sábado, 24 de junio de 2017

Gestación subrogada




Temas de hoy:

- Gestación Subrogada
- Ley de Sociedad
- Una falsa idea de las evocaciones
-La tentación posesiva


                                                                  ************************

      GESTACIÓN SUBROGADA

“Tú eres un alma. Todos somos almas. Somos almas incluso antes de nacer.”
J.M. Coetzee – Nobel de Literatura 2003
Uno de los temas que más polémica social está presentando últimamente es la cuestión de la Gestación Subrogada o vientres de alquiler. Es la posibilidad de tener un hijo propio en cuanto a su carga hereditaria y genética por parte de aquellas madres que no pueden tenerlo, pero que se desarrolla en el vientre de otra mujer. Por norma general el óvulo es fecundado por los futuros padres, implantándolo en la madre de alquiler mediante la técnica de fecundación in vitro.
Sin duda es un tema de permanente actualidad que genera una enorme controversia en diferentes aspectos; económicos, legales, morales, éticos, personales, etc.. Como siempre, estas cuestiones están siendo objeto de estudio por parte de los poderes públicos, a fin de implementar las consecuencias que tienen para los derechos de los padres, la gestante y el futuro niño. Sin embargo, desde nuestro punto de vista consideramos que la mayor de las divergencias de opinión se establece en el orden moral y ético.
Los conceptos religiosos o no religiosos, las creencias, y los principios que cada cual posee respecto a la vida influyen poderosamente en la opinión que tenemos al respecto. No obstante, desde aquí partimos del respeto absoluto a todas las posiciones, pero nos vemos en la responsabilidad de explicar nuestra opinión al respecto al amparo de la ciencia del espíritu, que nos otorga una visión trascendente y precisa sobre lo que es la vida y acerca de las cuestiones más importantes que la rodean.
En el caso concreto de esta técnica o método de reproducción, es en principio, una posibilidad viable que permite la concepción a los padres que han probado otros métodos y su incapacidad para conseguirla ha sido manifiesta. Ahora bien, antes de emitir una opinión definitiva hemos de considerar las causas y las consecuencias espirituales que intervienen en los tres actores de la cuestión: padres, gestante y niño futuro.
En primer lugar, el hecho de que los padres no puedan tener hijos, salvo accidentes y cuestiones puntuales, no es casualidad. Normalmente, el conocimiento espiritual nos indica que las dificultades para engendrar hijos se deben a reajustes morales y a los débitos del pasado contraídos por los padres respecto a esta circunstancia.
Pongamos un ejemplo –que no debe ser generalizado– pues hay muchos otros: unos padres que en vidas anteriores despreciaron la vida o practicaron el aborto voluntario, hoy en esta vida tienen dificultades para engendrar, pues entonces negaron la posibilidad de encarnar a un espíritu y hoy reciben la cosecha de la siembra realizada.
La práctica abortiva voluntaria y consciente, deformó el Centro Genésico de la madre en el periespíritu, y al volver a reencarnar, los problemas de ese deterioro se manifiestan en diversos problemas ginecológicos que le impiden concebir. Esto no quiere decir que deban renunciar a tener hijos; antes al contrario, esta dificultad estimula todavía más su deseo de tener hijos, por lo que -interiormente- buscan desesperadamente cumplir con la reparación de la falta que realizaron en el pasado, aunque no sean conscientes de ello, recurriendo a los métodos que sean necesarios, como en el caso que nos ocupa.
En segundo lugar, en esta circunstancia de gestación subrogada hemos de tener en cuenta siempre que se trata de “dos madres las que intervienen en el proceso”: la que aporta el huevo fecundado con su hereditariedad y su genética y la que cede su vientre en alquiler para posibilitar el desarrollo del embrión y del niño que llevará en su interior durante nueve meses.
Es preciso establecer que desde nuestro punto de vista la definición de “vientre de alquiler” no es del todo precisa; pues puede darse el caso de algún familiar, amigo o mujer de buena voluntad conocida de los padres que, en un acto de caridad y de altruismo sea capaz de ceder su vientre y amparar al nuevo niño por amor, sin interés alguno; simplemente por el hecho de ver felices a los futuros padres y procurar de esta forma una nueva vida. En esta circunstancia, y conociendo las intenciones nobles y generosas de la gestante, la gestación subrogada podría ser una solución al problema; quizás la única plausible o menos problemática en cuanto a las repercusiones ético-morales.
Sin embargo, esto no es lo común; por los casos conocidos, y alrededor de esta necesidad o desesperación por ser padres, se ha articulado todo un negocio con pingües beneficios, en los que agencias y empresas de fertilidad, venden al mejor postor y en condiciones de “explotación de la miseria” los vientres de alquiler de muchas mujeres que, por necesidades económicas se prestan a este tipo de prácticas por norma general.
Es preciso tener en cuenta que, como hemos explicado anteriormente, son dos madres las que intervienen en el proceso, y ofrecer un óvulo fecundado en vías de desarrollo a alguien desconocido, entraña un riesgo importante, no sólo el económico -que es el que menos importa aquí- sino el moral y personal. Pues según nos ilustra la psicología prenatal, el vínculo de la madre gestante con el nuevo bebé, se implementa desde el momento en que lo alberga en su vientre en fase embrionaria. A partir de ese momento, todos los pensamientos, emociones, sentimientos y actuaciones de la madre gestante repercutirán de forma directa en el niño que está formándose, condicionando su carácter, su psicología y su forma de ser después del nacimiento.
También sabemos que los deseos y pensamientos de los padres que ceden el óvulo fecundado pueden llegar al bebé y condicionar su desarrollo; aunque en menor medida que los de aquella que lo lleva en su vientre. No podemos obviar que, en una gestante que ofrece su cuerpo por interés meramente material, es más difícil que el amor y el deseo de tener ese hijo sea la emoción que dirija su voluntad y sus anhelos. Lo más normal será pensar, que las incomodidades que la gestación le irá produciendo serán para ella un inconveniente que, aunque no tenga más remedio que soportar, intentará que acaben cuanto antes.
Esta será lógicamente la posición mental de la gestante. Y con ello, El Niño verá condicionado su propio desarrollo emocional y psicológico desde el mismo vientre de su madre; pues según la psicología prenatal, el feto capta perfectamente las emociones de incomodidad que produce en la gestante y su animadversión al respecto; algo tan diferente al sentimiento amoroso de una madre que soporta toda la incomodidad de la gestación, arropando a su hijito querido con emociones positivas y sentimientos de protección, alegría y seguridad.
Así pues, y bajo el aspecto moral que nos compete desarrollar aquí, nunca presentaríamos una postura beligerante respecto a este método de reproducción, siempre y cuando nos podamos asegurar de quién es la gestante de nuestro hijo; sabiendo como piensa, cómo actúa, los motivos que la inducen a prestar su vientre y las condiciones de salud mental y emocional, psicológicas, sociales y económicas en las que se desenvuelve, decidiendo en consecuencia. Si embargo consideramos que actualmente, y mientras la ciencia no avance sustancialmente, en este método reproductivo todavía no se dan las circunstancias y garantías adecuadas para una correcta evolución del desarrollo completo del niño (psicológico, emocional y biológico) salvo en casos excepcionales, y por ello el proceso presenta más inconvenientes que ventajas.
Si únicamente son intereses materiales o económicos los que motivan a la gestante a traer nuestro hijo al mundo, es preciso pensarlo con detenimiento; pues corremos el riesgo de que la formación y desarrollo de nuestro hijo durante esos nueve meses, condicione de forma drástica su posterior crecimiento afectivo, biológico, psicológico y espiritual, apareciendo en su crecimiento como niño las perturbaciones y deficiencias emocionales, o las disfunciones o deformaciones biológicas como consecuencia del escaso cuidado de la gestante o de la perniciosa influencia de una desordenada conducta mental o emocional.
En esto, como en muchos aspectos de la vida, la intención y la disposición es lo que cuenta; ante un acto de caridad y altruismo realizado por una persona -mental y emocionalmente equilibrada- que nos ofrece por afecto esta posibilidad de gestar a nuestro hijo, podríamos aceptar el riesgo; asegurándonos primero, de lo contrario hemos de explorar otras vías. Hemos de convenir en el hecho de que existen otros métodos reproductivos para tener un hijo. Y si todos ellos se agotan, siempre queda el recurso de adoptar un niño, o de criar el hijo de otros que no pueden hacerlo y son condenados a la pobreza, la exclusión y el sufrimiento de por vida.
Si optamos por estas otras formas de ser padres, podemos confirmar que, el compromiso espiritual de reparación aceptado por nuestras faltas y errores del pasado queda saldado; solucionando así la deuda con las leyes de causa y efecto que rigen el proceso evolutivo del espíritu humano. Siendo así que en una próxima reencarnación, ningún obstáculo impedirá nuestra maternidad; gozando de las condiciones adecuadas para engendrar hijos, y ofreciendo las oportunidades de progreso necesarias a aquellos que son queridos y amados por nosotros en el transcurso de nuestra jornada evolutiva a través de las vidas sucesivas.
“Es difícil creer que el destino de un hombre sea tan bajo que le lleve a nacer sólo para morir”
Mary Shelley – Escritora
Gestación Subrogada por Redacción  Amor, paz y caridad

                                                     *********************************
                                                                     
               VI. Ley de sociedad

798. El espiritismo, ¿llegará a ser una creencia común, o permanecerá
como patrimonio de algunas personas?

“Sin duda llegará a ser una creencia común, y señalará una nueva era
en la historia de la humanidad, porque está en la naturaleza y porque
ha llegado el tiempo en que debe ocupar su lugar entre los
conocimientos humanos. No obstante, habrá que sostener grandes
luchas, más aún contra los intereses que contra la convicción, pues
no se puede ocultar que existen personas interesadas en combatirlo,
algunas por amor propio y otras por causas absolutamente materiales.
Con todo, dado que sus contradictores van quedando cada vez más
aislados, se verán en la obligación de pensar como todo el mundo, so
pena de ponerse en ridículo.”
Las ideas sólo se transforman con el tiempo, y nunca de manera
súbita. Se debilitan generación tras generación y concluyen por
desaparecer poco a poco junto con quienes las profesan, que
serán reemplazados por otros individuos imbuidos de nuevos
principios, tal como sucede con las ideas políticas. Reparad en
el paganismo: no cabe duda de que en la actualidadnadie profesa
las ideas religiosas de aquellos tiempos. No obstante,muchos
siglos después del advenimiento del cristianismo, esas ideas han
dejado huellas que sólo la renovación total de los pueblos pudo
borrar. Lo mismo ocurrirá con el espiritismo. Realiza
considerables progresos, pero todavía habrá, durante dos o tres
generaciones, un fermento de incredulidad que sólo el tiempo
habrá de disipar. Con todo, su marcha será más rápida que la del
cristianismo, porque el propio cristianismo le abre camino y le
sirve de apoyo. El cristianismo debía destruir. El espiritismo
sólo tiene que edificar.
799. ¿De qué modo el espiritismo puede contribuir al progreso?
“Al destruir al materialismo, que es una de las plagas de la sociedad, el espiritismo hace que los hombres comprendan dónde reside su verdadero interés. Dado que la vida futura ya no está velada por la duda, el hombre comprenderá mejor que puede garantizar su porvenir mediante el presente. Al destruir los prejuicios sectarios, de castas y de colores, el espiritismo enseña a los hombres la gran solidaridad que debe unirlos como hermanos.”
800. ¿No es de temer que el espiritismo no pueda triunfar sobre la indiferencia de los hombres y su apego a las cosas materiales?
“Sería conocer muy poco a los hombres si se pensara que una causa, sea cual fuere, podría transformarlos como por encanto. Las ideas se modifican poco a poco según los individuos, y se necesitan generaciones para borrar por completo las huellas de los antiguos hábitos. Así pues, la transformación sólo puede operarse con el tiempo, gradualmente, poco a poco. En cada generación, una parte del velo se disipa. El espiritismo viene a rasgarlo por completo. Con todo, aunque no produjese otro resultado más que corregir un solo defecto en un hombre, le habrá hecho dar un paso adelante, y por eso mismo le habrá hecho un gran bien, pues ese primer paso hará que los siguientes le resulten más fáciles.”
801. ¿Por qué los Espíritus no han enseñado en todos los tiempos lo que enseñan hoy? “Vosotros no enseñáis a los niños lo mismo que a los adultos, como tampoco le dais al recién nacido un alimento que no podría digerir. Cada cosa a su tiempo. Los Espíritus han enseñado muchas cosas que los hombres no comprendieron o que desvirtuaron, pero que ahora pueden comprender. Mediante su enseñanza, aunque incompleta, prepararon el terreno para recibir la simiente que ahora va a dar fruto.”
802. Dado que el espiritismo debe señalar un progreso en la humanidad, ¿por qué los Espíritus no apresuran ese progreso por medio de manifestaciones de tal modo generalizadas y patentes, que la convicción alcance incluso a los más incrédulos?
“Querríais milagros. Dios los siembra a manos llenas a vuestro paso, pero todavía tenéis hombres que reniegan de Él. El propio Cristo, ¿convenció acaso a sus contemporáneos con los prodigios que realizaba? ¿No veis hoy a hombres que niegan los hechos más patentes que ocurren ante sus propios ojos? ¿No hay entre vosotros quienes afirman que no creerían aunque viesen? No, Dios no quiere conducir a los hombres mediante prodigios. En su bondad, quiere dejarles el mérito de que se convenzan por medio de su propia razón.
LIBRO DE LOS ESPÍRITUS. - Allan kardec
El progreso de la Humanidad, sin duda, es lento, incluso muy lento, pero constaste e incesante.
El Espiritismo es uno de esos movimientos y se destina no sólo a abrir un campo diferente de investigaciones a la Ciencia, sino principalmente a marcar una nueva era en la Historia de la Humanidad
El Espiritismo se sostiene en las enseñanzas de Jesús
- Susana Gómez-
El espiritismo se basa en la libertad de pensamientos y expresiones , de voluntades personales
y de conformar el comportamiento de bien común, de una actitud, de responsabilidad, de
respeto y de buena disposición.
El espiritismo se va aprendiendo de manera pausada, que se entiendan los puntos de
que se trata y de las ideas que Dios quiere darnos a entender. Es una herramienta que debemos saber utilizar para nuestro adelantamiento.
EL ESPIRITISMO NO ES UNA RELIGIÓN ES UNA DOCTRINA.
                                                ****************************

                                                      

               UNA FALSA IDEA SOBRE LAS   
                       EVOCACIONES

Ciertas personas se forman una idea muy falsa de las evocaciones. Las hay que creen que 
consisten en hacer venir a los muertos, con el aparato lúgubre de la tumba. Sólo en los romances, en los cuentos fantásticos de aparecidos y en el teatro, se ve a los muertos desencarnados salir de sus sepulcros, tapujados con sábanas, y haciendo crujir los huesos. El Espiritismo no ha hecho nunca milagros de ninguna clase, y menos el de resucitar un cuerpo muerto. Cuando el cuerpo está en la fosa, está en ella definitivamente. Pero el ser espiritual, fluídico, inteligente, no ha quedado allí con su envoltura grosera, sino que se ha separado de ésta en el momento de la muerte, y una vez verificada la operación, no tiene nada en común con ella
 (¿Qué es el Espiritismo?, cap. II, n.º 48).
                         *****************

                 


                                       
                LA TENTACIÓN POSESIVA

En cuanto a la tentación posesiva, que es cuando el espiritu radica su influencia más bien en la conciencia que en el entendimiento, hay una manera de conocerla, y combatirla, y es oponer en estado de conciencia un deseo de justicia muy recta; por ejemplo; ¿es una repugnancia a una persona o personas determinadas? Aquí debe oponerse un espíritu de caridad a toda prueba; si es un amor desmedido debe combatirse con un espíritu recto de justicia; por ejemplo: ¿ es justo que por esta persona sientas lo que te pasa? Si no es justo, se puede estar seguro que aquella impresión es sostenida por algún enemigo del espacio, mayormente si aquel deseo o amor desmedido puede dar lugar a hacer sentir los deseos de alguna pasión, o si bien las atenciones que se sienten por aquella persona pueden dar lugar a alterar la armonia, ya dentro de la familia, o dentro de nuestras relaciones íntimas. 
Ya he dicho que la tentación tiene muchas maneras de emplearse entre los encarnados; pero si el espíritu se escuda con verdadero espíritu de justicia, descubrirá en seguida la causa y podrá combatirla; y si con el querer solo no se logra separar influencias que perjudiquen a la moral y al cumplimiento del deber, entonces debe acudirse a la oración, evocar con estusiasmo y fe a nuestro guia espiritual y a influencias de espiritus elevados, que ellos acudirán con gusto a nuestro llamamiento y se verán satisfechos en sus deseos, que siempre son de que sus hermanos de la tierra progresen y se eleven; así pues, por afligida que sea nuestra situación, nunca debemos desconfiar de los socorros de arriba, y mucho más si éstos se piden. En estos casos es cuando están mejor aplicadas las palabras del Señor: <Pedid y se os dará; llamad y se os abrirá; velad y orad>; y al mismo tiempo, mientras se sufre, se debe poner una resignación a toda prueba y una paciencia inalterable, que es lo que más cansa al espíritu tentador; de manera que si en los estados de nuestro ánimo y en las tentaciones de nuestra mente oponemos siempre un espíritu de recta justicia y una resignación y paciencia a toda prueba opondremos una valla al espiritu de tinieblas que nunca podrá inducirnos al error y no nos podrá causar un trastorno ni retroceso ninguno; al contrario, obrando de esta manera, toda las molestias que el espíritu de tinieblas nos podrá causar tendrán un resultado contraproducente a lo que el tal espíritu se proponga, y es que con los sufrimientos de la tentación, sufridos y combatidos con espíritu de recta justicia, con paciencia y resignación, el ser encarnado progresa y da pruebas al Padre que por amor al cumplimiento de la ley sufre, se resigna y espera, suprema manera de obrar de los espíritus que han vivido, viven y vivirán en la tierra. 
Con esta manera de obrar, el espíritu encarnado en la tierra no se evitará todas las molestias y sufrimientos que nos pueden causar los espíritus atrasados que populan a nuestro alrededor, pero triunfará de todas sus acometidas, y los sufrimientos que le causen le servirán para progresar mucho. 
Si obramos de la manera que dejo dicha, podremos repetir las palabras de un gran escritor antiguo; Cuando se resiste la tentación, es la Hormiga del León; más cuando el ser se entrega a ella, es el León de la Hormiga, pues sigamos siendo siempre el León y la tentación la Hormiga, y así no tendremos que temerla, sino al contrario, seremos dueños de nosotros mismos, pensando, sintiendo y queriendo o deseando únicamente lo que el deber nos imponga; así nos evitaremos muchas angustias en la vida y nos prepararemos para morar más tarde en el reino de Dios. 
Miguel Vives. 


                        ******************












No hay comentarios: