INQUIETUDES ESPÍRITAS
1.- Escala Espírita: Observaciones preliminares
2.- ¡ Ir y Volver !
3.- ¿La existencia de "niños prodigio" se puede justificar por la herencia genética?
4.-¿ Como contacta el médium con el Espíritu comunicante?
*********************************
Observaciones preliminares.-
La clasificación de los Espíritus se basa sobre su grado de adelanto, las cualidades que han adquirido y las imperfecciones de que han de despojarse todavía. Por lo demás, esa clasificación no tiene nada de absoluto. Cada categoría representa un carácter definido sólo en su conjunto. Pero de un grado al siguiente la transición es imperceptible y en los límites de los grados el matiz se esfuma, igual que en los reinos de la Naturaleza, del modo que ocurre con los colores del arco iris e incluso con los diferentes períodos de la vida humana. En consecuencia, se puede concebir una cantidad más o menos grande de clases, según sea el punto de vista desde el cual se enfoque la cuestión. Ocurre aquí lo que en todo sistema de clasificación científica: pueden ser más o menos completos y más o menos racionales y cómodos para la inteligencia, pero, sean como fueren, no alteran en nada el fondo de la ciencia. Por tanto, los Espíritus interrogados acerca de este punto han podido diferir en el número de categorías, sin que de ello pueda extraerse mayor transcendencia. Se ha reparado en esta contradicción aparente, sin reflexionar en el hecho que los Espíritus no otorgan importancia ninguna a lo que es puro convencionalismo. Para ellos, el pensamiento significa todo. Dejan a nuestro arbitrio la forma, la elección de los términos, las clasificaciones; en suma, los sistemas.
L.E.
**************************
¡ IR Y VOLVER !
Siempre he creído que los terrenales, al dejar este mundo teníamos que volver a él, excepto raras excepciones, pues no veía en mis compañeros de destierro conocimientos y virtudes suficientes para poder ir a mundos mejores; pero creía también que los Espíritus reposaban en el espacio y adquirían nuevas fuerzas para emprender la marcha a la Tierra; mas según dice un Espíritu, hay seres tan desgraciados que viven en una turbación perpetua y conforme dejan la Tierra, sin darse cuenta de que han desencarnado, viendo su cuerpo encerrado en estrecho ataúd, escuchando los lamentos de sus deudos, preguntando a unos y a otros qué sucede en torno suyo, se precipitan de nuevo en el mundo que han dejado, y huyendo de sí mismos; y este ir y volver puede durar muchos siglos, porque una agonía le alcanza otra agonía; un dolor a otro dolor; una turbación a otra turbación; un desacierto a otro desacierto. Y yo, conforme iba hablando el médium, sentía un terror indescriptible. ¡ Ir y volver sin descanso !, ¡qué tormento tan horrible!.
Esta turbación continua tiene mucha semejanza con las penas del infierno, pues aunque no sea eterna, todo el tiempo que dure será de espantosa expiación para el Espíritu. Ya conozco yo a varias personas que, indudablemente, estarán sufriendo la pena de ir y volver desde la Tierra al espacio sin interrupción, porque parecen dementes sin camisa de fuerza. ¡Qué alocamiento!, ¡ Qué falta de lógica!, ¡ Qué perversión del buen sentido !, ¡ Qué desconocimiento de la grandeza de la Creación!. Estos seres si que tienen oídos y no oyen, ojos y no ven, pies y no andan, cerebro pero no les funciona, que todo en ellos es anormal, que se crean el vacío en torno suyo, porque su trato es tan poco agradable, que nunca piensan como los demás; siempre han de llevar la contraria por el gusto de contradecir; para ellos nadie hace nada, todos son ignorantes y mal intencionados, y hasta para querer son insoportables, porque son celosos, incorregibles, maliciosos, suspicaces hasta el extremo que amoscan por una sonrisa, por un gesto, un ademán; siempre están descontentos de todo el mundo y de sí mismos; la vida para ellos es una carga enojosa; son seres verdaderamente desequilibrados, que nunca saben lo que quieren y lo que desean; disputan por el gusto de disputar; contradicen por armar camorra en todas partes, y el número de sus amigos es tan escaso, que donde van se forma el vacío; esto les aburre, les exaspera, les impacienta, hasta el punto de que, aunque sea el mozo del café o el vendedor de periódicos, gritan y alborotan por el más leve motivo.
Siempre me han causado profunda compasión los camorristas y disputadores de oficio, y más que aquellos he compadecido a su familia, pero desde que oí a un Espíritu explicar con todo lujo de detalles lo que sufrían los Espíritus condenados a ir y volver desde la Tierra al espacio, siento lástima inmensa por esos viajeros que miran sin ver y que de seres racionales se convierten en cosas que ruedan por la pendiente de la vida impulsados por su propia ignorancia. ¡ Infelices ! .... ¡ y pensar que ellos forjan los eslabones de su cadena !..... ¡ que ellos son los árbitros de su destino !..... ¡ que ellos malgastan su tiempo tan inútilmente !....
Yo, que soy tan avara del tiempo, que me gusta aprovecharlo lo más posible, ¡ cuanto sufriría si me viera en el espacio obligada por mis torpezas a desandar el camino andado! y a desandarlo sin haber reposado, sin haber contemplado una mínima parte del mundo de los Espíritus, sin haber cambiado impresiones con los seres amigos que encontrara a mi paso.
¡ Convertir la fábula del Judío errante en una espantosa realidad ! Oír la voz de la justicia eterna que nos dijera: ¡ Anda!,... ¡anda!,... ¡anda! ... ¡ Qué horror ! ¡ qué mayor infierno que poner en práctica el movimiento continuo !. Y no es que me guste la vida contemplativa, no es que yo tenga propósitos de permanecer en el espacio por mucho tiempo; porque como no creo que tenga hecho mi Espíritu un adelanto excepcional, me hago cargo de que volveré a la Tierra a continuar mi trabajo interrumpido, millones de veces, pero quiero saber por qué vuelvo, por qué lucho, por qué espero. Trabajar como trabajan los jumentos, dando vueltas a la noria sin ver el pequeño círculo que recorren, eso no es vivir.
Honda impresión causó en mi mente la comunicación cuyo tema fue ir y volver; no perdí una sola palabra del médium, porque ya había pensado yo muchas veces en lo que sentía el Espíritu al verse en el espacio, y aunque hay sobra de comunica iones que tratan el asunto, con todo, yo creo que habrá mucha diferencia de lo vivo a lo pintado; mejor dicho: como no hay dos Espíritus que tengan el mismo grado de adelanto, cada uno mirará con sus propios ojos y verá el panorama distinto.
¿Cómo lo veré yo?. Esta pregunta me la he hecho miles de veces y desde que oí la comunicación sobre el ir y el volver de los Espíritus, no hay noche que al entregarme al sueño no piense largo rato en mi futuro viaje, y al despertar por la mañana murmuro con tristeza: ¿ que será de mí?. Pero mi abatimiento desaparece como por encanto y exclamo con verdadera contrición: ¡ Dios mío, que sea buena y que trabaje mucho!. Esta es mi oración matinal; no pronuncio otra en todo el día. Yo digo como Víctor Hugo: El que trabaja ora, y yo trabajo en la propaganda del Espiritismo cuanto puedo y cuanto sé. Yo soy de los que creen que el movimiento se demuestra andando, pero sabiendo de donde se parte y por qué se parte; en cuanto al punto de llegada, ya es más difícil saberlo a punto fijo; mejor dicho, es imposible. Nadie sabe cuando llegará al espacio, ni aun el suicida, porque ignora el tiempo que permanecerá en la turbación creyendo que está atentando contra su vida.
A veces una reflexión me consuela: El verdadero espiritista tiene mucho ganado para no ir y volver sin descanso; el que estudia la vida de ultratumba, procura despojarse de algunos defectos y adquirir algunas virtudes, y con tan buenos propósitos creo que irá al espacio y volverá a la Tierra, sabiendo lo que vale ir y volver.
- Amalia Domingo Soler-
*******************************
¿La existencia de “niños prodigio, se puede justificar por la “herencia genética”?
Hay una teoría o creencia cientifista de carácter materialista, ( como casi toda la Ciencia en la actualidad), que afirma que todo el contenido de conocimientos y sabiduría procedente de muchas generaciones de antepasados se transmite a través del ADN celular, y no solamente la capacidad de aprendizaje, sino también los conocimientos específicos, la sabiduría, las habilidades, los sentimientos, las vivencias y hasta los recuerdos del pasado; esto sin duda, no deja de ser un dogma materialista sin sentido .
Sin embargo esta clase de "recuerdos" y de extraordinarios aprendizajes realizados a muy temprana edad, solamente han podido llegar hasta nuestra materia cerebral por la vía del estudio y del análisis, lo cual en el caso de los niños pequeños, no les ha dado tiempo para que suceda así.
Los genes al fin y al cabo, no dejan de ser sustancia celular, y según esta tesis de la Ciencia Oficial, los conocimientos y hasta los sentimientos y la capacidad de amar o de crear el arte, que son una capacidad, o una percepción o habilidad psíquica, inmaterial, sutil y muchas veces extrasensorial, se heredan a través de las cadenas del ADN molecular de
las células y así, generación tras generación, se van transmitiendo los recuerdos, aptitudes,
sensibilidades, así como las experiencias y recuerdos claros y detallados de otras épocas. Pero una cosa es que las características físicas, y las capacidades psíquicas, así como las características neurológicas y temperamentales que nos limitan o condicionan, se transmitan a través de los genes, condicionando la manifestación del temperamento y del carácter tal como lo son en su globalidad total, o sea, el carácter y la capacidad mental, como el temperamento y personalidad individual y otra bien distinta es que los recuerdos concretos y detallados, los conocimientos, emociones, el desarrollo del sentido del arte y su manifestación, las habilidades no aprendidas y el desarrollo de conocimiento intelectual, se puedan atribuir por completo a la herencia genética.
Así, el niño puede heredar la inteligencia necesaria para aprender y desarrollar matemáticas, pero el conocimiento de las matemáticas no lo hereda, sino que lo aprende, y si no lo aprendió en esta existencia, es porque lo ha sido ya en otra anterior.
Podríamos decir como un símil, que de nuestros ancestros heredamos el vaso, que puede ser precioso, pero el contenido del vaso lo pusimos nosotros.
Por los genes solamente se transmiten las capacidades físicas, cerebrales y nerviosas que dotan al Ser de la herencia humana que le va a condicionar y a limitar su temperamento y su inteligencia durante toda su vida, y estos sí que los hereda de los padres y antepasados, lo cual explica los parecidos físicos y de caracteres y aptitudes dentro de las familias y de los grupos familiares, ( son el vaso referido en el símil), pero sin embargo no hereda la “ciencia infusa” ni los conocimientos y aptitudes innatas que aparecen en ciertos seres humanos y que no poseen otros miembros de la familia ni se conocen en sus antepasados ( este es el contenido del vaso en el anterior símil).
Los hombres de ciencia que esta tesis de la "herencia genética del conocimiento" tan puramente materialista que sostienen, todo por no admitir la realidad espiritual como un Ente inmaterial pero absolutamente real que acompaña a la materia, creen que la reencarnación solo es una teoría propia de cerebros fértiles en imaginación, y a los conocimientos y aptitudes naturales y espontáneos le encuentran la única explicación de la herencia genética, sin más análisis imparcial de su tesis. Sin embargo tampoco explican cómo estos niños prodigio son muchas veces hijos de personas mediocres e incultas o torpes, así como a su vez el por qué hay grandes sabios que tienen hijos de coeficiente mental bajo, en vez de haber recibido la buena herencia genética mental de sus padres o ancestros y las habilidades, aptitudes o ciencia de los mismos. Y es que el cuerpo genera el cuerpo, la materia genera la materia con sus propiedades naturales, pero al espíritu solo lo genera el propio espíritu y permanece y actúa como elemento independiente de la materia.
Me gustaría que una explicación racional, no reencarnacionista, nos explicase el caso de una niña-bebé, que a los 8 meses comienza a hablar, conoce el manejo de los teléfonos móviles y de los ordenadores, y conoce los nombres de las capitales de todos los países de Europa. Las habilidades del lenguaje precoz, así como la habilidad innata del manejo de nuevas tecnologías, tal vez podría haberle sido transmitida a través de la herencia genética, pero ¿el conocimiento de los datos geográfícos también le ha podido llegar por esa vía?. Solo le ha podido llegar por la vía del estudio y con 8 meses, ¿Acaso ha tenido tiempo de estudiar ese conocimiento imposible, vía estudio, a su edad?....
De otro lado la teoría de la memoria transmitida en la herencia genética no está en absoluto comprobada por la Ciencia, y racionalmente parece más complejo admitirla, antes que la explicación que ofrece la Reencarnación del Espíritu- que sí que está ampliamente comprobada- sobre la herencia de la memoria espiritual.
- Jose Luis Martín-
*************************************
¿Cómo contacta el espíritu comunicante con el médium?
El Espíritu comunicante siempre lo hace a través del Espíritu del médium a quién influencia según la afinidad con el grado de sintonía espiritual del médium. El Ser comunicante transmite ideas a las que el médium da forma mediante el léxico de lenguaje que tiene archivado en su cerebro.
La relación entre el plano espiritual y el nuestro viene determinada fundamentalmente por una cuestión de sintonía vibratoria entre los Periespíritus de los Seres del plano espiritual y el del médium . Allan Kardec señala en El Libro de los Espíritus, que la comunicación se establece por el contacto de los fluidos de los periespíritus respectivos, los del médium y los del Ser comunicador que transmite el pensamiento de modo análogo a como se transmite el fluido eléctrico.
Como ya se ha dicho anteriormente, para actuar sobre la materia , el Espíritu tiene necesidad del Periespíritu, y del agente intermedio que es una energía psíquica conocida como Fluido Universal , que actúa como transmisor de energía psíquica obrando a modo semejante a como transmite el sonido el aire que nos rodea.
Para llevar a cabo este contacto, los Entes espirituales superiores que tratan de manifestarse ,relentizan su nivel vibratorio, generalmente más elevado que el de los Seres encarnados, mientras que el médium a su vez se debe esforzar por elevar el suyo mediante la oración y la meditación , elevando su mente hacia lo Alto, hasta conseguir acoplar ambas sintonías.
De otra parte, cuando deba ayudar a Seres espirituales de baja vibración, en estado lamentable angustioso etc, lo hará siempre con el extremo cuidado de no permitir en sí mismo las influencias de sus vibraciones que llevan a esos estados negativos.
- Jose Luis Martín-
*********************************
“
- El Libro de los Médiums-
*****************************
No hay comentarios:
Publicar un comentario