Niño prodigio

Sumario de temas:

1..- El poder moral
2.- Niño Prodigio
      Juana de Ángelis 
3.- El Problema del mal
4.- Pruebas colectivas
5.-Soledad del alma


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                                                EL PODER MORAL

26. “Jesús iba por toda la Galilea enseñando en las sinagogas, predicando el Evangelio del reino y curando todas las dolencias y todas las enfermedades en medio del pueblo. Su reputación se extendió por toda Siria; y le traían a todos los que estaban enfermos y afligidos por dolores y males diversos, los poseídos, los lunáticos, los paralíticos, y a todos los curaba. Lo acompañaba una gran multitud de Galilea, Decápolis, Jerusalén, Judea, y del otro lado del Jordán.” (San Mateo, 4:23 a 25.) 

27. De todos los hechos que dan testimonio del poder de Jesús, no cabe duda de que los más numerosos son las curaciones. 

Él quería probar de esa forma que el verdadero poder es aquel que hace el bien; aquel cuyo objetivo era ser útil, y no la satisfacción de la curiosidad de los indiferentes por medio de cosas extraordinarias. 

Al aliviar los padecimientos, las personas quedaban ligadas a Él por el corazón, y hacía prosélitos más numerosos y sinceros que si los maravillase con espectáculos para la vista. De ese modo se hacía amar, mientras que si se hubiese limitado a producir sorprendentes efectos materiales, como lo exigían los fariseos, la mayoría de las personas no habría visto en Él más que a un hechicero o un hábil prestidigitador, al que los desocupados buscarían  para distraerse.

 Así, cuando los discípulos de Juan el Bautista le preguntan si Él era el Cristo, su respuesta no fue: “Yo soy”, como cualquier impostor hubiera podido responder. No les habla de 
prodigios ni de cosas maravillosas, y les responde simplemente: “Id y decid a Juan: los ciegos ven, los enfermos son curados, los sordos oyen, el Evangelio es anunciado a los pobres”. Es como si hubiese dicho: “Reconocedme por mis obras, juzgad al árbol por sus frutos”, porque era ese el verdadero carácter de su misión divina. 

28. Del mismo modo, mediante el bien que hace, el espiritismo prueba su misión providencial. Cura los males físicos, pero cura sobre todo las dolencias morales, y son esos los mayores prodigios a través de los cuales se afianza. Sus más sinceros adeptos no son los que fueron tocados por la observación de fenómenos extraordinarios, sino los que recibieron consuelo para sus almas; los que se liberaron de la tortura de la duda; aquellos a quienes devolvió el ánimo en las aflicciones, que recuperaron fuerzas mediante la certeza del porvenir que vino a mostrarles, mediante el conocimiento de su ser espiritual y su destino. Ellos son los de fe inquebrantable, porque sienten y comprenden. 

Quienes sólo ven en el espiritismo efectos materiales no pueden comprender su poder moral. Por eso los incrédulos, que apenas lo conocen a través de fenómenos cuya causa primera no admiten, consideran a los espíritas meros prestidigitadores y charlatanes. 
Por consiguiente, el espiritismo no triunfará sobre la incredulidad a través de prodigios, sino por la multiplicación de sus beneficios morales, puesto que si bien es cierto que los incrédulos no admiten los prodigios, también es cierto que conocen, como todas las personas, el sufrimiento y las aflicciones, y nadie rechaza el alivio y el consuelo. 

Los milagros en el Evangelio 
LA GÉNESIS - Capítulo XV 348* 
ALLAN KARDEC 

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                     NIÑO PRODIGIO

                                                               

                       

     Niño mexicano de seis años dio una conferencia sobre osteoporosis

Quien ve esta foto enseguida piensa que se trata de una presentación infantil u otra cosa parecida. En verdad, todo sucedió de forma instructiva y peculiar.

 Un niño mexicano, Maximiliano Arellano,de seis años, habló, por 45 minutos, a un público compuesto por médicos y profesionales de salud de la Universidad Autónoma de México. El tema no es común para su edad, pues discurrió sobre Osteoporosis. Como no tenía un púlpito para su altura, fue improvisada una silla para que alcanzase el micrófono. Este artículo periodístico fue publicado en varios diarios de Estados Unidos, y también en el “Diario de Pernambuco” y en el “Correo Brasiliense”. Su madre, la Sra. Alejandra de Noé, cuenta que, desde los dos años, su hijo demostró conocimiento sobre la ciencia médica, habiendo realizado ya una conferencia sobre Anatomía Cardiovascular. Ella aclara que él tiene sus pasatiempos como un niño normal, como jugar con vídeogame, natación, etc. El Director de la citada Facultad de Medicina, Roberto Camacho, dice que Maximiliano habla de fisiopatología con el lenguaje de un médico residente. Por eso está en estudio una forma de poder inscribirlo en aquella Institución.

   Para la Doctrina Espírita, el conocimiento tan precoz de Maximiliano de la Medicina, demuestra que él lo adquirió en vidas anteriores y, en esta vida, afloró en su infancia. Es la única explicación, por lo demás, muy lógica, para este hecho. En el artículo sobre ese admirable acontecimiento, se percibe que Maximiliano da poca importancia a la memoria precoz, pues revela ser un espíritu desprendido. Él afirmó que, cuando crezca, quiere ser médico, para disminuir los dolores de las personas.

     El Espiritismo tiene como uno de sus principios la reencarnación, una ley de la Naturaleza y que la ciencia convencional aún no ha comprendido. Cuando analizamos un caso como éste, percibimos que la memoria humana es extra-cerebral; por tanto, independiente del cerebro. Pereciendo el cuerpo físico, el Espíritu, que es inmortal, se libera íntegro, portando sus adquisiciones intelectuales y morales. Al admitirse la realidad de la reencarnación todo se aclara, encontrando la justicia de las leyes del Creador actuando en la criatura y, de forma colectiva, en toda la Humanidad.

(…) Niara Branco (“Tribuna Espírita” João Pesoa, Brasil

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                               El Espíritu Juana de Ángelis nos dice :

Muestre siempre a los demás una sonrisa, que les cause la impresión de que a pesar de vivir entre problemas,usted es capaz de demostrar esa bondad que solo existe en los buenos y en los que solo piensan en practicar el bien.

                         ¡ Haga de su rostro el espejo de su alma !

                                       Juana de Ángelis 

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"No llegan los que más corren,sino los que saben donde van; más que ligereza de piernas, es menester cabeza firme."

- Mariano Aguiló-

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                                                         El Problema del Mal

       Desde las más antiguas épocas el hombre ha observado que, al lado de las buenas cosas que hacen de la vida un deleite, existen otras, u ocurren, que son el revés de la moneda, es decir, sólo causan aflicciones, dolores y perjuicios. Fue, por eso, inducido a creer que el gobierno del mundo está dividido por dos autoridades rivales: - Dios, fuente del Bien, y Satanás, agente del Mal. Esa creencia en los dos principios antagónicos, en lucha por el poder, fue y continua siendo, la base de las doctrinas religiosas de todos los pueblos, inclusive católicos y reformistas. Entre estos, la idea de que unos se salvan y otros se pierden para siempre es general, habiendo hasta quien afirme que el número de los que se pierden es mucho mayor que la cifra de los dichosos. Eso quiere decir que el Mal sería más fuerte que el Bien, y que Satanás estaría consiguiendo derrotar a Dios, frustrándole los designios de salvación universal. Pese a la antigüedad de tales conceptos, son falsos y absurdos, diríamos incluso, heréticos. En efecto, admitir el triunfo del Mal, en perjuicio de la Humanidad, es lo mismo que negar al Padre Celestial los atributos de la omnisciencia y de la omnipotencia, sin los cuales no podría ser verdaderamente Dios.

      El Espiritismo, que es el Paráclito anunciado por Cristo, contrariando las enseñanzas de la Teología tradicional, nos esclarece que el Bien es la única realidad eterna y absoluta en todo el Universo, siendo el Mal sólo un estado transitorio, tanto en el plano físico, en el campo social, como en la esfera espiritual. Para que se comprenda esto, es necesario, entretanto, considerar, no las consecuencias inmediatas de todo cuanto observamos, sino sus efectos indirectos, futuros, porque sólo estos, a lo largo de los años, de los siglos o de los milenios, es que harán resaltar, nitidamente, la inhabilidad de la Providencia Divina frente a los destinos de la Creación. Ciertos fenómenos geológicos, por ejemplo, pueden haber sido considerados catastróficos en la época en que ocurrieron; ellos fueron, sin embargo, los que formaron los continentes y los océanos, dándoles los maravillosos aspectos que hoy nos dejan extasiados, provocándonos encanto y admiración. Muchas guerras internacionales y otras tantas revoluciones internas, aunque se constituyan, como de hecho se constituyen, dolorosos flagelos para las generaciones que en ellas se envuelven, dan oportunidad, a su vez, a la caída de tiranos y opresores, a la extinción de preconceptos y privilegios inicuos, al cambio de costumbres arcaicas, al progreso tecnológico y de la misma naturaleza, resultando de ahí, en favor de los últimos (que seremos nosotros mismos en nuevas reencarnaciones), la mejoría de las instituciones, mayor libertad de pensamiento y de expresión, una justicia más perfecta, mayor confort en los sistemas de transportes, de comunicaciones, en los hogares, etc.

      Cuando no, es por medio de ellas que los malos se castigan recíprocamente, en consonancia con la enseñanza: “quien con hierro hiere, con hierro será herido”. Un día, aunque aún esté lejano, cansadas de sufrir el choque de retorno de sus crueldades, dictadas por el egoísmo, por el orgullo y otros sentimientos parecidos, las naciones aprenderán a valorar la paz, buscándola, entonces, sincera y vehementemente, a través de la fraternidad y de la solidaridad cristiana. Así también ocurre con nuestras almas. Creadas simples e ignorantes, pero dotadas de aptitudes para desarrollar todas las virtudes y adquirir toda la sabiduría, necesitarán, vida tras vida, en este orbe y en otros, pasar por un proceso de perfeccionamiento que mucho las harán sufrir. Es la lucha por la subsistencia, son las enfermedades, las insatisfacciones, los conflictos emocionales, los desengaños, las imperfecciones propias y las de aquellos con los cuales convivimos; en fin, las mil y una vicisitudes de la existencia. En ese auténtico desorden, usando y abusando del libre albedrío, cada cual va recogiendo victorias o amargas derrotas, según el grado de experiencia conquistada. Unos ríen hoy, para llorar mañana, y otros, que ahora se ensalzan, después serán humillados.

      Sin embargo, todo concurre para enriquecer nuestra sensibilidad, perfeccionar nuestro carácter, hacer que se desarrollen en nosotros nuevas facultades, o lo que podríamos decir, se dilaten nuestros gozos y aumente nuestra felicidad. ¡Bendito sea, pues, el Espiritismo, por la revelación de esa verdad, a la luz de la cual se nos hace patente, esplendorosamente, la Bondad infinita de Dios! (Cap. I, preg. 634)

 (Art. publicado anteriormente por J.Cabral)

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PRUEBAS COLECTIVAS

            

            Hace todavía pocos años, el mundo conoció el accidente  del avión que hacía el vuelo AF-447 el Airbus A330, de la Air France, en el trayecto Rio de Janeiro-Paris, con 216 pasajeros y 12 tripulantes. Su destino final era el Aeropuerto Charles de Gaulle situado en la capital francesa. 

          Según las autoridades del control aéreo de Brasil y de Francia, hasta el momento existen varias hipótesis para la caída del avión situando, entre otras, una turbulencia y  en seguida una parada eléctrica que llevó a la aeronave a caer en el océano atlántico.

       Aparte de las causas humanas que son analizadas por las autoridades aéreas tenemos las causas de fondo espiritual que todos nosotros comprendemos, en este episodio, que conmovió a todo el pueblo brasilero y francés, y especialmente a los familiares de las victimas.

       Del punto de vista eterno somos todos nosotros espíritus encarnados en este mundo conocido de “pruebas y de expiaciones” en la clasificación de los espíritus superiores. La Tierra es considerada un hospital donde tenemos tantas personas enfermas en busca de la cura para sus males físicos y morales. Es una escuela donde recapitulamos lecciones de esta y de otras vidas. Es una penitenciaria donde corregimos nuestros errores y somos amparados por una Justicia que es la Ley Divina que a todo regula. Nada de lo que hacemos queda sin el control del mundo mayor que es la Ley de Causa y Efecto.

        Ya al renacer en la Tierra y en muchas situaciones ya tenemos señaladas las pruebas que vamos a pasar quiera que sea individual o colectivamente. Pero, estas pruebas y expiaciones pueden ser amenizadas por el trabajo y por la caridad cuando obramos a favor del semejante. Pero, no todos necesitan pasar por este tipo de pruebas.  

        Por ejemplo, en el día 17 de diciembre de 1961, en la ciudad de Niteroi, sucedió el incendio del gran circo americano, donde murieron más de 1.000 personas pisoteadas por las fieras y animales y otras quemadas vivas por las llamaradas de fuego de la lona del circo. Fue una conmoción en Brasil.   Algunos  que perdieron hijos en la tragedia fueron hasta la ciudad de Uberaba a buscar al médium Francisco Cândido Xavier para que fuesen consoladas y obtener informaciones del mundo espiritual.

        En el momento el Espíritu Humberto de Campos conocido por el pseudónimo de Hermano X, uno de los más destacados escritores de Brasil, vino por la psicografía de Chico Xavier a traer una crónica que fue publicada en el Libro Cartas y Crónicas - La Tragedia del Circo –  relatando que la causa de la muerte en el circo tuvo origen en el siglo 2º del año 177, cuando los muertos de ahora fueron los mismos que en un circo romano quemaron a más de 1.000 personas declaradas cristianas.

       Así,  la Ley se cumple en el proceso de la evolución espiritual, pasado, presente y el futuro se entrelazan  en busca de la perfección. Nada sucede en nuestra vida sin el permiso de Dios. La muerte es el nacer para la vida espiritual que es Luz y Amor. ¡Piense en esto!

 João Cabral -

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SOLEDAD DEL ALMA

(Mensaje Mediúmnico)

¿Qué sentimiento es ese que surge de repente y nos sentimos como una minúscula hormiga cargando el mundo a cuestas?

¿ Quien no ha vivido ya, al menos un día, esa experiencia?

Es importante que comprendamos cuales son las causas de ese sentimiento tazan triste que llamamos soledad.

No podemos confundir el estar solo en un espacio físico con la soledad que viene de dentro.
Algunos podrían cuestionar el pasaje en que Jesús deja a todos y se dirige al monte para orar. En este momento él estaba solo, viviendo un momento de introspección y comunión con el Padre. Era un momento de interiorización, de diálogo íntimo y no un momento de soledad como sinónimo de desespero, dolor y tristeza.
Aun cuando hablamos en soledad, muchas otras imágenes se forman en nuestras mentes como la figura de un ermitaño, de un monge o también, de una casa de reposo para la mejor edad o incluso los cómodos vacíos de una casa en donde los hijos ya se mudaron o aun después del final de una relación conyugal.

Queremos abordar aquí un concepto más íntimo de la soledad. La soledad que es mucho más que un espacio físico, la soledad del alma.

Hay millones de personas que se sienten en completa  grandes metrópolis como Sao Paulo, New York, Tókio, Inglaterra, etc. ¿Ya pensaron en eso? Rodeados de seres y completamente solas. En el mundo materialista en que vivimos hay una enorme competición por el estatus,o la  posición de mercado, entre otras muchas cosas. Somos inducidos a vivir de modo egoísta y con mucho orgullo aislados en nuestras "burbujas" y en nuestros males.

También tenemos el sentimiento de que, en muchas ocasiones, nos sentimos profundamente solos, aun delante de amigos y de personas que amamos mucho.

De esa manera no podemos considerar la soledad del alma como la ausencia de personas alrededor, se puede sentir uno solo en medio de una multitud, ¿Están de acuerdo?                          

Profundicemos un poco más...

La soledad del alma es no encontrarse consigo mismo. ¿Cuantos viven hoy distantes de su alma?. ¿Distantes de sí mismos?, ¿Por qué?. ¿Ustedes me sabrían responder?

Por el simple hecho de no haber aprendido aún a desarrollar el autoamor, el autoperdón... No se conocen a sí mismos, tal vez por miedo a poderse encontrar con las posibles decepciones de lo que se idealizó. ¿Pero, de qué sirve  vivir con las máscaras?

Preferimos dejar de oír la centella divina que habita en nuestro interior y proporciona todas las respuestas a nuestros cuestionamientos íntimos y en cambio vamos a procurar la aprobación de los demás.

Cuando no conseguimos la aprobación de los otros nos sentimos profundamente en soledad. Y de esta manera corremos al galope para entrar rápidamente en una depresión y quien sabe si hasta en una obsesión y en un suicidio.

¿Entonces cual es la causa de esa soledad?. ¿Quien es el responsable? ¿Es el otro porque no se dedicó a mi?, ¿O que no aceptó ni manera de pensar?

Creo que la mayoría diría que la culpa es de otro. Pero yo respondo con total convicción, que la culpa es suya. 

Y aún me podrán cuestionar, pero en los casos de las Residencias de la "tercera edad", en donde muchos hijos abandonan a los padres y estos se sienten en completa soledad, ¿qué culpa tendrán los padres?. ¿O también, si mi cónyuge no me escucha?. Si mis amigos no comparten las ideas y los momentos conmigo, ¿Cómo no me voy a sentir solo?.

Y yo tranquilamente respondo...SI, y cada uno es culpable por sus acciones.

Veamos el por qué.

 Esa soledad que se siente en los casos presentados es procedente de nuestro egoísmo, de nuestra manía de perfección, de nuestro orgullo. Nos parece que siempre tenemos las mejores respuestas, los mejores caminos, al final somos "casi perfectos", ¿ no es así ?. Teniendo el cuidado de decir "casi", pues como espíritas que somos, sabemos que solamente a Dios cabe la perfección.

No somos mejores o peores que otros, porque cada cual vive según el nivel de aprendizaje en que se encuentra, teniendo la certeza de que todos llegarán más próximos a la perfección en un futuro, pues esa es nuestra misión 

Creamos espectativas en relación al otro y en relación a nosotros mismos, Y cuando las espectativas no son atendidas, sentimos la más profunda soledad, y en nuestra forma "racional" de pensar, creemos que es nuestro "deber" cambiar al otro, y así no respetamos su tiempo de aprendizaje y su libre albedrío. Esa actitud es muy común en las relaciones.

Recordemos que los cambios acontecen solamente interiormente. El cambio es un movimiento de dentro para fuera, o sea, es preciso querer cambiar. Y también es una opción personal, por tanto no cambiamos a las personas. Todo cambio procederá del empeño, dedicación y persistencia del mismo. A través del ejemplo podemos influenciar de forma positiva o negativa, pero el cambio real depende del empeño y es conquista de cada ser.

Vivimos aún la soledad, por no haber sabido lidiar con nuestros sentimientos. 

Decimos que somos Todos UNO con el Padre, entonces ¿como podemos sentirnos solos?, ¿Cómo podemos vivenciar esa soledad?. Jamás seremos abandonados por el Padre.

Coraje amigos.... Enfrentemos los fantasmas que nos asustan, Asumamos nuestro equilibrio interno, hagamos una limpieza en nuestros archivos emocionales y conseguiremos desmitificar la soledad.

Recordemos que somos el fruto de nuestros pensamientos y que nunca estamos solos. Emanando y recibiendo vibraciones, estamos siempre en compañía de los que poseen la misma frecuencia.

Compartamos con todos los Universos, la grandeza de ser Hijos de Dios, en comunión, amparo y apoyo eternos.

Queden en paz y en la compañía de todos los que vibran y obran por el bien.

Médium: Lucía (Cavile)                                                       Espíritu: Matheus (Colonia Espiritual María de Nazaret)

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