposo o aun por la situación de penuria socio-económica e imaginando la gravedad  de la situación, considerando el estado en que se encuentran, sea cual fuera el motivo, desde los más complejos  hasta la más simple vanidad, el hecho es que esta situación se da con relativa frecuencia.
    No existe un crimen más doloroso entre los cometidos por el hombre; este crimen al que nos referimos lo es por la voluptuosidad  y crueldad con que es practicado, que se realiza igualmente en el silencio del santuario  domestico, en cualquier clínica legalizada o no,  o incluso  en el regazo de la Naturaleza…Este es un crimen terrible, porque la víctima  no tiene voz para suplicar piedad y ni brazos  robustos con los cuales poder defenderse  con movimientos de reacción.
   Este crimen es el aborto delictuoso, en el que padres conscientes determinan la muerte de los propios hijos, cortando su  existencia, antes que puedan sonreír a la bendición de la luz.
    Hombres de la Tierra, y sobre todo vosotras las madres, corazones sensibles que estáis  llamadas a la exaltación del amor  y de la vida, absteneos de semejante acción ya que os ocasionará el desequilibrio del alma, y oscurecerá vuestro camino.
   ¡Huid del satánico propósito de sofocar los frutos del propio seno, porque los ángeles tiernos que rechazáis son mensajeros de la Providencia, asomándose al  hogar en vuestro propio socorro, y, si no hay legislación humana que os señale la torpeza del infanticidio, en los recintos familiares o en la sombra de la noche, los ojos divinos de Nuestro Padre os contemplan desde el Cielo, llamándoos, en silencio, para las pruebas de reajuste, a fin de que se os expurgue en la conciencia la falta indiscutible que perpetráis.
   El aborto, sin duda  es un doloroso crimen. Arrancar  una criatura  del vientre materno  es infanticidio confesado. La mujer que promueve o comete  semejante delito ese ve constreñida,  por leyes irrevocables,  a sufrir alteraciones deprimentes en el centro genésico de su alma, predisponiéndose  generalmente  a dolorosas enfermedades, que pueden enfocarse  en la matriz,  vaginismo, metralgia, o infarto uterino, tumoraciones cancerosas,etc,,  flagelos esos con los cuales, muchas veces, desencarna, reclamándole en el  más Allá para responder, ante la Justicia Divina, por el crimen practicado. Es, entonces, cuando se reconoce rediviva, pero enferma  e infeliz porque, la incesante recapitulación  mental del acto abominable, a través del remordimiento, la retendrá por tiempo muy largo en la degeneración de las fuerzas genésicas.
    La visión religiosa distorsionada de las leyes universales, lleva a muchas criaturas  a destruirse psíquicamente. Uno de los flagelos de la humanidad, y una herencia judaico-cristiana de la civilización occidental, es la culpa. Aún hoy, hay residuos del espíritu de  autoflagelación por la culpabilidad  promovido en la mayoría de las religiones. Las mujeres presas en las redes del remordimiento y sufriendo el sofocante  sentimiento de culpa, al chocar con comentarios acusatorios, agravan sus sufrimientos. Son verdaderas como cuchilladas en heridas que cuestan cicatrizar. No olvidemos que abortos provocados en el ayer determinan muchos abortos espontáneos de hoy.
    El velo del olvido del pasado es el que posibilitará la reaproximación  de los Seres bajo el mismo techo.
   La sensación de vacío interior, mezclada con un sentimiento de culpa consciente e inconsciente  frecuentemente determina  una  vibración acentuadamente baje,en la pspicoesfera femenina.
   Paralelamente, la acción del magnetismo mental de los espíritus  expulsados pasará gradualmente  a exacerbar la situación depresiva materna.
  Pese al esfuerzo de protección ejercido por los mentores  amigos, en muchas circunstancias  se establece el vinculo simbiótico, sumergiéndose la madre en los tristes  rincones  de la psicopatología.
   Mujeres que corrompieron voluntariamente su centro genésico recibirán en el futuro a  criminales y suicidas, en el campo de la reencarnación, regenerando las energías sutiles del periespíritu, a través  del sacrificio nobilísimo con que se entregará  a los hijos torturados e infelices de su carne, aprendiendo a orar y  a servir con nobleza, mentalizando la maternidad pura y sana, que acabará reconquistando al precio de sufrimientos y justos trabajos…
   Al desencarnar, de vuelta al plano espiritual, la madre  presentará  en diversos niveles, conforme su grado de responsabilidad, distonías energéticas en forma de masas fluídicas oscuras que compondrán la estructura de su cuerpo espiritual (periespíritu) A pesar de ser atendidas con los recursos y técnicas terapéuticas existentes en el mundo espiritual, la llaga energética en muchos casos se mantiene, en función de gravedad y agravantes existentes.
    Las lesiones en la textura intima del psicosoma a que nos referimos, muchas veces solo pueden ser eliminadas mediante una próxima reencarnación de características expiatorias
    La expiación, lejos de tener  una connotación castigadora, pues este criterio no existe  en la planificación superior, es un método de eliminación de las desarmonías más profundas para la periferia  del nuevo cuerpo físico.
   La expiación siempre tiene una función regeneradora y constructiva, buscando restaurar  el equilibrio energético perdido por posturas  desequilibradas del pasado.
    Es importante resaltar, que no hay actos perversos que hayan sido planeados por la espiritualidad superior. Sería una miopía intelectual sin límite, la idea de que alguien debe reencarnar a fin de ser violado. La concepción del Dios castigador  y vengativo, ya no cabe  en el diccionario de los religiosos esclarecidos sobre la vida espiritual. Dios es una fuente inagotable  de amor. Es la Ley mayor  que  todo preside, Ley coordinadora  de las leyes naturales.
    Cada uno de nosotros al reencarnar  trajo todo su pasado impreso indeleblemente  en sí mismo. Espíritus que somos y por los numerosos viajes que hacemos, representados  por las múltiples vidas, poseemos en nuestro pasaporte numerosos matasellos de las posadas donde estuvimos en el pasado. Hoy la suma de estas experiencias se traduce en manantial energético que irradia constantemente desde nuestro interior hacia  la superficie.
     Nada puede justificar el aborto. Infanticidio execrable, el aborto delictivo es un cobarde proceso del que se utilizan los espíritus débiles para desligarse de la responsabilidad, incidiendo en un grave delito del que no se podrán  exonerar con facilidad.
     La vida es patrimonio divino que no puede ser ligeramente maltratado.
    Desde el momento en que los hombres se permiten la comunión carnal es justo que se sometan al tributo de la responsabilidad del acto libremente aceptado.
    El espíritu que es impedido de nacer volverá a intentar recomenzar  de nuevo en la Tierra.
     Tal vez en circunstancias  más graves  para el abortista, se produzca  el reencuentro con aquel de quien gustaría liberarse.
  Vinculados por compromisos de impostergable regularización, se imantan recíprocamente, dando inicio, cuando el amor no los favorece, a largos procesos de alienaciones crueles y enfermedades  de diversa etiología muy compleja.
   Todo hijo es un préstamo sagrado que debe ser valorado y mejorado por el cincel del amor  de los padres, para la oportuna devolución al Padre Celestial.
    No transfieras tu elevación espiritual a través de la criminal acción del aborto, aunque las dificultades y aflicciones sean el pavimento por donde marchan tus pies.
    Toda ascensión impone el encargo del sacrificio.
    La cima de la escalada, sin embargo, responde con paz y belleza a los obstáculos de la jornada. Llegarás a la honra de la paz, después de la conciencia liberada de los débitos y de las culpas.
Matar ¡Nunca!

 Trabajo original realizado por Merchita  Extraído de diversos libros espíritas
“Después de la Tempestad” de Divaldo Franco
“Gestación sublime intercambio” de Ricardo Bernardi. 
Adaptado   por Jose Luis Martín

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VISIÓN ESPÍRITA DE LAS ALMAS GEMELAS


           

      Encontrar un gran amor y ser feliz para siempre es el sueño de muchas personas. Muchos pasan la vida idealizando su querida mitad; otros, cuando se apasionan. después creen haber encontrado a la persona ideal, hasta el momento en que surgen los problemas y las decepciones. Como consecuencia, la desilusión parece desmoronar el castillo construido, como esculturas en la arena. Pero la gran duda permanece: ¿nuestra alma gemela realmente existe, o será apenas un sueño, fruto de la imaginación de los más románticos?

La creencia en el alma gemela viene desde la antigüedad. Una leyenda cuenta que, Dios, en el proceso de la creación del mundo, unió hombres y mujeres en un solo cuerpo ( la Bíblia dice que la mujer fue creada a partir de una costilla de Adán), pero después la caída del Paraíso de los seres humanos, estos se fueron distanciando del Creador.. Así, la unión fue interrumpida, dando origen al sexo opuesto. Desde entonces, el hombre y la mujer pasaron a buscar su otra mitad para sentirse plenos nuevamente.
La explicación bíblica y mitológica está cargada de informaciones profundas, que no fueron correctamente interpretadas, pueden dar la idea de algo fantasioso.
En la psicología junguiana, que lleva en cuenta el lenguaje simbólico, el término alma gemela simboliza el arquetipo de la afectividad. Algunos psicólogos explican que, con el tiempo, los conceptos evolucionarán y el príncipe encantado que llegaría montado en un caballo blanco, será sustituido por una persona que se identifique con los ideales del otro, la llamada mitad o compañero ideal.
  La ficción alimenta la fantasía de las personas y, muchas veces, huye de la realidad. Por tanto, necesitamos estar atentos al mensaje que está siendo pasado al público sobre ciertos conceptos.
El Espiritismo esclarece que no existen dos espíritus creados el uno exclusivamente para el otro, pero que pueden tener en común los mismos intereses o afinidades. El espíritu inmortal podrá encontrar en su trayectoria evolutiva muchos espíritus afines. Esa búsqueda del gran amor, significa la aspiración del alma para la felicidad completa.
La pregunta 286 de El Libro de los Espíritus, explica que dos personas que se conocieron y se estimaron en vidas anteriores no se reconocen, como muchos creen; apenas se sienten atraídos el uno hacia el otro. Eso acontece porque los recuerdos de las existencias pasadas traerían grandes inconvenientes; pero está claro que existen raras excepciones.

Esas cuestiones nos llevan a una reflexión: como aprender a convivir es aceptando las diferencias, como cuando hay una gran afinidad entre los espíritus afines, al final, cada cual traza su camino en la jornada evolutiva.

Escrito por Victor Rebelo   


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                                   DEFECTOS DEL ALMA


“Cuando eres sencillo y humilde porque no te crees por encima de nadie y aceptas tu verdad, entonces estás mas cerca de la sabiduría de Dios”.

                -Toni de Mello-“Testigo de la Luz”



Mucho se podría hablar aquí de estos importantes defectos humanos y espirituales, pero por no hacer excesivamente extensa esta obra, extractamos en la medida de lo posible, lo necesario para saber  identificar y distinguir estas lacras del alma:



Amor Propio”.-   En realidad solo es una forma de egoísmo, por tanto es un factor  negativo que se muestra en personas que solamente son capaces de amarse a sí mismas sin amar a los demás ni importarles ningún problema ajeno.  El común de las gentes lo confunde como algo positivo que deberíamos  tener todo el mundo. Ello sin duda, es porque se le confunde con la dignidad y la autoestima, que si son factores positivos. Sin embargo el amor propio es un defecto del alma que es un serio causante de vibraciones negativas que afectan a nuestra vida emocional.



        Este defecto está bastante relacionado con el Orgullo y a la Vanidad, además de con el Egoísmo, porque al que lo tiene , su propio orgullo le hace que le cueste mucho llegar a admitir y a reconocer sus debilidades y la responsabilidad por sus errores, encontrando siempre buenas disculpas para justificarse .

      Quien tiene este defecto moral, se vuelve  obcecado, intransigente y caprichoso, censurando en los demás ciertos defectos que son  precisamente los que él mismo tiene y no re conoce; sin embargo, precisamente por su estrecha relación con el orgullo y la vanidad, suelen presumir de unas virtudes y valores de los que en realidad carecen.
      Las personas con amor propio creen que lo merecen todo porque creen que son de mejor nivel o clase que los demás, y al no obtener todo aquello que creen merecer, terminan padeciendo problemas emocionales, depresiones, etc. Se suele decir de estas personas que manifiestan esta clase de egoísmo que es el amor propio, que  se sienten el "ombligo del mundo".
    Popularmente se suele considerar este defecto espiritual, como si fuese un factor positivo, cuando es todo lo contrario,  dando por ello culto a la terquedad, la soberbia, etc, a las que llega a considerar como virtudes.
   El amor propio suele ser en realidad el mayor obstáculo para el progreso espiritual, porque a partir de él aparecen como variedad del mismo toda clase de aspectos morales negativos y defectos que confunden con valores positivos. Suele originar vanidad, orgullo, odio, etc, y finalmente conduce a un aislamiento de las demás personas que les rodean y a causa de este defecto les rehuyen. Este defecto lleva a quienes lo tienen, a creerse por encima de los demás, y piensan que todo el mundo está al servicio de ellos, por lo que por sus exigencias e impertinencias provocan una mala relación con los demás que terminan por dejarles aislados .
El mejor antídoto para protegernos de este defecto moral que dá paso a tantos otros con los que se mezcla y confunde, es la humildad que nos hace ver con mayor claridad nuestros defectos, pudiendo así cerrar las puertas a sufrimientos innecesarios.
     No se le deberá confundir con el tesón, el empeño, el coraje y la lucha por conquistar metas difíciles ante las que lo fácil y cómodo sería rendirse: Estos últimos aspectos absolutamente positivos,  en realidad se tratan de  Dignidad, valor  de autoestima que nos hace sentir bien cuando el esfuerzo es por conquistar metas dignas y nobles.

El Orgullo es  un concepto que tiene una doble acepción: una positiva  y otra negativa. En su acepción positiva, no es un defecto, sino un sentimiento de satisfacción íntima  debida  al éxito obtenido con esfuerzo, a la consecución de metas y de logros, o también se refiere a satisfacción ante el reconocimiento de nuestros méritos por parte de los demás,  o los éxitos y bondades de un ser querido, etc .En su acepción negativa el orgullo positivo descrito, cuando es llevado a extremismos incontrolados, supone  llegar a un estado mental que lleva al indivíduo a sobrevalorarse y a considerarse superior a los demás ,a quienes suele mirar "por encima del hombro", con desdén, como si les fuesen inferiores y le tuviesen que agradecer el favor de su trato y estar siempre dispuestos para su servicio. El orgulloso, en este sentido, se suele encuentrar elevado sobre un falso pedestal, y suele caminar por la vida como el pavo real que  se pasea inflado, contoneándose con la cola abierta, y aparentando un valor del que en realidad carece.
Se debe de distinguir entre la Dignidad y el orgullo en su acepción negativa ; la dignidad la da el saber ser humilde, porque la humildad  reconoce los propios defectos y estimula al indivíduo a superar sus imperfecciones una vez reconocidas o detectadas, por tanto la dignidad es una gran virtud, pero el orgullo sin embargo, oculta y no reconoce las demás imperfecciones, por lo que  este es un gran defecto y al orgulloso le resulta muy difícil  reconocerlas y superarlas.
La sencillez humana demuestra la auténtica valía de la persona, y esta cualidad es una forma de ser, que nace y se desarrolla cuando se vence al orgullo y a la Vanidad  que  viene a ser lo mismo que el orgullo, pero adoptando posiciones de orgullo aún más acentuadas y ridículas, porque el vanidoso se suele intentar disfrazar con falsas virtudes.  La  vanidad  es una  consecuencia  del Amor Propio, y  se suele rodear de lujos y apariencias falsas, siendo esto la causa de la ruina económica y social en muchos hogares.
La persona vanidosa es en realidad víctima de un complejo profundo de inferioridad y esta siempre trata de destacar y de llamar la atención de los demás hacia su persona.
El vanidoso suele hacer facilmente elogios de sí mismo, alardeando de lo que en realidad no tiene o no es capaz de hacer, aparentando lo que no es en la realidad.
El vanidoso, su defecto lo emplea como máscara con la que se muestra en la vida para no mostrar una realidad de si mismo que no le gusta y desea ocultar. 
También actúa así porque desea sentirse importante o superior a los demás, dando un falso valor a su personalidad. Se infla como un pavo ante el halago o ante otras personas que él considera inferiores, y cuando no puede igualar  algún aspecto positivo de otra persona, la intenta desacreditar en su reputación.
Tanto la vanidad como el orgullo, tienen unos motivos psicológicos como por ejemplo, el deseo de sentirse importante o superior a los demás, dando un excesivo valor a la propia  personalidad. El vanidoso y el orgulloso se inflan ante los halagos y delante de personas con inferior nivel económico, cultural o social; asimismo  sufre o se molesta cuando encuentra a personas que sabe que valen mas que él y ante las que en el fondo siente envidia ; entonces suele intentar desacreditarlos al no poder igualarlos mediante su propia valía. El vanidoso en el fondo ,sufre un complejo de inferioridad y por eso trata de impresionar a los demás mediante apariencias y arrogancias que le hacen parecer ridículo.
 Por su altivez resulta antipático a los demás y antes o después suele terminar convertido en un ser desgraciado que se encuentra solo y aislado porque los demás se alejan de él y le abandonan en su postura.  A quien padece este defecto,  sus  propios prejuicios sociales y el qué dirán  le suelen  llegar a resultar una pesadilla.

         La ostentación y el ansia de aparentar lo que no se es o lo que no se tiene, suelen ocultar mucha vanidad, orgullo, altivez  y estupidez. Esto, en definitiva es la Arrogancia o endiosamiento ridículo, y tal vez el arrogante sufra porque en lo más íntimo comprende que a sí mismo no se puede engañar; se ve tal como es, y a veces se siente como  un ser inútil y por eso precisamente  trata de disimularlo con una falsa apariencia. La persona arrogante vive sientiendo interiormente su nulidad que intenta ocultar con el ropaje de su altivez y su estupidez, lo cual le aleja  otras personas que normalmente valen más que él y aparentan menos. Vive por ello en un complejo de inferioridad que le corroe internamente y le obliga a pretender engañarse a sí mismo continuamente.
 
 La Soberbia viene a ser  una especie de orgullo cargado de arrogancia y altanería, que llevados al límite, pueden llegar a alcanzar extremos de  violencia  y  crueldad
Ante estos defectos morales tan parecidos y tan abundantes, la  gran virtud que se les opone y llega a anularlos, es la Humildad; esta  virtud supone un estado mental de superación del amor propio, la vanidad y el orgullo, y es una manifestación de modestia y sencillez, que sabe rechazar los elogios y halagos, mientras los vanidosos van en busca de ellos. La humildad es la característica común de los espíritus grandes y fuertes . Es una virtud que conduce  a vivir sin apariencias, con naturalidad y sencillez.  Tal como enseñó Jesús de Nazaret, la humildad es una de las virtudes que nos acercan más a Dios en un acto de sumisión, mientras el orgullo y sus derivaciones suponen un estado de sublevación contra Dios del que  nos alejan. Mientras mas sencillos seamos como humanos, mas grandes seremos espiritualmente,  y esta sencillez se conquista en la medida que somos capaces de superar imperfecciones tales como la vanidad, el amor propio, el orgullo, etc.  En la medida que se adquiere el hábito de practicar la virtud de la humildad, se va adquiriendo el antídoto para alejar y debilitar los defectos espirituales señalados .   
No se debe confundir humildad con servilismo, pues mientras  esta es una fuerza del espíritu evolucionado, el servilismo supone una claudicación de la propia dignidad, bajeza, degradación y debilidad de espíritu.  Tampoco la humildad se debe confundir con  una apariencia de apocamiento, ni el humilde tiene por qué alejarse de los lugares de esparcimiento, pues la humildad no se opone a la dignidad personal, y lo indigno sería acobardarse ante otros a los que consideramos superiores a nosotros en algo y dejar por ello de disfrutar de lo común, al igual que hacen los demás.
- Jose Luis Martín-

“El orgullo divide a los hombres, la humildad los une “
-Lacordaire -

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Si te encuentras triste, eleva a Dios tus sentimientos, meditando en la alegría solar con la que, todas las mañanas, la Infinita Bondad del Padre disuelve las tinieblas, anunciando un día nuevo de oportunidades.
- Psicografía de Chico Xavier -

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