lunes, 23 de diciembre de 2024

Asimilación de corrientes mentales

 INQUIETUDES ESPÍRITAS

1.- Una historia de Navidad

2.- Diálogos de Kardec con un sacerdote católico

3.- La Rencarnación y el rodillo de la Iglesia Católica

4.- Asimilación de corrientes mentales

                                         ********************************



Mis deseos a todos de que celebréis una muy feliz Noche Buena y día de Navidad, en donde la armonía, la Paz y la alegría por el nacimiento de Jesús, os regalen unos días especialmente felices.




                                                   ********************************

UNA HISTORIA NAVIDEÑA

No temáis porque es aquí os traigo nuevas de grandes alegrías… Lucas 2:10

Todo en la vida de Lúdico era una fiesta, fuese la simple sonrisa de alguien en medio de la calle, fuese la conmemoración más extraña que pudiese participar.
No se perdía un evento, encuentro de ex colegas, almuerzos de familia y, hasta el baile de la 3ª edad del parque, aunque el aun estuviese lejos de alcanzarla.
Para el la Navidad era el ápice de un año festivo y la línea divisoria que marcaba el inicio de más de un año de conmemoraciones.
Amaba todos los símbolos y hábitos navideños. Iba a ver la iluminación Paulista, de la calle de Normandía. Compraba regalos para todos los que imaginaba que encontraría en la cena. No pocas veces entró en la fila y se sentó en el regazo de Santa Claus para hacer algunas compras, con deleite y risas de los niños.
Comía, bebía y cantaba Jingle Bells en varios idiomas hasta el amanecer.
En el extremo opuesto de toda esa alegría estaba Lidimo. Un sujeto serio y hosco que hallaba intolerable todos los desvíos que el llamaba de compostura. Jamás sonreía a un extraño en medio de la calle, es más, jamás sonreía.
La Navidad de Lidimo era espartana. Rechazaba los arboles navideños por sus orígenes paganos, abominaba a papa Noel y discutía de forma enardecida en defensa del verdadero sentido de la Navidad.
Su conmemoración se reducía al culto formalísimo de su iglesia, a los votos de feliz Navidad al pastor y demás personas que estuviesen presentes en el culto. Después él se iba para casa solo y no se dormía inmediatamente pues el barullo de los fuegos le causaba insomnio.
Cierta Navidad, por un contratiempo, Lúdico se vio solo. Los familiares no hicieron la fiesta tradicional pues uno de ellos estaba hospitalizado en estado grave y cancelaron la cena pocas horas antes de su inicio.
Sin saber lo que hacer, salió paseando a pie por las calles de la ciudad.
En la misma Navidad, por otro contratiempo, Lidimo se vio solo. Atendiendo el pedido de varios miembros que querían viajar, la conmemoración de la Navidad en la Iglesia fue anticipada tres semanas (un absurdo, según Lidimo) y no hubo culto el día 24.
Sin saber que hacer, él también salió paseando a pie por las calles de la ciudad.
Lúdico vio a aquel hombre solo sentado en el banco de la plaza y resolvió sentarse al lado de él. Como era en él habitual, le ofreció una sonrisa. El hombre era Lidimo, que no sonreía nunca, pero a pesar de ser tozudo, era un sujeto educado y saludó a Lúdico con unas buenas noches.
Lúdico sacó la conversación sobre las fiestas. Lidimo soltó su discurso, Lúdico lo oyó atentamente, hasta el fin.
Después comenzó a hablar sobre la alegría de vivir, sobre la sonrisa de los niños, sobre el placer de estar con las personas.
Lidimo se emocionó. Tantas navidades solitario y, en la más solitaria de todas, alguien le hablaba de alegría.
Repensó su discurso, y empezó hablar de Jesús para Lúdico. Habló de la donación, la salvación, la vida eterna.
Mientras hablaba, la fe tocó el corazón de Lúdico.
Lidimo descubrió que era posible creer en la alegría.
Lúdico descubrió que era posible alegrarse en la fe.
Juntos fueron a la tienda de conveniencia del puesto de gasolina de la plaza y celebraron juntos comiendo pan de queso y tomando un refresco.
Nunca más volvieron a tener una Navidad sin Cristo o sin alegría.

( Aportación de Lorena Dorante )

***********************************

   

  DIÁLOGOS DE KARDEC CON UN SACERDOTE CATÓLICO


- PREGUNTA DEL S. - Si la Iglesia, al ver surgir una nueva doctrina, encuentra en ella principios que, a su modo de ver, debe condenar, ¿le negará usted el derecho de discutirlos y combatirlos, de prevenir a los fieles contra lo que considera errores?

- RESPUESTA DE A.K. - De ningún modo negamos un derecho que reclamamos para nosotros. Si la Iglesia se hubiese encerrado en los límites de la discusión, nada mejor podíamos pedir. Pero lea usted la mayor parte de los escritos emanados de sus miembros o publicados en nombre de la religión, y los sermones que han sido predicados, y verá usted la injuria y la calumnia rebosando en todas partes, y los principios de la doctrina indigna y maliciosamente desfigurados. ¿No se ha oído calificar desde lo alto del púlpito de enemigos de la sociedad y del orden público a los espíritas? ¿No han visto anatematizados y arrojados de la Iglesia, a los que el Espiritismo ha atraído a la fe, dando por razón que más vale ser incrédulo que creer en Dios y en el alma por medio del Espiritismo? ¿No se han echado de menos para ellos las hogueras de la inquisición? En ciertas localidades, ¿no se les ha señalado a la animadversión de sus conciudadanos, hasta hacer que se les persiguiese e injuriase en las calles? ¿No se ha conjurado a todos los fieles a que se huyese de ellos, como de los apestados, e inducido a los criados a que no entrasen a su servicio? ¿No se ha solicitado de las mujeres que se separasen de sus maridos, y de los maridos que se separasen de sus mujeres por causa del Espiritismo? ¿No se ha hecho perder su trabajo a los empleados, retirar a los obreros el pan del trabajo, y el de la caridad a los desgraciados porque eran espíritas? Hasta los mismos ciegos han sido echados de los hospitales, porque no quisieron abjurar de su creencia. Y dígame usted, señor sacerdote, ¿es ésta una discusión leal?

¿Acaso han devuelto injuria por injuria, y mal por mal los espíritas? No. A todo han opuesto la calma y la moderación. La conciencia, pues, les ha hecho ya la justicia de decir que no han sido ellos los agresores.

- PREGUNTA Sacerd.. - Todo hombre sensato deplora tales excesos, pero la Iglesia no puede ser responsable de abusos cometidos por algunos de sus miembros poco ilustrados.

- RESPUESTA A.K. - Convengo en ello, ¿pero son miembros poco ilustrados los príncipes de la Iglesia?

Vea usted la pastoral del obispo de Argel y de algunos otros. ¿Y no fue un obispo el que decretó el auto de fe de Barcelona? La autoridad superior eclesiástica, ¿no tiene todo poder sobre sus subordinados? Si tolera entonces sermones indignos de la cátedra evangélica, si   favorece  la publicación de escritos injuriosos y difamatorios para una clase de ciudadanos, si no se opone a las persecuciones ejercidas en nombre de la religión, es porque aprueba todo eso.

En resumen, rechazando sistemáticamente la Iglesia a los espíritas que a ella volvían, les ha obligado a replegarse sobre sí mismos, y por la naturaleza y violencia de sus ataques ha ensanchado la discusión trayéndola a otro terreno. El Espiritismo no era más que una simple
doctrina filosófica; la Iglesia es quien lo ha engrandecido, presentándolo como un enemigo terrible, quien, en fin, lo ha proclamado una nueva religión. Esto fue una falta de destreza, pero la pasión no reflexiona.

QUE ES EL ESPIRITISMO. ALLAN KARDEC

                                      ************************************



LA  REENCARNACIÓN Y EL  RODILLO DE LA  IGLESIA  CATÓLICA



La doctrina de la reencarnación, doctrina de esperanza y de amor, no le interesaba a los jefes de la Iglesia, ellos querían imponer la doctrina del  miedo, del terror al pecado y a la muerte.

Querían establecer sobre bases sólidas la autoridad del sacerdocio, porque si el hombre podía redimirse por sí mismo, ya no tenía necesidad del sacerdote.

La Iglesia atemorizada resolvió poner término a esta lucha, sofocando el movimiento espiritualista, impuso silencio a todos ellos, que con objeto de espiritualizar al Cristianismo, afirmaban ideas cuya elevación la aterraba. La Iglesia llegó a declarar que todas esas ideas eran inspiradas por el demonio. Afirmó desde lo alto de su cátedra que sólo ella era la única revelación, perpetua y permanente. Todo lo que no salía de ella fue condenado y maldecido.

Hubo un momento en el que pudo creerse que la doctrina de Jesús iba a prevalecer sobre las tendencias del misticismo judeo-cristiano e impulsar a la humanidad por la amplia senda del progreso hacia las elevadas inspiraciones del alma. Pero los
hombres interesados en seguir los enseñamientos del Maestro, eran una minoría en los Concilios. Otras doctrinas se adaptaron mejor a los intereses materiales de la Iglesia, y fueron fortalecidas en aquellas célebres asambleas, cuyo objetivo principal fue inmovilizar y materializar la religión. Con el apoyo de los pontífices romanos, la Iglesia levantó el andamiaje de extravagantes dogmas que nada tienen que ver con los Evangelios.

Así construyó el sombrío edificio donde encerró el pensamiento humano. Esta construcción maciza que ha mantenido engañados a los católicos del mundo empezó en el año 325 con el concilio de Nicea y ha terminado en 1870 con el último concilio de Roma que reafirma la existencia del pecado original, la infalibilidad del Papa y la Inmaculada Concepción.

Este es el resultado de las pasiones y de los intereses materiales que entraron en acción en el mundo cristiano después de la muerte de Jesús.

La noción de la Trinidad tomada de una leyenda hindú que era la expresión de un símbolo, vino a oscurecer y materializar la idea sublime de Dios.

La inteligencia humana rechaza la idea de que tres seres se tengan que unir para construir un solo Dios y menos aún que Dios, el Ser Increado y creador de todo lo que existe, tenga que manifestarse en forma humana en este insignificante planeta.
La Concepción Trinitaria, tan oscura y tan incomprensible, tenía una ventaja para la Iglesia: le permitía hacer de Jesucristo un dios, le daba así, a quien llama su fundador, una autoridad, un prestigio que se reflejaba en ella y aseguraba su poder. Este es el motivo de su adopción por el concilio de Nicea, después de las discusiones y perturbaciones que agitaron a los espíritus durante tres siglos. Las discusiones no cesaron hasta la proscripción de los obispos arrianos, ordenada por el Emperador Constantino y el destierro del Papa Liborio, que se había negado
a aprobar la decisión del Concilio.

La divinidad de Cristo, rechazada anteriormente, quedó finalmente proclamada en Nicea en el año 325, en estos términos:

“La Iglesia de Dios, Católica Apostólica Romana, anatematiza a aquellos que dicen que hubo un tiempo en que el Hijo no existía o que no existía antes de haber sido engendrado”.

José Aniorte Alcaraz.



                                           ***********************






ASIMILACIÓN DE CORRIENTES MENTALES



En cualquier estudio mediúmnico no debemos olvidar que la individualidad espiritual, en el cuerpo físico, mora en la ciudadela  atómica carnal  que está formada por recursos tomados provisionalmente del ambiente del mundo. Sangre, encéfalo, huesos, nervios, piel y músculos son elementos materiales que se aglutinan entre si para la manifestación transitoria  del alma en la Tierra, constituye  una vestimenta temporal, según las condiciones y pruebas que tiene que pasar.

Cada recipiente recibe conforme a su capacidad. Los mundos actúan los unos sobre los otros por las irradiaciones que despiden, y las almas se influyen mutuamente  por intermedio de los agentes mentales que producen. El campo de la mente  ofrece un amplio panorama para el estudio de sus combinaciones… pensamientos de crueldad, rebeldía, tristeza, amor, comprensión, esperanza o alegría, tiene una naturaleza diferente  con características y pesos propios, haciendo más densa al alma  o utilizándola, además  de poderse definir  sus cualidades magnéticas… La onda mental poseerá determinados coeficientes de fuerza,  tanto en la concentración silenciosa como en el verbo exteriorizado o en la palabra escrita…

Comprendemos con esto, que somos victimas o beneficiarios  naturales  de nuestras propias creaciones, según las corrientes mentales qué proyectamos, nos esclavizamos  a compromisos contraídos  por el equivoco de nuestras experiencias  o liberamos con el bien  hacia el progreso, según nuestras determinaciones  y obras en armonía  o desacuerdo con las leyes eternas…

Casi todos los hechos mediumnicos son ejercidos  por el fenómeno  de la perfecta asimilación de corrientes mentales. El organismo  es como un aparato receptor donde se condensan  los pensamientos  y la voluntad con profusiones de rayos que alcanzan el campo interior del médium, primeramente por los poros, que son como miríadas  de antenas sobre las cuales  esa emisión adquiere el aspecto de impresiones débiles e indecisas. Esas impresiones  se afirman en los centros del cuerpo espiritual, los que funcionan  a modo de condensadores  y alcanzan de inmediato los enlaces del sistema nervioso desempeñando el papel de preciosas bobinas de inducción, acumulándose allí en un instante y reconstituyéndose automáticamente en el cerebro, en donde poseemos centenares de centros motores semejantes a un milagroso teclado de electroimanes ligados los unos a los otros. En esos núcleos dinámicos se procesan las acciones y las reacciones mentales que determinan  vibraciones creativas a través del pensamiento o de la palabra, considerándose el encéfalo  como una poderosa  estación emisora y receptora  y a la boca como un valioso auto parlante.  Tales estímulos  se expresan también a través del mecanismo  de las manos y de los pies, o por las sensaciones de lo sentidos y de los órganos que trabajan al igual que elevadores  y conductores, transformadores y clasificadores bajo el comando directo de la mente.

El pensamiento que nos pertenece con exclusividad, fluye incesantemente de nuestro campo cerebral, al igual que las ondas magnéticas acalóricas que nos son peculiares y lo utilizamos normalmente  accionando los recursos de que disponemos.

En los asuntos de este orden es imprescindible tener mucho cuidado para juzgar, porque si se basa el criterio sobre la medida de expresión terrena, se posee una  vida mental parasitaria y restringida, ya que ocultamos  la onda de pensamiento  que nos es propia para reflejar  y actuar con los preconceptos  consagrados   o con la pragmática de las costumbres  preestablecidas, que son cristalizaciones mentales  producidas en el tiempo. Basta que se ejerza la meditación, al estudio edificante y a la vocación de discernir,  para comprender con nitidez cual es la calidad de nuestros pensamientos y poder identificar  claramente a las corrientes espirituales que asimilamos.

La mediumnidad es un don inherente a todos los seres, al igual que la facultad de respirar, cada criatura asimila las fuerzas superiores o inferiores con las cuales se haya en sintonía. Por eso mismo el Divino Maestro nos recomendó la oración y la vigilancia  para no caer en las sugestiones del mal,  porque la tentación es la corriente  de fuerzas vivas que irradiamos nosotros y que, llegando hasta los elementos afines, tejen entre si, alrededor  de nuestra alma, una espesa red de fuerzas impulsivas que se tornan a veces irresistibles.

Estudiemos trabajando. El tiempo utilizado en el bien de nuestro prójimo  es una bendición que atesoramos para siempre en nuestro propio provecho.


 Extraído de el libro: “En los Dominios de la Mediumnidad” de Chico Xavier.

Realizado por Merchita



                                               **************************

No hay comentarios: