INQUIETUDES ESPÍRITAS
1.- De las mixtificaciones
2.- Religiones y Doctrina Espírita
3.- Resumen de la Doctrina Espírita
4.- Emma Livry, una joven de bien. ( Parte 1 de 2 )
*********************************
DE LAS MIXTIFICA CIONES
303. Si es
desagradable el ser engañado, lo es más aún el ser mixtificado; por otra parte
es uno de los inconvenientes más fáciles de salvar. Los medios de descubrir las
astucias de los Espíritus mentirosos se han manifestado en todas las instrucciones
precedentes; por esto hablaremos poco sobre el particular. Aquí están las
respuestas de los Espíritus sobre este asunto:
1. Las mixtificaciones
son uno de los escollos más desagradables del Espiritismo práctico; ¿hay un
medio de preservarse de ellas?
Me parece que podéis encontrar la respuesta en todo aquello que se os ha
enseñado. Sí, cierto, hay para esto un medio sencillo, es no pedir al
Espiritismo más que aquello que puede y debe daros; su objeto es el
mejoramiento moral de la Humanidad; si no os separáis de esto nunca seréis
engañados, porque no hay dos modos de comprender la verdadera moral, la que
puede admitir todo hombre de buen sentido. Los Espíritus vienen a instruiros y
a guiaros por el camino del bien, y no por el de los honores y de la fortuna o
para serviros en vuestras mezquinas pasiones. Si nunca se les pidiera nada
trivial o que esté fuera de sus atribuciones, no se daría motivo a los
Espíritus mentirosos; de donde debéis sacar en consecuencia que el que es
mixtificado es por que lo merece. La misión de los Espíritus no es para
enseñaros las cosas de este mundo, sino para guiaros con seguridad en lo que
pueda seros útil para el otro. Cuando os hablan de cosas de aquí abajo, es
porque lo juzgan necesario, pero esto no es según vuestra pregunta. Si viéseis
en los Espíritus los substitutos de los adivinos y de los hechiceros, entonces
sería cuando quedarías engañados. Si los hombres sólo tuvieren que dirigirse a
los Espíritus para saberlo todo, no tendrían ya su libre albedrío y se saldrían
de la vía que Dios ha trazado a la Humanidad. El hombre debe obrar por sí
mismo; Dios no envía a los Espíritus para allanarles el camino material de la
vida, sino para preparar el del porvenir.
–¿Pero hay personas
que no piden nada y son engañadas indignamente por los Espíritus que vienen
espontáneamente sin que nadie les llame?
Si no piden nada, dejan que digan, que viene a ser lo mismo. Si acogiesen con
reserva y desconfianza todo lo que se separa del objeto esencial del
Espiritismo, los Espíritus ligeros no les engañarían tan fácilmente.
2. ¿Por qué permite
Dios que personas sinceras que aceptan el Espiritismo de buena fe sean
mixtificadas? ¿no podría esto tener por inconveniente el hacerles vacilar en su
creencia?
Si esto hiciera vacilar su creencia, su fe no sería muy sólida; los que
renunciasen al Espiritismo por una simple contrariedad, probarían que no lo
comprenden y que no se dedican a la parte formal. Dios permite las
mixtificaciones para probar la perseverancia de los verdaderos adeptos, y
castigar a aquellos que hacen de él un objeto de diversión.
El Espíritu de Verdad.
Observación. — La
truhanería de los Espíritus mixtificadores, sobrepuja muchas veces a todo lo
que uno puede imaginarse; el arte con que dirigen sus baterías y combinan los
medios de persuadir, sería una cosa curiosa, si sólo se tratase siempre de
bromas inocentes, pero estas mixtificaciones pueden tener consecuencias
desagradables para aquellos que se descuidan; somos bastante felices por haber
podido abrir a tiempo los ojos a muchas personas que quisieron pedirnos nuestro
consejo y haberles evitado acciones ridículas y comprometidas. Entre los medios
que emplean estos Espíritus, es menester colocar en primera línea, como los más
frecuentes, los que tienen por objeto tentar la avaricia, como la revelación de
los pretendidos tesoros ocultos, el anunciar herencias u otros bienes de
fortuna. También es menester mirar como sospechosos en primer grado los
pronósticos en épocas fijas, así como todas las indicaciones precisas tocante a
intereses materiales; guardarse de dar ningún paso prescrito o aconsejado por
los Espíritus, cuando el objeto nos es eminentemente racional; no dejarse nunca
cegar por los hombres que toman los Espíritus para dar una apariencia de verdad
a sus palabras; desconfiar de las teorías y sistemas científicos aventurados;
en fin, de todo lo que separa del objeto moral de las manifestaciones.
Podríamos llenar un volumen muy curioso con la historia de todas las
mixtificaciones que han venido a nuestro conocimiento.
Allan Kardec
Extraído del libro "El libro de los médiums"
*********************************
RELIGIONES Y DOCTRINA ESPÍRITA
Todas las creencias son respetables
Sin embargo, si buscaste la Doctrina Espírita, no le niegues fidelidad
Todas las religiones son sublimes.
Sin embargo, la Doctrina Espírita es la única que consigue explicarte los fenómenos mediúmnicos en los que están basadas todas las religiones.
Todas las religiones son santas en sus intenciones.
Sin embargo la Doctrina Espírita es la única que puede guiarte en los problemas del destino y del dolor.
Todas las religiones auxilian
Sin embargo la Doctrina Espírita es la única capaz de librarte del pavor ilusorio del infierno, que subsiste nada más que en las conciencias culpables
Todas las religiones infunden consuelo en relación con la muerte.
Sin embargo la Doctrina Espírita es la única que está en condiciones de poner al descubierto la continuidad de la Vida más allá del sepulcro.
Todas las religiones preconizan que el bien es el precio del paraíso para sus adeptos.
Sin embargo la Doctrina Espírita es la única que esclarece que la caridad sin condiciones constituye simplemente un deber.
Todas las religiones exorcizan a los espíritus desventurados.
Sin embargo la Doctrina Espírita es la única dispuesta a abrazarlos como enfermos, pues reconoce en ellos a seres humanos desencarnados en otras regiones evolutivas.
Todas las religiones educan siempre.
Sin embargo la Doctrina Espírita es la única en que se permite el libre examen, con el sentimiento libre de presiones dogmáticas, para que la Fé contemple a la razón cara a cara.
Todas las religiones mencionan las penas y las recompensas.
Sin embargo la Doctrina Espírita es la única que sostiene que todos hemos de cosechar con arreglo a lo que hayamos sembrado en la Vida, sin ninguna clase de privilegios en relación con la Justicia Divina.
Todas las religiones erigidas sobre principios nobles, incluso las que tienen vigencia en otros continentes, aunque nos parezcan extrañas, conservan la esencia cristiana.
Sin embargo la Doctrina Espírita es la única que nos ofrece las claves necesarias para la correcta interpretación de los Evangelios.
Debido a que la Doctrina Espírita es en sí misma la liberalidad y la comprensión, hay quienes opinan que está obligada a mezclarse con las aventuras marginales y con los exotismos, so pena de contradecir los principios de fraternidad que difunde.
Dignifica pues a la Doctrina Espírita que te consuela y te libera, mediante la vigilancia de su pureza y simplicidad, no vaya a ser que sin percibirlo colabores con los vicios de la ignorancia y con los crímenes del pensamiento.
"Espírita", tal debe ser tu carácter, aunque sepas que estás en proceso de reparación después de haber caído.
" Espírita", debe ser tu conducta, aunque te encuentres con arduas experiencias.
" Espírita", debe ser el nombre de tu nombre, aunque respires en medio de aflictivos combates contigo mismo.
" Espírita", debe ser el claro objetivo de tu institución, aunque por eso carezcas de las transitorias subvenciones y honras terrenales.
Doctrina Espírita significa Doctrina de Cristo.
Y la Doctrina de Cristo es la Doctrina del perfeccionamiento moral en todos los mundos.
Entonces, consérvala en tu existencia como tu más elevada responsabilidad, porque llegará un día en que naturalmente, serás invitado a rendirle cuentas.
- Emmanuel. ( Espíritu)
( Enviado por Alborada Espírita Cristiana )
*************************************
RESUMEN DE LA DOCTRINA ESPÍRITA
Podemos resumir todo lo que hemos estudiado sobre la Doctrina Espírita, en los siguientes principios fundamentales, tal como lo hizo León Denis:
1. Una inteligencia Suprema rige el Universo. Ella regula las leyes eternas, a las cuales los seres y las cosas están sometidos.
2. Dios es el Señor del Universo, ley viva, foco inmenso de luz que irradia hacia todos los mundos la armonía, el amor, la verdad y la justicia.
3. En el Universo todo marcha hacia un estado superior. Todo se transforma y perfecciona.
4. El Espíritu es inmortal. Contiene el germen de la perfección y se desenvuelve por sus trabajos y esfuerzos, encarnando en mundos materiales y elevándose a través de las vidas sucesivas.
El espíritu tiene dos envolturas: una es el cuerpo terrestre que le sirve de instrumento de lucha y de prueba y del cual se deshace en el momento de la muerte. El otro es el cuerpo fluídico, inseparable del Espíritu y que progresa y se depura con él: el periespíritu.
5. La vida terrestre es una escuela, un medio de educación y perfeccionamiento por el trabajo, por el estudio y por el sufrimiento.
Libre y responsable, cada uno de nosotros trae es sí la ley de su destino; preparamos en el presente nuestras alegrías y dolores futuros.
El espíritu se perfecciona y engrandece a medida que va usando su libre albedrío para practicar el bien y rechazar el mal.
6. Una estrecha solidaridad une a todos los Espíritus, iguales en su origen y en sus fines, aunque ocupan diferentes grados en la escala de progreso. Hijos de Dios, su Padre común, todos los Espíritus son hermanos y forman una inmensa familia.
7. Los Espíritus se clasifican en el espacio de acuerdo con la densidad de su periespíritu, correspondiente al grado de adelanto u de depuración de cada uno.
Los Espíritus culpables y malos se encuentran envueltos por una espesa sombra fluídica que los arrastra hacia los mundos inferiores, donde deben encarnar para liberarse de sus imperfecciones.
El Espíritu virtuoso, revestido de un cuerpo sutil, etéreo, participa de las sensaciones de la vida espiritual y se eleva hacia los mundos felices. El Espíritu en su vida superior y perfecta colabora con Dios, coopera en la formación de los mundos, dirige el progreso, vela por las humanidades y por la ejecución de las leyes divinas.
8. El bien es la ley suprema del Universo.
9. El objeto de la vida es la educación del Espíritu. Siendo así, es necesario vencer las pasiones, terminar con los vicios, alentar todo lo que fuera elevado.
Luchar, combatir, sufrir por el bien de la humanidad. Iniciar a nuestros hermanos en los esplendores de la armonía, del amor, de la verdad y de la justicia; tal es el secreto de la felicidad del futuro, tal es el deber.
Tomado del libro “Doctrina Espírita para la Niñez.
Eliseo Rigonatti
Adaptación: Oswaldo E. Porras Dorta.
********************************
EMMA LIVRY, UNA JÓVEN DE BIEN
( Parte 1 de 2 )
A
consecuencia de un accidente causado por el fuego, esta doncella fallecida
después de pasar por crueles sufrimientos. Alguien propuso solicitar su
evocación en la Sociedad Espírita de París, cuando ella se presentó
espontáneamente el 31 de julio de 1863, poco tiempo después de su muerte.
Así presenta el
maestro Allan Kardec en el libro El Cielo y el Infierno o la
Justicia Divina, la primera de las dos manifestaciones de la joven
Emma después de su trágica muerte.
En su sencillez,
el primer mensaje es una narración de temas que merecen nuestra reflexión.
Heme
aquí, pues, todavía en el teatro del mundo, yo, que me creía ahogada para
siempre con mi velo de inocencia y juventud. El fuego de la Tierra me ha
salvado del fuego del Infierno; así pensaba en mi fe católica y si osase
entrever el esplendor del Paraíso, mi alma trémula se regocijaría en la
expiación del purgatorio y pediría, sufriría y lloraría.
En el siglo XIX eran escasos los recursos para
socorrer a los accidentados por el fuego, particularmente en casos graves,
cuando buena extensión del cuerpo está dañada. Tampoco había analgésicos
poderosos capaces de calmar los inmensos dolores.
Solo le quedaba
al paciente la oración, tal y como hizo Emma.
Sintiendo
que la muerte se aproximaba, admitía, en la simplicidad de su creencia, no ser
digna del Paraíso inmediato. No obstante se apegaba a la idea de poder rescatar
en el Purgatorio.
Pero, ¿
quien dio a mi debilidad la fuerza para soportar mis angustias?, ¿ Quien en las
largas noches de insomnio y de fiebre dolorosa, se inclinaba sobre mi pecho de
mártir?,¿ Quien refrescaba mis labios secos?- Erais vos, mi ángel guardián ,
cuya blanca aureola me rodeaba, erais vosotros también, mis queridos Espíritus,
que veníais a musitar a mis oídos palabras de esperanza y amor.
Con el debilitamiento físico. se aflojaron los
lazos que prenden al Espíritu, abriéndose así la visión espiritual.
Fue eso lo que
aconteció con Emma. Pasó a percibir la presencia de su mentor y de otros amigos
espirituales, que atenuaban sus dolores y calmaban sus inquietudes.
Eso ocurre
con frecuencia con las personas de edad avanzada. Los médicos, apoyándose en
convicciones materialistas, proclaman que se trata de una simple alucinación de
la mente debilitada, lo que les impide percibir la belleza del fenómeno,
marcado por la acción de los Espíritus que están preparando al enfermo para la
gran transición.
Hace algunos
años, visite, a petición de su familia, a una señora de 85 años que estaba
viviendo ese fenómeno. Para ella, la familia se constituía en motivo de
perplejidad y miedo, pues según su concepción religiosa, las almas de los
muertos duermen hasta el supuesto juicio final. ¿No sería que el demonio los
estaba engañando?.
¡ Bendita sea la
Doctrina Espírita cuy9s esclarecimientos permiten que cosechemos en abundancia
los beneficios de esa presencia bienhechora!
La llama
que consumía mi débil cuerpo también me despojó de sus cadenas y así, he muerto
viviendo ya la verdadera vida. No conocí la turbación, y entré serena y acogida
en ese día radiante que envuelve a los que después de haber sufrido
mucho, supieron esperar un poco.
Cuanto más apegado a la materia es el individuo,
ignorando su condición de Espíritu inmortal en tránsito por la Tierra, más
difícil es su retorno, en largos periodos de sufrimiento en las regiones
umbralinas, que los hermanos católicos denominan Purgatorio.
Un Umbral o
Purgatorio no es una penitenciaría, con determinada pena a cumplir. El Espíritu
está en él, hasta que volviendo en sí, según la expresión de la Parábola del
Hijo Pródigo, presentada por Jesús, reconozca la extensión de sus compromisos
con las Leyes Divinas, como el hijo que se dispone a retornar a la casa
paterna.
Un amigo
confesaba:
- No me
siento preparado para asumir las realidades espirituales, `porque aun estoy muy
comprometido con las ilusiones de la Tierra. No obstante, cuando me vea en el
Umbral, me arrodillaré, y golpeándome en el pecho diré: ¡ Mea máxima culpa !.
Si el querido lector piensa así, olvídelo. No
sirven los golpes de pecho, es preciso que el arrepentimiento venga del pecho,
de las profundidades del alma, lo que puede llevar algún tiempo... algunas
décadas o más....
( Continúa en la siguiente publicación )
************************************
No hay comentarios:
Publicar un comentario