Monográfico sobre el Aborto:
- El Aborto
- Aborto,¿Signo de Progreso?
- Aborto Criminal
-El efecto abortivo de la "Píldora del día después".
-
*************************
EL ABORTO
Antes de abordar en profundidad este tema, es de señalar que el embrión humano y el feto, desde el punto de vista que da el conocimiento espiritual, no son simplemente un trozo de carne como si fuese un tumor que se desarrolla en el vientre de la mujer gestante, sino que se trata del cuerpo en desarrollo de un Ser espiritual que lo necesita para la reencarnación; debe ser considerado como un proyecto de vida humana de un Ser que ya existía desde antes de que comenzase el proceso de embarazo materno y que tal vez viene a este mundo con una misión importante y en cualquier caso, siempre necesaria.
Si existe un cuerpo en proceso de formación y desarrollo y sabemos que existe un Ser Espiritual ligado al mismo, cuya existencia es imprescindible para que ese cuerpo humano se forme y desarrolle, se puede afirmar que este cuerpo que se está formando y aun no ha nacido a este mundo, ya es un Ser humano, que además durante ese periodo está totalmente indefenso ante cualquier posible agresión exterior que se realice en contra de él. Y sin embargo las leyes que se vienen barajando al respecto, conductoras, en unos casos a salvaguardar al feto y otras veces a la mujer que renuncia a ser madre para convertirse en una homicida de su propio hijo, no reconocen ningún derecho al no nacido porque no es considerado como un ser humano. No es un forúnculo, ni un tumor, sino un ser, tal como reconocen. Entonces si el embrión o el feto es reconocido como un ser y no es humano, ¿de qué especie es?. ¿ Por qué cuando aún está dentro de su madre, no es nada que haya que respetar y cuando al final de la gestación sale al exterior ya es un bebé Humano, con derecho a protección , de modo que cualquier forma de atentado contra él es un delito?.
Existen dos clases de aborto: el espontáneo, y el provocado voluntariamente que es el que nos sume en el aspecto mas grave y delicado a la hora de analizarlo.
El aborto espontáneo es involuntario por parte de los padres, y sucede de forma imprevista o accidental bien sea por causas orgánicas o psicológicas, tal como pueden ser disturbios mentales y emocionales, deseo de gravidez que puede ocasionar una gestación sin ninguna presencia de un Espíritu reencarnante, lo cual supone una falta de directriz en la formación y desarrollo del cuerpo fetal que queda sin posibilidades de vivir porque le falta lo indispensable para su normal desarrollo, y es el Espíritu inmortal que existe antes que ese cuerpo que se forma bajo su influencia kármica, y necesita del cuerpo para seguir evolucionando en un nuevo proceso reencarnatorio, pero si no hay espíritu.... no hay ser humano, y en ese caso ese cuerpo no podría vivir ni desarrollarse, porque no sería nada, sino materia. Este supuesto es realmente poco frecuente pues, repito, para que haya formación y desarrollo del cuerpo, es necesario que lo haga bajo el molde periespiritual.
El aborto espontáneo también se puede deber a problemas espirituales de tipo kármico debidos a procesos obsesivos en la madre o en el Ser que pretende reencarnar interrumpiendo la evolución física de la gestación, o bien por intensas colisiones mentales entre los padres y el Espíritu reencarnante que sucumbe a unos fuertes sentimientos de desarmonía.
En todos estos casos independientemente de las causas físicas, psíquicas o espirituales que los provocan, existen siempre unas causas de tipo espiritual o kármico para el Ser renaciente o para sus padres , como por ejemplo en el caso de padres que alguna vez, en esta vida o en otras anteriores, han impedido voluntariamente por razones egoístas, el nacimiento de sus hijos, o que han abortado voluntariamente, o han ayudado a abortar a otros, etc.
Otro motivo por el que se puede producir el aborto espontáneo, podría ser a causa del temor que puede invadir al Ser reencarnante ante la perspectiva de volver a nacer en este mundo a causa de las pruebas ,tal vez difíciles, que sabe o intuye que le aguardan, y a pesar del apoyo, consuelos y consejos que recibe en el plano astral , finalmente el temor al fracaso le resulta insuperable y retrocede ante el proyecto de nacer y se resiste a llevar a término o de completar su proceso reencarnatorio por lo que , en principio, su decisión y libre albedrío es respetado en el plano astral donde se encuentra,
En el tema del aborto provocado, hay que diferenciar entre los casos en donde el embarazo o el parto se complican gravemente,poniendo en peligro real la vida de la mujer embarazada. Entonces puede llegar el extremo de tener que decidir entre la vida de la mujer gestante y la del feto, que si se salva es a costa de la vida de su madre. En este caso, lo mas ético y correcto es la decisión de salvar antes la vida de quien ya está en este mundo, que es la madre, antes que la del Ser que todavía no está en este mundo y que no es casual que se vea protagonista en esa tesitura.
Otro asunto mas problemático y delicado que queda en la conciencia de quien se ve implicado, es la responsabilidad por los abortos ejecutados voluntariamente, sin una necesidad ética real y con un trasfondo egoísta mas o menos camuflado, amparándose en las leyes humanas vigentes que suelen estar hechas a medida del sentido ético de los políticos y legisladores que con sus decisiones contentan a la multitud que premia con votos su trabajo de defender oscuros intereses humanos, pero careciendo absolutamente de ningún sentido ético, moral y espiritual.
Con el aborto, el lazo fluídico que une al Ser con su cuerpo en formación, es roto violentamente, lo cual produce una enorme perturbación al Espíritu reencarnante que si no es de cierto nivel de evolución moral, puede verse de este modo incitado a promover un proceso obsesivo y persecutorio contra quienes le dañaron.
El aborto provocado amparándose en otras excusas, siempre es un crimen contra la Humanidad, que se concreta contra un Ser humano vivo, pequeño e indefenso. El hecho de que su cuerpo sea todavía un embrión no disminuye la gravedad y responsabilidad del acto. A veces la excusa que se emplea incluso para hacerlo legal y tranquilizar conciencias, es el de alegar que el motivo es que el feto o el niño viene mal o con enfermedad o deformidad. En este caso habría que señalar que ningún espíritu viene a este mundo enfermo o deforme por casualidad, sino como resultado de la Ley de Consecuencias, y esa vida humana le es necesaria a él o a sus familiares para su evolución espiritual. Otras veces la “excusa” que se lleva hasta la legalidad para permitirlo, es el caso de violación. En este caso , reconociendo la dificultad natural para aceptarlo humanamente, desde un enfoque espiritual esta circunstancia puede ser una prueba y la criatura que está siendo generada es un Ser humano que no tiene culpa de aquella violación y al que se le debe dar una oportunidad de vida. Este crimen supone la interrupción del proceso de la necesaria reencarnación de un Espíritu , o sea, diciéndolo claro, es el crímen más abyecto que se puede cometer, porque se atenta y asesina a un ser humano inocente, como tal, sin culpa alguna de las circunstancias que acompañan su gestación, y totalmente indefenso.
Este acto supone un acto absolutamente violento y contrario a la Ley Divina pues frustra al Ser de una existencia humana necesaria.
Las leyes que legalizan este crimen amparándose en supuestos que no sean los de serio peligro para la vida de la madre, son injustificables desde un enfoque espiritual, moral y humano. La legalización del aborto no exime a nadie de lo que todos llevamos impreso en lo más íntimo de la conciencia y sin duda, el aborto provocado jamás debe ser una alternativa para solucionar un problema humano, sino que es fuente de mayores problemas agravando una situación humana que de por sí suele ser grave. El aborto provocado sin una justificación médica y ética real, que lo sea solamente ante un alto riesgo de la vida de la madre, siempre supone la destrucción innecesaria de un proyecto de vida humana que se había planificado minuciosamente desde el mundo espiritual, entorpeciendo y perjudicando el proceso evolutivo del Ser reencarnante, al impedirle acceder a una vida programada en el plano físico.
Hay quienes justifican el aborto como si se tratara de un simple método anticonceptivo más, porque quieren ignorar la realidad existencial del espíritu como Ser inmaterial y quieren creer que el feto solo es un trozo de carne que no tiene conciencia ni siente por el hecho de estar en una primera etapa de formación en la que aún no hay un cerebro formado, cosa que ya se ha experimentado que desde luego no es así. Quieren pensar que el embrión o feto es solamente como un tumor que se ha formado en el cuerpo de la madre, y que se puede destruir tranquilamente, sobre todo durante las primeras semanas de gestación, en las que todavía no tiene una figura humana completa o el cerebro que creen imprescindible para que un Ser humano tenga existencia y consciencia, pero sin tener en cuenta que el motor de ese proyecto de vida humana es un Ser espiritual existente y real que necesita de la reencarnación en una nueva vida humana. Con este credo amparado por las leyes humanas, si no interesa que nazca otro niño, se quita o se mata “esa cosa”, y ¡ya está¡, ¡ así de fácil ¡....
Esta forma de pensar y de actuar sobre este tema, con independencia de cómo se quiera considerar o tratar, es un gran crimen y un terrible error, porque demostrado está, que el niño tiene identidad y vida propia cuando está aún dentro de la madre en una primera etapa embrionaria, aunque dependa de ella para alimentarse, vivir y recibir impulsos emotivos. Quieren creer que solamente puede haber algo de consciencia a partir de los tres primeros meses de embarazo en adelante; ello lo justifica la creencia de que al no haber cerebro anteriormente , no puede haber consciencia, y sin embargo el cerebro y la consciencia son dos cosas diferentes e independientes. La mente no necesita obligadamente del cerebro, pues como se ha comprobado en las plantas, estas no tienen cerebro, y sin embargo tienen una percepción o conciencia primaria.
Muchos casos de abortos cometidos al amparo de estas leyes por motivos egoístas y de ignorancia espiritual,suelen generar posteriormente venganzas de los Seres que así fueron matados , y que pueden llegar a atormentar a los que destruyeron su cuerpo impidiéndoles nacer. Esta venganza se manifiesta en forma de casos de obsesión o subyugación espiritual, que se suelen tomar como casos de locura por la Psiquiatría, o por intervenciones demoniacas según las Iglesias Cristianas.
Como dato preocupante sobre este tema, es de añadir que la práctica abortiva aumenta cada año en todo el mundo.
Cualquiera que sean las causas por las que el aborto se pretenda justificar, este es un asunto que queda en la conciencia de quienes se ven implicados en ello, pero en cualquier caso no hay que olvidar que siempre supone la muerte de un Ser humano , por muy en formación que se encuentre su cuerpo. Por tanto , se juzgue o se disimule en argumentos como se quiera, este aborto criminal siempre es un asesinato por el que alguna vez tendrán que pagar sus autores ante las Leyes Divinas de las que somos individualmente responsables cuando las violentamos.
La mujer que alguna vez ha cometido esta grave acción no solo cometió un crimen contra el Ser reencarnante sino contra ella misma, pues desde antes de nacer programó su vida en la que iba a ser madre de ese Ser y con este acto traiciona su proyecto. Asimismo hiere su cuerpo periespiritual y esta lesión puede hacer que ya no pueda gestar más ni ahora ni más adelante, aunque su cuerpo físico esté sano. Todos estos argumentos los debieran conocer todas las personas en general, en particular las mujeres, que debieran conocer la realidad de la reencarnación y que este Ser que pretenden destruir con su acto egoísta, cobarde y criminal, en una vida anterior pudo ser un Ser querido con el que se comprometió a recibirlo como su madre en esta vida.
La persona que cometió ese error se puede redimir cuando arrepentida pide perdón al Espíritu víctima del aborto y a Dios, comenzando por el autoperdón consigo mismo y que apague este remordimiento con el trabajo por los demás, especialmente niños y personas desamparadas.
- Jose Luis Martín-
****************************
“Los padres no son los que deciden tener o no tener hijos. Los padres son los instrumentos que los Seres de Luz, responsables de las programaciones encarnatorias, que son la realidad de nuestra vida física, utilizarán para cumplir una parte del proyecto evolutivo en el campo material”
- Centro de Estudios de Ciencias Universales-
*******************************
ABORTO : ¿ SIGNO DE PROGRESO ?
Seguimos a
vueltas con el tema del aborto. Parece ser que conseguir cada vez unas más
amplias cuotas de plazos, es un logro social y necesario.
Quisiera ser
capaz de analizar esto con mente objetiva y racional, partiendo de un
conocimiento espiritual que asumo, por ser un conocimiento lógico que me aclara
coherentemente, temas importantes o transcendentes respecto al por qué y al
para qué de la vida, quienes somos, por
qué estamos aquí, de dónde venimos o a donde vamos.
Al aborto, la
sociedad materialista y atea, lo ha presentado como algo permisible de llevar a
cabo, cuando los métodos anticonceptivos no se aplicaron a tiempo, o cuando
estos fallaron. La idea es la de que lo que se aborta, no es un ser humano,
sino una especie de tumor que aparece inoportunamente en el seno de la mujer, y
que si se le destruye, este ni siente ni padece. Es, según dicen, una cosa viva
que está ahí por un fallo de los medios anticonceptivos y si se le permite desarrollarse y nacer, termina por convertirse en un ser humano, pero
mientras está “dentro”, no lo es y si se le mata, no pasa nada reprochable a la
conciencia; al fin y al cabo solo somos materia….
Y a esto,
se le da un plazo legal, por
otra parte muy fácil de burlar, de modo que se establece que hasta los tres
meses y medio de embarazo, la mujer puede abortar libremente, y a partir de
ahí, ya no se puede.
Yo me pregunto:
Aunque esto se pudiese cumplir con exactitud, ¿ Supone el hecho de reconocer
que lo que el primer día de plazo, una vez trascurridos esos tres meses y
medio, si lo destruimos, matamos a un
ser humano, y por tanto es un crímen, pero que el día anterior, aún se podía matar
porque esto que a partir de hoy ya es reconocido como humano, ayer no lo era
todavía?; ¿Era una cosa o un quiste?. ¿ Donde está la diferencia que otorga al
no nacido el derecho de ser
o no ser reconocido como humano de un día para otro , o el de nacer, o que alguien ajeno al mismo, como
su propia madre, lo condene a muerte, queriendo creer que lo que se quita de
encima es apenas un grano o un tumor?. Si así fuese , que esto fuese solo una excrecencia de
su cuerpo, sería lógico en efecto, que la mujer tuviese absoluta libertad para decidir si se lo quita o no, pero, ¿ un
embrión o un feto, es equiparable a un grano o a un tumor?
Creo que el
problema reside precisamente en el concepto materialista y sobre todo egoísta
de la vida, en el creer que el ser humano es solamente la materia de su cuerpo,
esa materia que podemos considerar como la de cualquier otro animal, destinada
a la putrefacción o a las cenizas de un crematorio tras su muerte. Si fuésemos solo esto, ¡
qué poca cosa seríamos!. Sin embargo, demostrado está por la psiquiatría, la
psicología, la parapsicología, el espiritismo y por la ciencia en general,-
aunque en este caso, ciencia ignorada o silenciada por los poderes fácticos
hedonistas- , que estos atributos que poseemos los humanos son atributos del alma , como lo son los
sentimientos, la voluntad, la inteligencia, la capacidad de amar, de sentir la
belleza, el arte, o de desarrollar la ciencia, todo eso no son secreciones de
nuestra materia cerebral, sino atributos
de ese Alma ignorada que anima a esa materia y que es independiente
de ella, tal como ya está largamente demostrado, aunque- como digo- ignorado a
propósito porque contradice las tesis hedonistas.
Por tanto pensemos por un momento que hasta
ahora, nos hemos considerado seres humanos, pensando solamente en el cuerpo
humano que tenemos, en el cuerpo mortal. Pero este cuerpo físico por sí solo, no
es nada más que un montón de materia repartida en forma de órganos, que cuando
están vivos y activos, son una máquina maravillosa por la que se manifiesta el
Espíritu que los dirige y ocupa, pero cuando les falta esa energía que llamamos vida, se disgrega y se convierte en materia putrefacta y finalmente
en polvo, como la materia de cualquier otro animal.
Por
otra parte en el seno de las religiones se ha plasmado a las gentes religiosas,
la idea de que somos seres humanos porque somos un cuerpo que tenemos un alma o
espíritu.
Pero si cambiamos ese concepto por el de que
realmente somos almas o espíritus, que no procedemos o acompañamos a un cuerpo,
sino que lo tenemos temporalmente, revistiendo con él, una identidad humana, la perspectiva de lo que
es o no es un ser humano, o cuando empieza o no empieza a serlo, cambia por
completo.
La lógica nos dice que en cuanto al
cuerpo físico se pueden
establecer diferencias que
por su grado de desarrollo puedan delimitar la línea de separación entre lo
que todavía no es, y lo que a partir de cierto momento ya es, aunque la idea siga repugnando a la razón
lógica, pero ahora, bajo esta nueva perspectiva de que somos un espíritu o alma
con un cuerpo, y no al revés, el panorama cambia por completo, porque, ¿ a
partir de que momento el embrión o el feto, está ligado a un espíritu o
alma con el que va a
emprender su aventura humana?.
Esta es la clave de la cuestión, pues
aun admitiendo la
existencia del alma, cabría
preguntar, que a partir de qué momento esta unión de ambas realidades que
conforman al ser humano total, es un hecho.
Aunque al Espiritismo, se le
haya echado tanta basura
encima, y tantas falsedades y bulos que han tratado y tratan de desfigurarlo,
sobre todo por parte de las propias religiones que no lo han visto como un
aliado, sino como un enemigo competidor, este se apoya en tres pilares fundamentales: el de la ciencia de observación del fenómeno mediúmnico
y parapsicológico, el de la
filosofía codificada por
Kardec a partir de las informaciones obtenidas desde el plano espiritual por Seres
que se comunican a través del citado fenómeno mediúmnico, y que ellos mismos se
identifican como espíritus, y de
ahí, el fruto y consecuencia final
de esta ciencia y esta filosofía: la moral. Una moral plenamente
coincidente y adaptada a la
de los Evangelios cristianos, a
los que confirma, aclara y
amplía en profundidad, sus aspectos
y enseñanzas éticas, que cuando se adoptan en el transcurrir de la vida humana,
ayudan a mejorar al ser humano, desarrollando y haciendo evolucionar su esencia o parte espiritual, lo
cual constituye un carácter
religioso, íntimo y personal, que nos
lleva a gozar del verdadero sentido de
la vida.
Y estos comunicados mediúmnicos
codificados por Kardec , nos señalan, entre otros muchísimos temas, que el
embrión y el feto, ya tienen un Ser espiritual asignado y unido a ellos, y son
los que facultan su
desarrollo hasta el momento de nacer, en cuyo momento se terminan de integrar totalmente
a la materia que les va a acompañar como cuerpo orgánico en su vida humana. Por
tanto, si se suprime este feto o este embrión, independientemente de la semana
de desarrollo físico en que se encuentre, estamos suprimiendo una vida humana,
estamos impidiendo que se lleve a cabo un proyecto de vida humana que ya está en marcha,
estamos interrumpiendo el proceso evolutivo de un Ser espiritual como nosotros,
que no ha sido creado por nosotros, y que tiene exactamente el mismo derecho
que nosotros a estar aquí, en este mundo. Hablando claro: Lo disfracen como lo
quieran disfrazar y justificar, el aborto es un crímen, ¡ Un Crimen horrendo ¡,
pues se lleva a cabo contra un ser humano absolutamente indefenso.
Creo que es muy
importante divulgar el conocimiento
espiritual a nivel popular, porque la realidad actual es la de que se está
cometiendo en todo el mundo el mayor genocidio de la historia, y cada uno, en
su grado de responsabilidad, tendrá que afrontar en el futuro el fruto de lo que ahora
tan inconscientemente se está sembrando.
Los hombres y
mujeres que hoy en día abogan por suprimir tan irresponsable y alegremente
estas vidas humanas no nacidas, también
bajo el pretexto de malformaciones congénitas detectadas en el feto, con lo
cual justifican su
eliminación, ( parece que vamos a un mundo de físicos
perfectos y guapos; el que no lo sea no tendrá derecho a nacer ni a
vivir- ¡ horrible ! - )
Ignoran que después de que suceda su propia
muerte, ( que siempre se ve tan remota y lejana, como si eso solo
sucediera a los demás pero a ellos no), seguirán viviendo como espíritus
desencarnados, ¡ pero viviendo !, y tendrán que volver a renacer bajo la
tutela de la Ley de Causa y Efecto, por la cual se
cosecha obligadamente lo que antes se sembró voluntariamente. Por tanto no será
de extrañar que esa cosecha sea la
de ser ellos mismos abortados una y otra vez, y a experimentar el horror que
experimentan todas esas criaturas que han destruido; o tal vez tengan que volver a nacer como niños sanos y perfectos,
para morir después de cualquier forma al
poco de nacer, de modo que
experimenten en si mismos lo que es una vida cortada desde su comienzo, como
las que ellos mismos cortaron en su pasado.
Por favor, no
cometamos más errores. Tengamos claro que un feto, sea cual sea su momento de
desarrollo, es un ser humano desde su concepción, al que acompaña un Espíritu como el que somos nosotros mismos- Divulguemos estos conceptos e
impidamos en la medida que nos sea posible, que esta matanza de inocentes
continúe.
Que cada uno en
la parcela de su responsabilidad individual, digamos
siempre de corazón: ¡ Sí a la
Vida ¡.
Jose Luis Martín
********************************
ABORTO CRIMINAL
El propósito de los inconscientes criminales abortistas de que no se proteja más al no nacido, ya lo han conseguido hasta en la ONU, cuya Carta Universal de Derechos
Humanos, defiende como primero y principal
el Derecho a la Vida, englobando otros derechos, tal como el derecho a
la libertad. Y este Tratado nacido como un paso hacia adelante en el progreso
moral humano, ahora es derogado por la misma ONU que promulgó el derecho a la vida que incluía al no nacido, y lo que fue un paso adelante en el progreso moral humano, ahora han dado otro paso para atrás.
En principio, a continuación vemos aquí el caso concreto de Costa Rica, cuyo
Código Penal autoriza el aborto, pero la situación es
perfectamente transferible al resto de
países que se encuentran actualmente en situaciones
semejantes respecto a la lucha por que se implante o no se implante el aborto
libre en sus leyes.
No es señal de progreso el que se creen y acepten este tipo de
leyes contra la vida, más bien al contrario, es una inequívoca señal de atraso
cultural, moral y humano, porque el progreso defiende y valora la vida como un bien
supremo al cual todos tenemos derecho, nacidos y no nacidos, pues un ser humano
no nacido, se mire como se mire o se le llame como se prefiera, es un ser humano
ya
existente y vivo, cuya vida depende de la vida de su madre, pero que es
independiente de la misma y que es totalmente indefenso ante los que atentan contra su vida.
Un diario independiente, se expresó en estos términos :
“Para conseguir su
aprobación, la estrategia de las feministas es la siguiente: se agarran al art.
121 del Código Penal de Costa Rica que despenaliza el aborto terapéutico para
pedir que se establezca un protocolo.
El art. 121 dice
textualmente lo siguiente:
“No es punible el
aborto practicado con consentimiento de la mujer por un médico o por una
obstétrica autorizada, cuando no hubiere sido posible la intervención del
primero, si se ha hecho con el fin de evitar un peligro para la vida o la salud
de la madre y éste no ha podido ser evitado por otros medios”
Las feministas obvian
el último extremo de que “no se haya podido evitar por otros medios” y se
aferran al peligro
para la salud de la madre.
Eso sí, interpretan
salud en sentido
amplio acogiéndose a la definición de la OMS: “estado de
bienestar”.
Es decir, si el embarazo produce ansiedad o
estrés en la madre, sería suficiente argumento para abortar.
Las feministas también
están utilizando dos casos dramáticos para sensibilizar.
Uno es el caso
de Aurora a
la que diagnosticaron que su hijo nacería muerto. El otro es Ana, que tuvo
un bebé
anencefálico, sin cerebro, y murió a los segundos de nacer.
Argumentan que
culminar el embarazo les produjo daño psicológico.
La realidad,
archidemostrada por estudios científicos es que -en estos casos graves- es mejor
terminar el embarazo y poderse despedir del bebé para poder iniciar el duelo.
Lo contrario es mucho
más doloroso psicológicamente porque supone la participación en la muerte del propio
hijo.
Afortunadamente la
ciencia permite ya que no haya que elegir entre una vida u otra. El bebé es también un paciente del
médico y el objetivo debe de ser salvar a los dos.
Sólo en el caso de un
embarazo hectópico es necesario intervenir. El bebé anidado en la trompa en
lugar de en el útero supone una amenaza cierta para la vida de la madre al tiempo
que es segura su inviabilidad.
Pero este caso no es
considerado aborto provocado en ningún texto científico.
Todo lo demás, es
sembrar sensiblería y confusión para IMPONER EL ABORTO.
Siguiendo con el
empeño abortista que niega la vida humana cuando el ser humano aun está en el
vientre de su madre, hoy vemos con
preocupación lo que es una mala noticia para la Humanidad:
En la
Revista Info-Vaticana, y firmado por Carlos Esteban, viene el siguiente
artículo informativo que nos señala que en la actualidad el
tema del aborto está siendo inclinado hacia lo que vienen pretendiendo
los partidos abortistas y los grupos feministas pro-abortistas :
“Ya es oficial: la ONU excluye al no
nacido del Derecho a la Vida
4 noviembre, 2017
Las Naciones Unidas llevan
desde su origen siendo, a través de sus distintas organizaciones filiales, un
poderoso patronizador del aborto en todo el mundo, financiando grupos como
Planned Parenthood o abogando por campañas malthusianas radicales, muy próximas
a veces a la coacción, en continentes enteros como África.
Pero, por otra parte, uno de los hitos de la ONU es la Carta Universal de los Derechos Humanos, el primero de los cuales es, naturalmente, la vida. Y hasta ahora, pese a todo su entusiasmo abortista, la posición oficial del concebido no nacido se beneficiaba indirectamente del silencio en cuanto a su inclusión -por lo demás, evidente- en este derecho universal.
Pero ahora, y a pesar de la oposición explícita de un centenar de gobiernos -como los de Polonia y Estados Unidos- y asociaciones provida, el Comité de Derechos Humanos de las Naciones Unidas ha excluido explícitamente a los no nacidos del derecho a la vida en la legislación internacional esta semana en Ginebra.
Estados Unidos, que había basado su independencia en “el derecho a la vida, a la libertad y a la búsqueda de la felicidad” de los que todos los hombres han sido dotados por su Creador, se vieron en su día ante una contradicción similar con la esclavitud, lo que obligó a la llamada Cláusula de los Tres Quintos, que en la práctica suponía negar a los negros una plena humanidad para no tener que reconocer su inalienable derecho a la libertad.
El borrador de la disposición ha estado a cargo del profesor de Derecho israelí Yuval Shany, que ha trabajado en la misma durante dos años, y que admite haber sabido que no encontraría obstáculos. Los 18 miembros del comité aprobaron el texto, que en algunos aspectos es aún más radical que el previsto previamente.
Así, en el texto queda claro no solo que el ser humano concebido y aún en el seno de su madre no tiene derecho a la vida, sino que el acceso al aborto se convierte en derecho, y ha de ser “efectivo” y al alcance de cualquier economía, exactamente lo que había recomendado el lobby abortista.
Ni una sola voz, ni un solo ‘experto’, mencionó en las deliberaciones preocupación alguna por el hecho de que el niño en el vientre materno siente dolor, según numerosas pruebas, ni se mencionaron los códigos de todo el mundo que prevén una protección especial para el nasciturus.
Para mayor sarcasmo, las discusiones estuvieron dominadas por un tono de moralina. “Soy muy sensible a mi consciencia”, llegó a decir el profesor italiano Mauro Politi, aunque lo que conmovía su conciencia no era la muerte del concebido mediante métodos brutales sino la idea de que alguna mujer pudiera verse privada del derecho de acabar con la vida de su hijo no nacido.”
¡ Que Dios perdone a esta pobre Humanidad, tan degradada !.
Pero, por otra parte, uno de los hitos de la ONU es la Carta Universal de los Derechos Humanos, el primero de los cuales es, naturalmente, la vida. Y hasta ahora, pese a todo su entusiasmo abortista, la posición oficial del concebido no nacido se beneficiaba indirectamente del silencio en cuanto a su inclusión -por lo demás, evidente- en este derecho universal.
Pero ahora, y a pesar de la oposición explícita de un centenar de gobiernos -como los de Polonia y Estados Unidos- y asociaciones provida, el Comité de Derechos Humanos de las Naciones Unidas ha excluido explícitamente a los no nacidos del derecho a la vida en la legislación internacional esta semana en Ginebra.
Estados Unidos, que había basado su independencia en “el derecho a la vida, a la libertad y a la búsqueda de la felicidad” de los que todos los hombres han sido dotados por su Creador, se vieron en su día ante una contradicción similar con la esclavitud, lo que obligó a la llamada Cláusula de los Tres Quintos, que en la práctica suponía negar a los negros una plena humanidad para no tener que reconocer su inalienable derecho a la libertad.
El borrador de la disposición ha estado a cargo del profesor de Derecho israelí Yuval Shany, que ha trabajado en la misma durante dos años, y que admite haber sabido que no encontraría obstáculos. Los 18 miembros del comité aprobaron el texto, que en algunos aspectos es aún más radical que el previsto previamente.
Así, en el texto queda claro no solo que el ser humano concebido y aún en el seno de su madre no tiene derecho a la vida, sino que el acceso al aborto se convierte en derecho, y ha de ser “efectivo” y al alcance de cualquier economía, exactamente lo que había recomendado el lobby abortista.
Ni una sola voz, ni un solo ‘experto’, mencionó en las deliberaciones preocupación alguna por el hecho de que el niño en el vientre materno siente dolor, según numerosas pruebas, ni se mencionaron los códigos de todo el mundo que prevén una protección especial para el nasciturus.
Para mayor sarcasmo, las discusiones estuvieron dominadas por un tono de moralina. “Soy muy sensible a mi consciencia”, llegó a decir el profesor italiano Mauro Politi, aunque lo que conmovía su conciencia no era la muerte del concebido mediante métodos brutales sino la idea de que alguna mujer pudiera verse privada del derecho de acabar con la vida de su hijo no nacido.”
¡ Que Dios perdone a esta pobre Humanidad, tan degradada !.
*********************************
El efecto abortivo de la píldora del día
después
Un estudio conducido
por un grupo de científicos españoles dirigido por el doctor Emilio Jesús
Alegre del Rey y publicado por el European Journal of Clinical Pharmacy reitera
el potencial efecto abortivo de la píldora del día después.
“Hemos demostrado que,
con las evidencias actuales, nadie puede continuar negando el efecto
contragestivo, abortivo, de esta píldora”, aseveraba el doctor Alegre del Rey
en una entrevista a Zenit publicada en
agosto de 2016.
El resultado del estudio muestra que, en
la mitad de los casos analizados en que los embarazos fueron impedidos por el
Levonorgestrel -la píldora del día después-, hubo fecundación y hubo
concepción del embrión, pero la carga hormonal de la píldora impidió al embrión
continuar su proceso de desarrollo, es decir, su vida.
El doctor Alegre del Rey destacaba que
“se ha repetido hasta la saciedad que la píldora del día después no es
abortiva”. Pero, para afirmar esto, señala este experto, se debe suponer
primero que el aborto consiste en poner fin a un embarazo y que el embarazo
empieza en el momento de la implantación del embrión en el útero.
“No es que el embarazo empiece en el
momento de la implantación, es que es a partir de ahí cuando es posible
detectarlo”, asegura Alegre del Rey, que recuerda, además, que el aborto “no es
poner fin a un embarazo, sino poner fin a la vida de un ser humano”. Por tanto,
lo que se debe tener en cuenta “no es cuándo queremos decir que empieza el
embarazo, sino cuándo comienza la vida humana”.
Sobre los motivos que se esconden tras
el silenciamiento de los efectos abortivos de la píldora del día después, el
doctor Alegre del Rey cree hay razones comerciales e ideológicas. Este experto
explica que cuando la píldora se comercializó hubo un notable rechazo porque la
ficha técnica del Levonorgestrel no omitía el posible efecto
anti-implantatorio y por tanto abortivo.
“Los productores, por tanto, usaron más tarde la estrategia de negar el efecto
abortivo”, señala Alegre del Rey.
****************************
****************************
No hay comentarios:
Publicar un comentario