lunes, 20 de febrero de 2023

Sensaciones de los Médiums

      INQUIETUDES  ESPÍRITAS

1,. Sensaciones de los médiums

2.- Sensibilidad individual

3.- Espiritismo y Arte (3)- Manifestaciones mediúmnicas artísticas

4.- Miniaturización del Periespíritu en el proceso reencarnatorio.

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      SENSACIONES DE LOS MÉDIUMS

28. Muchos médiums reconocen a los Espíritus buenos y a los malos por la impresión agradable o penosa que experimentan cuando se les aproximan.-

 Deseamos saber si la impresión desagradable, la agitación convulsiva, en una palabra, el malestar, son siempre indicios de la naturaleza maligna de los Espíritus que se manifiestan.

“El médium experimenta las sensaciones del estado en que se encuentra el Espíritu que se le aproxima. Cuando el Espíritu es feliz, se encuentra tranquilo, sereno, sosegado. Cuando es desdichado, está agitado, febril, y esa agitación se transmite naturalmente al sistema nervioso del médium. Por otra parte, lo mismo sucede con el hombre en la Tierra: el bueno es calmo y tranquilo; el malo está constantemente agitado.”

EL LIBRO DE LOS MEDIUMS
ALLAN KARDEC

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   SENSIBILIDAD INDIVIDUAL

 

Estudiando la sensibilidad de una forma particular  y desde un punto de vista científico, existe el mundo físico, el mundo hiper-fisico y las diferencias entre las diversas manifestaciones de Materia, Energía y Espíritu, que resultan de las variables ordenes de vibraciones.

En el Universo todo vibra y se transforma, ora involucionando: Espíritu hacia la Energía – Energía hacia la Materia; ora involucionando: Materia hacia Energía – Energía hacia Espíritu. Y en esa perenne transformación los mundos se entrelazan armoniosamente, formando un todo uno e indivisible.

Cuando las vibraciones entre los dos mundos se equilibran, se sintonizan, se establecen ligaduras íntimas, con mayor o menor resonancia. Y esa sintonía cuando se verifica entre habitantes de esos mundos, permite, como es natural el intercambio entre esas entidades.

La facultad de hacer tal sintonización es lo que constituye la que se llama la mediumnidad. Todos los hombres poseen esa facultad en mayor o menor grado, pues todos los hombres vienen del mismo origen, tienen la misma constitución y caminan hacia el mismo fin. Todos tienen esa misma posibilidad, que tanto más se amplia y perfecciona  cuanto más se eleva, por lo cual se deduce que la facultad mediúmnica es espiritual  y no material. 

André Luiz, a quien se considera  una gran autoridad sobre las realidades de la vida espiritual – afirma que: “mediúmnidad no es una disposición de la carne transitoria y si la expresión del Espíritu inmortal”.

La sede de las facultades no está situada en el cuerpo físico, sino en el peri espíritu, esto quiere decir que no se ejercen por los órganos de los sentidos físicos, y si por los de los sentidos psíquicos. Todos los hombres son médium en mayor o menor  grado  a las vibraciones de otros planos, y la    sensibilidad individual es el primer síntoma  de esa facultad.

La facultad natural no representa un “don” – como muchos admiten – dado que eso sería un privilegio; por muy al contrario, su posesión corresponde a méritos ya conquistados, vale por un derecho ya adquirido, representa un acceso a un determinado grado de la escala evolutiva.

Son innumerables los que juzgan que la mediumnidad es un don, y el propio Codificador así lo dice en sus obras, pero se comprende que el término “don” está ahí empleado  como un otorgamiento de Dios a Espíritus en prueba y no como un privilegio de algunos con relación a otros, lo que sería una evidente injusticia, tanto más que la mayoría de los médiums son, Espíritus deudores en mayor grado que muchos que no son médiums. Por eso se debe entender “don” como tarea transitoria a desempeñar, de la cual ha de rendirse cuentas, y no como atributo o privilegio permanente del Espíritu.

La sensibilidad individual presenta diversos aspectos desde el clásico “nervioso constitucional” hasta las formas más avanzadas del trance completo.

Se va desarrollando de a poco, silenciosamente, con el despertar de las glándulas cerebrales, y paulatinamente  va aumentando de intensidad, presentando variadas formas de perturbaciones físicas y psíquicas, hasta que un síntoma  más  positivo surge transformando la sensibilidad – condición estática vegetativa – en mediúmnidad- estado dinámico funcional.

Podríamos compararlo a una simiente vegetal que día a día aumenta su fuerza y se transmuta hasta el momento en que, en plena eclosión expansiva, rompe las últimas resistencias del suelo y se transforma en una planta.

Y así, como no podemos interferir en el proceso genético animal o vegetal, tampoco lo podemos en el de la facultad mediúmnica, correspondiéndonos solamente el cuidado de “fertilizar el suelo” y ofrecer a la planta condiciones favorables  de vida y crecimiento.

La sensibilidad es, pues, el preanuncio  de la mediúmnidad, y todos los individuos que la presentan deben irse aproximando al campo de la vida espiritual, suministrando a su propio espíritu , el alimento sazonado y puro del que este carece para desarrollarse, fortificarse y tornarse digno del grandioso trabajo que le espera en el ámbito de la espiritualidad.

 Extraído del libro “Mediúmnidad” de Edgard Armond

 Adaptación: Oswaldo E. Porras Dorta

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       Espiritismo y Arte (3) 

Manifestaciones mediúmnicas artísticas


Estudio en las manifestaciones mediúmnicas artísticas:

El espíritu comunicante y el médium deben poseer el conocimiento artístico necesario para visualizar la manifestación artística. Este conocimiento puede tener origen en una experiencia pretérita, en aprendizaje desarrollado en el plano espiritual o en adquisiciones obtenidas en la actual vida. Cuanto más profundo sea el conocimiento del espíritu y del médium en el tema mejor sintonía alcanzarán y más bellas obras producirán.

Los principales tipos de médiums para las manifestaciones artísticas son :

1. Médiums pintores o dibujantes: son los que pintan o diseñan bajo la influencia de los espíritus. Hablamos de los que obtienen trabajos serios, ya que no se puede dar ese nombre a ciertos médiums que espíritus burlones lo llevan a hacer cosas grotescas, que despreciarían el más atrasado estudiante. La pintura realizada en estado de trance es llamada Psicopictoriografía.
Son características de la pintura mediúmnica no sólo la fidelidad e inconfundibles estilos peculiares a cada pintor-espíritu, permite que las entidades usen sus capacidades para sus creaciones propias. El médium puede realizar varios trabajos simultáneos, de escuelas distintas y, no es raramente, antagónicas entre sí.
Es de destaque las maneras no convencionales y la rapidez con que son producidas tales obras, no superando la vertiginosa fracción de segundos o minutos. Se realizan con o sin pinceles, con las manos o los pies, con los ojos abiertos o cerrados, en la oscuridad o en la luz.

Eugène Henri Paul Gauguin

Las pinturas mediúmnicas son una prueba evidente de la vida espiritual. Varios médiums pictóricos han podido ser instrumentos para grandes maestros de la pintura clásica y moderna, artistas como Vincent van GoghLeonardo da VinciOscar Claude MonetPaul CézanneRaffaello SanzioEugène Henri Paul Gauguin entre otros, nos han dejado su legado reflejando sobre el lienzo su magistral obra.

Estas pinturas demuestran no solo el estilo del autor, sino que presenta el mismo uso del trazo, del color incluso la firma, no dejando así posibilidades de fraudes ni de dudas sobre quien ha sido el creador, escapando del médium cualquier posibilidad de emular o copiar estas características tan intimas asegurando así la originalidad de la obra.

Frederic Chopin

Frederic Chopin

Otra forma por la cual la mediumnidad pictórica puede manifestarse es la directa, caracterizada más como de efectos físicos. El dibujo o la pintura se «precipitan” en hojas de papel o telas guardadas en recipientes cerrados. Esta mediumnidad no deja de ser una variedad de la pneumatografía.
2. Médiums músicos: son los que ejecutan, componen o escriben músicas bajo la influencia de los espíritus. Hay médiums músicos mecánicos, semimecánicos, intuitivos e inspirados, como los hay igualmente para las comunicaciones literarias.
«Todo el mundo reconoce la influencia de la música sobre el alma y sobre su progreso. Pero, la razón de esa influencia es en general ignorada. Toda su explicación está en este hecho: que la armonía coloca al alma bajo el poder de un sentimiento que la desmaterializa.” La personalidad creativa.

Johann Sebastian Bach

3. Médiums de efectos musicales: provocan la ejecución de composiciones, en ciertos instrumentos de música, sin contacto con estos. Son muy raros. La diferencia entre médiums músicos y médiums de efectos musicales es que estos están clasificados en la de efectos físicos y los otros en la mediumnidad de efectos intelectuales.

4. Médiums historiadores: los que revelan aptitud especial para las explanaciones históricas.

 5. Médiums versificadores: obtienen, más fácilmente que otros, comunicaciones en versos. Muy comunes, para malos versos; muy raros, para versos buenos.


6. Médiums Poetas: sin ser versificadas son más comunes, las comunicaciones que reciben tienen alguna cosa de vaporoso, de sentimental, propios para la expresión de sentimientos tiernos y afectuosos.

Alphonse de Lamartine

Alphonse de Lamartine

7. Médiums literatos: no presentan ni lo que hay de impreciso en los médiums poéticos ni la elevación de los médiums cuyas comunicaciones son nítidas y precisas; no obstante, disertan con sagacidad. Tienen el estilo correcto, elegante y, frecuentemente, de notable elocuencia.

8. Médiums auditivos: Los médiums auditivos representan una modalidad mediúmnica muy común, «oyen la voz de los espíritus. Es (…) algunas veces una voz interior, que se hace oír en el foro íntimo, otras veces, es una voz exterior, clara y elegante, cual la de una persona encarnada. Los médiums auditivos pueden, así, entablar conversación con los espíritus reconociendo inmediatamente la naturaleza de la voz. Quien no esté dotado de esa facultad puede, igualmente, comunicarse con un espíritu, sirviéndose de un médium auditivo, que desempeñe las funciones de intérprete.
      La mediumnidad auditiva puede estar relacionada a la mediumnidad de videncia, es decir, generalmente quien ve espíritus también los oye. En verdad, el principio de la manifestación de ambas mediumnidades es bastante semejante: lo que las diferencia es el órgano de manifestación:  oídos y ojos , respectivamente.
      La historia registra un ejemplo notable de clariaudiencia, en la mediumnidad de Juana de Arco.

Joanna de Arco

Juana de Arco

«La vida entera de la heroína está llena de apariciones y voces, siempre idénticas, y que jamás son desmentidas. En los valles de Domremy, en los campos de batalla, en presencia de sus acusadores de Poitiers y de los jueces de Ruano, por todas partes la asisten y la inspiran los espíritus. Sus voces le resonaban en los oídos, marcando su tarea cotidiana e imprimiendo a su vida una dirección precisa y un glorioso objetivo. Las voces anuncian acontecimientos que, sin excepción, se realizan. En su doloroso encarcelamiento, esas voces la animan y consuelan: -Lleva todo con paciencia; no te inquietes con tu martirio; llegarás por fin al reino del paraíso. Y los jueces, a quien ella comunica esos coloquios aparecen desasosegados con semejante predicción, cuyo sentido comprenden.”

- Claudia Bernaldes de Carvalho-

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   MINIATURIZACIÓN DEL PERIESPÍRITU

 DURANTE EL PROCESO REENCARNATORIO

Al referirnos a este fenómeno, nos cumple recordar que nuestra percepción de reencarnados está limitada a la vida tridimensional de nuestro planeta. Nuestros razonamientos también se limitan, salvo ocasionales señales  de percepción mayor, a las dimensiones que podemos comprender.

El reencarnar significa, por encima de todo, como fenómeno, el sumergirnos en nuestra dimensión física. Estableciendo un parámetro diferencial conocido, decimos que los espíritus en su cuerpo espiritual. poseen una altura semejante a la atribuida al hombre encarnado. digamos 1'70 mt. Para no polemizar vamos a reportarnos a los Espíritus materializados en las sesiones ectoplámaticas, y observar que sus alturas son las esperadas para un ser humano.

En el ejemplo del agua, decíamos que en vapor, líquido o hielo, continúa siendo molécula de agua; lo que ocurre en estos tres estados físicos es una mayor o menor concentración de las moléculas, que no pierden su característica básica, esto es, continúan siendo la misma agua.

Un Espíritu reencarnante tendrá que fijarse en un huevo, embrión, y  después en un recién nacido de aproximadamente cincuenta centímetros. En términos relativos y de nuestra percepción dimensional, diremos de él, en su  cuerpo espiritual de 179 cm. , tendrá que sufrir una reducción de volumen. Su periespíritu pasará por un proceso de miniaturización, pero permaneciendo con todas sus características esenciales y registros de vidas pasadas.

En el sencillo ejemplo de las moléculas de agua en tres estados físicos, tenemos la figuración de la conservación de identidad, a pesar del mayor o menor volumen con que se presenta la sustancia mencionada.

Como fuente bibliográfica, recordamos Misioneros de la Luz, donde el autor espiritual que dicta la obra a Chico Xavier, detalla el proceso reencarnatorio de Segismundo. En La Vida continúa, André Luiz, en el capítulo 16, hace también referencia al fenómeno de la miniaturización.

El embrión, a medida que se va desarrollando, multiplica el número de sus células y aumenta el área de fijación del cuerpo espiritual, el cual se prende a las células del cuerpo físico en formación. Al concluir la gestación, tendremos un recién nacido formado por un gran número de células que compondrán las mallas de la red que retiene el cuerpo espiritual.

En el proceso de reducción volumétrica o miniaturización, las moléculas periespirituales se aproximan reduciendo los espacios intermoleculares. La pérdida de actividad vibratoria y la reducción de la energía cinética determina la aproximación molecular, como el vapor de agua al enfriarse, condensándose en agua líquida. La reducción de volumen se acompaña de la progresiva pérdida de consciencia del Espíritu, variando el grado de esta pérdida con el nivel evolutivo de la entidad reencarnante. Hay Espíritus que mantienen su consciencia hasta adelantada fase de gestación en cuanto que otros la pierden después del inicio del proceso.

Existe un mecanismo de atracción recíproca, de un lado el cuerpo espiritual y el Espíritu, como polo penetrante o positivo, de otro lado la materia receptora como polo negativo. El polo positivo, así denominado por ser el elemento directo, sin embargo influenciado por la materia. El principio espiritual, automáticamente coordina, moldea y domina completamente toda la cadena de reacciones que se producen en el proceso reencarnatorio.

Durante la miniaturización, parte de las vibraciones más periféricas del Espíritu, son absorbidas por las zonas más profundas, que pasan a retener estas potencialidades energéticas.

El conjunto espiritual, queda entonces reducido al tamaño del útero y en las zonas más periféricas, el periespíritu pasa también a sufrir modificaciones durante todo el periodo del embarazo. La reencarnación como fenómeno renovador, siempre se dará en posiciones más avanzadas que las anteriores, expresando el Espíritu la herencia de los caracteres anteriormente adquiridos.

En los Espíritus que viven todavía en los límites de la animalidad, la reducción del conjunto espiritual alcanza su máximo, no limitándose, en el espacio, al tamaño del útero, y sí a las dimensiones microscópicas de la célula- huevo. Estos Espíritus cuando están desencarnados se presentan con una postura fija mental o monoideísmo auto-hipnotizante de vuelta a la vida física. Su idea fija neutraliza otras emociones, determinando la disminución de las energías espirituales hasta el punto que las moléculas se condensan al nivel microscópico de un núcleo de célula-huevo.

La reducción del volumen del cuerpo espiritual tiene un papel muy importante en la facilitación de las tareas del Espíritu en la nueva encarnación. Más allá de propiciar la integración al nuevo cuerpo biológico, determina la pérdida de consciencia progresiva, con la importante consecuencia del olvido del pasado, imprescindible para la estabilización psicológica frente a las situaciones kármicas de reencuentro familiar y otras necesidades para la evolución del Espíritu.                                                                                                                                                                                                 - Prof. Ricardo di Bernardi  ( de su obra "Gestación: Sublime intercambio")

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