INQUIETUDES
1.- El sentido de esta vida
2.- La clonación humana
3.-El Purgatorio
4.- Laboratorio del mundo invisible
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Ese borracho tirado en la acera, ese mendigo sin sentido, ese drogado tirado en la cuneta, ese viejo abandonado en un manicomio, esa prostituta que nadie aprecia... todos estas personas tienen una misión en la Tierra y un propósito, porque si no lo tuvieran, no estarían aquí.
Hasta el momento la clonación es un experimento científico, realizado con éxito por primera vez el año 1996 en Inglaterra clonando una oveja que pasó a la historia con el nombre de Dolly. El tema de la clonación humana solamente es un proyecto científico que probablemente se podría realizar, pero hasta ahora solamente ha generado debates y discusiones de carácter ético y religioso y por eso mismo, que se sepa, no ha sido llevado a cabo, pues supondría traspasar una “línea roja” y esto es lo que al parecer ha dejado este proyecto científico en un “tiempo muerto”.
Quizás la línea roja mencionada podría ser la de pretender crear estos clones como ejemplares humanos que sirvan para aportar órganos para trasplantes, o simplemente para que sirvan como sirvientes baratos o esclavos para los humanos que los adquieran, como se adquiere un animal o cualquier otro objeto. Como robots de carne pero sin alma. Evidentemente esta horrible idea es totalmente anti-ética y difícil de traspasar por las conciencias humanas.
Independientemente de las opiniones religiosas o ateas que pueda tener el ser humano en general, sabemos sin embargo, que un ser humano no es simplemente un cuerpo material constituido por tejidos, huesos, órganos, etc; sino que para que sea un ser humano completo y normal, es imprescindible el concurso de un Ser espiritual que se encuentre encarnado en él y lo aliente, y para eso sabemos que es necesaria la participación de su Periespíritu como campo de energía moldeadora y aglutinadora del cuerpo físico, que actúa dentro del vaso uterino como molde del cuerpecito físico del niño en su desarrollo normal, conforme a la herencia genética aportada por los padres.
En el tema de la clonación humana, nada varía en lo esencial, si acaso solo en las formas, pues en este caso el ser humano no sería concebido por la unión de las células sexuales o gametos masculino y femenino; solamente se manipula genéticamente una de ellas, y el proceso de desarrollo comienza. Sin embargo esta fecundación y desarrollo solo será posible si, unido a ese germen o embrión que forman las primeras células en sus primeras particiones, existe un Periespíritu irradiando el útero con su energía para ir dando forma y cuerpo del nuevo Ser humano.
Si mediante la clonación se quisiera facilitar una vida humana a uno o varios Espíritus que necesitan de ella, ¿ qué de terrible tendría esto?; ¿ quien nos asegura a nosotros que tal vez, en alguna otra civilización planetaria con un adelanto científico sobre la nuestra, de quizás miles de años, este procedimiento no sea lo normal y habitual ?. Pero el procedimiento natural y normal de la humanidad terrestre no es precisamente ese.
Si sabemos que el meollo de la cuestión es la de que ligados a este mundo existen muchos espíritus que necesitan de la reencarnación, lo importante es el hecho de que lo hagan en un medio humano adecuado; importaría menos la forma de llevarse a cabo este proceso reencarnatorio. Pero si llevamos más de dos mil años reencarnando mediante la procreación natural conocida, a semejanza de otras especies animales, ¿Por qué tendría el hombre actual la necesidad de crear otras vías diferentes para venir a este mundo?.
Nuestro mundo evoluciona, y no nos deberíamos asombrar de sus adelantos, pues como dijo Kardec, el Espiritismo, como Ciencia que es, además de Filosofía y Moral, caminará siempre al lado de la Ciencia, aceptando y adaptándose a lo que ella compruebe y confirme. Pero, ¿ Por qué la clonación humana sería un adelanto?....
Un Ser humano clonado no sería nunca exactamente igual a los otros "clones" que se hiciesen, porque el Espíritu que lo anima es diferente al de los demás “hermanos de clonación”, así como sus particularidades kármicas propias, que le definen el carácter, el grado de inteligencia,etc. Y sabemos que para que haya ser humano, antes tiene que haber espíritu que lo conforme y lo aliente, por tanto, nunca podría existir un cuerpo humano clonado, vivo; solamente sería un cuerpo sin alma, o sea un montón de carne y huesos pero no sería un ser humano; si nunca ha tenido alma no podrá existir, pero si alguna vez la tuvo y ya no la tiene, sencillamente se trata de un cadáver, pero no de un ser vivo.
Recordemos que no es la materia la que hace al Espíritu, sino al revés: Es el Espíritu quien moldea y utiliza con más o menos provecho los órganos físicos de su cuerpo.
Si con la clonación se pretende la inmortalidad y permanencia indefinida de un mismo ser humano, esto en teoría sería posible, pero en la práctica se encuentra la dificultad de que por bien que se cuiden, los órganos y tejidos orgánicos envejecen y mueren y permanecer con el mismo cuerpo indefinidamente sería imposible. O sea, que la inmortalidad verdadera, que es la del alma, ya la tenemos por naturaleza, pero alternando las existencias corporales humanas a lo largo del tiempo.
Como la Ciencia pretenda solamente hacer una maqueta humana, sin alma,( y otra cosa no puede hacer, porque el Alma solo la puede crear Dios, y además la propia Ciencia niega su existencia…) en teoría podría tal vez conseguir un muñeco de carne y hueso que imitase mas o menos bien al Ser humano, pero eso NO sería nunca un Ser humano. No obstante tengamos presente que la Ciencia seguirá evolucionando y avanzando hacia una perfección en pos del mas completo bienestar del Ser humano, aunque a veces parezca que quiere suplantar a Dios.
Ella podría ser capaz de crear cuerpos, pero nunca creará las almas que los animan y los convierten en Seres humanos.
- Jose Luis Martín-
“ El Espiritismo, marchando con el progreso, nunca quedará rezagado, porque si nuevos descubrimientos le demostrasen que está en el error en un punto, se modificará en este punto, y si una nueva verdad se revelara, la aceptaría” -Allan Kardec-
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127. La escritura directa o pneumatografía es aquella que se produce espontáneamente sin auxilio de la mano del médium ni del lápiz. Basta tomar una hoja de papel blanco, lo que se puede hacer con todas las precauciones necesarias para no ser chasqueado por ninguna superchería, doblarla y colocarla en alguna parte, en un cajón o simplemente sobre un mueble, y si se tienen las condiciones que se requieren, al cabo de cierto tiempo más o menos largo se encuentran en el papel caracteres trazados, diversos signos, palabras, frases y aun discursos, las más de las veces con una sustancia pardusca parecida al plomo; otras veces con lápiz encarnado, tinta ordinaria y aun tinta de imprenta. He aquí el hecho en toda su sencillez, y cuya reproducción, aunque poco común, no es, sin embargo, muy rara, porque hay personas que lo obtienen con mucha facilidad. Si se ponía el lápiz con el papel se podría creer que el Espíritu se ha servido de él para escribir; pero desde el momento que el papel está enteramente solo, es evidente que la escritura está formada por una materia depositada. ¿De dónde ha tomado el Espíritu esta materia? Tal es la pregunta que hemos dicho, a cuya solución nos ha inducido la caja de tabaco de que más arriba hemos hablado.
CAPÍTULO VIII LIBRO DE LOS MEDIUMS - ALLAN KARDEC
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