martes, 4 de junio de 2024

Una visión del Espiritismo para la actualidad (1 de 4)

 INQUIETUDES ESPÍRITAS

1.- Sobre las evocaciones

2.- Dos historias para reflexionar

3.- Una visión del Espiritismo para la actualidad (1 de 4)

4.- ¿Quién es el Jesús del Espiritismo?

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                           SOBRE LAS EVOCACIONES

¿Puede evocarse a los Espíritus puros que han terminado la serie de sus encarnaciones?
Sí, pero rara vez; pues solo se comunican a los corazones puros y sinceros, y no a los orgullosos y egoístas; es menester desconfiar de los Espíritus inferiores que toman esta cualidad para darse más importancia a vuestros ojos.

32. ¿En qué consiste que el Espíritu de los hombres más ilustres venga tan fácil y familiarmente al llamamiento de los hombres más oscuros?
Los hombres juzgan a los Espíritus como ellos, y es un error; después de la muerte del cuerpo, las categorías terrestres no existen; no hay más distinción entre ellos que la bondad, y los que son buenos van por todas partes en donde puede hacerse bien.


33. ¿Cuánto tiempo después de la muerte puede tardarse en evocar a un Espíritu?
Puede hacerse en el mismo instante de la muerte, pero como en este momento el Espíritu está aún en la turbación responde imperfectamente.

Observación. – Siendo la duración de la turbación muy variable, no puede haber plazo fijo para hacer la evocación; es raro, sin embargo, que al cabo de ocho días el Espíritu no se reconozca bastante lúcido para poder responder; algunas veces lo puede muy bien dos o tres días después de la muerte; en todos los casos se debe ensayar con respeto.

34. ¿La evocación en el instante de la muerte es más penosa para el Espíritu que la que se hace más tarde?
Algunas veces es como si os quitasen el sueño antes de despertaros completamente. Sin embargo hay algunos que no son contrariados y aun les ayuda a salir de la turbación.

35. Un niño que muere a corta edad, ¿ cómo puede su Espíritu responder con conocimiento de causa, si cuando vivía no tenía aún conciencia de sí mismo?
El alma del niño es un Espíritu envuelto aún en los lazos de la materia; pero separado de ella goza de las facultades del Espíritu, porque los Espíritus no tienen edad; lo que prueba que
el Espíritu del niño ha vivido ya. Sin embargo, hasta que esté completamente desprendido, puede conservar en su lenguaje algunas trazas del carácter de la infancia.

Observación. – La influencia corporal que se hace sentir más o menos tiempo sobre el Espíritu del niño se hace igualmente notar algunas veces sobre el Espíritu de aquellos que mueren en estado de locura. El Espíritu, por sí mismo, no es loco, pero ya se sabe que ciertos Espíritus creen durante algún tiempo estar aun en este mundo; no es, pues, extraño que sintiéndose loco el Espíritu se resienta aún de las trabas que durante la vida se oponían a su libre manifestación, hasta que esté completamente desprendido. Este efecto varía según las causas de la locura, porque hay locos que recobran toda la lucidez de sus ideas inmediatamente después de su muerte.

- El Libro de los Médiums. por Allan Kardec

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   DOS HISTORIAS PARA REFEXIONAR

                                                      




1ª Historia
Una vez, un niño entró en la sala de emergencia de un hospital tras haber sido atropellado. El motorizado que lo auxilió, al solicitársele que efectuara el depósito necesario para atender al niño, informó que no poseía en ese momento efectivo o cheque que pudiera dejar en garantía, pero que, si el hospital aceptase, efectuaría el depósito a primera hora de la mañana.

La enfermera, ante la imposibilidad de ordenar que el niño fuera atendido, fue a consultar el caso con uno de los directores del hospital que, justamente esa noche, estaba de guardia. El doctor no dio la orden de atenderlo, hecho que condujo a la muerte de la criatura.

Cuando un rato después, el médico fue llamado para firmar el deceso del niño, descubre que éste era su hijo, quien pudo haberse salvado si hubiese sido atendido...

2ª Historia

José, un padre de familia, cierto día, cuando regresaba del trabajo, se encontró con un embotellamiento de tránsito infernal y notó que un señor conducía apresuradamente, cortándole el paso a todo el que podía al tratar de abrirse paso entre los vehículos. Cuando se aproximó al carro de José, se le atravesó de una manera tan brusca que por poco ocurre una colisión.

En ese momento, José tuvo deseos de insultarlo e impedirle el paso, pero luego pensó: "¡El pobre! Está tan nervioso y apurado... ¡Sabrá Dios si tiene un problema serio y necesita llegar cuanto antes a su destino!"

Con estos pensamientos, detuvo por completo su auto y lo dejó pasar. Al llegar a casa, José recibió la noticia de que su hijo de tres años había sufrido un grave accidente y había sido llevado al hospital por su esposa.

Inmediatamente se dirigió al hospital; al llegar, su esposa corrió a sus brazos y lo tranquilizó diciéndole: - Gracias a Dios todo está bien. El médico llegó justo a tiempo para salvar la vida de nuestro hijo; ya está fuera de peligro.

Aliviado, José pidió hablar con el médico para agradecerle. Cual sería su sorpresa cuando vio que el médico era ese señor nervioso y apurado a quien le había cedido el paso casi una hora antes.

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Hay que estar siempre dispuesto a ayudar al prójimo, independientemente de su apariencia o condición económica.

Trata de ver a los demás más allá de las apariencias.

Imagina que, detrás de esa actitud que no entiendes, existe una historia, un motivo que puede llevar a esa persona a actuar de una manera determinada, quizá a veces no sea un motivo justificable pero... siempre hay un motivo.

( Aportado por Mónica Bonzini)

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UNA VISIÓN DEL ESPIRITISMO PARA LA ACTUALIDAD (1 de 4)

VIGENCIA DE LOS POSTULADOS FUNDAMENTALES DEL ESPIRITISMO 

                                

Los principios fundamentales que constituyen el marco estructural del Espiritismo (Existencia de Dios; Preexistencia y Supervivencia del Espíritu; Evolución del Espíritu; La Reencarnación; Mediumnidad; Pluralidad de Mundos Habitados) no sólo no se han visto negados por el progreso de la humanidad, sino que los avances y las investigaciones realizados por el hombre en muy diversos campos del conocimiento, han venido ofreciendo evidencias y pruebas cada vez más numerosas y concluyentes a favor de ellos. 

Desde la medicina, la biología, la astronomía o la física se aportan periódicamente descubrimientos que refuerzan la realidad de los postulados del Espiritismo. Y en el orden moral, los ideales de la fraternidad que propugna el Espiritismo parecen cada vez más necesarios y urgentes en un mundo presidido por la exacerbación del egoísmo y las lacerantes injusticias sociales.

 Una de las últimas fuentes de verificación de las enseñanzas espíritas ha venido a través de un camino del todo inusitado hace unos años: La Transcomunicación Instrumental. La importancia que para el Espiritismo están alcanzando las investigaciones en la Transcomunicación Instrumental (TCI), viene determinada por el hecho de que si bien esas investigaciones, en su mayor parte, están siendo realizadas por científicos y técnicos ajenos al Movimiento Espiritista, los resultados obtenidos confirman una y otra vez sus tesis básicas.

(Continúa en el siguiente )

Por Oscar M. García Rodríguez

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                   ¿Quién es el Jesús del espiritismo?

SalomónSalomón Jacob Benchaya

El libro El Cristo de Paulo de Tarso, publicado en octubre/2020 por el prof. José Lázaro Boberg, de                      Jacarezinho-PR, está destinado a tener un fuerte impacto en el movimiento cristiano y, en                                    particular, en el movimiento espírita. Esto se debe a que confronta posiciones arraigadas en la                                tradición católica y espiritualista en torno a los evangelios y sus principales protagonistas, con                        repercusiones, en mi opinión, en la lectura de las obras de Kardec y de médiums como Chico Xavier                                  y su guía espiritual Emmanuel.

En esta obra, prologada por Milton Medran Moreira, Boberg afirma que el Cristo al que se refiere                                  Pablo en sus “cartas” o “epístolas” –los primeros escritos del cristianismo– no es el hombre de                                          Nazaret, sino el Christós del gnosticismo, el Cristo espiritual, interior, el Dios que vive en nosotros,                                    la chispa divina de la que todos estamos dotados.

Boberg es un estudioso de los temas bíblicos y del gnosticismo, doctrina cristiana anterior al                            cristianismo, considerada herética y violentamente combatida por la Iglesia, habiendo publicado ya,                                  en la misma línea, obras como “El Evangelio de Tomás – el eslabón perdido”, “ El Evangelio de                                Judas”, “El Evangelio de María Magdalena” “El Evangelio Q” . Sus estudios se basan en el                                      trabajo de brillantes investigadores del cristianismo y sus principales protagonistas. En la Introducción                            de su libro, el autor informa: “Me quedé estupefacto” ante un insólito descubrimiento del “Cristo                            gnóstico de Pablo” a través de dos libros fundamentales, fuera de la literatura espiritista: el best                                seller “El Cristo de los Paganos: La sabiduría de la historia antigua y el significado espiritual de la                                Biblia y la historia de Jesús” y “Convertir el agua en vino” , ambos del ex pastor anglicano Tom                        Harpur. También cita a autores célebres como Rudolf Bultmann, John Dominic Crossan, Elaine Pagels,                          Barth Ehrman, Alvin Boyd Kuhn, Albert Schweitzer, Marcelo da Luz, Carlos Pastorino, Huberto                                  Rohden, Hermínio de Miranda, entre otros. Me gustaría aprovechar esta oportunidad para destacar                                  los interesantes libros escritos por el ex seminarista católico prof. José Pinheiro de Souza (1938-2014)                        “ Tres maneras de ver a Jesús” (2011), con prefacio de Milton Medran Moreira, y “Mitos                           cristianos” (2019), ambos relacionados con la verdadera identidad o naturaleza de Jesús.

Boberg también menciona la importancia del “Seminario de Jesús”, fundado en 1985, en California,                            formado por uno de los grupos de crítica bíblica más calificados, cuyo objetivo era reconstruir la vida                              del Jesús histórico, definiendo quién fue Jesús, qué hizo. , lo que dijo, empleando conocimientos                            científicos y basándose en fuentes primarias, evidencia arqueológica y estudios antropológicos.                            Pretendían separar al Jesús histórico del Cristo de la fe.

Con base en esta copiosa literatura, creo que los estudiosos espíritas -particularmente los  espíritas                                    cristianos- tienen el deber de analizar racionalmente este tema, a la luz de la Ciencia, como Kardec.                 recomienda máxime porque una de las críticas dirigidas a él se refiere precisamente a , a su excesiva vinculación de la Filosofía Espírita con las tradiciones religiosas del judaísmo/cristianismo.

En el siglo XVIII, los estudios del llamado Jesús Histórico se iniciaron con la obra del filósofo deísta alemán Hermann Samuel Reimarus (1694-1768), negando el origen sobrenatural del cristianismo, que, naturalmente, no era bien visto por la Iglesia. En 1835, el teólogo alemán David Friedrich Strauss escribió el libro “La vida de Jesús” criticando el “mito de Jesús”, afirmando que su vida no tenía nada de sobrenatural. En 1863 apareció en Francia una obra con el mismo título, escrita por el teólogo, filósofo e historiador Ernest Renan, demostrando que el Jesús histórico no es el mismo Cristo de la fe o el Jesús dogmático. Esta obra tuvo gran repercusión y Kardec incluso la menciona en la Revista Espírita de mayo y junio de 1864, no sin demostrar su disgusto por la interpretación poco caballerosa que el autor hace del Cristo descrito en los evangelios. Un poco antes, el 14 de octubre de 1863, el Espíritu Erasto, respondiendo a la pregunta de Kardec sobre “¿qué efecto producirá la 'Vida de Jesús' de Renan?” afirmó que “está incluido en esa legión de Espíritus encarnados que pueden ser catalogados como demoledores del viejo mundo” y finaliza su comunicación diciendo que “Sin sospecharlo, Renan encontró el camino hacia el Espiritismo” (AK - Obras Póstumas) .

Hoy se sabe que las narraciones de los evangelios canónicos –los “atribuidos” a Marcos, Mateo, Lucas y Juan– son construcciones literarias surgidas a partir de la segunda mitad del siglo I, probablemente copiadas de una fuente anterior, el Evangelio “Q ” – de Quelle (fuente) – y que, en gran medida, son reproducciones de tradiciones mitológicas que dieron forma a Jesucristo - el Cristo de la fe - de las Iglesias cristianas. Los revolucionarios descubrimientos, en Nag Hammadi, Egipto, de papiros que contienen el Evangelio de Tomás (1945) y, más tarde, de los Rollos del Mar Muerto (1947) , conservados en vasijas de barro, muchos de los cuales aún no han sido revelados al público, sugieren una relación entre Jesús y la Orden de los Esenios, una secta judía ortodoxa. Los estudiosos admiten que los aforismos (máximas, dichos) contenidos en estos papiros son los más coherentes con las enseñanzas de Jesús y revelan que la narración biográfica de la vida de Jesús fue introducida más tarde en los evangelios canónicos producidos por la Iglesia.

El hecho es que los estudiosos son unánimes al afirmar que no existen registros verdaderamente originales, sino copias de copias, como informa Boberg en su libro “El Cristo de Pablo de Tarso”. También se sabe que muchos “hechos” narrados en los Evangelios fueron copiados de tradiciones paganas de Persia y Egipto o ajustados a profecías del Antiguo Testamento.

De todo esto surge la pregunta: - Después de todo, ¿qué es verdad en los Evangelios y qué es mito? La tesis de que Pablo de Tarso, en sus escritos, no se refiere a un Jesús humano, sino a un concepto gnóstico –el Christós (Dios en nosotros)– sugiere una reflexión sobre el hecho de que Kardec, a pesar de haberse detenido sólo en la enseñanza moral de Jesús, como se explica en El Evangelio según el Espiritismo, en “El Génesis” interpreta, desde una perspectiva espírita, milagros y predicciones de Jesús narrados en los evangelios canónicos, fuente evidentemente poco confiable.

Sé que el abordaje de este tema hiere tradiciones y creencias religiosas muy arraigadas y no es mi intención faltarles el respeto.

Sin embargo, no puedo evitar enfrentar los hechos que la ciencia ha demostrado a través de investigaciones honestas como la del "Seminario de Jesús" en California, que sólo el 18% de lo que Jesús dijo y el 16% de lo que realizó son aceptados como verdaderos, en el mundo. evangelios canónicos recordemos que Kardec advierte que el espiritismo sigue a la Ciencia y que cambia en puntos donde indica que está en error”, que “la 'vida' de Jesús en los evangelios resulta, en definitiva, distorsionada y. Copia fragmentaria de un prototipo egipcio que era un personaje puramente dramático que retrataba la divinidad en el ser humano”, reproduciendo el escritor y expastor anglicano Tom Harpur, autor del clásico “El Cristo de los paganos”.

Elaine Pagels, Helmut Koester y otros investigadores coinciden en que los aforismos (dichos, frases, depositarios de sabiduría ancestral, preexistente a Jesús) que se encuentran en el evangelio de Tomás son los que más se asemejan a las enseñanzas de Jesús, lo que ayuda a identificar cuáles fue interpolado en los Evangelios de la Iglesia. Hermínio C. Miranda también aborda este tema en su libro "El Evangelio de Tomás - Texto y Contexto".

No veo ninguna razón para que el tema no deba ser discutido en los centros espíritas. Es obvio que habrá una resistencia comprensible a medida que entremos en el terreno de las creencias profundamente arraigadas. Los espíritas vienen lidiando, desde hace más de un siglo, con la idea de que Jesús es el Espíritu más puro que encarnó en la Tierra, e incluso es su Gobernante. Los espíritas roustainuistas ven en él un Espíritu que nunca se equivocó y que evolucionó en línea recta, sin encarnar, habiendo nacido virginalmente con un cuerpo fluídico, doctrina radicalmente contraria al espiritismo. En otra perspectiva espiritualista, se afirma que la evolución de Jesús fue tal que necesitó 1.000 años sólo para condensar su periespíritu y poder reencarnar entre los humanos. En Brasil, especialmente, la cristolatría está creciendo vigorosamente.

Es necesario un cambio en nuestras estructuras mentales, en palabras de Jaci Régis.

Yo, por ejemplo, ante la falta de fiabilidad de los textos canónicos, con sus falsas historias sobre Jesús, prefiero sustituir al Cristo Hombre eclesiástico y adoptar el concepto pagano y gnóstico de Khristós –poder divino inmanente a todos los seres, el Cristo interno– principio que no depende de religión, etnia o ubicación geográfica. Maurice Herbert Jones utiliza la expresión teotropismo para nombrar este impulso interno del Ser en busca de Dios.

Este concepto, por otra parte, se alinea perfectamente con la propuesta de autonomía moral inherente a la Filosofía Espírita, tan destacada en trabajos recientemente publicados. Repitiendo mi comentario en la parte final del libro de Boberg, se puede decir que, si Allan Kardec hubiera conocido esta información, en mi opinión, el uso de las expresiones “espiritismo cristiano” y “espíritas cristianos” habría estado plenamente justificado. . que algunos consideran inapropiado.

(Artículo publicado en el periódico CCEPA Opinião, ediciones de marzo, abril y mayo de 2021)

                        

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