jueves, 30 de enero de 2025

Al Espiritismo por el Magnetismo

 INQUIETUDES ESPÍRITAS

1.- La virtud más meritoria

2.- Atendimiento fraterno

3.- Historia del concepto reencarnacionista

4.- Al Espiritismo por el Magnetismo

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              LA VIRTUD MÁS MERITORIA

 



El apego a las cosas materiales, es un indicio notorio de inferioridad, pues, cuanto más el hombre se apega a los bienes de este mundo, menos comprende su destino.

Por el desinterés, al contrario, él prueba que ve el futuro desde un punto de vista más elevado

 "El hombre de bien que, creyendo en su futuro celestial, quiere llenar su vida con nobles y bellas acciones, saca de su fe, la certeza de  felicidad que lo aguarda y  la fuerza necesaria para sus  acciones de caridad, de sacrificio y de abnegación.

Y, por fin, no hay malas inclinaciones, que con la fe, no puedan ser vencidas."

El Libro de los Espíritus, Allan Kardec, cap. XIX, íten 12.

 Pregunta Allan Kardec a los espíritus responsables por la codificación, cuál sería la más meritoria de todas las virtudes. De ellos obtuvo la siguiente respuesta que nos sugiere una gran reflexión:

"Todas las virtudes tienen su mérito, porque todas son indicios de progreso, en el camino del bien.

Hay virtud siempre que hay resistencia voluntaria, a ser arrastrado por las malas tendencias.

Mas la sublimidad de la virtud, consiste en el sacrificio del interés personal, por el bien del prójimo, sin segunda intención. La más meritoria es aquella que se basa en la caridad mas desinteresada".

 El hábito de hacer el bien

 Según los buenos espíritus, esa caridad es espontánea, sin necesidad de lucha interior, en las personas que realizan el progreso. Así, los buenos sentimientos no les cuestan ningún esfuerzo y sus acciones les parecen tan naturales; que el bien se tornó para ellos en un hábito.

Se debe honrar a esas personas, "como a viejos guerreros, que conquistan posiciones".

 Como estamos todavía lejos de la perfección, esos ejemplos nos sorprenden por el contraste y lo admiramos, porque son raros.

Sin embargo, en los mundos inter-dimensionales, más avanzados que el nuestro, eso que nos es excepción, es la regla.

 El indicio más característico de la imperfección, es el interés personal.

  Informan los espíritus orientadores que, en la evaluación de los tribunales de justicia divina (y de la conciencia), fuera la de nuestros defectos y  nuestros vicios, sobre los cuales nadie se engaña, el más característico indicio de la imperfección, es el interés personal.

 Según nos enseñan, las cualidades morales, son generalmente como un objeto de cobre, que no resiste a la piedra de toque. "Un hombre puede poseer cualidades reales que lo hacen para el mundo, un hombre de bien, pero esas cualidades, aunque representan un progreso, no soportan por lo general ciertas pruebas, y basta tocar la tecla del interés personal, para que se descubra el fondo de su pensamiento".

 Indicio notorio de inferioridad

 Dicen los espíritus orientadores al pedagogo de Lyon: "El verdadero desinterés, es un hecho tan raro en la Tierra, que se le puede admirar como a un fenómeno, cuando se presenta. El apego a las cosas materiales, es un indicio notorio de inferioridad, pues, cuanto más el hombre se apega a los bienes de ese mundo, menos comprende su destino. Por el desinterés, al contrario, se prueba que mira el futuro, desde un punto de vista más elevado".

 Y prosiguen: "A  medida que los hombres se aclaren, sobre las cosas espirituales, daran menos valor ha las materiales; en seguida, es necesario reformar las instituciones humanas, que lo entretienen y lo excitan.

Esto depende de la educación".

 Es necesario que el egoísmo produzca mucho mal, para hacer comprender la necesidad de su extirpación

 El egoísmo, que lejos de disminuir, crece con la civilización, que parece excitarlo y entretenerlo, se presenta como un gran mal. Y cuanto mayor es el mal, mas horrible se torna.

Cuando los hombres se hayan separado del egoísmo que los domina, vivirán como hermanos, no  haciendo el mal y ayudándose recíprocamente por un sentimiento fraterno de solidaridad.

Entonces el fuerte será el apoyo y no el agresor del débil, y no se verán hombres desprovistos de lo necesario, porque todos practicarán la ley de justicia.

Ese es el reino del bien, que los Espíritus están encargados de preparar". 

 El medio de destruir el egoísmo :

 Por la práctica de la abnegación se combate el predominio de la naturaleza corpórea, generadora del egoísmo. De esa forma el Espíritu triunfará sobre la materia.

 En su lógica irrefutable, esclarecen los bienhechores espirituales que, de todas las imperfecciones humanas, "la mas difícil de eliminar es el egoísmo, porque se liga a la influencia de la materia, de la cual el hombre, todavía permanece muy cerca de su origen, y del cual no puede liberarse.

Todo concurre para mantener esa influencia: sus leyes, su organización social y su educación.

El egoísmo se reducirá con el predominio de la vida moral sobre la vida material, y sobretodo, con la comprensión que el espiritismo nos ofrece en cuanto al nuestro estado futuro real y no desfigurado por las ficciones alegóricas.

 El egoísmo se funda en la importancia de la personalidad. Pues el espiritismo bien comprendido, hace ver las cosas desde un punto tan alto, que el sentimiento personal desaparece de alguna forma, ante la inmensidad.

Al destruir esa importancia, o por lo menos al hacer ver la persona como aquello que de verdad  es, combate necesariamente el egoísmo".

  El principio de la caridad y de la fraternidad, se opone  al egoísmo

 Es por el contacto, como el hombre experimenta el egoísmo de los otros  y que lo torna generalmente egoísta, porque siente la necesidad de ponerse a la defensiva.  

 En un contexto genuinamente cristiano, los buenos espíritus aseguran que solamente "el principio de la caridad y de la fraternidad debe de ser la base de las instituciones sociales, de las relaciones legales del pueblo para el pueblo y del hombre para el hombre, y este pensará menos en si mismo cuando vea, que los otros también lo hacen.

Experimentará, así, la influencia moralizadora del ejemplo y del contacto".

Explica Fénelon a Kardec: "cara al actual desdoblamiento del egoísmo, es necesaria una verdadera virtud, para abdicar de la propia personalidad, en provecho de los otros que en general no lo reconocen.

Es a esos, sobretodo, a los que poseen esa virtud, a quienes está abierto el reino de los cielos; a ellos, sobretodo, está reservada la felicidad de los elegidos, pues, en verdad os digo, en el día del juicio, quien no piense sino en si mismo, será puesto a un lado y sufrirá  el abandono".

Lopes para asociación frat.  Estudio elaborado sobre la condensación del cap. XII, Perfección Moral, del Libro de los Espíritus, de Allan Kardec, traducción de J. Herculano Pires, Editora EME.

Adaptación: Oswaldo E. Porras Dorta

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ATENDIMIENTO FRATERNO

(Entrevista con Divaldo )

 

José Ferraz: -¿Cuál es la utilidad doctrinaria del servicio de Atendimiento Fraterno en la Casa Espírita? 

Divaldo: - Recibir a las personas, orientándolas según las posibilidades que la Casa dispone en forma de recursos que son puestos a las órdenes de aquellos que vienen hasta el núcleo de iluminación espiritual, encaminando a los que tienen problemas para recibir las respuestas pertinentes a sus necesidades y, por fin, haciendo el trabajo educativo y fraternal de bien y conducir a todos aquellos que llaman a las puertas de la Institución Espírita.

Joao Neves: - ¿Es beneficioso para las personas que recurren a la terapia de los pases ser, antes, asistidas y orientadas por el atendedor fraterno? 

Divaldo: - El Atendimiento Fraterno es una psicoterapia que modifica la estructura del problema en el individuo que se acerca a la Casa Espírita con ideas que no corresponden a la realidad. Se puede decir que, de ese contacto personal que anticipa el pase, muchas veces el cliente ya se beneficia, siendo incluso innecesaria la aplicación de la bioenergía. Vivimos en una sociedad que padece conflictos psicosociales, socioeconómicos, comportamentales, cuyos individuos tienen necesidad de hacer catarsis. Como el atendimiento psicoanalítico es muy caro y muy prolongado, en el Atendimiento Fraterno el individuo tiene la oportunidad de abrir el alma al buen oyente, que se puede orientar con seguridad 

 Como es natural, la desinformación, la falta de información atribuye al pase un carácter de naturaleza milagrosa, lo que ha llevado a algunas personas menos esclarecidas a establecer el número de ellos para la solución de ciertos problemas, lo que no deja de ser una equivocación, porque se les podrá aplicar en número infinito y, si el paciente no se transforma interiormente, de nada adelantará la terapéutica. Si él no se abre para asimilar las energías, es igual a una piedra granítica que, a pesar de estar sumergida en aguas profundas durante millones de años, al no abrirse se encuentra seca interiormente.

José Ferraz: - ¿Cuáles son los requisitos indispensables para que una persona, como atendedor fraterno, pueda sintonizar con los Buenos Espíritus? 

Divaldo: - La condición esencial es la buena moral. Desde el punto de vista espiritista el requisito moral del individuo es relevante, imprescindible. Nos utilizamos de un dicho popular. “Dime quien es y yo te diré con quien andas; dime con quien andas y te diré quien es”. Ir a Dios a través de la oración es otra condición, pues se abren los canales psíquicos para una perfecta sintonía con el Mundo Espiritual que os asiste en el atendimiento a las criaturas de la Tierra. Además de esos caracteres esenciales, a parte de los valores morales, es imprescindible el conocimiento de la Doctrina Espírita. No se puede propiciar un buen atendimiento fraterno en la Casa Espírita, sin que se conozca el Espiritismo, lo que sería una paradoja, hablar de una cosa con la cual no se está identificado.

El conocimiento amplio de la Doctrina Espírita es un requisito que tiene un carácter primordial, porque la persona hablará sobre aquello que es la esencia de la Doctrina a fin de que el recién llegado se entere de lo que puede conseguir.

Un buen tacto psicológico es necesario. La capacidad de saber escuchar es valiosa, porque el cliente, normalmente, quiere hablar. En la mayoría de las veces, no desea escuchar respuestas, quiere “desahogarse”, como muchos afirman, porque, a falta de una respuesta para el problema, él necesita de alguien que lo oiga. Entonces, el atendedor debe poseer este tacto psicológico para dar oportunidad al visitante de liberarse del conflicto. Evitar, cuanto sea posible, que él hable de cuestiones íntimas, de las que se arrepentirá después, cuando el problema haya pasado. El Atendedor Fraterno no es un confesionario. Como el propio nombre dice, es un encuentro, en el cual se atiende fraternalmente a aquel que tiene cualquier tipo de carencia. Con tacto psicológico se puede desviar, en el momento oportuno, un asunto que sea un inconveniente e interrumpir al cliente en el momento adecuado, a fin de no alargar demasiado, generando una “complicidad” de afinidades entre el terapeuta del atendimiento y aquel que lo busca, evitando producir lo que, a veces, ocurre entre el psicoterapeuta convencional y su paciente. El atendedor fraterno no debe dar preferencias, debe permanecer en una neutralidad dinámica, como diría Juana de Ángelis, porque todos son iguales –dice la justicia- ante la Ley. Entonces, a todos los que tienen problemas y nos buscan, deberemos atender con cariño, sin preferencias, sin excepciones y sin absorber su problema, para que él no se convierta en un paciente nuestro y no transfiera todos sus desafíos hacia nuestra residencia. Muchas veces preguntará: - Cuando tenga un problema ¿puedo llamarle? – No – será la respuesta – en casa yo tengo otros compromisos; usted vendrá cuando lo necesite, aquí al Atendimiento.

  Atendimiento Fraterno, Proyecto Manuel Philomeno de Miranda.

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HISTORIA DEL CONCEPTO REENCARNACIONISTA

                                                              


La  idea de la reencarnación es un concepto que se remonta a épocas tan antiguas y remotas casi como el propio Ser humano.

 Términos como alma, espíritu, reencarnación (la idea), inmortalidad, etc, no son inventos de esta época, sino que ya aparecían en los pueblos diseminados por toda la Tierra, desde muchos siglos antes de la aparición de Cristo.

     En los tiempos primitivos esta idea ya era  intuida por el Ser humano con su  sentido innato  de lo religioso. Se puede comprobar que es así por hallazgos arqueológicos, como por ejemplo, que  en la Edad de Piedra, hace unos 10.000 años, se hacían entierros en posición fetal, porque creían que así facilitaban el renacimiento.

      El Ser humano desde su origen, ya experimentó la idea de haber vivido antes, al retomar emociones y recuerdos de un pasado desconocido; a estas sensaciones y recuerdos, posteriormente se les llamó “dejá vú ”, (vocablo  francés que significa ya visto).                                                                                                                       

 Si nos remontamos  unos 50.000 años,  podemos comprobar como el hombre de Neanderthal  enterraba a sus muertos provistos de alimentos y utensilios, expresando así su fe en otra vida semejante a la terrena.

 En las tumbas de los Etruscos, que florecieron en Italia antes de la época del Imperio Romano, se han encontrado muebles y carrozas para el uso de los Seres que habían partido de este mundo, lo que confirma el concepto que estos tenían sobre el más allá..

 En el antiguo Egipto, 3000 años antes de nuestra era, la supervivencia del espíritu y su reencarnación ya eran conocidas y afectaba a la aristocracia de los reyes  cuyos nombres terminaban en “Keres”, porque atribuían que todos ellos eran reencarnaciones de “Keres”. En un principio la reencarnación solo era atribuida  a los poderosos, pero ya en la XVIII Dinastía se creía que las personas inferiores también renacían.

 De los egipcios esta idea pasó a los Griegos, a través de Pitágoras- unos 500 años antes de C- y de sus discípulos Sócrates, Platón, Empedocles, Apolonio, etc

  Asimismo fueron figuras históricas destacables que sostuvieron este concepto, Aristóteles, -350 años antes de C. aproximadamente; Plutarco – unos cien años a. de C. aprox) y  Herodoto,  Este último fue un historiador griego que vivió cinco siglos antes de C. y reflejó las creencias egipcias de su tiempo. Creían en la reencarnación como metempsicosis (entrada del alma humana en un animal inferior como castigo por sus pecados).  Ya entonces la enseñanza se concretaba en que el alma ascendía a través de todos los grados hasta que se convertía en humana, y después guiada por Espíritus Superiores ascendía a través de miles de grados hacia la Perfección.

En el oriente viene siendo esta idea sostenida desde hace miles de años, no solamente a nivel religioso, sino también como creencia popular. Los  hinduistas  y los budistas han sido sus principales paladines, y a partir de ellos esta idea formó parte de las raíces religiosas de casi todas las religiones asiáticas.

       En  occidente este concepto no ha sido desconocido, pues aunque haya a quien pueda parecer extraña esta afirmación, la idea de la reencarnación ha sido un pilar básico en la cuna de la cultura occidental.

      En Europa, según los galeses, esta idea comenzó con los Celtas  y de allí pasó al Este en donde coincidió y se afianzó  con el Hinduismo y con el Budismo.

  La cultura occidental  nació en base a la cultura Helénica, en Grecia, en donde filósofos como Pitágoras, Sócrates, Platón, Aristóteles, etc, defendieron y explicaron estos conceptos a sus discípulos.  

     Posteriormente diversas Escuelas Esotéricas  continuaron manteniendo esta idea hasta el momento en que surgió el Cristianismo. Durante los primeros cuatro siglos del mismo, surgieron por  Europa oriental y en la parte occidental de Asia, varias escuelas de pensamiento que trataron de lograr una síntesis del platonismo, conjugando enseñanzas griegas, judías, orientales y cristianas. Constituyeron así el Neoplatonismo, cuyos máximos exponentes fueron las Escuelas de Alejandría, de Atenas, Siria, Pérgamo y Roma, que buscaron reunificar  la sabiduría de oriente y occidente,  siguiendo el hilo conductor de la doctrina de Platón.  El  Cristianismo   fue  un  fenómeno  social    de   importantísimas   y    transcendentes   dimensiones   que  en  su  historia   ya   presenta   testimonios  que   prueban  que  la  idea   de  la  reencarnación  era  una  creencia  firme y consolidada  entre los primeros cristianos. Entre las más destacadas figuras, están los llamados Padres de la Iglesia,  que la sostuvieron y defendieron, tal como Orígenes y Tomás de Aquino.

  Sin embargo, después el Cristianismo y posteriormente el Islam, combatieron severamente este milenario concepto que tuvo que quedar oculto y disperso entre grupos minoritarios debido a las discrepancias que presentaba con respecto a la religión oficial impuesta, por lo que la Iglesia de Roma lo persiguió como “herejía”. Así, se instituyó la “Santa Inquisición” que persiguió, torturó y dio muerte en las hogueras a muchos cientos de aquellos primeros cristianos que han pasado a formar parte de la negra historia  de la Iglesia y fueron  conocidos  como los “Albigenses”.. 

    La Reencarnación no solamente está contemplada en las primeras y más remotas obras escritas, sino que fue adoptada por grandes pensadores, filósofos y reformadores morales que ha  tenido la Humanidad, desde los asiáticos   Confucio o Buda,  hasta  el mismo  Jesús Cristo, como asimismo por otros personajes filósofos y pensadores de la antigua Grecia hasta otros  más recientes, como Voltaire, Franklin, Niestzche, Shopenhauer, etc 

     Y así, en esta situación actual de desconocimiento e indiferencia, a causa del materialismo que se forjó con tantos dogmas falsos y absurdos de las religiones, hemos llegado hasta nuestros días, en los que la divulgación del conocimiento espiritista está reponiendo entre las gentes los conceptos espirituales y racionales que necesita la humanidad para avanzar hacia un mundo mejor y más equilibrado que el actual.                   

 - José Luis Martín-

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 “Antes de nacer, el niño ha vivido ya y la muerte no termina en la nada. La vida es un devenir que transcurre semejante a un día de sol, que recomenzará”   - Egipcios- 3000 a.a.C

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AL ESPIRITISMO POR EL MAGNETISMO


 El Magnetismo y los fenómenos magnéticos son tan sorprendentes que, como decía el Barón  Du Potet (1796-1881), pueden parecer exagerados y extraordinarios, pero resultan necesarios para un exacto entendimiento de la extensión de la Doctrina Espírita. Es así porque al tratarse de Magnetismo cuidamos de los pases y sus técnicas, de curas espirituales y/o magnéticas, y así podemos llegar al Espiritismo por medio del Magnetismo.

El propio Allan Kardec (1804-1869) sabía de la importante relación entre esas ciencias, diciendo que el Magnetismo preparó el camino del Espiritismo y que el rápido progreso del Espiritismo solo ocurrió en virtud de la vulgarización de las ideas de los magnetizadores.

Joseph Philippe François Deleuze (1753-1835), importante magnetizador francés, decía que el Magnetismo es una extensión del poder que tienen todos los seres vivientes para actuar sobre aquellos órganos que están sujetos a la voluntad, y es el hombre quien tiene la facultad de ejercer sobre sus semejantes una influencia provechosa, dirigiendo sobre ellos, por su voluntad, el principio que nos anima y nos hace vivir.

No hay una fecha precisa de reconocimiento del Magnetismo. No es como en el Espiritismo, en el que la eclosión de los fenómenos de las mesas giratorias o de los hechos ocurridos con las hermanas Fox en los EUA, en 1848, permiten una fecha, o mejor, la observación y el estudio  hasta su sistematización en Doctrina por Kardec.

Algunos afirman que el Magnetismo fue "descubierto" por Franz Antón Mesmer (1784-1815), médico alemán anterior a Kardec.


Mesmer fue, sin duda, el mayor magnetizador; fue quien sistematizó el Magnetismo, siendo considerado el Padre del Mesmerismo; fue el primero que pronunció las palabras Magnetismo Animal, las cuales sustituyeron a la de gravitación animal, usadas en su tesis de doctorado. Mesmer "no descubrió" el Magnetismo, porque este ya era conocido y manejado desde la Antigüedad, practicado en secreto en todas las épocas de la Historia, en casas o en templos, por sacerdotes, pitonisas, videntes, oráculos, profetas y curanderos que eran los únicos "habilitados" o "instruidos" para esto. Hay noticia de que los sacerdotes de los templos del antíguo Egipto estaban habilitados en la experimentación magnética.  

Hector Durville, por cierto, presentó una talla o una pintura en el Templo de Karnak, en donde uno de los grandes Jefes Divinos proyectaba en la nuca del faraón, un fluído que proporcionaba vida, salud y fuerza.

En el mismo sentido, Jacob Melo afirma que no hay una fecha o periodo preciso que confirme la implantación del magnetismo en el seno de la humanidad, siendo por eso mismo y por todas las reflexiones seria al respecto, permitido que se diga que hay magnetismo en el mundo, desde que el mundo es mundo. 

De esa forma, el Magnetismo no era ninguna novedad en el siglo de Kardec. Al contrario, asunto por demás debatido, era conocido en toda Francia y también objeto de los estudios de Kardec, como el mismo confirma por sus innumerables escritos en la Revista Espírita.

A pesar de eso, no se puede ignorar que el "Magnetismo Animal" fue iniciado en 1776, como la primera respuesta terapeútica científica de la era moderna, habiendo sido por la metodología científica que el doctor Mesmer hizo su descubrimiento. 

¿ Y para qué sirve el Magnetismo?. El Magnetismo tiene gran influencia en los procesos de cura. El Barón Du Potet destacaba la virtud curativa del Magnetismo, advirtiendo que indebidamente manejado sin que fuesen seguidas sus técnicas, podría causar accidentes, lo que significa que si el magnetismo puede hacer el bien, reconoceremos igualmente que igual que los demás elementos de la Naturaleza, también puede hacer el mal, por lo que deberán aprender a conocerlo bien, a fin de estar en guardia contra los accidentes que pueda producir.

En el Libro de los Espíritus, Kardec se refirió a aquellas personas que tienen el don de curar por el simple toque, siendo que los Espíritus son sensibles a la fuerza magnética, a la pureza de sentimientos y al ardiente deseo de hacer el bien, como una especie de "filtros" para evitar abusos y narraciones interesadas por parte de personas  exploran la credulidad en su provecho.

En el Libro de los Médiums, Kardec distingue a los magnetizadores de los médiums curadores, reconociendo que había algo más en los Espíritus, aludiendo a la potencia magnética, que residía, sin duda, en el hombre, pero aumentada por la acción de los Espíritus que llama en su ayuda". 

La ciencia del Magnetismo, decía León Denis (1846-1927), coloca al hombre que la posee, como dueño de maravillosos recursos, pues la acción de los fluidos sobre el cuerpo humano es inmensa; sus propiedades son múltiples y variadas. 

De ahí por qué al ser el Magnetismo un método racional, con él se puede comprender y estudiar mejor el Espiritismo.

- Antonio Cesar Lima de Fonseca- del Centro Cultural Espírita de Porto Alegre (CEPA).Brasil                    

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miércoles, 29 de enero de 2025

Mediumnidad y cambio de ciclo evolutivo


 INQUIETUDES ESPÍRITAS

1.- El Espiritismo, un compromiso social

2.- Instrucciones particulares ( Viaje espírita)

3.- Dirigido a un ateo

4.- Mediumnidad y cambio de ciclo evolutivo

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      EL  ESPIRITISMO, UN COMPROMISO SOCIAL                   

Por CATHERINE GOUTTIÈRE

 “Para saber quiénes somos, el espiritismo enseña a vivir mejor; para saber de dónde venimos, el espiritismo enseña a comprender mejor la Tierra y el universo; para saber a dónde vamos, el espiritismo explica el mañana, borrando los miedos y las angustias de una muerte desconocida”.

Extracto del libro de Karine Chateigner Entre cielo y tierra —espírita y médium.

Ser espírita, es tener en sí la convicción y la certeza de la existencia del alma y de su supervivencia más allá de la muerte; es comunicarse con esa misma muerte; es aportar, por una parte, la ayuda de los espíritus sufrientes y por otra, recibir el fruto de la reflexión de aquellos que, conscientes de su vida espiritual, vienen a compartirla con nosotros.

Igualmente, ser espírita es actuar. En efecto, si bien el mundo de los espíritus tiene su existencia propia en otra dimensión, no por ello está desvinculado del mundo de los humanos. Los espíritus observan nuestro planeta y vienen en sesión para alertarnos sobre nuestro mundo y sobre nuestra condición. Vivimos en un planeta inferior en evolución moral donde reinan el orgullo, el egoísmo y la voluntad de dominar al otro para someterlo mejor. Los mensajes que se nos dan nos ayudan a comprender la razón de la vida, de las vidas sucesivas, de nuestra presencia en esta Tierra y del vínculo fraternal que existe entre todos sus habitantes, pues todos proceden del pensamiento divino.

Hemos vivido ya, y porque ya hemos vivido, hemos  podido vivir en otras comarcas, en otras latitudes y por consiguiente, haber tenido un color de piel diferente o  un sexo diferente. Hemos podido ser hombre o mujer, vivir en África, en la India o incluso hasta en China.

Nuestra psicología, nuestra forma de pensar, nuestros temores, nuestras angustias, nuestros gustos o nuestros centros de interés son el resultado de todo ese pasado, vivido y registrado en nuestra memoria espiritual.

En ese caso, ser espírita nos hace tener una visión diferente sobre los hombres y mujeres que componen por la población de nuestro planeta. El miedo al extranjero, dentro de su diferencia tanto física como social o religiosa, y la idea racista que de él deriva se atenúa en pro del reconocimiento de un hermano, él también reencarnado, para avanzar por su camino evolutivo.

Los seres humanos que somos deben aprender a vivir juntos dentro del respeto y la dignidad de cada uno, en el seno de una sociedad mundial donde la dominación, bien sea ésta religiosa, militar, social o financiera, sería abolida. Así, un reparto equilibrado permitiría a todos vivir y desarrollarse juntos. Ciertos espíritas se comprometen entonces, según las afinidades y atracciones de unos u otros, en organizaciones humanistas que trabajan, por ejemplo, por la supresión de la pena de muerte y dan su apoyo a los reclusos norteamericanos que esperan su ejecución en el corredor de la muerte; se incorporan a asociaciones, como la ayuda a los más desposeídos, y participan en diversas manifestaciones para tener siempre más justicia social.

Con sus cadenas de pensamiento, los espíritas luchan por la paz en el mundo y por el fin de las dictaduras y de todas las injusticias, y saben aunar así el combate de los humanistas y no espíritas que también han comprendido que sólo se crece junto con los demás.

Los espíritas piensan y trabajan por una sociedad más justa, en ello el compromiso espírita es igualmente un compromiso social.

Extracto de un mensaje de Jean Jaurès en 1989: “El espiritismo abraza todos los campos referentes a la naturaleza de los hombres. Por consiguiente, el espiritismo no puede ser, y nunca ha sido, apolítico. Quien afirme lo contrario no lo conoce bien y no ha estudiado la fórmula espírita, o incluso más grave aún, se engaña a sí mismo…

¿Estarían ustedes solos dormidos en un mundo que cambia, en un mundo que vive? ¿Serían indiferentes a las injusticias sociales? No pueden y lo saben bien. Al saberlo, ya hacen política.

Hacer política no consiste simplemente en hablar y charlar. Consiste en comprometerse y en ser, tan claro como se pueda, en el sentido de su compromiso. La fórmula espírita, que es cristiana, sólo puede ser una fórmula de reparto, justicia, libertad y dignidad para todos los hombres, para todos los pueblos y todas las razas…

Ustedes siempre están invitados a un mejor estar, es decir a otro mundo, y allí están invitados como agentes y participantes. Ayúdennos en la lucha social, ayúdennos en la transformación de la sociedad. No se disfracen de falsos revolucionarios. Sean verdaderos revolucionarios y no tengan miedo a la palabra.

Revolucionario no quiere decir homicida o sanguinario.

Revolucionario quiere decir tener el corazón, la inteligencia y el ardor, tener el coraje y la voluntad de hacer evolucionar al planeta completo. Es juntos como lo conseguiremos…”

TOMADO DEL LA REVISTA ESPIRITISMO EUROPEO 

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INSTRUCCIONES PARTICULARES -
Dadas a los grupos como respuestas a algunas de las cuestiones formuladas

Considerando las sabias enseñanzas que brindan los Espíritus y el gran número de personas que son conducidas a Dios a través de sus consejos, ¿Cómo es posible acreditar en que todo eso sea obra del demonio?
El demonio, en este caso, se manifiesta completamente desacertado, puesto que le sería mucho más fácil dominar a aquellos que no creen en Dios, ni en la existencia del alma, ni en la vida futura, y contra los cuales podría lograr, consecuentemente, todo cuanto se le ocurriese. Aunque bautizado, ¿quien puede estar más distante de la Iglesia que aquel que en nada cree? El demonio no necesita, pues, recurrir a ningún medio para atraerlo, y sería una locura de parte de él si con sus propios recursos lo aproximase a Dios, a la oración y a todas las convicciones que pueden apartar a alguien de la práctica del mal, y esto por el simple placer de recapturarlo luego. Esta doctrina ofrece una triste idea del diablo, representado siempre como tan hábil, convirtiéndolo, en realidad, en algo poco temible.

El hombre de la fábula El pececillo y el pescador, nos recuerda el sentido común a aplicar en estos casos. ¿Qué se diría de alguien que, teniendo un pájaro aprisionado en una jaula lo soltase con la intención de prenderlo nuevamente?

Pero tenemos una argumentación todavía más seria. Si sólo el demonio se puede manifestar, él lo hace con o sin el permiso de Dios. Si lo hace sin ese permiso, él es más poderoso que Dios. Si cuenta con el permiso, esto significa que Dios no es bueno, puesto que otorga al Espíritu del mal, con exclusión de los demás, el poder de seducir a los hombres sin conceder a los Espíritus buenos, además, la oportunidad de combatir la mala influencia de aquél. Éste no sería ni un acto de bondad ni de justicia. Y la cosa sería aún peor si, de acuerdo con la opinión de ciertas personas, la suerte de los hombres estuviese fijada irrevocablemente después de la muerte, pues entonces Dios precipitaría intencionadamente y con conocimiento de causa a sus criaturas hacia los tormentos eternos, permitiendo que se les preparasen celadas. Ahora bien, Dios sólo puede ser concebido en la infinitud de sus atributos: limitar o disminuir uno solo de ellos sería su negación, dado que eso implicaría la posibilidad de un ser más perfecto. Esta doctrina, pues, se refuta ella misma. Por otro lado, cuenta con muy poco crédito para merecer cualquier consideración, incluso entre los indiferentes. Muy rápidamente ha de ser olvidada, y quienes la preconizan la han de abandonar espontáneamente cuando verifiquen que ella es la causante de más daños que beneficios.

Del Libro Viaje Espírita en 1862 - Allan Kardec

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                   Dirigido a un ATEO…

Explícame de donde surgió todo, explícame cómo explicar la armonía del Universo, explícame las comunicaciones con el mundo invisible y los Espíritus, explícame de donde surgió todo, explícame lo inexplicable que puedes mencionar, y que al final tendrás que admitir  que solo una inteligencia como DIOS, es el que es el responsable. El pensamiento ateo, lo critica todo, pero no explica nada. Yo prefiero creer en Dios.

El Libro de Génesis cuando nos habla de :
Acerca de la naturaleza divina,  nos indica lo siguiente:

18. Resumiendo: Dios, para ser tal, no puede ser superado en nada por otro ser, ya que si existiera alguien más perfecto que Él, aunque en pequeñísima medida, ese otro sería Dios. Por tanto, es necesario que sea infinito en todo. Es así que la existencia de Dios se constata por sus obras, y es mediante una simple deducción lógica que se llega a determinar los atributos que lo caracterizan. 19. Dios es, por tanto: la suprema y soberana inteligencia. Es único, eterno, inmutable, inmaterial, todopoderoso, soberanamente justo y bueno e infinito en todas sus perfecciones, y no puede ser de otra manera. Esa base sobre la cual reposa el edificio universal es el faro que ilumina al Universo entero, y su luz es la única que puede guiar al hombre en la búsqueda de la verdad. Siguiéndola, no se perderá nunca, y si a menudo se ha extraviado, es porque se desvió de la ruta que le estaba indicada. Ese es también el criterio infalible de todas las doctrinas religiosas y filosóficas. El hombre posee para juzgarlas una medida rigurosamente exacta en los atributos de Dios, ya que puede proclamar con entera seguridad que toda teoría, todo principio, todo dogma, toda creencia, toda práctica que esté en contradicción con uno solo de esos atributos o que intente anularlos o simplemente debilitarlos, no puede estar en la verdad. En filosofía, en psicología, en moral, en religión, sólo es verdad lo que no se aparta en nada de las cualidades esenciales de Dios. La religión perfecta sería aquella en la que ningún artículo de fe contradijese esas cualidades y en la que todos sus dogmas pudiesen ser sometidos a la prueba de ese control sin sufrir menoscabo alguno.
Libro de Génesis Acerca de la naturaleza divina

• 8. No nos está permitido adentrarnos en la naturaleza íntima de Dios. Para comprender a Dios nos falta el sentido que sólo se adquiere con la completa depuración del espíritu. Mas si al hombre no le es permitido penetrar su esencia, puede, mediante el razonamiento, conocer sus atributos, es decir, las cualidades que Dios debe tener para ser Dios. Sin el conocimiento de los atributos de Dios sería imposible comprender la obra de la Creación, punto de partida de todos los credos religiosos. Aquellas religiones que no entendieron la Creación, verdadero faro conductor, han equivocado sus dogmas: las que no creyeron en un Dios todopoderoso, imaginaron muchos dioses. Esas otras que no atribuyeron a Dios la bondad suprema crearon un dios celoso, colérico, parcial y vindicativo.

 9. Dios es la inteligencia suprema y soberana. La inteligencia del hombre es limitada, ya que no puede crear ni comprender todo lo que existe. La de Dios, que abraza el infinito, debe ser infinita. Si fuese limitada en algún aspecto, podríamos concebir la existencia de un ser aún más inteligente, capaz de comprender y hacer lo que el otro no pudo, y así sucesivamente hasta el infinito.

Dios es real, y lo ves en todo lo que tú no has creado y que solo lo Explica DIOS.

- Frank Montañez- 

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  MEDIUMNIDAD Y CAMBIO DE CICLO                             EVOLUTIVO

    La Providencia ha querido que la nueva revelación no sea privilegio de nadie, sino que tenga sus órganos por toda la Tierra, en todas las familias, tanto en los grandes como en los pequeños. 

   Según estas palabras que hoy cumplen los médiums de nuestros días: “Y acontecerá en los postreros días -dice el Señor- que yo derramaré de mi espíritu sobre toda carne, profetizarán vuestros hijos, vuestras hijas y vuestros mancebos verán visiones, vuestros ancianos soñarán sueños. Y ciertamente en aquellos días derramaré de mi espíritu sobre mis siervos y sobre mis siervas y profetizarán” (Hechos de los apóstoles, Cáp. II, v. 17 y 18). 
    Mas declara también: Habrá falsos Cristos y falsos profetas (El Evangelio según el Espiritismo, Cáp. XXI).* 

    Pues estos últimos tiempos han llegado ya. No se trata del fin del mundo material, como se ha creído, sino del fin del mundo moral, es decir, la era de la regeneración. 

Allan Kardec

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