INQUIETUDES ESPÍRITAS
1.- La cuestión del suicidio ( 3 )
2.- Floración de Navidad
3.-Perlas en tu vida
4.- La superación de la depresión
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LA CUESTIÓN DEL SUICIDIO
( 3 )
Suicidio y Libertad
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Así pues, las responsabilidades son variables de acuerdo con el grado de libre albedrío o de libertad; además, pueden ser individuales o más colectivas, cuando el entorno crea las condiciones de un estado suicida. Y en este segundo caso, es preciso igualmente plantear la cuestión del libre albedrío a los que, por indiferencia o por ausencia de solidaridad y amor, van a tener una parte de responsabilidad, y por tanto de culpabilidad, frente a un suicidio.
En otros casos concretos más particulares, sucede igualmente, que las personas son inducidas al suicidio por situaciones sociales, políticas o bélicas, en casos donde prácticamente no hay otra solución que ir hacia la muerte.
El caso extremo, sería el del rebelde torturado, cuyo fin es un plazo fatal y que, teniendo a su alcance los medios para poner fin a sus días, abrevia entonces sus propios sufrimientos. En este caso preciso, puede considerarse que el acto voluntario de evitar un sufrimiento insoportable cuando se conoce el final, es totalmente legítimo, y no hay lugar para hacerse malas preguntas por cuanto se trata más de un crimen, que de un suicidio.
La Ayuda al suicida o suicidio asistido
En otro orden de cosas, se habla igualmente de suicidio como alternativa a la eutanasia. Se trata del suicidio asistido médicamente, y designa el acto de suministrar a un paciente afectado de una enfermedad incurable, el medio de poner fin a sus días por sí mismo ante los intolerables sufrimientos. En algunos países, se han legalizado ciertas formas de ayuda al suicidio, dentro de un marco medicalizado y reglamentado. El suicidio asistido médicamente, es ilegal en la mayoría de los países, con las notables excepciones de Suiza, los Países Bajos, Canadá y cuatro estados de los Estados Unidos. En esos países, el suicidio médicamente asistido, es considerado bajo control de un médico, y con el aval, decidido previamente, por cercanos a la familia o amigos. Esta práctica hay que colocarla en paralelo con la eutanasia, formando parte del mismo debate, con la diferencia de que el acto ya no es realizado por un tercero, sino por el paciente mismo.
Se vuelve entonces al problema planteado en el editorial de Le Journal Spirite Nº102 respecto a la ley Leonetti en Francia. Era cuestión de oponerse al ensañamiento terapéutico cuando representa una “obstinación irracional”. Era cuestión de cuidados paliativos, de la suspensión de todo tratamiento de supervivencia, y de una profunda sedación terminal, todo lo cual se resume en la famosa fórmula del derecho a morir con dignidad. Respecto a los países comprometidos en esta vía, parece que todavía hay un cierto número de errores, más o menos encuadrados en la ley. Por ejemplo, en Suiza, el código penal castiga al que, impulsado por un móvil egoísta, haya prestado asistencia con miras al suicidio. Se ven pues, los límites a lo que podría favorecer desviaciones. Y desde este punto de vista, existen protocolos muy particulares en países como Canadá, los Países Bajos y los Estados Unidos, en los estados de Oregón, Washington, Vermont y Montana.
Esta delicada cuestión del suicidio asistido abre un nuevo debate ético; es sin duda prematuro concluir desde un punto de vista espírita, y por el momento, eso concierne sólo a los países citados, con una carencia de retorno y retroceso, frente a la importancia de los problemas planteados.
En conclusión, respecto al suicidio en general, existen dos posiciones: por una parte, la de los espíritas más tradicionales, que son opuestos a toda aceptación del suicidio, considerando que, en todos los casos, sin excepción, se trata de un crimen contra sí mismo que expone a engendrar los peores tormentos después de la muerte. Fuera de este punto de vista, intransigente y sin concesión, existe entre los espíritas progresistas otra manera de considerar las responsabilidades individuales o colectivas.
Desde el punto de vista Espírita, y en forma general, sabemos que el hecho de abreviar voluntariamente sus días es una falta grave, cuya consecuencia será que, al no haber cumplido su vida, el espíritu deberá reencarnar más rápidamente planificando de nuevo para realizar lo que le queddó sin hacer. Pero, más allá de esta noción general, hay numerosos casos particulares: por ejemplo, es preciso tener en cuenta la edad del suicida, que puede haber cumplido ya lo esencial de su vida; y luego hay que considerar todos los casos particulares mencionados antes, en relación con la responsabilidad del entorno humano.
Por Jacques Peccatte. Presidente del Círculo Espírita en Nancy (Francia)
- FINAL -
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Floración de Navidad
( Oración transmitida por un Espíritu)
Dulce Amigo Jesús,
Entendiendo cuanto la humanidad ha olvidado Tus hermosas enseñanzas, y admitiendo cuantos dolores y frustraciones se han abatido sobre el mundo en razón de esa indiferencia. Venimos a decirte, amado Amigo, nuestros más profundos anhelos y suplicarte las renovadas conquistas de asistencia para todos los hombres.
Escucha, Jesús, los llantos de agonía de los sufridores que se arrastran sin aliento o sin medición que los alivie. Atiende, Señor, la rogativa dolorida de las madres en desespero y disgusto tanto como de los hijos en la orfandad, ansiando por Tu amoroso y acogedor regazo.
Visita, Rabí, el hogar infestado por el crimen y por el vicio, a fin de que el mal sea golpeado sin detención. Envuelve, Maestro, los que siembran miseria y sinsabores en todo y en cualquier camino, en cuanto hay tiempo de retornar a nuevos rumbos.
Renueva, Atento Guía, las energías de Tus servidores pequeñitos y dedicados, que se levantan con el Sol y se recogen con las frías y solitarias madrugadas, para que no falten a los plantones de la fraternidad y de la misericordia en nombre de Tu amor, para que no se desanimen.
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En cuanto Tu nos puedas escuchar, atender, visitar, envolver y renovar nuestras fuerzas, guardaremos la dulce certeza de que renaces a cada día, por las manos de los que sirven, por la voz de los que se levantan, por los gestos de los que no descansan, anunciando, por la Tierra entera, que es siempre tiempo de Navidad. Que es siempre Navidad.
¡Que hay siempre Tu amor floreciendo corazones!
Ivan de Albuquerque ( Médium J. Raúl Teixeira)
19.11.1990. En la Sociedad Espirita Fraternidad -en Brasil- RJ Publicada en el periódico Mundo Espirita de diciembre de 1990.
Traducido por Jacob.
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PERLAS EN TU VIDA
Las perlas son heridas y curadas!!
En la parte interna de la concha se encuentra una sustancia lustrosa llamada nácar.
cuando un grano de arena penetra, las células del nácar comienzan a trabajar y cubren el grano de arena con capas y más capas, para proteger el cuerpo indefenso de la ostra.
cuando un grano de arena penetra, las células del nácar comienzan a trabajar y cubren el grano de arena con capas y más capas, para proteger el cuerpo indefenso de la ostra.
Como resultado, una linda perla se va formando. una ostra que no fue herida, de algún modo, no produce perlas, pues las perlas son heridas cicatrizadas...
¿-Te has sentido herido por el engaño y rechazo de alguien que tu en verdad amabas...?
¿-Te has sentido herido por palabras crueles o duras de alguien?
¿-Tus ideas ya fueron rechazadas o mal interpretadas?
¿-Ya sufriste los duros golpes del prejuicio?
¿-Ya recibiste el intercambio de la indiferencia? "entonces produce una perla"
Cubre tus heridas con varias capas de amor. infelizmente, son pocas las personas que se interesan por hacer esto.
La mayoría aprende sólo a cultivar resentimientos, dejando las heridas abiertas, alimentándolas con varios tipos de sentimientos pequeños y pensando solo en lo que sucedió o en la persona que te dejo o lastimó y, por lo tanto, no permitiendo que cicatricen.
Así, en la practica, lo que vemos son muchas "ostras vacías", no porque no hayan sido heridas, sino porque no saben perdonar, comprender, dejar el pasado atrás y transformar el dolor en amor.
Una sonrisa, una mirada, un gesto, en la mayoría de veces, habla mas que mil palabras…
¡Ya es hora! ¡empieza a producir perlas en tu vida !.
( Enviado por Merce Bol )
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La superación de la depresión
Momentos delicados en la salud emocional y conductual vive nuestra sociedad. En todas partes, la depresión ha estado llegando a las multitudes desde la antigüedad. En una encuesta realizada por la OMS (Organización Mundial de la Salud), más de 350 millones de personas en todo el mundo sufren de depresión.
La OMS define la depresión como un trastorno mental común, que se caracteriza por la tristeza, pérdida de interés, falta de placer, fluctuaciones entre los sentimientos de culpa y baja autoestima y trastornos del sueño o del apetito. Existe también la sensación de cansancio y falta de concentración. La enfermedad puede ser de larga duración o recurrente. En su forma más severa, puede incluso conducir al suicidio.
Cadenas de investigación médica concluyen en que la depresión se manifiesta como un trastorno orgánico con resultados de problemas de química neuronal, con falta de algunos neuropéptidos y neurotransmisores como la noradrenalina, la dopamina y la serotonina, responsable de la alegría, el bienestar, el afecto.
Sin embargo, profundizando un poco más en el problema, se percibe que la enfermedad se manifiesta en el cuerpo porque el paciente es siempre su Espíritu reencarnado en busca del reequilibrio de los errores cometidos anteriormente.
Los tratamientos con medicamentos modernos contribuyen a la regulación eficiente de la química neuronal que ya se ha mencionado, pero es importante que las personas también busquen modificar su comportamiento moral y espiritual.
La depresión es una enfermedad del alma que se siente culpable, y con frecuencia lleva la sensación en el inconsciente debido a conductas erróneas practicadas a lo largo de las reencarnaciones.
El Espíritu de Joanna de Ángelis dice que en la mayoría de los trastornos depresivos, la causa se presenta en primer lugar como de naturaleza espiritual, y en segundo por fenómenos orgánicos - psicológicos o fisiológicos.
Para el tratamiento de la depresión el seguimiento médico es indispensable. Junto a esto, el espiritismo ofrece una terapia para la clarificación del/ de la paciente con el fin de tomar conciencia de que la responsabilidad le recae sobre sí mismo/a. A través de esfuerzos personales, con la sana costumbre de la oración, de los buenos pensamientos, de lecturas edificantes, de diálogos enriquecedores, terapia de fluidos, el individuo es motivado a tomar la lucha para derrotar este mal. Y el Señor de la vida, generosa, siempre ofrece una oportunidad para la rehabilitación.
Rafael Francinaldo
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