lunes, 27 de octubre de 2025

A tener en cuenta en las reuniones mediúmnicas... (3)

 INQUIETUDES ESPÍRITAS

1.-La turbación después de la muerte, El suicidio

2.- Reencarnación

3.- A tener en cuenta en las reuniones mediúmnicas ( 2 )

4.- A tener en cuenta en las reuniones mediúmnicas (3)

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 LA TURBACIÓN DESPUÉS DE LA MUERTE. EL SUICIDIO                                

Después de la desencarnación sucede un estado de turbación, en el muchos se encuentran como aletargados o confundidos. La lentitud y la dificultad de la separación, tanto como la superación del estado de turbación. guardan `proporcionalidad con el estado de depuración del alma, por lo que depende de cada uno que el tránsito sea más o menos fácil o penoso, o agradable o doloroso. Al despertar en la vida espiritual, después de la crisis de readaptación a una forma de existencia distinta, y si hubiere ignorancia acerca de esa realidad el tránsito será más difícil.

  En la muerte natural, la que resulta de la extinción de las fuerzas vitales, por la edad o por la enfermedad, la separación se opera gradualmente por el aflojamiento progresivo de los lazos que unen el espíritu con el cuerpo, y de acuerdo también con la madurez intelectual de la persona. En el hombre con conocimientos de la realidad espiritual y que ha superado el apego por las cosas terrestres, el desprendimiento no es traumático, sino suave y casi automático, su confianza en el porvenir le hace mirar la muerte con tranquilidad, con una calma y resignación que endulzan el pensamiento.

  El individuo materializado, que ha vivido apegado a los placeres y bienes materiales, con descuido total de los valores morales y desconocimiento de los valores espirituales, sufre en la separación y adhiere tanto más a la vida corporal porque no ve nada más allá, siente que la vida se le escapa y quiere retenerla, prolongando dramáticamente su agonía.

  En la muerte accidental o violenta, las condiciones son distintas. Mientras que la vida orgánica se detiene repentinamente y el cordón fluidico se rompe bruscamente, la separación del espíritu y su envoltura periespiritual, va a producirse de forma lenta y paulatina, especialmente si no hay destrucción del cuerpo físico. El Espíritu, sorprendido y aturdido, se cree aún vivo y esta ilusión le dura hasta que se da cuenta de su realidad. Este periodo de turbación es de corta duración para los que su espíritu está más evolucionado; se recuperan con rapidez e ingresan con naturalidad en su nuevo hábitat; en otros seres se puede prolongar hasta en años.

  En el suicidio, la posición del espíritu es aún más penosa. El suicidio es la mayor crueldad que puede hacer el hombre para consigo mismo, y si pudiera comprender las consecuencias que se derivan de semejante acto, preferiría vivir las miserias y contrariedades de la vida humana, antes de recurrir a un recurso tan lesivo como inútil y atentatorio contra las leyes de la vida y su evolución.

  Hay quienes cometen suicidio para liberarse de sus cruentos dolores o para sustraerse de la lucha por la vida, creyendo poner así, fin a sus males, pero el suicidio no borra ni extingue nada. resulta un acto completamente estéril que en lugar de librarnos de los sufrimientos, los aumenta, puesto que la vida no desaparece con la muerte, el espíritu continúa siendo y existiendo al pasar al nuevo plano, y se enfrenta a unos dolores muy intensos, a sensaciones fisiológicas muy desagradables, porque el cordón fluidico conserva aún mucha vitalidad, y ahora la frustración y el arrepentimiento añaden traumas morales muy amargos. Así, el ser humano que intenta escapar por la puerta falsa del suicidio, se convierte en la primera y mayor víctima de su propio engaño.

  Muchos son los móviles que pueden llevar a alguien al suicidio; unos creen encontrar un descanso total y eterno, o la nada. Otros actúan por desesperación, al sentir herido su orgullo o porque sufren una enfermedad incurable, o cuando atraviesan crisis económicas o familiares, pensando en todo caso que la muerte es el fin de todo. Según sean esos móviles y las circunstancias agravantes o atenuantes que rodean al hecho, así será la responsabilidad moral y las subsiguientes consecuencias.

- Lic. Jon Aizpurua -

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                        REENCARNACIÓN 

33... El principio de la reencarnación es una consecuencia lógica de la ley del progreso. Sin la reencarnación, ¿cómo explicaríamos la diferencia entre el estado social actual y la barbarie de otros tiempos? Si las almas fueran creadas al mismo tiempo que el cuerpo, las que naciesen hoy serían totalmente nuevas y primitivas, tanto como aquellas que vivieron hace mil años. Además, no habría entre ellas la conexión ni relación necesaria alguna y serían completamente independientes unas de otras. Pues bien, ¿por qué motivo Dios dotaría con más prodigalidad a almas actuales que a sus antecesoras? ¿Por qué causa son más inteligentes? ¿Por qué se han depurado sus instintos y dulcificado sus costumbres? ¿Por qué poseen la intuición de ciertas cosas sin haberlas aprendido?    
      No se puede salir de este ordenamiento, a menos de admitir que Dios crea almas diferentes, según el momento y el lugar, proposición inconciliable con su justicia soberana (cap. II, n.º 19). 

     Por el contrario, considerad que las almas actuales ya vivieron en un tiempo pasado; que pudieron ser bárbaras, como el siglo que las engendró, mas han progresado, y como en cada nueva existencia traen lo adquirido en vidas anteriores, las almas de los tiempos civilizados no son creadas más perfectas, sino que se fueron perfeccionando por sí mismas con el transcurso del tiempo, con lo que tendréis la única explicación lógica de la causa del progreso social.. 

EL LIBRO DE LOS ESPIRITUS 
ALLAN KARDEC. 


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  A TENER EN CUENTA EN LAS REUNIONES MEDIÚMNICAS ( 2)

                                


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El segundo punto es SELECCIÓN DE LOS PARTICIPANTES POR EL CRITERIO DE LA AFINIDAD ENTRE SI, INTERÉS, DEVOCIÓN, CAPACIDAD DE INTEGRACIÓN, EQUILIBRIO EMOCIONAL, SALUD Y CONOCIMIENTO ESPÍRITA COMPATIBLES CON LA TAREA QUE SE PROPONEN.

La influencia del medio por la condición mental y el nivel de los participantes  encarnados determinan, la calidad del asesoramiento espiritual de la reunión, así como  de las posibilidades de realización del grupo.

La necesidad de un conocimiento doctrinario básico elimina una buena parte de los riesgos de una frustración, derivada de una selección mal hecha, pues cuando se reúnen personas dispuestas al aprendizaje para colocarse a la altura de la tarea, es señal de que esos candidatos ya demuestran un cierto valor moral que, desde ese punto de vista, les acreditan.

También se consideran  otros factores de orden íntimo y de comportamiento, tales como – interés, devoción, etc. – que se reflejan de otro modo en la base psicológica del candidato. No sse intenta medir  el nivel evolutivo de las personas, cosa que es imposible,  sino para evitar que elementos incapaces  por una postura excesivamente teórica  y falta de compromiso, intercepten el trabajo,  a los que se esfuerzan en hacerlo debidamente, desarrollando la amistad y la convivencia que son factores indispensables para un trabajo mediúmnico de calidad.

En un Centro Espirita donde las tareas de solidaridad ya están implantadas y en funcionamiento,  los candidatos surgirán  del grupo que las desarrolla y del conjunto de personas que trabajan indirectamente para que las cosas ocurran.

Ante la hipótesis que se nos presenta en un grupo en formación, no conviene comenzar por las experiencias mediúmnicos organizadas, sino con ensayos de servicios fraternos, como talleres de adiestramiento para definir la afinidad y que sirvan de seleccionadores naturales de elementos útiles.

El trabajo mediúmnico es para las personas integradas en las actividades del Centro Espírita.

Cuando un grupo surge en torno a la mediúmnidad de alguien, formándose con las personas atraídas por aquel foco y con los elementos que se prestan a dar apoyo a aquel médium, es conveniente que el grupo no se aísle, sino que procure utilizar los conocimientos de otros más experimentados a través de pequeños aprendizajes de observación.

Si el grupo posee valor moral o lo adquiere, y sus miembros se unen por medio de un compromiso serio a través del propio canal mediúmnico que le dio origen, difunden orientaciones valiosas señalando caminos de trabajo, rutas de estudio capaces de ir encaminando aquel experimento de mediúmnidad natural hacia una tarea bien organizada.

Allan Kardec nos dice: Todos tienen derecho a ser candidatos a la enseñanza espiritual, siempre que no sean opositores a ella, consciente o inconscientemente, voluntaria o involuntariamente.

El incrédulo sistemático, el que se complace en el materialismo por las emisiones perturbadoras de que son portadores, no puede participar directamente de las reuniones mediúmnicos. Aquel que es incrédulo por ignorancia y que está despertando la buena voluntad, puede y debe proponerse como candidato para la enseñanza espiritual desde que cumpla el programa preparatorio necesario, y consiga sus áreas por medio de la respetabilidad y dedicación, esperando con paciencia su oportunidad.

También añadimos la salud y el equilibrio emocional como requisitos previos. Manuel Filomeno de Miranda hace referencia a esos temas en el Preámbulo de Cadenas Rotas, afirmando textualmente que solo aquellas que se encuentran con una salud equilibrada están capacitadas para el trabajo en equipo, y añadiendo: personas mañana.nerviosas, versátiles, susceptibles, carentes de auxilio no encontrándose habilitadas para más altos cometidos que exigen recogimiento, paciencia, afectividad, clima de oración en una esfera de lucidez mental.

Estos candidatos, no son eximidos para siempre, no se trata de una exigencia discriminatoria, porque la dolencia es transitoria no constituyendo un impedimento definitivo; enfermo hoy, saludable.

( continúa....)

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A TENER EN CUENTA EN LAS REUNIONES MEDIÚMNICAS-(3)

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     Otro requisito indispensable es la afinidad, que se adquiere con la convivencia en el Centro Espirita,  que a veces se remontan a otras vidas, o a compromisos asumidos en el Plano Espiritual, pues la simpatía y afinidad cuando son profundas no se adquieren en cuatro días, y aunque no existe en todos los miembros sería muy bueno que así fuese en relación al mayor número posible de colaboradores, principalmente aquellos bajo cuyos hombros pesan mayores responsabilidades.

Un Centro Espírita es una gran sintonía, y es comprensible que otras sintonías menores también se construyan en ese ambiente dedicado al estudio, a la caridad y a la oración, cuando un grupo de personas se integren en el conjunto.

Cuando existen diversos grupos mediúmnicos en un mismo Centro, es conveniente que se intente agrupar a las personas con rasgos psicológicos parecidos, y con lazos más estrechos de amistad, para que no se aíslen o pierdan el estímulo, consiguiendo así una integración cada vez mayor en el sentido colectivo.

Herminio de Miranda  nos dice en el libro “Dialogo con las Sombras” que es mejor rechazar al principio un participante sobre el cual tengamos algunas dudas razonables, que vernos forzados después a decirle que desgraciadamente tenga que dejar el grupo por no adaptarse a las condiciones exigidas por el trabajo”.

Hay que meditar muy bien antes de formar un grupo para aceptar solo a aquellos con los que se pueda contar con un mínimo de comprensión y engranaje con los demás. Esto en lo que respecta a un grupo inicial, en el caso de los ya Consolidados se sugiere la no invitación a posibles candidatos interesados  excepto cuando se trate de aquellos que se sientan realmente interesados en participar de la tarea mediúmnica.

En el tercer punto entra los requisitos inherentes de los participantes : ARMONÍA Y AMISTAD ENTRE LOS MIEMBROS DE CADA GRUPO MEDIÚMNICO Y ENTRE LOS DIVERSOS GRUPOS, NO PERMITIENDO NINGÚN SENTIMIENTODE COMPETICIÓN.

La armonía se sitúa aquí como una adquisición a ser alcanzada por el grupo, un proceso en el que la realización de cada individuo inter actúa con la de los demás, estableciéndose un efecto sinérgico – acción conjunta o combinada de dos o más factores que se potencian – en el que el resultado es mayor que la suma de las partes.

Manuel Filomeno de Miranda afirma que la armonía del conjunto se consigue por medio del ejercicio de la cordialidad entre los diversos miembros, que se conocen y se ayudan en el ambiente de lo cotidiano, (Preámbulo de Cadenas Rotas).

Una propuesta de ese tipo, en la que la relación no se agota en el contenido e interés de la propia reunión progresando hacia otras áreas como sugiere el Benefactor, necesita del apoyo de la amistad fraternal desinteresada, y siendo capaz de acoger a todos en transformaciones de calidad superior que irán a establecer las bases vibratorias del propio trabajo mediúmnico, fomentando la confianza y estima.

Por esta razón Allan Kardec instituyó como base psicológica para la reunión mediúmnica, la idea de una familia por ser la familia una institución donde se construye la amistad. Y la característica de la amistad es el compartir, esto es, ser feliz con la felicidad del otro.

En esa propuesta no hay lugar para la competición, a no ser en la saludable y natural emulación del Bien que se inspira por los buenos ejemplos para impulsar el crecimiento del ser, porque esa es una de las finalidades de la vida social.

De esta forma nunca se podrán realizar trabajos mediúmnicos de calidad cuando los miembros del grupo se pierdan por los laberintos de la envidia y de las desconfianzas.

El cuarto punto trata de: INTERÉS INCESANTE EN APRENDER-SIRVIENDO CON DESPRENDIMIENTO DE TODA ACTITUD PERSONALISTA.

Allan Kardec concibió las reuniones como permanentes frentes de estudio, animando a los médiums a liberarse de toda presunción de infalibilidad (EL Libro de los Médiums, apartado 329).

Por lo tanto no hay límite para el perfeccionamiento mediúmnico, el cual avanzará hasta el infinito. Debemos entender la falibilidad y la infalibilidad, no necesariamente como mistificación o error, sino como precisión – imprecisión, perfección – imperfección. ¿Quién de nosotros, conscientemente se consideraría completo? . La meta es huir del inmovilismo, aceptar nuevos desafíos y avanzar. Llegados a ese punto, es oportuno el siguiente comentario: El adiestramiento mediúmnico debe ser permanentemente vivido bajo la criba de la observación rigurosa con vistas a ese tan anhelado perfeccionamiento.

( Continúa....)


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